Chicas de la a a la Z... Con 'C' de Causas SocialesA�|A�Vielka Valenzuela
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Empresas, gobiernos y derechos humanos. Deia
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Noticias y política
Dicen que un producto sin marca no se vende. Nosotros diríamos aún más: que los derechos humanos deberían formar parte del ADN de toda marca. 2 Noviembre 2013 Deia
4 IRITZIA Sábado, 2 de noviembre de 2013 Deia
Cuchillas contra la humanidad
http://twitter.com/AntonioMaestre
El gobierno español va a reforzar su
frontera con Marruecos por medio
de nuevas vallas que contendrán
cuchillas. Como lo oyen. Y si quie-
ren verlo, pueden ir a la cuenta en
Twitter del periodista Antonio
Maestre, que muestra el espeluz-
nante artefacto afilado dirigido a
evitar que los inmigrantes accedan a España. Después de los desastres
humanitarios de Lampedusa y el desierto de Níger, esta noticia supone
una muestra estremecedora de insensibilidad, porque el propio Gobier-
no desterró en 2007 estas cuchillas por las graves lesiones que provocaba.
La sentencia de la
‘doctrina Parot’
En el Derecho romano nace el prin-
cipio de la irretroactividad y se con-
vierte en un principio de aplicación
de la ley aceptado universalmente;
de tal manera, que sea cual sea el
delito, “solo se puede juzgar con las
leyes vigentes en el momento de
cometerlo”.
Arranca todo de un cambio jurídi-
co de la Audiencia Nacional, luego
el Tribunal Supremo que modifica
el criterio a favor de la retroactivi-
dad de las penas, confirmado poste-
riormente por el Tribunal Consti-
tucional, comprometiendo este cra-
so error jurídico a todo el Poder
Judicial. Violentan uno de los pila-
res del Estado del Derecho: la irre-
troactividad de la pena. El varapalo
del Tribunal de Derechos Humanos
de Estrasburgo les ha supuesto: un
duro golpe a la Justicia española, un
descrédito político para quienes,
sabiendo de su ilegalidad, apoyaron
esta barbaridad jurídica, un criterio
propio de venganza que de justicia.
Este Poder Judicial ideologizado sal-
tó la norma básica de Derecho para
satisfacer la corriente conservado-
ra dominante. La guinda la pone el
Sr. Rajoy, la primera declaración a
una periodista (haciéndose el gra-
cioso) “llueve mucho”, después de
tres días de silencio, dice que la sen-
tencia es “injusta y equivocada”.
Yo lego en la materia, y conocien-
do casos de jueces que han sido cas-
tigados por prevaricar, todos estos
jueces y magistrados que sabían que
al apoyar dicha doctrina cometían
una ilegalidad… ¿no lleva implícita
la prevaricación? Y hablando de
otras víctimas, que las hubo, quiero
recordar más de 200.000 que yacen
en cientos de cunetas, y al lado de los
cementerios, a los que no hubo jus-
ticia, ni siquiera enterramiento dig-
no. Víctimas que para cierta socie-
dad solo son asuntos liquidados por
la amnistía de 1977, a todas luces ile-
gal, porque los delitos de lesa huma-
nidad no prescriben. Viene a cuen-
to la frase “si la justicia existe, tiene
que ser para todos, nadie tiene que
quedar excluido, de lo contrario ya
no sería justicia”. ¿Por qué algunos
medios mienten sembrando odio y
división en este tema perdiendo toda
credibilidad democrática?
Finalmente, hay dos tendencias
irreconciliables: aquí solo está auto-
rizado a las víctimas del terrorismo
y hacer apología del franquismo…
con absoluta libertad y apoyo guber-
namental.
Pedro Mari Usandizaga Añorga
Ondarroa
A los jueces de Euskadi
Este gudari del 36, con todo el res-
peto, me dirijo a los jueces vascos.
