1. Editan COIT y AEIT G enero 2015 nº 199 / 6 €€
EditanCOITyAEITGenero2015nº199/6€€
Carlos Espinós
“El satélite está llamado a jugar un papel esencial en esta
sociedad conectada en la que vivimos”
Carlos Espinós
Consejero Delegado de Hispasat. Ingeniero del año 2014
Monográfico:
Impulso a la industria
española
Perfil:
Begoña Cristeto
Secretaria General de Industria
y de la PYME
Monográfico:
Impulso a la industria
española
Café de redacción:
Las TIC promotoras de
la competitividad
empresarial
Café de redacción:
Las TIC promotoras de
la competitividad
empresarial
Perfil:
Begoña Cristeto
Secretaria General de Industria
y de la PYME
2. 5119999 enero 2015
Queridos colegiados,
El año 2015 se abre marcado por una serie consecutiva de citas electorales que anticipan un escenario político mar-
cado por debates de profundo calado. Y en el COIT estamos preocupados porque estos debates se lleven a cabo sin la
necesaria perspectiva y lleguen a poner en cuestión los propios fundamentos de la actividad económica de todos aque-
llos españoles que viven pendientes de su trabajo y de su propio desarrollo profesional o del de sus familiares más cer-
canos.
La temática que parece va a presidir el debate electoral, apunta a que se centrará en cuestiones bastante alejadas de
la realidad económica y profesional de los españoles. Espero equivocarme, pero todo parece indicar que se ignorará el
aspecto de la competitividad española, de nuestras empresas y nuestros profesionales y una vez más se presentarán
propuestas relacionadas con asuntos más etéreos y otras más enfocadas a criterios de reparto, más que de creación de
valor. No pretendo menospreciar ninguna propuesta ni ignorar otros elementos debatibles, pero debemos abordar de
una vez la necesidad de tener un país verdaderamente competitivo, eficaz, en el que el trabajo no sea un privilegio inal-
canzable para muchos y en el que ser empresario y vivir de ello no sea una tarea hercúlea. Para ello, debemos pregun-
tarnos qué sabemos y podemos hacer en un entorno global, en qué especializarnos y a qué dedicarnos.
España es un país en el que a veces sus protagonistas políticos no perciben la importancia de dotar de continuidad
a nuestro tejido económico y de ilusión a nuestras generaciones más jóvenes. Con demasiada frecuencia se han adop-
tado posturas y realizado propuestas desfasadas cuando no antagónicas con la realidad internacional, marcada por la
existencia de un mercado global, altamente competitivo en el que solo los países con políticas claras en aquellas mate-
rias estratégicas pueden garantizar su estabilidad social y su desarrollo económico.
En este sentido, el diseño de políticas rupturistas y la permanente obsesión con la creación de nuevas estructuras
políticas y barreras administrativas por parte de algunas administraciones públicas es un error cuando el mundo está
cada día más interrelacionado y nuestras empresas y profesionales compiten en el escenario internacional.
España no puede seguir dando la espalda a la importancia de contar con un tejido industrial tecnológicamente com-
petitivo en un entorno absolutamente global. Y para ello, es imprescindible que cambiemos la percepción que la indus-
tria, la creación de valor tecnológico y el apoyo al emprendimiento tienen tanto en nuestra sociedad como en la propia
administración.
No pretendo disminuir la importancia de otros sectores económicos, pero demasiado a menudo se comprueba
cómo se minusvalora la industria, el diseño o la fabricación de bienes y servicios avanzados, mientras se enfatiza la
importancia de la administración o de servicios y actividades que, por respetables que sean, no aportan el mismo valor
neto a nuestra economía.
Es prioritario para España que seamos capaces de crear un entorno que haga atractivo el estudio de disciplinas téc-
nicas y que a su vez fomente la creación de empresas orientadas al diseño y la fabricación de bienes y servicios de
alto contenido tecnológico. Para conseguirlo, existen dos líneas de trabajo imprescindibles.
