1. LA PINTURA FLAMENCA
En el contexto de un siglo XV marcado por el embrión revolucionario del
humanismo, los Países Bajos vieron aparecer una serie de grandes artistas
que, a primera vista, parecen no participar en el fenómeno de transformación
contemporánea que representó el Renacimiento italiano. Sin embargo, la
dirección que allí toman la escultura y la pintura no es opuesta, sino todo lo
contrario, a la dirección que habían emprendido los artistas florentinos. Lo
demuestra el hecho de que ambos focos artísticos, el flamenco y el florentino,
pudieron convivir sin ninguna dificultad.
Aunque progresivamente fueron aceptando los postulados renacentistas los
pintores flamencos siguieron siendo fieles a la propia tradición, ya que se
trataba de algo vivo y con enormes posibilidades creativas.
La pintura flamenca carece de precedentes en gran formato, a excepción de las
vidrieras. Pero sí en las miniaturas, sobre las cuales posee una larga tradición
de gran calidad. Esto determinará alguna características del arte flamenco
como es el empleo de los colores brillantes que recuerdan a los pigmentos
usados para la iluminación de las miniaturas. Otras características principales
de la pintura flamenca son:
• El realismo, con pinturas que describen la vida cotidiana y cuyo objetivo
es ser expuestas en las viviendas de los compradores, por lo que
adquieren relevancia los retratos (Flandes es una de las primeras
regiones en llevar a cabo retratos con penetración psicológica del
modelo)
• El naturalismo, que buscará la preferencia por la representación
detallista y minuciosa de los objetos y sus calidades. Los detalles se
convierten en algunos casos en símbolos espirituales ( un campo de
flores puede ser una alegoría de la Virgen o de las virtudes teológicas).
• El gusto por el paisaje. En un cuadro flamenco encontraremos una
escena que siempre remite al paisaje, bien sea a través de una
2. ventana, bien porque se desarrolle al aire libre. Estos paisajes son
estereotipados: rocas aristadas y sin vegetación, árboles en forma de
pluma, ciudades lejadas y torreadas etc.
• Tridimensionalidad con perspectiva de punto de vista alto (“perspectiva
de vista de pájaro”).
• Obras para la burguesía, que las adquiere para resaltar su riqueza.
• Ausencia de elaboración teórica
Y por supuesto, la aplicación sistemática de la técnica al óleo ( no
inventada por los flamencos). Conservaron como soporte la tabla a pesar
de que en Venecia ya se estaba empezando a generalizar el uso del lienzo.
El tema religioso (tratado de forma familiar) predomina en esta etapa,
desde la recreación de temas bíblicos hasta los referentes a la vida de
santos o anacoretas. Algunos creadores como El Bosco o Brueghel el Viejo
representan escenas de pecados y sus consecuencias con profusión de
elementos fantásticos que configuran un lenguaje simbólico.
Los cuadros, de pequeño formato, se pueden dividir en Trípticos ( con la
central más grande con el tema principal) y Polípticos (con mayor número
de tablas). Entre los pintores más afamados destacan:
♦ Hugo Van der Goes: autor del Tríptico “La Adoración de los
Pastores” encargado por el representante en Brujas de la Casa
Médicis Tommaso Portinari (también se le llama Tríptico Portinari).
En esta obra resaltan en la tabla central el realismo de los
pastores y el bodegón inferior que contrastan con la gravedad de
la escena.
♦ Hubert Van Eyck: autor junto con su hermano Jan del famosísimo
políptico del “Cordero Místico” de la Catedral de Gante donde el
nuevo lenguaje y la nueva sensibilidad hacen que el ciclo teológico
medieval alcance su culminación. Esta es la única obra conocida
del pintor y no se puede aclarar tampoco cuales fueron las partes
3. por él pintadas. En las tablas superiores se representa a Dios Padre
con sus atributos de poder y en posición sedente flanqueado por la
Decís (la Virgen y San Juan). Éstos a su vez están rodeados por
ángeles cantores. En los laterales superiores se encuentran Adán Y
Eva. En las tablas inferiores aparece la Adoración del Cordero
Místico. El Políptico ofrece una gran minuciosidad y cuidado del
colorido, destacando los ángeles con detalles tratados a la manera
miniaturista.
♦ Jan Van Eyck: este perfeccionador de la técnica del óleo es el
creador, además del Políptico del Cordero Místico, de obras de
temática mariana como la “Virgen del Canciller Rolin” del Museo
del Louvre considerada uno de los grandes retratos de la historia
del arte. En ella, además de la calidad retratística destaca el paisaje
que se distingue entre las arcadas románicas.
Entre sus obras de temática burguesa caben citar el “Hombre del
Turbante” que bien pudiera ser el suegro de Jan y “Margarita Van
Eyck” -retrato de la esposa del artista de mirada inteligente y limpia.
Mención especial merece el “Retrato del Matrimonio Arnolfini” que
presenta la representación de una boda en una escena interior
dentro de una habitación burguesa. Evidencia de la revolución
flamenca en paralelo a las innovaciones italianas, es u n retrato
doble pleno de simbolismo ( la cama, símbolo de realeza y nobleza,
y el candelabro con sólo una vela encendida, símbolo del ojo de
Dios que todo lo ve)
♦ Robert Campin: Una de sus obras principales es “San Juan
Bautista y el Donante” del Museo del Prado. También citar
dentro de este mismo museo “Los desposorios de la
Virgen” donde se observan símbolos como la puerta gótica
inacabada que representa a la Nueva Iglesia.
4. ♦ Roger Van der Weyden: el pintor flamenco que más se
ocupa del dolor y el dramatismo. Este autor da gran
importancia a la composición y sus figuras son de canon
muy esbelto. Entre sus principales obras sobresalen “El
Calvario”, la “Virgen con el Niño” que probablemente
formaba parte de un díptico y el “Descendimiento” de
equilibrada composición escenográfica que supone una
exaltación del dolor y el dramatismo (la Virgen se
representa desmayada sostenida por San Juan).
♦ Hans Memling: pintor de origen alemán e influencia gótica,
su obra se muestra salpicada de primitivismo. Algunas de
sus obras más célebres son las escenas de la Arqueta
relicario de Santa Úrsula (obra encargada para la Catedral
de Brujas) con imágenes de la vida de la santa, el “Tríptico
de la Epifanía”pintura narrativa de posición horizontal con
complejo planteamiento de la luz
♦ Gerard David: con influencias de Van der Weyden, las
características principales de sus obras son la serenidad y
dulzura en los rostros. Entre ellas cabe mencionar
“Descanso en la Huida de Egipto” que muestra a la Virgen
con el niño en brazos,
♦ El Bosco: nacido en Holanda pero dado a conocer por sus
obras en Flandes, Jerónimo Bosch fue el pintor de Felipe II
y su producción es un intento de salvar la cultura clásica,
difuminada en la Edad Media. Sus creaciones se
caracterizan por su perfección técnica y la fantasía y
originalidad que en ocasiones, llega al surrealismo. Sus
principales obras son “La Mesa de los Pecados Capitales”,
“La extracción de la piedra de la Locura” (cuadro irónico
con un magnífico paisaje), “El carro de heno” (tríptico
donde se representa el tema de la codicia) y “El Jardín de
5. las Delicias”, tríptico de punto de vista altísimo que en las
dos tablas laterales muestra la escena de la Creación y en
la tabla central escenas deliberadamente sexuales.
6. las Delicias”, tríptico de punto de vista altísimo que en las
dos tablas laterales muestra la escena de la Creación y en
la tabla central escenas deliberadamente sexuales.