Introducción
La osteomielitis es una patología infecciosa de carácter inflamatorio del hueso, la cual es más
frecuente observar en pacientes de países en vías de desarrollo, esta representa un problema de
salud pública debido a la elevada morbilidad asociada a la potencial incapacidad en la persona a
causa de la enfermedad.
Osteomielitis
• La osteomielitis se define
como un proceso inflamatorio
que afecta al hueso y a la
médula ósea resultando en
destrucción ósea local,
necrosis y aposición de nuevo
hueso.
Definición
Epidemiología
•19% de las osteomielitis son de origen hematógeno, 47% secundario a una infección por
contigüidad, y 34% asociado a la insuficiencia vascular.
•En los niños predomina la osteomielitis hematógena y afecta sobre todo a los huesos largos.
•En los adultos más jóvenes, la osteomielitis suele estar relacionada con un traumatismo o una
cirugía.
•En los adultos mayores, las presentaciones clínicas más comunes son la osteomielitis contigua
relacionada con la artroplastia articular, la osteomielitis de las extremidades inferiores
relacionada con la diabetes mellitus y la enfermedad vascular, y la osteomielitis relacionada con
la ulceración por decúbito.
Etología
• H. influenzae
• E. Coli
• K. pneumoniae
Lactantes
• Staphylococcus
aureus
• Streptococcus
pyogenes (Grupo A).
• Otros gram negativos
Escolares
Clasificación según estadio clínico
•Osteomielitis Aguda
Menor de 14 días
Hematógena
Cuadro febril, tumefacción, impotencia funcional, dolor localizado
Ausencia de derrame articular
•Osteomielitis subaguda
14 a 30 días
Dolor
Hemocultivos y analíticas dentro de parámetros normales
•Osteomielitis crónica
Mayor de 30 días
Presencia de fístulas cutáneas con secreción purulenta
Signos radiológicos
Clasificación de Waldvogel: descrita en
1970
• Más frecuente en niños menores de 5 años
•Se localiza metáfisis de huesos largos: Tibia fémur, humero.
•En el adulto acostumbra ser a nivel vertebral y en diáfisis de
huesos largos.
Hematógena
•Fracturas expuestas, cirugía.
•En adultos puede evolucionar hacia la cronicidad.
•La etiología suele ser polimicrobiana.
Sec. A un foco o
inoculación directa
• Adultos, diabéticos y/o insuficiencia vascular.
•Afecta huesos del pie
•La etiología suele ser polimicrobiana.
Asociada a insuficiencia
vascular y neuropatía
Anamnesis y Examen físico
•APP, antecedentes quirúrgico, fracturas.
•Edema
•Eritema
•Dolor óseo
•Aumento del calor local de tejidos
blandos, secreción local
•Fistulas
•Úlceras en miembros inferiores
•Fiebre
•Limitación funcional
Osteomielitis crónica
• La infección del hueso ocasiona necrosis
del tejido, que es reabsorbido por el tejido
de granulación. El que persiste y no
regresiona produce el secuestro óseo.
Tomografía computarizada
•Osteomielitis aguda
•Permite observar edema
de tejidos blandos,
reacción perióstica,
disminución de la
atenuación medular,
áreas de erosión cortical
y masas de tejidos
blandos que deben ser
diferenciadas de tumores
y fracturas
Osteomielitis Crónica
• El secuestro aparece como una zona densa, en el
interior de un hueso hipodenso por el edema en la
TAC (4) y una imagen hipointensa en todas las
secuencias, que no realza con el contraste en la RM.
Otros tipos de Osteomielitis
• Es una forma localizada de osteomielitis
crónica
• S. Aureus 50%
• Afecta a miembros inferiores, generalmente
metáfisis de la tibia
• Clínica: dolor intermitente de larga evolución,
generalmente nocturno con sensibilidad local
Abscesos de Brodie
Osteomielitis Esclerosante de Garre
•Se caracteriza por condensación ósea difusa de un
hueso largo y dolor neurálgico rebelde más nocturno
debido a la tensión interósea
•Forma crónica de baja virulencia
•Tratamiento consiste en resecar la cortical esclerosada
y descomprimir la médula; no suele encontrarse pus
Osteoperiostitis albuminosa de Ollier
•Absceso subperióstico de paredes
engrosada, de contenido amarillo filante.
