Tema xxxii. la edad del bronce antiguo y medio en europa
1. PREHISTORIA Tema XXXII Carlos Basté López
2º Cuatrimestre
Tema XXXII. La Edad del Bronce Antiguo y Medio en Europa
1. PANORAMA GENERAL
La Edad de Bronce en Europa comienza durante los últimos años del III milenio
(aparición de los primeros túmulos armoricanos) y se extiende hasta el siglo VIII a.C.,
cuando en buena parte del continente empieza la Edad de Hierro.
La mayor parte de los investigadores han fijado para el Bronce Medio la fecha
aproximada de la segunda mitad del II milenio a.C. y para el Antiguo desde el 2.300
a.C., para Europa Central, hasta un 1.800-1.500 a.C., según las regiones.
BRONCE ANTIGUO
En este período todavía no se ha generalizado el bronce para la fabricación de armas y
útiles, ni tampoco aparecen todavía los nuevos tipos metalúrgicos que definirán la
siguiente etapa: hachas, puñales y espadas con remaches para el mango.
A comienzos de este período, Europa Central, las regiones del Báltico, las Islas
Británicas y la Península Ibérica se relacionan por el comercio del cobre, que se apoya
en Mecenas, y del ámbar (cuyo control lo tienen culturas como Utenice u Otomani en
Europa Central y los Balcanes). Gran parte del comercio se desarrolla en canoas que
remontan los cursos fluviales hacia el interior.
Hay una ocupación nueva de tierras, especialmente desde el 1.800 a.C. El uso del carro
y el arado aumentan la producción agrícola que, junto a la ganadera, es la base de la
economía fundamental. El tejido fue también importante en la economía de estas gentes.
Las técnicas metalúrgicas son similares a las anteriores: fundición y martilleado y,
solamente a finales del período, comienzan a usarse moldes bivalvos y la aleación de
cobre y estaño. El control de la explotación del metal debió ser un factor muy
importante en el desarrollo posterior de las jerarquías.
En las regiones del este de Europa, sobre todo en torno a los Cárpatos, los
asentamientos tienen hábitats no muy grandes, pero situados estratégicamente y, a
menudo, con sistemas defensivos artificiales, mientras que en el oeste europeo,
encontramos poblados muy pequeños y sin defensas, posiblemente estacionales.
Aún cuando hay una cierta uniformidad, en el continente europeo se desarrollan varias
culturas durante esta etapa que, aunque presentan semejanzas en los artefactos muebles,
presentan sustanciales diferencias en sus modos de vida.
2. EUROPA CENTRAL
2.1 Unetice o Aunjetitz
Los pueblos del hacha de combate calcolíticos fueron la base de esta nueva cultura,
aunque en su formación intervienen también grupos tardocampaniformes.
La cultura Unetice controla las rutas comerciales europeas, siendo el intermediario entre
el Báltico, la Grecia Micénica y las Islas Británicas. Las rutas comerciales canalizan el
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oro y el ámbar. Su potencial metalúrgico se basa en la exhaustiva explotación de las
minas de cobre de Centroeuropa, aunque su economía es predominantemente ganadera
(cerdos, bueyes y caballos), complementada con el cultivo de cereales, al parecer,
mediante el uso del arado.
Se admite una periodización interna en tres etapas:
• Utenice Arcaico: es una etapa bastante heterogénea de formación, con claros
influjos Campaniformes y Calcolíticos. Destaca el yacimiento de Adlerberg,
necrópolis del Bronce Antiguo a orillas del Rhin.
Los asentamientos están constituidos por casas rectangulares en madera y
ramajes, semisubterráneas, y con cubiertas a dos aguas. Las sepulturas son de
inhumación individual en fosas, cistas, e incluso en cajas de madera, en
ocasiones bajo túmulo, y formando necrópolis. Los ajuares están constituidos
por armas en las tumbas masculinas y adornos en las femeninas.
La cerámica es lisa, con formas de carena baja con asas.
