El documento ofrece un poco de humor para alegrar el día a través de una historia corta sobre un padre e hijo. Aconseja agradecer a Dios por tener personas que piensen en uno y reenviar el mensaje a amigos aunque eso signifique volver a enviarlo a la persona que lo envió originalmente. Recuerda que aunque para el mundo solo seas alguien, para alguien eres todo su mundo.