1. Vicent Van Gogh S. XIX
Apasionado, sensible,
desequilibrado…pero el artista
del S. XIX que más
entusiasmo provoca en
nuestra sociedad actual, fue
un prodigio de potencia y
fertilidad creadora.
Vivió 37 años de los cuales
sólo le entregó a la pintura 9
y dejó 879 cuadros, sólo
vendiendo 1 lienzo en vida
mientras que hoy bate
records de venta.
2. Era hijo de un pastor calvinista y entró con el
arte cuando empezó a trabajar como
marchante de la galería francesa Goupil en La
Haya trasladándose luego a Bruselas y
Londres y a París.
Sus desengaños amorosos aumentan su
depresión llevándole a desatender el negocio
y siendo despedido en 1876 cuando inicia una
correspondencia con su hermano Thèo, su
gran soporte moral y financiero hasta que se
suicida.
3. Busca consuelo en la religión y decide convertirse en
“evangelizador de los pobres” predicando la Biblia
pero tiene problemas por su fanatismo, siendo
rechazado. Entonces, se vuelca en la pintura
cultivando una temática social, a base de tonos
oscuros y grises, que resume en Los comedores de
patatas.
4. En 1886 fija su residencia en París donde
alegra la paleta de sus cuadros. Thèo le
presenta a los impresionistas y aprende el
valor de la pintura colorista y clara pero
reconoce que no quiere afiliarse por completo
porque desea aplicar las influencias de otros
estilos como Rubens, Delacroix y la estampa
japonesa.
Los dos últimos años de su vida los pasa en el
sur de Francia, Arlés, donde alcanza su
madurez de genialidad y dondepasa
temporadas internado en el psi quiátrico de
Saint Rémy.
5. Su estilo se define por la línea firme de los
japoneses y el color como gran motor de la
emoción. Pinta noches estrelladas, campos de
trigales, olivos, cipreses, almendros, gladiolos,
girasoles y lirios; representa escenas de
interior, entre las que no falta su propia
habitación y culmina la serie de 43
autoretratos, donde ensayaba pigmentos y
técnicas tomando como referencia su rostro,
cada vez más degradado.