2. 1. Piensa en positivo y cambia tu lenguaje. Sustituye el
"estamos mal" por algo del tipo "nuestro país sigue siendo
uno de los países más ricos del mundo, lo estamos
pasando mal, pero tenemos la fuerza suficiente para salir".
Este matiz influirá también a las personas de tu entorno.
2. No te quedes en el problema, busca soluciones. Si estás
en paro y no encuentras trabajo, es el momento de buscar
alternativas. Por ejemplo, pensar en emigrar a otro país es
duro, pero debes afrontarlo como una forma de cambiar
de aires; y si tienes ahorros, lánzate a emprender en algún
sector innovador.
Fuente: Tisoc.
3. 3. Es el momento de unirte a tu familia más que nunca.
4. Sigue teniendo ratos de ocio, como sea. Si te quedas en
casa sólo conseguirás deprimirte más y no todas las
aficiones son caras: si te gusta el deporte y no puedes
permitirte pagar el gimnasio, haz footing; si te gusta estar
con tus amigos, reuníos cada fin de semana en una casa
distinta y evitad ir de restaurante.
4. 5. Rechaza la idea de que uno es lo que hace. Deja de decir
"soy abogado" o "soy fontanero" y cámbialo por "trabajo
como…". Esto es más importante de lo que parece, porque
con la primera fórmula se cae en una tendencia cerrada a
la hora de buscar nuevas oportunidades laborales.
6. No seas un esclavo del mundo material. Disfruta de lo
que tengas ahora mientras vienen tiempos mejores.
5. 7. Ahora es el mejor momento para pensar en tu desarrollo
personal. Hay multitud de actividades que, sin ser caras, te
ayudan a relativizar y no pensar sólo en "lo mal que están
las cosas": yoga, pintura o lectura, entre otros.
8. Ajusta tu estilo de vida. En la lista de la compra, incluye
artículos de buena calidad pero más baratos y busca
recetas de comida nutritiva y rica pero más económica;
usa el transporte público; evita la tarjeta de crédito; o
planea vacaciones divertidas sin irte a un hotel de lujo.
6. 9. Sé más activo socialmente que nunca. Si estás en mejor
posición que otros, hazte voluntario y dedica algunas
horas a la semana a colaborar con ONGs o participa en
alguna manifestación por una causa que consideres justa.
Eso sí, respeta a todo el mundo y respeta la ley, concluye
Tisoc.