•Poca sintomatología
•Tratamiento quirúrgico: drenaje
Conclusión
La osteomielitis es una patología infecciosa del hueso que genera una elevada morbilidad en los
afectados, su abordaje diagnóstico oportuno permitiría el inicio de una antibioticoterapia
efectiva guiada por la correcta clasificación e interpretación de manifestaciones clínicas que
permitan establecer cuál es el agente infeccioso potencialmente involucrado
Bibliografía
1. Osteomielitis aguda: manifestaciones clínicas, diagnóstico y tratamiento. Eugenia Mariuxi
Pincay Coello1 ; Ivanna Margarita Avilés Lúa2 ; Diego Mauricio Cabrera Moyano3 ; Cárdenas
Rodríguez Jorge Daniel4 2020
2. Imaging of Osteomyelitis: Current Concepts Carlos Pineda, MDa, *, Ange´lica Vargas, MDb ,
Alfonso Vargas Rodrı´guez, MD
3. Osteomyelitis Steven K. Schmitt, MD
4. Osteomielitis: abordaje diagnóstico terapéutico
5. Revisión bibliográfica. Osteomielitis. Carlos Eduardo Ugalde Ovares, Diana Morales
Castro.
Notas del editor
LA VÍA MAS FRECUENTE ES LA HEMATOGENA EN LACTANTES Y NIÑOS
EN ADULTOS ES POR INOCULACIÓN DIRECTA POR FRACTURAS EXPUESTAS O POR TRATAMIENTO QUIRURGICO DEL TEJIDO ÓSEO
Strepto del grupo B 10%
Pseudomnas mas común en drogadictps y diabéticos
Salmonella pacientes con anemia drepanocitica
Brucella cuerpo vertebral
TBC cuerpo vertebral
Micoticas enfermos crónicos
Secuestro óseo: fragmento óseo necrótico separado del hueso viable por tejido de granulación.
• Involucro: hueso viable formado alrededor del secuestro.
• Fístula: vía de drenaje del involucro a las partes blandas u órganos internos.
Osteomielitis aguda hematógena (Existe una variante denominada: Osteomielitis subaguda): caracterizada por la llegada endógena de las bacterias y la no existencia, inicialmente de hueso muerto. Es el tipo principal en la infancia.
Osteomielitis crónica (este término es intercambiable por el de osteomielitis postraumática o postquirúrgica): caracterizada por la llegada exógena de los patógenos y la presencia de hueso necrótico. Es el tipo que más frecuentemente encontramos en la edad adulta. Hay infección ósea con presencia de osteonecrosis, se clasifica de esta manera cuando la persistencia de la infección es mayor a tres meses1
. Se asocia con la formación de una gran área de hueso muerto no vascularizado y secuestro óseo2 , puede presentarse como una enfermedad recurrente o intermitente, con periodos de inactividad y duración variable. Los pacientes suelen recaer posterior a una terapia aparentemente exitosa.
Hematógena: Este tipo de osteomielitis se caracteriza porque los agentes causales de la misma se acumulan en la cavidad medular ósea, formando así un foco infeccioso. En los huesos largos, la región que está más predispuesta a la infección es la metáfisis, porque tiene un flujo sanguíneo lento. La metáfisis también es propensa a la infección porque existe una discontinuidad en el revestimiento endotelial de las paredes de los vasos metafisarios, los espacios en los vasos metafisarios permiten que las bacterias escapen del torrente sanguíneo a la cavidad medular.
Sex a un foco o inoculación: Las infecciones que se originan en los tejidos blandos y las articulaciones pueden propagarse de forma contigua al hueso, esto ocurre a menudo en el contexto de insuficiencia vascular, como en pacientes con diabetes mellitus o enfermedad vascular periférica, en los cuales hay una respuesta inmune disminuida secundaria a la mala perfusión de la región infectada. En estos pacientes, las extremidades inferiores son las más afectadas, ya que hay neuropatía periférica asociada, lo que predispone a microtraumas repetidos.
Las infecciones que
Clasificacion de Cierny-Mader: se basa en la anatomía d
el hueso afectado y en el estado fisiológico del huésped
Comprimiso loca: fumador, linfedema crónico, estasis venosa, artritis, cicatrices largas o firbosis por radioterapia.
Compromiso sistémico: diabetes mllitus malnutriion,k falla renal o hepática, hipoxia crónica, neoplasia y extresmos d ela edad
Principalmente se debe hacerse incapie en el estado fisiológico del paciente y de los tejidos blandos.
En pacientes con cambios clínicos en sus úlceras crónicas, como empeoramiento del dolor, mal olor o aumento de la supuración.
