El documento define la paciencia como la capacidad de soportar algo sin alterarse o hacer cosas pesadas o minuciosas sin quejarse. Explica que los niños pequeños no pueden ser pacientes porque actúan según sus impulsos inmediatos, pero que a medida que desarrollan habilidades como el lenguaje y el pensamiento, los adultos pueden enseñarles autocontrol y a esperar su turno. Finalmente, indica que la paciencia se desarrolla gradualmente a través de actividades que requieren diferir la gratificación inmediata.
1. pasiencia
Se define la paciencia como la capacidad de padecer o soportar algo sin alterarse,
también la capacidad para hacer cosas pesadas o minuciosas, o la facultad de
saber esperar cuando algo se desea mucho.
El niño de cero a seis años actúa de acuerdo con sus impulsos y deseos
inmediatos; no sabe esperar y mucho menos tener paciencia, siempre quiere ser
complacido de inmediato, para él la mediatez no existe.
En la medida que los procesos psíquicos tales como el lenguaje, la memoria, el
pensamiento se van desarrollando en el niño, el adulto puede trabajar para
desarrollar el autocontrol y la regulación de la conducta y es entonces, y aparejado
a este desarrollo, que podemos enseñarle a tener paciencia.
Hay que enseñar al niño a saber esperar su turno en la fila, su turno en el juego,
saber escuchar al adulto, contestar a las preguntas del maestro en el momento
que le corresponde, etc.
Ante el sistema de demandas que impone el adulto y el aprendizaje paulatino y
consecuente de que las cosas no pueden tener retribución inmediata, que todo no
puede darse de acuerdo con los deseos, el niño va aprendiendo a ser paciente, si
bien, aún en las etapas más tardías de la primera infancia, esta cualidad psíquica
es aún muy endeble y fácilmente cede ante la estimulación fuerte, esta es una
conducta normal que no debe interpretarse como malacrianza, sino tan solo como
mecanismos de regulación de la conducta aún no suficientemente estables y
formados.
De esta manera en el proceso educativo no existen actividades para “ser
paciente”, sino actividades que en su realización implican el diferir la gratificación
inmediata, el seguir un determinado proceso, el postergar el logro, y esto poco a
poco va conformando la cualidad psíquica de la paciencia.
Lo definimos como el formar un carácter capaz de dominar la comodidad y los
impulsos propios de su forma de ser para hacer la vida más amable a los demás.
Es el valor que nos ayuda a controlar los impulsos de nuestro carácter y la
tendencia a la comodidad mediante la voluntad. Nos estimula a afrontar con
serenidad los contratiempos y a tener paciencia y
comprensión en las relaciones personales.
Auto dominio
2. 1. El autodominio debe comprenderse como una actitud que nos impulsa a
cambiar positivamente nuestra personalidad. Cuando no existe esa fuerza interior,
se realizan acciones poco adecuadas, generalmente como resultado de un estado
de ánimo; la armonía que debe existir en toda convivencia se rompe; quedamos
expuestos a caer en excesos de toda índole y entramos en un estado de
comodidad que nos impide concretar propósitos. Cada día que buscamos ejercer
ese señorío sobre nosotros mismos, automáticamente nuestro carácter comienza
a madurar por la serenidad y paciencia que imprime este valor, la voluntad nos
libera del desánimo, controlamos nuestros gustos y vivimos mejor la sobriedad, en
pocas palabras, entramos en un proceso de superación constante. Algunas
personas han opinado que la fuente para lograr el autodominio proviene de la
aplicación de algunas técnicas para relajarse, y aunque efectivamente pueden
ayudar, no debemos perder de vista que los valores se forman a través del
ejercicio diario, con el esfuerzo por descubrir en nuestra personalidad aquellos
rasgos poco favorables.
2. Las costumbres y hábitos determinan en mucho la falta de autodominio.
3. El autodominio nos ayuda a reconocer los distintos aspectos de nuestra
personalidad y nuestra forma de reaccionar ante determinadas
circunstancias.Debemos comenzar por analizar cuales de ellas nos condicionan e
impiden vivir este valor.
Lealtad
La Dignidad:
La dignidad Hace referencia al valor inherente al ser humano en cuanto ser
racional, dotado de libertad y poder creador, pues las personas pueden modelar y
mejorar sus vidas mediante la toma de decisiones y el ejercicio de su libertad.