Su cronología se ha establecido entre 1.800 y el 1.650 a.C.
• Utenice Clásico: es la fase de apogeo, desarrollada entre el 1.650 y el 1.550 a.C.
Aparecen las “tumbas reales”, bajo túmulos, enterramientos de inhumación
individual, doble o triple, en estructuras de madera con forma de casa, con
ajuares riquísimos con objetos de oro y bronce (tumba principesca de
Leubingen). También hay tumbas más simples como fosas o cistas de sillarejo y
son frecuentes huesos de animales como ofrenda funeraria.
• Utenice Tardío: aparecen sistemas defensivos en los poblados (muralla de
Cezauy), tal vez como consecuencia del grupo Otomani. Se generaliza el uso del
caballo, proliferando los arreos, con fuerte influjo micénico.
Gran cantidad de adornos en cobre, oro y bronce evidencian una gran desarrollo
metalúrgico. Desde mediados del siglo XV a.C. este período va desapareciendo
para imponerse la Cultura de los Túmulos del Bronce Medio.
2.2 Otomani
Grupo de carácter guerrero, testimoniado en la existencia de un número mayor de armas
que de útiles, y en las potentes fortificaciones de sus poblados, asentados en los
Balcanes, Hungría y Eslovaquia.
Son pueblos de gran movilidad, facilitada por el uso
del caballo y, a partir del III milenio a.C., del carro
de cuatro ruedas (en la imagen, modelo de carro
otomani del yacimiento de Nizna Mysla). Su
economía se basa en el cultivo de cereal y en la cría
de bueyes, cerdos y caballos.
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Una primera etapa refleja las influencias kurganas. Desde el 1.600 a.C. comienza el
Otomani Clásico el incremento de las explotaciones de oro y cobre y la metalurgia del
bronce, dan a este grupo una personalidad propia. Aparecen las hachas de enmangue
directo y talón alargado y una cerámica decorada con relieves, en vasos con asas
verticales.
El final del Otomani Clásico y comienzos del Tardío, que representa el Bronce Medio,
coincide con un cambio de rito funerario, pues la incineración va sustituyendo a la
inhumación.
3. EUROPA NÓRDICA
En esta región del norte de Europa se emplea el nombre de Montelius para denominar
las diferentes etapas de la Edad de Bronce. Desde finales del III milenio a.C. se detectan
en estas regiones factores culturales procedentes de grupos kurganos, la cerámica de
cuerdas, las sepulturas de inhumación individual bajo túmulo o las hachas de combate,
perdurando invariables hasta que en el 1.600 a.C. entra en contacto con la cultura
Utenice.
Esta región no poseía recursos minerales, por lo que elabora una gran cantidad de
puñales de sílex, réplicas de los metálicos. Los enterramientos son de inhumación
individual en cistas y continúa la tradición tubular y algo de metal.
Desde finales de este período comienza a desarrollarse en el territorio nórdico
occidental la Cultura de los Campos de Urnas, con rito funerario de incineración.
4. EUROPA MEDITERRÁNEA
Las diferencias entre el Egeo y el Mediterráneo occidental se acentúan aún más que en
la etapa anterior. Mientras en el Egeo se desarrollan el Cicládico, el Minoica y el
Heládico, en el resto del Mediterráneo se mantiene la inercia sin cambios importantes
hasta finales del II milenio a.C. Solamente en el sur de Francia la secuencia sufre un
cambio paralelo al de Europa templada, con el comienzo de la civilización de los
Campos de Urnas.
En la Península Italiana algunas áreas continúan sin interrupción con los modos de vida
calcolíticos, mientras otras áreas hay una ruptura clara y se instalan nuevos modelos
culturales.
4.1 Italia Central: Asciano y Ritranpasone
El grupo Asciano lo constituyen pueblos pastores y muy probablemente seminómadas,
mientras el grupo Ritranpasone, situado en la zona costera adriática, está representado
por un enterramiento de inhumación colectiva en cueva y algunas sepulturas
individuales, con puñales triangulares de empuñadura metálica.