Leo que exigen a los de ETA del daño
causado a las víctimas, según pala-
bras del rey, quien dijo que la Justi-
Cartas al Director
P O R I K E R M E R O D I O
El puente del Congreso
http://twitter.com/Jurdan
Los diputados y diputadas tienen
todo el derecho a irse de puente, a
correr para coger un avión y dormir
en casa la noche del jueves al vier-
nes. Es más, los diputados y diputa-
das, parlamentarios y parlamenta-
rias, junteros y junteras, concejales
y concejalas, tienen pleno derecho
a conciliar su vida laboral de servi-
cio a la sociedad, con su vida personal como les dé la real gana. Pero el
dicho de la mujer del César, que no solo tiene que parecer honrada, tam-
bién tiene que serlo, nunca fue tan apropiado: la imagen de sus señorías
huyendo de sus escaños como si fuera a entrar otro Tejero, que nos mues-
tra el periodista Jurdan Arretxe en Twitter, es injusta con su trabajo, pero
justamente criticable.
Todos son fantasmas
http://www.vtv.gob.ve
A estas alturas ya habrán leído e
incluso visto parte del discurso de
Nicolás Maduro sobre la aparición
mariana de Hugo Chávez, transfor-
mado en una cara de Bélmez ver-
sión caraqueña. Les invito a que
vayan a la fuente original: el ente
público audiovisual del gobierno
venezolano, para que vean que no
ha habido manipulación alguna. Maduro quiso hacer el ridículo y devol-
ver a la vida a un líder militar, golpista, homófobo, ultracatólico y millo-
nario desde que alcanzó el poder. Un líder de la izquierda mundial, por
cierto.
Titulares ¿desafortundos?
http://www.estrelladigital.es
Podría ser un titular desafortuna-
do, pero en el caso de Estrella Digi-
tal llueve sobre mojado. A finales de
septiembre pasado me sorprendía
el modo que titulaban en este medio:
“El asesinato de Asunta, un chollo
para las TV”. No se puede conside-
rar “un chollo”, de ninguna mane-
ra, la muerte de una menor. Esta
semana, el mismo medio animaba a la chavalada a disfrutar de la prime-
ra noche de este puente: “Madrid, un Halloween por todo lo alto para con-
jurar el triste recuerdo”. Una frase para guardar en la colección de “titu-
lares para la vergüenza”.
¿Es posible navegar de un modo secreto?
http://duckduckgo.com
No lo sé y, sinceramente, me parece
muy difícil hacerlo. Siempre he
dado por hecho que un correo elec-
trónico puede ser leído por cual-
quiera que sepa hacerlo. O que
quien quiera saber qué búsquedas
hago, va a poder hacerlo sin mucha
complicación. Al final, en internet, todo lo que hacemos, lo dejamos por
escrito. Y la publicidad “personalizada” que recibimos es la mejor prue-
ba de lo que les cuento. Por si acaso, les presento una alternativa:
DuckDuckGo, un buscador que asegura que no cede las búsquedas que
hagamos y que, además, funciona realmente bien.
Cuando más de dos terceras partes de los
Estados europeos tienen ya sus propios pla-
nes, en el Estado español todavía está en
proceso de elaboración. La Oficina de Dere-
chos Humanos del Gobierno de España,
encuadrada en el Ministerio de Asuntos
Exteriores y de Cooperación, prevé que el
Plan Nacional de Empresas y de Derechos
Humanos esté concluido a finales de este
año. Pero esta iniciativa, que en principio
podría parecer positiva, está llevándose a
cabo mientras se ponen en marcha medidas
gubernamentales que sitúan a la ciudada-
nía en una posición de mayor desprotección
y vulnerabilidad; medidas tales como la
reforma laboral y otras prácticas que favo-
recen recortes de derechos y la privatiza-
ción de los servicios y recursos públicos,
primando los intereses empresariales fren-
te al interés público. ¿Dónde quedan las obli-
gaciones en materia de derechos humanos?
¿Y la coherencia en las políticas públicas?
