2. A principios de la década de los setenta, Helio Jaguaribe (1) resumió el estado
de la teoría sobre esta problemática, en la forma que ahora veremos (porque
muchas de sus consideraciones siguen siendo válidas) al propio tiempo que
anotaremos lo que ocurrió desde entonces.
A esta altura del siglo ya hay que preguntarse, en realidad cuál es la causa de la
persistencia del subdesarrollo latinoamericano. En primer lugar, establezcamos
que el subdesarrollo latinoamericano no es un desarrollo incompleto o
insuficiente, sino un desarrollo de conducción exógena, hecho en función de
intereses exógenos.
No se puede separar subdesarrollo y dependencia. Somos subdesarrollados
porque somos dependientes, y si en los próximos años vamos a volver a
desarrollarnos algo es porque hay un cambio en la modalidad de la
dependencia: de la dependencia "satelital" vamos a pasar a la dependencia
"provincial"; y esa nueva modalidad exige un nivel de desarrollo mayor que la
anterior. La dependencia satelital ya es inviable, como lo demostró la crisis de
la deuda externa, y se impone un cambio en la forma de la relación de
dependencia.
3. Históricamente, el subdesarrollo latinoamericano admite varias
explicaciones: la deficiencia intrínseca en la formación del capital local
y la insuficiencia en el abastecimiento externo de capital. Desde fines
del siglo XIX hasta aproximadamente 1930 es válida la explicación por
el deterioro de los términos de intercambio.
Pero a esta altura de los tiempos hay que buscar otras explicaciones. Es
muy interesante la que plantea Jaguaribe, que atribuye la persistencia
del subdesarrollo a una relación circular de mutuo reforzamiento entre
el estancamiento, la marginalidad y la desnacionalización.
El estancamiento es el resultado del agotamiento del impulso de
sustitución de importaciones sin haber logrado un proceso general de
crecimiento autosostenido. Implica también la correspondiente
carencia de procesos autosostenidos en otros planos de la estructura
social: el desarrollo cultural, social y político. También significa que la
brecha que separa a América Latina de los países desarrollados se hace
cada vez mayor.
4. La marginalidad es un concepto que puede interpretarse en tres sentidos diferentes pero
complementarios:
- la mayor parte del pueblo es marginal en su participación económica, política, social y
cultural, como productora y consumidora de bienes y servicios, respecto de los sectores
minoritarios centrales de cada sociedad.
- la mayor parte de las regiones latinoamericanas son marginales respecto de las pocas
regiones periféricas que han alcanzado cierto grado avanzado de desarrollo.
- la marginalidad de la mayoría de los países respecto de los pocos más desarrollados, y de
la región en su conjunto respecto del mundo desarrollado, crece continuamente.
La marginalidad se caracteriza por un nivel muy bajo de productividad/ingreso, y una
alta tasa de desocupación y subocupación rural y urbana. La marginalidad urbana, como
consecuencia de las migraciones internas que origina el caracter expulsivo de las áreas
rurales, ha crecido rápidamente en todos estos años y continúa creciendo. El
estancamiento y la marginalidad se refuerzan mutuamente, en un pro-ceso de causación
circular. La desnacionalización es un proceso que consiste en una transferencia del
control de los actores sociales, que dejan de estar manejados por manos leales a la nación
y pasan a estar manejados por manos leales a otra nación o a alguna entidad no nacional
(por ejemplo, a empresas multinacionales).
5. Es un proceso de graves consecuencias, porque un desarrollo
político-económico-social exitoso exige condiciones de
viabilidad nacional que son función directa de la capacidad
política de la sociedad. Esa capacidad a su vez depende de la
funcionalidad de la élite, que depende de la congruencia y
complementación entre sus cuatro roles principales: conducción
cultural, social, política y económica. Esa congruencia y
complementación requiere fidelidad nacional y no es compatible
con la desnacionalización. No se trata, pues, de un problema de
chauvinismo o de nacionalismo; es un tema de fidelidad
nacional, sin la cual la élite no es funcional y, por consiguiente, la
sociedad no tiene capacidad política para conducir
adecuadamente un proceso de desarrollo exitoso.
Jaguaribe considera que en América Latina hay tres variedades de
desnacionalización: económica, cultural y político-militar.
6. La desnacionalización económica se manifestó en una serie
de procesos sucesivos y parcialmente simultáneos:
- el creciente dominio por las corporaciones
multinacionales de los sectores más estratégicos y
dinámicos de las economías latinoamericanas.
- el creciente endeudamiento externo de la región, que
financió la ineficiencia global de su economía y su
administración, sin una contrapartida en capitalización
interna.
- la privatización de empresas estatales a cambio
principalmente de bonos de la deuda externa, adquiridos a
una fracción de su valor nominal, y una pequeña parte en
efectivo para financiar el remanente déficit fiscal durante el
periodo de transición en la reforma del estado.
7. En la desnacionalización político-militar hay que
analizar varios procesos. Jaguaribe menciona dos:
- la toma del poder político por medio de la fuerza, por
parte de la mayoría de las fuerzas armadas
latinoamericanas.
- la progresiva dependencia de las fuerzas armadas
latinoamericanas respecto de EE.UU.; y de
seguimiento de las políticas dictadas por el grupo de
intereses integrado alrededor del Departamento de
Defensa de los EE.UU.
8.
9. la clasificación de países desarrollados, en vías de desarrollo y subdesarrollados
nace por el sistema capitalista implantado por la revolución industrial en el
siglo xix, esto es así, los países que tuvieron acceso mas rapido a la revolución
industrial o sea lo que tienen los bienes de capital para producir bienes
industrializados son los países desarrollados, mientras que los que no tuvieron
acceso a esta revolución, o sea los países productores de materia prima como
casi todos los de América latina son los países subdesarrollados, y aquellos que
son productores de materia prima pero a su vez tienen una industria creciente
son países en vías de desarrollo por ejemplo brasil o uruguay. además de la
clasificación de los bienes que produce un país( industrializados o primarios) el
subdesarrollo refleja como es el aspecto político y social de un país, por ejemplo
el sistema democrático poco estable, sistemas de salud
desbordados, distribución de la riqueza desigual, pobreza etc. hoy en día
también existen otros conceptos técnicos de los países sub o desarrollados
como, el riesgo país, perca pita.
ahora bien!! ser o no un país subdesarrollado es una cuestión meramente
económica impuesta por los grandes países del norte todo lo que te expreso es
totalmente técnico.
espero te sirva saludos.
10. El convertirse en un país desarrollado no debería ser una
meta inalcanzable para países como el Ecuador. Durante las
últimas décadas, varias naciones han pasado del
subdesarrollo al desarrollo en alrededor de 30 años y,
aunque parezca un horizonte de muy largo plazo, basados
en la experiencia, es el tiempo que puede llevar a un país
cambiar estructuralmente su condición y convertirse en un
país desarrollado. El Japón de la post guerra y el modelo de
desarrollo de los tigres asiáticos han evidenciado lo crítico
de una proyección real de largo plazo y la posibilidad de
implementar una política sostenida en términos de
desarrollo. Sin embargo, un ejemplo tal vez más cercano, es
Chile, país con una historia similar a la ecuatoriana.