4.2 Norte de Italia: Polada
Polada es un poblado lacustre situado a orillas del Lago de Garda. La cultura Polada
ocupa las regiones de Lombardía, Venecia y el Trentino.
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La mayoría de los poblados son de tipo palafítico, con viviendas de madera, circulares y
oblongas, aunque también hay algunos asentamientos en llanuras y abrigos rocosos. Se
conservan muchos objetos materiales perecederos (piraguas, arcos, hoces o ruedas,
todos ellos en madera, tejidos y objetos de cuero). Sus materiales más representativos
son la cerámica, las puntas de flecha o las hachas de piedra pulimentada. Agricultura y
ganadería, e incluso caza y recolección, son la base económica de estas gentes.
Esta cultura abarca desde mediados del III milenio a.C. hasta los inicios del Bronce
Medio y se proyecta hacia Provenza, Languedoc, Pirineos y Cataluña.
4.3 Malta: “Cementerio o necrópolis de Tarxien”
La Edad de Bronce coincide con la llegada de gentes que introducen el rito funerario de
incineración y nuevos productos, como las figurillas estilizadas de arcilla o una
cerámica lisa y brillante. La necrópolis de incineración de Tarxien, muy influida por lo
heládico, de nombre a esta fase que sustituye a la cultura eneolítica anterior del mismo
nombre.
4.4 Sicilia: Castelluccio
Cultura caracterizada por los poblados con cabañas ovales, situadas en zonas con
defensas naturales, rodeadas de murallas. Hay materiales metálicos e ídolos de hueso;
los enterramientos son en cuevas artificiales. La cerámica está pintada en pardo o negro
sobre fondo amarillo o rojo, y presenta formas de ánforas, copas de pie cónico y vasos
geminados.
4.5 Islas Eolias: Capo Graziano
Las islas Eolias se convierten en centros comerciales de gran importancia, importando
cerámicas heládicas. Sus asentamientos tienen defensas naturales y/o artificiales. Los
enterramientos se realizan en fallas u oquedades naturales y son de inhumación
colectiva. Hay cerámicas lisas e incisas, pesas de telar, molinos y morteros y algunos
moldes de fundición.
Capo Graziano es el nombre de la cultura más representativa, situándose su inicio a
finales del III milenio a.C. o comienzos del II milenio. Los asentamientos se sitúan en
defensas naturales y las sepulturas son de incineración en urnas ovoides y con ajuar de
vasos cerámicos.
4.6 Córcega
Perduran en algunos núcleos los modos de vida neolíticos. Los enterramientos son en
abrigos rocosos o hipogeos, y en dólmenes sin corredor, junto a los cuales aparecen
menhires y alineamientos. La economía es fundamentalmente pastoril, aunque hay
poblados agrícolas, normalmente fortificados.
4.7 Cerdeña: Monte Claro
En Cerdeña empieza a desarrollarse la cultura de Monte Claro. Hay fortificaciones que
parecen ser los precedentes de las nuragas, los enterramientos son en hipogeos con pozo
central, colectivos y también en sepulturas individuales.
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4.8 Región mediterránea francesa y Suiza Occidental: Civilización del Ródano
En la región mediterránea francesa se desarrolla esta civilización que se ha dividido en
tres etapas. La primera recibe fuertes influjos centroeuropeos, sin cambiar sus modos de
vida y perdurando las tradiciones campaniformes. La fase intermedia recibe influjos de
Unetice, creándose el “estilo de Hojalata” y el puñal triangular de bronce con orificios
para enmangue y decoración geométrica en la hoja. En el período final aparecen tipos
metálicos propios como las hachas-espátulas y las hachas-Roseaux.
4.9 Provenza y Languedoc
Siguen aquí las antiguas tradiciones mediterráneas, con impactos micénicos tardíos de
carácter comercial.