Sin diagnóstico ni garantía
El Plan Nacional de Empresas y Derechos
Humanos se está elaborando sin realizar un
diagnóstico previo de la situación a abor-
dar, y su borrador se limita a enumerar una
serie de objetivos genéricos que ya vienen
detallados en el derecho internacional, sin
avanzar en la necesaria garantía de los dere-
chos humanos y las libertades fundamen-
tales frente a posibles riesgos y conculca-
ciones incurridas por las empresas.
El objetivo de todo plan elaborado por una
administración pública debería ser el bien
común, planteando mejoras tangibles para
incidir de forma efectiva sobre aquellos
derechos y colectivos real o potencialmen-
te afectados por las actividades empresa-
riales: personas empleadas y su entorno,
consumidores, comunidades, colectivos en
situación de riesgo o vulnerabilidad… Debe-
ría definir medidas concretas que conlleven
asegurar la coherencia política horizontal
y vertical, garantizar mecanismos de recla-
D
ICEN que un producto sin marca
no se vende. Nosotros diríamos
aún más: que los derechos huma-
nos deberían formar parte del
ADN de toda marca.
Es cierto que existen leyes y políticas que
regulan la creación de empresas y sus acti-
vidades, pero los impactos de las corpora-
ciones sobre los derechos humanos han sido
y son escasamente abordados. Tras décadas
de lucha contra la impunidad con la que
ciertas empresas han campado a sus anchas
en su búsqueda del mero beneficio econó-
mico, parece que –poco a poco– reclamar a
las empresas responsabilidades, perseguir
las vulneraciones de derechos humanos que
puedan cometer o propiciar, y exigir repa-
raciones podría dejar de ser solo un deside-
rátum. Tal ha sido el caso, por ejemplo, en
Bangladesh donde, tras lo ocurrido en Rana
Plaza, 80 marcas transnacionales se han vis-
to presionadas a firmar un acuerdo para
mejorar la seguridad en las fábricas. Aun-
que la reparación a las víctimas y familia-
res es otra historia aún pendiente. Y segui-
mos guardando en la memoria casos como
los de Bhopal, Chernobyl o Nigeria.
Cuando el Consejo de Derechos Humanos
de Naciones Unidas aprobó en junio de 2011
los Principios Rectores sobre Empresas y
Derechos Humanos, su gran aportación
radicó en precisar tres obligaciones básicas
para los estados y para las corporaciones:
1) Proteger contra conculcaciones de los
derechos humanos, responsabilidad que ata-
ñe a los gobiernos.
2) Respetar los derechos humanos, res-
ponsabilidad que atañe a las empresas y
otras entidades.
3) Remediar las conculcaciones que se pro-
duzcan, que atañe a todos, gobiernos y
empresas incluidos.
Y siguiendo ese impulso, la Estrategia de
Responsabilidad Social Corporativa for-
mulada por la Unión Europea en 2011 empla-
zó a los Estados miembros a elaborar pla-
nes nacionales para materializar esos Prin-
cipios Rectores.
Tribuna Abierta
P O R I . A L O N S O, O. L A N DA , E . S I LVÁ N Y A . K R A K E N B E R G E R ( * )
Empresas, gobiernos
y derechos humanos
Bog@ndoporlared
@ikermerodio
Deia Larunbata, 2013ko azaroaren 2a IRITZIA 5Deia Larunbata, 2013ko azaroaren 2 IRITZIA 5
U
N total de 522 mártires del siglo XX
fueron beatificados el 13 de octubre
en Tarragona en ceremonia presi-
dida por el delegado del Papa Fran-
cisco, cardenal Angelo Amato, con nutrida
asistencia de cargos públicos y cobertura de la
televisión estatal. Ya ascienden a más de 1.500
los mártires subidos a los altares por fallecer a
manos de los republicanos en la Guerra Civil
o durante la II República. Los obispos explican
que “el testimonio de miles de mártires y san-
tos ha sido más fuerte que las insidias y vio-
lencias de los falsos profetas de la irreligiosi-
dad y del ateísmo”.