La diabetes mellitus puede comprometer el suministro de sangre microvascular y macrovascular a las extremidades inferiores. En el marco de la neuropatía sensorial que también es común en la diabetes mellitus, los pacientes están predispuestos al desarrollo de ulceración de la piel en puntos de presión o trauma, con la subsiguiente colonización con flora cutánea. Una vasculatura deficiente contribuye a comprometer la inmunidad local y la cicatrización de la piel, lo que promueve la propagación de la infección al hueso subyacente
Las infecciones asociadas con insuficiencia vascular se presentan con mayor frecuencia con ulceración, eritema, hinchazón y drenaje que puede progresar a hueso visible de forma subaguda a crónica. La infección después de una fractura abierta puede presentarse durante semanas o meses como cicatrización incompleta de la herida o falta de consolidación de la fractura. La fiebre y los escalofríos son menos comunes en este entorno. La osteomielitis vertebral típicamente se presenta con dolor subagudo a crónico en el sitio afectado, a veces con fiebre. Aparecen signos de compresión y compromiso del cordón en aproximadamente el 25% de los pacientes,18con dolor irradiado desde las raíces nerviosas comprimidas correspondientes al nivel afectado, seguido de debilidad en las extremidades y alteración de la función intestinal o vesical
La VES es muy sensible pero poco específica, pues se normaliza a las 3-4 semanas en casos de osteomielitis no complicada y en un 25% de los casos, no presenta incremento en fases iniciales.
La proteína C reactiva se eleva en las primeras 8 horas, alcanza el valor máximo a los 2 días y se normaliza a la semana de haber iniciado el tratamiento; es útil para el seguimiento y para diferenciar formas complicadas.
Hemocultivo 50-60% sale positivo
Bajo rendimiento en formas crónicas , osteomielitis isquémia, y por contigüidad.
Punción por aspiración 60-70% positivos
Biopsia de hueso: el mejor criterio diagnóstico para la osteomielitis es un cultivo positivo de la biopsia de hueso, y una histopatología consistente con necrosis (2). Se debe obtener una biopsia ósea (abierta o percutánea) para la identificación de patógenos y para obtener datos de susceptibilidad siempre que sea factible; la biopsia también es útil si el diagnóstico de osteomielitis es incierto.
90% positivo se recomienda cuando el cultivo es negativo para realizar estufio histopatológico y cultivo para bacterias, micobacterias y hongos.
Desde un punto teórico, la Resonancia Magnética Nuclear (RMN) con contraste es la prueba de imagen de elección para el diagnóstico de la osteomielitis crónica (35) y sobre todo tiene una gran utilidad en la valoración de la inflamación de los tejidos blandos y el periostio (24). La realidad es que en muchas ocasiones la validez de la RMN está comprometida por la presencia de implantes que dificultan la valoración de los resultados
Los primeros hallazgos son cambios inflamatorios en los tejjidps blandos profundos, que oblitera los planos grasos aunque es un hallazgo inespecífico. Y posteriormente hay pérdida en la nitidez de la cortical de la metáfisis y osteolisis que solo son detectados cuando hay destrucción del 30 -50% de la esponja osea.
La radiografía simple tiene baja sensibilidad y especificidad para el diagnóstico de osteomielitis aguda, se estima que un 80% de los pacientes que acuden a consulta para realizarse este tipo de estudios de imágenes, presentarán una radiografía normal hasta 2 semanas después de haber adquirido la infección. El edema de la médula ósea, que es la característica patológica más temprana, no es visible en las radiografías simples (23). El primer signo radiográfico de osteomielitis hematógena aguda es la inflamación profunda de los tejidos blandos (19). Los cambios líticos en el hueso requieren que se reduzca del 50% al 75% de la densidad mineral ósea en adultos (19), y alrededor de 7 días de evolución en niños (2) antes de hacerse evidente en las radiografías simples. Es decir, estos signos más definitivos de destrucción ósea y reacción perióstica pueden no ocurrir hasta 1-2 semanas después de que la infección haya estado presente (19). Por lo tanto, cuando los síntomas son más recientes, la sensibilidad de la radiografía simple es baja.
A: Rx AP y B: Rx lateral. Aumento de la densidad y engrosamiento de la diáfisis femoral, como secuela de osteomielitis tratada.
La infección crónica produce expansión y remodelación ósea, con engrosamiento de la cortical, secundario a la reacción perióstica.
Tiene una utilidad limitada en el diagnóstico de osteomielitis aguda. Es más útil para el diagnóstico de osteomielitis crónica que la RMN, demostrando la presencia de destrucción cortical y de secuestro óseo.
Engrosamiento de la cortical en la tibia y defecto óseo en la parte anterolateral, por trayecto fistuloso. (Flecha delgada). En el interior de la medula ósea se encuentran fragmentos densos y espiculados, que corresponden a secuestros. (Flechas gruesas).
RESONANCIA MAGNETICA NUCLEAR Su excelente resolución para detectar la extensión y localización anatómica de abscesos de tejidos blandos asociados a osteomielitis. Es la técnica de elección para el diagnóstico de osteomielitis vertebral o Pélvica. Sensibilidad :82-100% Especificidad:75-96%