5. EUROPA ATLÁNTICA
Esta es una zona rica en minerales, por lo que los “depósitos” de objetos metálicos serán
uno de los tipos de yacimientos característicos de estas regiones. Igualmente hay
testimonios de las relaciones existentes entre las diferentes culturas locales con
personalidad propia.
En el período del Bronce Antiguo destacan la Cultura de los Túmulos Armoricanos y la
Cultura de Wessex.
Se ha pensado en una posible influencia argárica, debida a la existencia de objetos de
plata que llegan hasta Bretaña; los elementos comunes a estos grupos son las espadas de
cobre o bronce de pequeño tamaño y los adornos.
5.1 Francia: Civilización Armoricana
La Civilización Armoricana se desarrolla a partir de la llegada a las costas de Bretaña,
en torno al 1.900-1.800 a.C., de unos protovikingos procedentes del Mar del Norte, que
generan toda una serie de cambios en la zona:
- Desplazamiento de los asentamientos hacia el interior
- Tumbas diferenciadas que demuestran que los recién llegados son jerárquicamente
dominantes respecto a los indígenas. Las de ambos son de inhumación individual
bajo túmulo, pero los de los recién llegados están bajo grandes túmulos, en cistas de
piedra o sillarejo y en casas de madera, además de tener unos ajuares riquísimos.
- Cerámica impresa con cordones y utillaje doméstico en sílex y piedra pulimentada.
- Contactos evidentes con la fachada atlántica de la Península Ibérica y las Islas
Británicas.
Desde mediados del siglo XVI a.C. hay un empeoramiento de la calidad de los ajures,
los túmulos degeneran y desaparecen en el 1.400 a.C., al expandirse por Europa
Occidental la cultura de los túmulos protocélticos.
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5.2 Inglaterra: Wessex
Al sur de Inglaterra, una aristocracia guerrera que domina a la sociedad indígena, que
habita en pequeñas cabañas circulares de piedra y tejados vegetales, dedicada a una
economía agrícola y de cría de bóvidos.
Se han establecido dos fases, la primera con puñales, chapas y alfileres de oro y collares
de ámbar, cuyo comercio impulsaba la sociedad aristocrática, desde el Báltico a
Mecenas, y objetos de hueso, con una cronología entre el 1.800 y el 1.500 a.C. Se
constatan relaciones con Bretaña, Centroeuropa y probablemente el Mediterráneo.
Existe el rito mixto de inhumación e incineración.
En la segunda etapa, entre 1.600/1.550 y el
1.400 a.C., predomina la incineración y abundan
materiales de origen europeo como los alfileres
de hueso y bronce, pinzas de hueso, jarros de
ámbar y oro, etc.
En cualquier caso, la cronología evidencia un
escalonamiento temporal muy largo de esta
cultura.
En la imagen, lúnula de oro irlandesa, fechada
entre el 2.300 y el 1.600 a.C.
BRONCE MEDIO
1. PANORAMA GENERAL
En esta etapa hay un predominio claro del bronce sobre el cobre y un aumento en la
elaboración de utensilios, armas y adornos, estando ya el metal relacionado con
actividades cotidianas y no sólo como factor de exhibición social.
Se inician muchas de las industrias locales metalúrgicas y en el campo de la agricultura
hay una superexplotación de la tierra.
En esta etapa, enclavaba cronológicamente entre el 1.500/1.450 y el 1.250 a.C., se
desarrolla el mundo micénico en el Mediterráneo Oriental, la Europa Nórdica se
convierte en un destacado centro metalúrgico, y en Centroeuropa, la Cultura de los
Túmulos sustituye a Unetice en el control de la ruta del ámbar y del comercio micénico.
2. EUROPA CENTRAL
2.1 Cultura de los Túmulos
La Cultura de los Túmulos se desarrolla desde el Rhin hasta los Cárpatos Occidentales y
desde los Alpes al Báltico. Se denomina así por las sepulturas de inhumación individual
con túmulos, y es continuadora, quizás, de la cultura de Unetice. La diferencia más clara
es que Centroeuropa conoce ahora una desarrollada metalurgia del bronce, poniendo el
metal al alcance de casi todos.