Todo esto no estaría tan mal si, al mismo
tiempo, la compasiva Iglesia honrara debida-
mente a los muertos que ella causó por moti-
vos religiosos, las decenas de miles de víctimas
de “las insidias y violencias de los verdaderos
profetas de la religiosidad y de la fe”. En otras
palabras, a quienes murieron –siguiendo una
tradición secular– víctimas de la fe católica a
través de las acciones directas o las instiga-
ciones o delaciones de sus curas, obispos, car-
denales, o sencillamente adictos; aquellos ase-
sinados por no tener esa fe, comulgar con ella
en grado insuficiente, argumentar a favor de
la racionalidad frente a la superstición y la cre-
dulidad, o, aun siendo creyentes, por defender
valores democráticos republicanos… o no ata-
carlos. Los restos de muchos de ellos siguen en
cunetas y fosas comunes.
Nos dicen que mártir significa testigo, testi-
go hasta la muerte, y que de lo que da testimo-
niounmártiresdesufe.Perolasvíctimasmor-
tales de la fe, cuando esta es la que actúa de
matari-fe, de verdugo, también son testigos:
dantestimonio,atravésdesumuerte,delamor
fanático y criminal que con tanta frecuencia
hamovidoalaIglesia.Enotraspalabras,mien-
tras que, según los obispos, “los mártires
murieron por odio a la fe” (el odio a la fe de
unos asesinos, ciertamente), las víctimas de la
fe murieron por el amor a ella (el amor… de
otros asesinos). Aunque presumimos que
hubo, en ambos casos, motivos políticos que se
sumaron a los estrictamente religiosos (para
el historiador católico Hilari Raguer, los lla-
mados mártires no lo fueron, debido a la natu-
raleza política, y no religiosa, de sus asesina-
tos). Que la Iglesia se haga la gran mártir
mediante una beatificación récord mientras
ignora olímpica e inmisericordemente a sus
víctimas y rechaza la recuperación de la
memoriahistórica(puesesosíes“reabrirheri-
das”), revela que la jerarquía católica no pue-
de disimular que continúa simpatizando con
los insurrectos del 36. Hubo honrosas excep-
ciones, como la del cardenal y arzobispo de
Tarragona precisamente, Vidal y Barraquer,
uno de los pocos que en 1937 se negó a suscri-
bir la Carta Colectiva de los obispos en apoyo
de los golpistas, lo que le costó morir en el exi-
lio. Hoy, ningún obispo se ha desmarcado del
agravio. Como se sabe, no solo hubo víctimas
mortales de la fe en el fragor de la guerra (esa
Cruzadapromovida por la Madre Iglesia), sino
también, y muchas, en el disfrute de las mie-
les de la Victoria, y más allá, en frío, cuando la
dulce Iglesia siguió bendiciendo al criminal
golpista, ya como sangriento dictador, hasta el
extremo de llevarlo bajo palio.
Por todo esto, la macrobeatificación victi-
mista no es sino una macrofarsa de la que son
cómplices todas las autoridades e instancias
públicas que transgreden la aconfesionalidad
del Estado a que obliga la Constitución y fal-
tangravementealrespetoalosciudadanos.Es,
pues, una ignominia. Lo que pido es que se
haga la justicia que aún sea posible sobre los
crímenes contra la humanidad del nacional-
catolicismo… y que se restablezca lo esencial
de la legalidad laicista de la II República. Las
víctimas de o por la fe sufrieron delitos de lesa
laicidad.Sololalibertaddeconcienciaquepro-
mueve el laicismo asegura la convivencia pací-
fica de todos los individuos, cualesquiera que
sean sus creencias y convicciones, en un ámbi-
to en el que estas se puedan sostener, y tam-
bién criticar, con libertad, sin privilegios ni
intromisiones estatales. Y tal exigencia demo-
crática obliga a que se anule el Concordato con
la Santa Sede, acabando así con la degradante
sumisión del Estado al Vaticano y con las ini-
cuas prerrogativas, sobre todo, educativas y
económicas, de que disfruta la Iglesia católica.
