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GUÍA PARA HACER HIJOS LECTORES
¿Por qué queremos convertir a nuestros hijos en buenos lectores? La respuesta
es fácil: leer es importante, es bueno, les ayuda…
Efectivamente, los niños que leen:
Son buenos estudiantes
Mantienen una mayor atención ante las explicaciones.
Se concentran mejor.
Aumentan su memoria.
Comprenden y asimilan mejor los conceptos nuevos.
Pero ¿somos nosotros, buenos lectores?
El ámbito familiar es fundamental en el hábito de la lectura, difícilmente
conseguiremos que lean si no predicamos con el ejemplo.
Ser lector significa convertir la lectura en un hábito voluntario, libre, deseado y
placentero. La excusa de no tener tiempo no cabe aquí. Para leer no hace
falta tiempo, necesitamos ganas, el tiempo con ganas lo encontraremos,
seguro. Es cuestión de organizarnos bien.
DECÁLOGO DE LA FAMILIA COMPROMETIDA CON LA LECTURA
1. Hacer del libro un objeto cotidiano: Desde que son bebés, podemos
introducir el libro como objeto de juego y distracción. Hay libros de plástico,
tela, cartón duro que pueden tocar, chupar e incluso llevarse al baño. Con
ellos aprenderán a observar las imágenes y asociarán sus primeras
palabras.
2. Valorar el hecho de leer: Animarles en todo momento y no dejar escapar
ocasión para contagiarles nuestro entusiasmo y nuestra convicción de que
la lectura es gratificante.
3. Contarles cuentos, leerles sobre lo que les guste: Desde bien pequeños
crear un tiempo para leerle y compartir, hasta que ellos decidan
intercambiar los papeles.
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4. Que nos vean leyendo: Los niños siempre nos tienen como modelo.
5. Hablar de libros con ellos: Sin hacer de ello un interrogatorio, con mucho
tacto, podemos interesarnos por lo que leen, qué aspectos le han gustado
más y cuáles no. Debemos enseñarles también a realizar una crítica
constructiva.
6. Leer con ellos: Interesándonos por las lecturas que realizan en el cole,
dejando que nos recomienden aquél que le ha gustado.
7. Hacer de la lectura una costumbre saludable: Un lugar acogedor, una
iluminación adecuada que nos haga sentir cómodos.
8. Regalar libros: Para conseguir que el libro sea también un regalo siempre
tendremos en cuenta que los libros que regalemos no deben ajustarse a
nuestras preferencias, sino a las del que lo va a leer.
9. Visitar bibliotecas, librerías: Es un buen momento para dejarnos aconsejar
por personas especializadas y de este modo ellos puedan elegir sus propias
lecturas.
10. Implicarnos en el proceso: Manteniendo la comunicación. Muchos de los
buenos lectores, abandonan el hábito lector en la adolescencia, en este
periodo la libertad de elección será clave.
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CÓMO ELEGIR UN LIBRO
Un buen libro para los más pequeños tiene que captar la atención, ser original
y atractivo.
Durante los primeros meses se pueden utilizar libros de tela o plástico, lavables,
con música o elementos móviles. Con ellos ampliaremos su vocabulario, les
cantaremos canciones y pequeñas historias.
A partir de los 3 años.
Podemos introducirles los cuentos e incluso algún libro de conocimiento que le
resulte interesante, con ilustraciones claras y fáciles de identificar, de colores
vivos que llamen su atención.
De los 6 a los 8 años.
Libros con ilustraciones a todo color, cuentos, libros de poemas, relatos que no
sean muy largos, leyendas, fábulas, mágicos… que estimulen su imaginación y
la fantasía.
De los 9 a los 12 años.
Es la edad en la que se forman los lectores del futuro. Es el momento del
cómic, las primeras novelas, la ciencia ficción y los libros instructivos (Los
Planetas, El Cuerpo Humano, su deporte o deportista favorito...) Ya pueden ser
lecturas más largas y les encantan que los protagonistas sean de su edad y se
puedan identificar con ellos.
De los 13 en adelante.
Libros de actualidad con protagonistas de su misma edad o mayores en los
que busquen respuestas a sus propios cambios. Libros románticos o de
amistad, de misterio o de humor. Es también el momento de introducir la obra
clásica en ediciones atractivas para jóvenes.
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LECTURA Y VACACIONES
Con las vacaciones, padres y educadores nos planteamos la necesidad de
compaginar este descanso con la tarea de involucrar a nuestros chicos y
chicas en el maravilloso mundo de la lectura. Pero, ¿cómo?