Valóricamente se tiende a afirmar que el ser humano posee dignidad por sí
mismo, no viene dada por factores o individuos externos, se tiene desde el mismo
instante de su fecundacion o concepcion y es inalienable.
La Lealtad
La lealtad es una obligación de fidelidad que un sujeto o ciudadano le debe a su
estado, monarca o a sí mismo.
La lealtad es virtud consistente en el cumplimiento de honor y gratitud la lealtad
esta mas apegada a la relacion en grupo
Superacion
3. La superación personal es un proceso de transformación y desarrollo, a través del
cual una persona trata de de adoptar nuevas formas de pensamiento y adquirir
una serie de cualidades que mejorarán la calidad de su vida.
Mediante esta preparación personal el ser humano puede alcanzar un estado de
satisfacción consigo mismo y con las circunstancias físicas y emocionales que lo
rodean, para así poder disfrutar de una vida mejor.
Cuando digo una vida mejor no me refiero a una con más comodidades
materiales, aunque estas pueden ser un resultado del cambio personal, sino una
vida evolucionada libre de jaulas, esas jaulas que nos imponen las ideas y los
sentimientos erróneos, ficciones que crea nuestra mente y a las que les damos
tanto poder que se convierten en monstruos reales.
Compasion
La compasión (del latín cumpassio, calco semántico o traducción del vocablo
griego συμπάθεια (sympathia), palabra compuesta de συνπάσχω + = συμπάσχω,
literalmente "sufrir juntos", "tratar con emociones ...", simpatía) es un sentimiento
humano que se manifiesta a partir del sufrimiento de otro ser. Más intensa que la
empatía, la compasión describe el entendimiento del estado emocional de otro, y
es con frecuencia combinada con un deseo de aliviar o reducir su
Docildad
La docilidad, es el valor que nos hace conscientes de la necesidad a veces
urgente de recibir dirección, apoyo y ayuda en todos los aspectos más importantes
de nuestra vida cotidiana.
La docilidad, es el valor que nos hace tener la suficiente humildad y a la vez
capacidad para considerar, y a la vez aprovechar la gran experiencia y
conocimientos que tienen las demás personas.
La docilidad, nos ayuda enormemente a ser mucho más sencillos, pues nos
dispone a escuchar con calma, paciencia y atención, y a considerar con mayor
detenimiento las sugerencias que nos hacen, y a la vez tomar decisiones mucho
más serenas y prudentes en base a la información recibida.
Pocas veces en nuestra vida cotidiana pensamos en la necesidad que tenemos de
solucionarles los problemas a las demás personas, y generalmente intentamos
decidir, solucionar y ejecutar todas las cosas según nuestro criterio personal; y
efectivamente tendremos bastantes aciertos, pero también muchos fracasos y
errores, por considerar como inútiles los consejos sabios que recibimos de
quienes nos rodean.
4. Respeto
El respeto a las personas es una aceptación y valoración positiva del otro por ser
persona. Lleva consigo una aceptación incondicional de la persona tal y como es.
Es decir, una aceptación sincera de sus cualidades, actitudes y opiniones; una
comprensión de sus defectos. En el plano humano, el respeto a las personas
implica no considerarse superior a nadie.
Todos sentimos que tenemos el derecho a ser respetados por los demás en
nuestro modo de ser, de actuar y de expresarnos. Esto exige de nosotros el deber
de respetar igualmente a todas las personas.
El respeto a las cosas es una actividad de valoración de todos los seres animados
o inanimados, naturales o elaborados por el hombre, como medios necesarios
para la vida y la realización personal de los seres humanos, en diversos niveles.
En efecto, el hombre necesita de las cosas para cubrir todas las necesidades
vitales, desde las necesidades más primarias y básicas (comida, vestido,
alojamiento) hasta las necesidades más elevadas (desarrollo intelectual,
contemplación y creatividad artística, etc.).
Sinseridad
La sinceridad no es algo que debemos esperar de los
demás, es un valor que debemos vivir para tener amigos, para ser dignos de
confianza…
Para ser sinceros debemos procurar decir siempre la verdad, esto parece muy
sencillo, pero muchas veces cuesta más de lo que se cree. Se utilizan las
„‟mentiras piadosas‟‟ para ocultar cualquier cosa que para nosotros es una
tontería, pero que en realidad a la persona que mientes haces daño, y esta
pequeña mentira que en un principio nos es nada se va haciendo más y más
grande hasta que la verdad se acaba sabiendo y sorprendiendo a quien mientes.