*Analista
Los textos dirigidos a esta sección no
pueden exceder las 15 líneas y deben ir
firmados. Debe adjuntarse fotocopia del
DNI del remitente y número de teléfono.
DEIA se reserva el derecho de publicarlos,
así como el de resumirlos y extractarlos.
No se devolverán originales ni se
mantendrá correspondencia.
>> DIRECCIÓN: Cartas al Director.
Capuchinos de Basurto 6, 5º C. Bilbao.
>> CORREO ELECTRÓNICO:
cartas@deia.com
cia española es igual para todos y en
eso miente.
Señores jueces vascos, ustedes no
conocieron al terrorismo del fran-
quismo, solo hablan de terrorismo
de ETA, y estos se encuentran en las
cárceles españolas. Yo les pregunto
a jueces, instituciones y a todos los
partidos políticos si no se acuerdan
de la memoria histórica. Todo esto
es triste que un gudari de 94 años
que luchó en Euskadi como muchos
compañeros por la democracia, esa
que nos arrebató el fascismo inter-
nacional, que cometió más víctimas
que ETA, y los que perdimos aque-
lla maldita guerra y sufrimos cárcel
y campos de concentración. Yo me
pregunto, ¿cuándo los verdaderos
demócratas veremos que se acuer-
dan de aquellas víctimas?, de aque-
lla dictadura tan criminal, pero los
que sufrimos aquellos 40 años no
hemos tenido justicia.
Hace poco tiempo, según en Argen-
tina, ha aparecido uno al que le lla-
Zirrikituetatik begira
J U A N J O O L A S A G A R R E
Lou Reed
I
RAGAN mina ez dela bizi-
tzeko adiskiderik onena ikas-
ten saiatu nintzen gaztexea-
goa –to eufemismoa– nintze-
nean. Iragan minak oraina bizi-
tzeko ezintzen zaituelako, eta, jaki-
na denez, bizitzeko modu bakarra
oraina delakoz. Orain minik ez
dugu, ohartzen garenerako denbo-
ra joan eta mina sentitzeko astirik
ere ez baitigu uzten orain puta
horrek. Iragan minaren beste izen
bat nostalgia da, beste bat melan-
kolia –joandako iraganari so egin
eta sentitzeko manera hori– eta bes-
te bat mailegu hartu beharko
genukeen saudade portugesekoa.
Ez naiz batere nostalgikoa nahiz
eta iragan dudan urtemugak horre-
tara bulkatu: ospatzera behartu
naute; eta nire idoloak hiltzen hasi
dira. Lou Reed, esaterako. Ez nin-
tzen Velvet Underground-era aile-
gatu. Transformer eta Rock and
Roll Animal izan ziren ezagutu
nizkion lehendabiziko LPak. Coney
mación y reparación efectivos, fortalecer la
reglamentación y capacidades, desarrollar
herramientas de aplicación, asegurar el
control y la vigilancia o sensibilizar a la ciu-
dadanía, entre otras. En definitiva, medidas
que contribuyan a la protección y el respe-
to de los derechos humanos de todos y todas
sobre la base de un análisis de la realidad
que responda a las necesidades particula-
res de cada colectivo o agente, en todos los
lugares del mundo: acabar con las rentas
diferenciadas entre el colectivo asalariado;
con la desigualdad en el acceso, condiciones
y salario entre mujeres y hombres; con la
esclavitud infantil; con las normativas dis-
criminatorias contra las personas inmi-
grantes; con la contaminación ambiental
impune...