En vacaciones tendemos a relajar las rutinas, cambiar los ritmos y disfrutar de
un mayor tiempo al aire libre. Pero queda mucho tiempo de ocio que
podemos emplear para introducir a nuestros hijos/as en la lectura y la
oportunidad de “engancharlos” en el tren lector.
Os recomendamos en este espacio 10 consejos que os pueden ser de utilidad
para llevarlo a cabo y llegar a buen puerto.
1. Planificar: Haz un hueco en la maleta y que nuestro plan de lectura esté en
la lista de aquello que nos vamos a llevar de vacaciones.
2. Compartir: Comparte este plan con tus hijos, involúcrales en su
planteamiento, en la elección de los libros y en cómo lo vamos a
desarrollar, que se sientan cómplices del proyecto.
3. Seleccionar: Seleccionad juntos los libros que os vais a llevar. Visita la librería
o el kiosco y que elijan aquellos que más les gusten, por temática y
extensión. Para ello hablad con ellos de sus gustos y preferencias.
4. Variar: En la variedad está el gusto. Es el momento de buscar la novela, el
cómic, libros informativos, de ciencia ficción…porque cada momento pide
una lectura diferente.
5. Temporalizar: Organizad las vacaciones para que cada día se puedan
disfrutar entre 20 y 30 minutos para leer.
6. Situar: Buscar un lugar acogedor: El lugar que se destina a leer debe ser
tranquilo, nada de televisión en marcha, música o videojuegos. A cada
momento lo suyo.
7. Comunicar: Es el momento de buscar un hueco para compartir con ellos
este ratito dedicado a leer. Aprovechad también para comentar los libros
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que estáis leyendo y preguntadles qué tal el que leen ellos. Es muy
importante que os vean leer.
8. Ampliar el horizonte: Si tenéis como costumbre leerles antes de dormir o en
cualquier otro momento, sería interesante que aumentarais el nivel de la
lectura, uno para más edad, de ese modo se puede ampliar el vocabulario
aprovechando que estamos ahí para explicarles lo que no entienden y les
haremos sentir más mayores e importantes
9. Charlar: Es el momento ideal para que habléis con ellos de vuestras
preferencias sobre libros y dará pie a que os cuenten las suyas. Es la
situación ideal para comentar lo que estamos leyendo y preguntarles si lo
están pasando bien con la lectura que han elegido. De esta manera les
ayudaremos a tener un buen criterio y a modificarlo cuando sea necesario.
10. Escribir: Es muy importante que la actividad lectora quede reflejada en un
comentario escrito. Resumir lo leído les ayudará a comprenderlo mejor.
Pero no seamos demasiado exigentes. No debemos plantearlo con un
número determinado de líneas, costosas preguntas, dibujos… Tiene que ser
una reflexión para que cuenten libremente su experiencia.
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CUESTIONARIO: ¿SOMOS UNA FAMILIA COMPROMETIDA CON LA LECTURA?
Cuestionario sobre acciones para las prácticas lectoras
Responde SÍ/NO a las siguientes preguntas:
SÍ NO
1. Anima a la lectura incluso antes de que su hija/o aprenda a leer.
2. Cuenta cuentos a sus hijos, les recita rimas, retahílas, poesías y se las
lee en voz alta.
3. Da ejemplo leyendo libros, revistas, periódicos y transmite a sus hijos
conductas lectoras.
4. Acompaña a sus hijos a visitar exposiciones. Asiste a funciones de
títeres o teatro y a otros espectáculos culturales para ir afinando la
sensibilidad y la imaginación de sus pequeños.
5. Comparte y comenta las lecturas con ellos.
6. Lleva a sus hijos a los lugares donde están los libros –librerías y
bibliotecas- para mirarlos y seleccionarlos juntos
7. Fomenta y cuida la biblioteca familiar o personal y destina en su
casa un espacio adecuado para leer.
8. Aprecia y lee, con sus hijos las publicaciones que se hacen en el
colegio.
9. Comprende que la compra de un libro no es algo excepcional y
adquiere libros regularmente (no sólo en fechas señaladas).
10. Se interesa por los criterios de selección de lectura asesorándose y
consultando a los responsables de las bibliotecas escolares y
públicas.
11. Participa en algunas propuestas de actividades lectoras realizadas
por el proyecto lector del centro educativo de sus hijos.
12. Destina un tiempo diario dedicado a la lectura.
Ahora cuenta todos los síes
Si habéis tenido más de 6 respuestas afirmativas seguid así.
Si habéis tenido menos de 6 respuestas afirmativas intentad cumplir alguna
de nuestras recomendaciones.
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