La sinceridad no sólo se ve en las palabras, sino que también se demuestra por
medio de nuestras actitudes.
Perdon
"Perdonar es el camino de la sanación...es el dejar marchar la dureza que se
tenía hacia una persona ; soltando todas esas cosas que abrigábamos
contra esa persona y soltándola de ese vínculo...perdonar es un proceso que
dura toda la vida y se va recibiendo la gracia en cada momento."
"El perdón permite liberarse de todo lo soportado para seguir adelante. Usted se
acuerda del frío del invierno, pero ya no tiembla porque ha llegado la primavera".
Comprencion
5. La comprensión es un proceso de creación mental por el que, partiendo de ciertos
datos aportados por un emisor, el receptor crea una imagen del mensaje que se le
quiere transmitir. Para ello es necesario dar un significado a los datos que
recibimos.
¿PARA QUE SIRVE?
SIRVE PARA ENTENDER A LAS OTRAS PERSONAS COMO SON,
ACEPTANDOLAS CON SUS VIRTUDES Y DEFECTOS… SER COMPRENSIVO
ES UNA VIRTUD QUE MUY POCOS POSEEN…
UN EJEMPLO
Un ejemplo nos ayudará a comprender esta idea: cuando un mimo hace una
representación somos capaces de comprender el mensaje que nos quiere
transmitir aunque no utilice palabras, cuando leemos una carta somos capaces de
comprenderla aunque no veamos la expresión de la cara del remitente,
Puntualidad
La puntualidad es la obligación para terminar una tarea requerida o satisfacer una
obligación antes o en un plazo anteriormente señalado o hecho a otra persona.
Valor de la puntualidad y teoría de las colas
En muchas situaciones el requisito para la puntualidad es asimétrico. Por ejemplo,
en la clínica de un doctor o el aeropuerto, se espera que se llegue a la hora para la
cita o lo pierdan. Sin embargo, pueden estar esperando los pacientes un rato
antes de que puedan ver al doctor o subir al avión sin especificar la causa.
Solidaridad
La solidaridad nace del ser humano y se dirige esencialmente al ser humano.
La verdadera solidaridad, aquella que está llamada a impulsar los verdaderos
vientos de cambio que favorezcan el desarrollo de los individuos y las naciones,
está fundada principalmente en la igualdad universal que une a todos los hombres.
Esta igualdad es una derivación directa e innegable de la verdadera dignidad del
ser humano, que pertenece a la realidad intrínseca de la persona, sin importar su
raza, edad, sexo, credo, nacionalidad o partido.
La solidaridad trasciende a todas las fronteras: políticas, religiosas, territoriales,
culturales, etc. Para instalarse en el hombre, en cualquier ser humano, y hacer
sentir en nuestro interior la conciencia de una “familia” al resto de la humanidad.
6. La solidaridad implica afecto: la fidelidad del amigo, la comprensión del maltratado,
el apoyo al perseguido, la apuesta por causas impopulares o perdidas, todo eso
puede no constituir propiamente un deber de justicia, pero si es un deber de
solidaridad.
Sensivilidad
La solidaridad nace del ser humano y se dirige esencialmente al ser humano.
La verdadera solidaridad, aquella que está llamada a impulsar los verdaderos
vientos de cambio que favorezcan el desarrollo de los individuos y las naciones,
está fundada principalmente en la igualdad universal que une a todos los hombres.
Esta igualdad es una derivación directa e innegable de la verdadera dignidad del
ser humano, que pertenece a la realidad intrínseca de la persona, sin importar su
raza, edad, sexo, credo, nacionalidad o partido.
La solidaridad trasciende a todas las fronteras: políticas, religiosas, territoriales,
culturales, etc. Para instalarse en el hombre, en cualquier ser humano, y hacer
sentir en nuestro interior la conciencia de una “familia” al resto de la humanidad.
La solidaridad implica afecto: la fidelidad del amigo, la comprensión del maltratado,
el apoyo al perseguido, la apuesta por causas impopulares o perdidas, todo eso
puede no constituir propiamente un deber de justicia, pero si es un deber de
solidaridad.