Imagen de país
Más allá del resultado final del proceso en el
ámbito estatal, el Gobierno vasco se encuen-
tra en la actualidad ante una interesante
oportunidad de promover y estimular cier-
tos tipos de producción y consumo, y pena-
lizar otros. Teniendo en cuenta el interesan-
te proceso que estamos viviendo en Euskadi
en los últimos tiempos, pensamos que una
de las señas de identidad de la marca Euska-
di Basque Country que se está impulsando,
debería ser el respeto de todos los derechos
humanos de todas las personas. Por ello, des-
de Argituz, emplazamos al Gobierno vasco,
desde su corresponsabilidad, a diseñar y
desarrollar medidas colaborativas que
garanticen los derechos humanos y las liber-
tades fundamentales en las empresas vascas
en toda su área de influencia, aquí y en los
territorios donde operan, y que conlleve
garantizar esos mismos derechos a quienes
subarriendan, suministran y abastecen. Solo
así podremos aportar el valor añadido que
busca diferenciar y hacer más competitivas
a las empresas.
Máxime en el contexto actual, marcado por
la crisis económica: los criterios de respeto
a los derechos humanos no deberían ser per-
cibidos como una carga adicional e inasu-
mible, sino que constituyen –creemos– un
plus estratégico para nuestra imagen de país
y para la sostenibilidad local y de todo el pla-
neta en su conjunto. Es cuestión de compro-
miso con un progreso más visionario y jus-
to, basado en modelos de desarrollo humano
garantistas, integradores e innovadores.
* En representación de la Asociación Pro Derechos
Humanos Argituz
man Billy el Niño, quien durante la
dictadura cometió muchas salvaja-
das pero no se encuentra en la cár-
cel. Ahora se habla mucho de la paz
y la reconciliación, mientras el PP
no pide perdón a las víctimas del
franquismo y no han desaparecido
todos los símbolos y el dictador con-
tinúa en el Valle de los Caídos,
José Moreno
Portugalete
Contralasrentasdiferenciadas,
ladesigualdadentremujeresy
hombres,laesclavitudinfantil,
lasnormativasdiscriminatorias
contrainmigrantes,la
contaminaciónambiental...
-
Loscriteriosderespetoalos
derechoshumanosnodeberían
serpercibidoscomounacarga
adicionaleinasumible,sinoque
constituyenunplusestratégico
paranuestraimagendepaísy
paralasostenibilidadlocal
Colaboración
P O R J U A N A N T O N I O A G U I L E R A M O C H Ó N ( * )
De los mártires por la fe a las
víctimas de la fe: la solución laica
Island baby, gero. Bai, binilotan eta
grabaturiko kasete haietan.
Onartu beharra dut laurogei
hamarkadan infidela izan nint-
zaiola: New Wave-a, Rock Radikala,
Madrilgo Movida. New Yorkekin
berriz ere harrapatu ninduen, eta
gerora, azkeneko disko parea arte,
jarraitu diot.
Susmoa dut gure belaunaldiak
hautsi bai , baina ez duela gauza
gehiegirik eraiki gizartea egitura-
tzeko balio duten erritoei dagokie-
nez. Hiletetan, esaterako, funtzio
kristaua egiten zaie ateo izanda-
koei, edo konpromisozko ekitaldi
gatzgabea errito zibila aukeratu
dutenei, non eta errito erabat
konprometitua –batez ere bizitza-
rekin– beharko lukeen tokian.
Hiletetarako errito bat sortu izan
bagenu, musikak garrantzia han-
dia izango zuen bertan. Klasikoak,
baina bata ere popak. Hortxe dau-
de zure errautsen aurrean maitatu
eta, zergatik ez, gorrotatu dituzun
horiek. Play. Lou Reed –Walk on the
wild side, azkenik!–, The Clash,
Mikel Laboa, Talking Heads, Radio
Futura, Leteren Habanera, The
Smiths, David Bowie, Ruper Ordo-
rika, M-ak, Sean Rowe, Terence
Trent D’Arby, Jeff Buckey-ren Gra-
ce, fadoa, corrido mexikarrak...
Gauza asko eraiki omen daiteke
melankoliatik. Diote.