2. Según la tradición cristiana
San Jorge nació a finales
del siglo II en Capadocia,
actualmente territorio turco
y por entonces parte del
Imperio Romano. Fue hijo
de Geroncio, oficial del
ejército imperial, y de
Policromía, siendo muy
joven se hizo soldado como
su padre e ingresó en el
séquito del emperador
Diocleciano, donde acabó
siendo uno de sus guardias
personales.
3. Valiente en las
batallas y fiel a su
Emperador, pero sin
abandonar nunca su
fe cristiana, su acción
heroica más célebre
fue matar con su
espada a un terrible
dragón que
atemorizaba a una
ciudad.
4. En dicho lugar, un reino
dependiente de Roma,
un dragón tenía
atemorizados a los
habitantes. Estas pobres
gentes mantenían a la
bestia entregándole a
diario dos corderos para
saciar su hambre. Pero
los animales pronto
escasearon y, en su
lugar, se decidió mandar
por sorteo a una persona
cada vez.
5. Un día la mala fortuna le
tocó a la princesa, pero
Jorge, al enterarse, acudió a
rescatarla blandiendo la
espada a lomos de su
caballo y mató al dragón de
una sola estocada, justo
cuando estaba por devorar
a la princesa. De la sangre
del monstruo muerto brotó
una rosa que el héroe
regaló a la hija del rey.
Toda esa ciudad se
convirtió, entonces, al
cristianismo.
6. Siguió luego su brillante
labor como soldado
romano, sin embargo, en
el año 303 la situación
cambió radicalmente, el
emperador Diocleciano,
que odiaba a los
cristianos, puso en
marcha una durísima y
violenta persecución
contra la comunidad
cristiana en auge, y
ordenó a Jorge
apostatar, o sea,
renunciar a su fe en
Cristo.
7. Jorge, cristiano confeso,
rehusó renunciar a su fe. El
Emperador, que le tenía
respeto, pero que no toleraba
que no se le obedeciera, le
dio una última oportunidad
llevándolo a un templo donde
estaban las estatuas de los
dioses romanos, para ver si
Jorge se arrepentía de su
decisión y adoraba a esos
dioses. Al entrar Jorge al
templo, las estatuas se
derrumbaron destruyéndose.
Diocleciano lo condenó a
muerte por decapitación.
8. La fecha de la ejecución fue el 23 de abril,
cuando el mártir contaba poco más de
treinta años.
La valiente historia de San Jorge se
extendió por el Imperio romano y con el
tiempo, a todo el continente europeo.
Durante la Edad Media, en el siglo IX,
Jorge se convierte en el ejemplo de los
caballeros andantes y por eso varios
países y ciudades lo tienen por patrono,
entre ellos, Inglaterra, Portugal, Bulgaria,
Ucrania, Etiopía, Rusia, Serbia,
Montenegro y Georgia (que lleva su
nombre). Entre las regiones que lo
veneran se encuentran Cataluña,
Vasconia, Aragón, Génova, Durango en
México y muchos otros lugares.