La primera, la puesta en marcha de una adecuada política educativa sólida que valore y haga valorar a la sociedad
la importancia de suministrar profesionales altamente preparados y capaces de investigar y trabajar en entornos mar-
Carta del Decano-Presidente del COIT
Eugenio Fontán
Decano-Presidente del COIT
@EugenioFontan
3. 6 enero 2015 119999
cados por la excelencia y la competitividad. Las ingenierías, y la ingeniería de telecomunicación muy concretamente,
siguen siendo el mejor vivero para la creación de entornos tecnológicos caracterizados por su alta productividad y efec-
to tractor sobre la economía. Pero para ello, nuestros egresados deben estar bien preparados a través de masters bien
diseñados y planteados, que provean a la industria de buenos profesionales capaces de liderar la transformación tec-
nológica que proponemos y necesitamos.
Si bien es cierto que la deficiente adopción del Modelo Europeo de Educación Superior en España ha distorsionan-
do gravemente la enseñanza universitaria de algunas profesiones y especialidades fundamentales para nuestra indus-
tria, nos encontramos en un momento decisivo para asumir entre todos el compromiso de rectificar, más allá de las
rigideces del anterior marco normativo, las ineficiencias de algunas titulaciones desenfocadas, sin una clara orientación
profesional, desligadas de las necesidades de la industria y reconducirlas para proveer a nuestro país de profesionales
capaces de liderar y ejecutar estos cambios.
La calidad de nuestra enseñanza universitaria y un modelo adecuado y sólido de equivalencia en los títulos pre-
Bolonia es uno de los fundamentos básicos para mantener un nivel competitivo de nuestro tejido industrial.
El segundo elemento básico corresponde al necesario liderazgo del Gobierno y las Administraciones públicas en el
diseño de una verdadera política industrial.
En este número, abordamos la propuesta de la Unión Europea y de nuestro Ministerio de Industria, Energía y Turis-
mo y sobre un nuevo modelo de industrialización. A nuestro parecer el planteamiento nos parece adecuado, pero nos
preocupa que su puesta en marcha y su ejecución no sigan criterios de eficacia.
Así, creemos que debe apostarse claramente por priorizar un número limitado de sectores estratégicos en los que
hacer el mayor esfuerzo. Para ello, se debe analizar con rigor la previsible evolución a medio plazo de nuestras capaci-
dades industriales y apoyar sin disimulo a aquellas más prometedoras. Mantener el apoyo a discreción y sin una se-
lección previa, a todos por igual, es una receta ideal para dilapidar nuestros escasos recursos. Partiendo de la base que
la iniciativa privada es el mejor y más seguro motor para mantener un tejido industrial competitivo en el entorno
europeo. Corresponde a la Administración el crear las condiciones idóneas para fomentar la inversión privada. Y ori-
entar claramente el esfuerzo escogido elenco de sectores estratégicos.
Entre éstos, el de las Telecomunicaciones, por su capacidad de transformación y su transversalidad. Son muchos los
ámbitos de su desarrollo, desde las “ciudades inteligentes” con su capacidad transformadora del entorno ciudadano, a
las nuevas redes y sistemas de control energético, capaces de resolver nuestra secular dependencia energética. Y por
supuesto, las aplicaciones “cloud”, las basadas en las tecnologías móviles y la ciber-seguridad. Sectores como la logís-
tica, el transporte y el sector aeroespacial entre otros, pueden beneficiarse de las nuevas tecnologías y aportar cambios
disruptivos en sectores como el agropecuario, la enseñanza o la salud.
En definitiva, hay que centrar los debates e intentar sumar y aportar valor, porque tenemos una magnífica oportu-
nidad para que España se enganche de verdad a un modelo de crecimiento sostenible, basado en la eficacia y en el
trabajo bien hecho.
Un abrazo,
EUGENIO FONTÁN