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Son poblaciones que usan el bronce en producciones en serie, realizadas con moldes de
piedra.
Esta cultura une las tradiciones metalúrgicas oriental y occidental y en ella, el control de
la explotación del metal es un factor clave en el desarrollo de las jerarquías sociales.
Muy característico de esta época es también la mezcla de pueblos.
Los túmulos de este período son más bajos que los de Unetice y forman parte de
grandes necrópolis, como la de Haguenau, en Alsacia; suelen tener planta circular y
encierran enterramientos en cistas de piedra o de madera. Es relativamente frecuente la
existencia de enterramientos dobles y también los depósitos de restos óseos de animales.
En regiones como Eslovaquia o Bohemia se usa la cremación.
Los lugares de habitación no son muy grandes y están ubicados en zonas altas con
defensas naturales. A veces se rodean de murallas con uno o más fosos. Las viviendas
son de planta rectangular o trapezoidal y se construyen con madera y materiales
perecederos.
La actividad agrícola es una de las bases económicas de estas gentes, aunque también se
emplean como pastores, sin embargo, la base fundamental fue la metalurgia, con la
aparición de mejoras en el armamento y en el utillaje: espadas largas y puntas de lanza
con enmangues tubulares. Los adornos en metal proliferan, en especial colgantes y
alfileres. Las diferencias regionales son, fundamentalmente, de los materiales.
2.1.1 Grupo danubiano
Se mantiene en los enterramientos la tradición de las hachas de combate húngaras y los
inhumados aparecen ataviados de guerreros.
2.1.2 Grupo de Baviera
Aparecen espadas con empuñaduras macizas, de modelos variados: triangulares,
circulares y en espiral, con decoración geométrica.
2.1.3 Grupo del noroeste de Alemania
Controla las rutas comerciales de metal y ámbar entre el noroeste de Alemania y
Jutlandia. Son destacables como particularidades los ataúdes de madera y la escasez de
túmulos en este grupo, excepto en sepulturas especialmente ricas. En las sepulturas
femeninas, hay una riquísima orfebrería de bronce.
2.1.4 Grupo Hercyniano del Palatinado y Franconia
Los grupos de Alsacia, Wurtenberg y el Rhin se identifican por los brazaletes y ajorcas
en espiral, junto con cerámicas excisas. Hay puñales, espadas con lengüeta trapezoidal,
hachas de talón húngaras y colgantes en forma de corazón.
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3. EUROPA NÓRDICA
A mediados del II milenio aparece en las regiones nórdicas una industria metalúrgica,
cuyo retraso se explica por la falta de recursos de cobre y estaño. A pesar de todo, no
dejó de ser una sociedad económicamente activa. La explotación del ámbar le permitió
adquirir el cobre y el estaño e incluso tener talleres de fundición.
Este período es el denominado Montelius II, en torno al 1.400 a.C. Escandinavia pasa
entonces a producir metales propios. Posiblemente hubo dos rutas comerciales: una que
conectaba el oeste de Dinamarca con el Rhin y el alto Danubio, y otra que unía el este
de Dinamarca, el Oder y el Danubio Medio.
Las sepulturas son tubulares y agrupadas en necrópolis, estando ubicadas en zonas altas
o bajas e incluso a lo largo de vías de comunicación. Los túmulos son circulares, de
gran tamaño y a veces rodeados con lajas de piedra. Predomina el rito de la inhumación.
Las sepulturas son, generalmente, individuales, aunque las hay dobles y familiares.
Troncos de árbol ahuecados son las sepulturas más frecuentes, aunque también hay
cistas de piedra.
Los ajuares son muy ricos y están constituidos por armas: espadas con empuñadura
maciza, lanzas tubulares, puñales y hachas, adornos muy variados y raras veces
recipientes de cerámica. La madera se ha usado para construir cubos, bowls, copas,
cucharas, fundas de puñales y espadas.
En Jutlandia hay sepulturas excepcionalmente conservadas, como la de Egtved o la de
Skryastup.
En Suecia y Noruega se han
localizado grabados sobre
roca que representan naves
con proas altas y mascarones
de animales, carros de cuatro
ruedas y parejas de animales
tirando de arados.
4. EUROPA MEDITERRÁNEA
La evolución cultural de todas estas regiones es bastante compleja y difícil.
4.1 Italia del Norte: Cultura de la Terramaras
En el norte de Italia vive un pueblo de agricultores y pastores, en terramaras, que son
una especie de “tells” orientales, con una pequeña metalurgia local. Pronto empiezan a
crearse nuevos tipos de espadas, puñales, fíbulas y, sobre todo, navajas. Los hábitats son
palafitos, con casas a menudo alineadas al borde de los ríos. Hay cerámica de color
negro decorada con acanaladuras y nervaduras, formas bicónicas, carenadas y tazas con
grandes asas en formas muy variadas.
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4.2 Italia Central: Cultura Apenínica
Se desarrolla con una cierta unidad en toda la Península Italiana al sur del Po la Cultura
Apenínica, eminentemente pastoril, con asentamientos en abrigos o cuevas en las
regiones montañosas, tal vez simples campamentos de gentes trashumantes, algunos a
2.000 metros de altitud. También hay en las zonas llanas poblados de pocas viviendas al
aire libre.
Hay cabañas de diferentes tipos. A finales de la Edad de Bronce aparecen estructuras
más complejas, como edificios con varias habitaciones y fortificaciones. Las facies
clásicas se fechan en los siglos XV y XIV a.C., por la presencia de cerámica minoica
importada. Para los enterramientos, debieron continuar tradiciones anteriores, con
inhumaciones en grutas o incineraciones.
La economía estaba basada en una agricultura con arado y en la ganadería trashumante,
sin embargo, debió existir también una cierta tradición metalúrgica. Hay algunos
puñales con empuñadura metálica, cuchillos, espadas, hachas con reborde brazaletes y
anillos.
La cerámica es grabada con motivos geométricos y excisa, siendo sus formas más
típicas las ollas, tazas carenadas con asas altas. Hay útiles en hueso y asta. Durante el
Bronce tardío subapenínico la cerámica es lisa, pero con modelados en las asas.
Sus inicios no pueden llevarse más allá del 1.700 a.C.
4.3 Isla de Malta: Borg-in-Nadur
Perdura en Malta la Cultura del Cementerio de Tarxien, que pronto será sustituida por la
Cultura de Borg-in-Nadur con poblados ubicados en lugares elevados. Aparecen tumbas
excavadas en la roca y ubicadas tanto dentro como fuera de los poblados.
4.4 Sicilia: Cultura de Thapsos
Esta cultura debe su nombre al yacimiento epónimo situado en Siracusa, fechado entre
los siglos XIV y XIII a.C. Es un hábitat grande en el que se reconocen dos fases: en la
más antigua hay cabañas circulares o cuadrangulares de gran tamaño sin organización y
en la segunda se advierte ya un protourbanismo con casas cuadrangulares, en torno a un
patio, y alineadas en las calles.
Los enterramientos son de inhumación colectiva en
cuevas artificiales, con cámara circular o cuadrangular y
el ajuar está constituido por cerámicas locales (en la
imagen) e importadas y metal, sobre todo armas.
Las relaciones marítimas están atestiguadas por
importaciones egeas, chipriotas y maltesas, de hecho, la
fase urbana se considera fruto de la presencia de grupos
egeos.
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4.5 Islas Eolias: Milazzo
La cultura de Milazzo presenta una metalurgia local evidenciada por la presencia de
moldes de fundición, e importaciones micénicas, apenínicas e incluso de fayenza
egipcia. Los asentamientos encierran dentro de un reciento rectangular cabañas de
planta oval y los enterramientos son individuales en pithoi. Hay cerámicas incisas y de
importación, así como idolillos y cuernos de cerámica.
4.6 Cerdeña: Nurágica
Cultura así denominada por las grandes construcciones llamadas nuragas, construcción
megalítica en cuanto a la técnica constructiva, en forma de torre troncocónica, cuya
función era esencialmente militar, y que puede aparecer aislada o formando recintos
defensivos.
Esta fase pudo iniciarse ya en torno al 1.800 a.C.,
con nuragas (en la imagen, nuraga de Valledoria)
con corredor e influencias culturales del mundo
occidental y atlántico. Posteriormente, entre el siglo
XVI y XV a.C. se introduce en la isla la arquitectura
abovedada, y con ellas las nuragas en tholos.
En esta etapa comienza la penetración comercial y cultural micénica en la isla. Betilos
cónicos representan divinidades femeninas y masculinas, perduran dólmenes e
hipogeos como enterramientos y no faltan las llamadas “tumbas gigantes”.
También han aparecido edificios tipo megarón, con cella al fondo, vestíbulo y
dependencia central, que se consideran santuarios. Los poblados se edifican en torno a
monumentos funerarios.
4.7 Córcega: Cutura Torreana
Lo más representativo de esta cultura son las torres que le dan nombre y que parecen
tener un carácter religioso, con ritos relacionados, de algún modo, con el fuego.
También existen aquí moldes de fundición que testimonian una actividad metalúrgica.
Como enterramientos, siguen usándose dólmenes y hay importaciones cerámicas. Las
torres aparecen a menudo asociadas a estatuas-menhir y tenemos restos de cabaña.
5. EUROPA ATLÁNTICA
En la Europa Atlántica hay una cierta continuidad cultural, desarrollándose una
industria de bronce muy activa. Las diferencias fundamentales radican en los rituales
funerarios y en la diversidad de tecnologías y tipos metálicos. Las ricas tumbas
principescas son reemplazadas por túmulos y ajuares más pobres, a besa de recipientes
metálicos.
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5.1 Francia
Destaca en la fabricación de palstaves (hachas de talón, dos ejemplos a continuación)
bretonas, que se conservan especialmente en depósitos, junto con brazaletes macizos de
bronce decorados con incisiones. Existen claros indicios de relaciones con las Islas
Británicas, aunque esta zona permanece bastante al margen de la influencia de la
Cultura de los Túmulos.
En Bretaña hay producciones originales tales como puntas de lanza, espadas de Saint-
Brandan, hojas o láminas ceremoniales, palstaves, etc.
En el Mèdoc (Gironde) y las regiones vecinas se han encontrado más de 50 depósitos
de hachas de rebordes, siendo las más características las “hachas de gran tipo
mèdocain”.
5.2 Países Bajos
También aquí se está al margen de la Cultura de los Túmulos y del Bronce Nórdico,
existiendo, a pesar de todo, conexiones con el sudeste de Inglaterra, evidenciadas en los
enterramientos con rito de incineración en urnas y en las lanzas con aletas laterales.ç
Las viviendas están formadas por construcciones rectangulares de gran longitud,
divididas en dos espacios, uno para las personas y el otro para el ganado.
5.3 Islas Británicas
Desde mediados del II milenio a.C. se produce aquí una cierta decadencia de la
industria lítica y un desarrollo de la metalurgia.
El rito funerario es el de incineración en urnas, planas o con túmulos y son escasos los
ajuares metálicos.
Las relaciones con el continente son bastante intensas. Se fabrican mayor número de
útiles, sobre todo palstaves, que de armas. Llegan también modelos europeos como las
hoces metálicas, alfileres de cabeza anular y adornos denominados “tútuli”. Desde las
Islas se exportan también puntas de lanza, espadas y oro. En Irlanda aparecen los
conocidos torques de oro macizos en espiral, como cordones.
Desde finales del siglo XI a.C. aparece un influjo mayor de los Campos de Urnas
centroeuropeos, así como cambios notables en la metalurgia, comenzando ya el Bronce
Final.
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