4 Experiencias Exitosas: Involucrando a los Hombres en la Prevención de la Violencia Contra las Mujeres en Lima, Perú

Cuatro experiencias exitosas
involucrando a hombres en la
prevención de la violencia
contra las mujeres, en Lima, Perú

Cuatro experiencias exitosas
involucrando a hombres
en la prevención de
la violencia contra las mujeres,
en Lima, Perú

Cuatro experiencias exitosas involucrando a hombres en la prevención de la
violenciacontralasmujeres,enLima,Perú
© Oxfam, 2015
© Oxfam-Québec, 2015
Ca. Diego Ferré 365
Miraflores, Lima
Teléfono: (511) 242-3659
/oxfamenPerú
@OxfamenPeru
http://peru.oxfam.org
Redacción e investigación:
Marie-Hélène Bérubé
Diana Doroteo Alegre
Revisión:
Christine Benoît
Centro de la Mujer Peruana Flora Tristan
Inppares
Centro Mujer Teresa de Jesús
Red peruana de masculinidades
Corrección de estilo:
José Luis Carrillo
Diagramación:
Richard Valdivia Mosqueira
Foto de la caratula:
Luís Alberto Sánchez / Oxfam
Impreso en:
Servicios Grafica Goicochea E.I.R.L.
Jr. Mariscal Orbegozo 271, Tda. 123, Breña, Lima
Hecho el depósito Legal en la Biblioteca Nacional del Perú N°2015-03108
Primera edición:
Lima, febrero 2015
Este documento fue producido gracias al apoyo financiero del Gobierno de Canadá,
a través del Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio y Desarrollo (MRECD).

INTRODUCCIÓN
PARTE I: CONTEXTO DE LA SISTEMATIZACIÓN
1. Violencia de género (VG)
1.1 Causas de la violencia contra las mujeres (VCM)
1.2 Tipos de violencia
1.3 ¿Cómo los hombres y la comunidad están afectados por la violencia de género?
1.4 Normativa internacional
1.5 Situación de la violencia de género en el Perú
1.6 Marco legal a nivel nacional
1.7 Discurso: prevenir la violencia de género incorporando a los hombres
1.8 Masculinidades
1.9 ¿Por qué involucrar a los hombres?
1.10 Prevención de la violencia de género en el Perú involucrando a los hombres
PARTE II: SISTEMATIZACIÓN DE LAS EXPERIENCIAS
1. Proyecto “Buenas prácticas para prevenir la violencia de género con incorporación
demasculinidades”
2. Objetivos de la sistematización
2.1 Objetivos generales de la sistematización
2.2 Objetivos especíﬁcos de la sistematización
2.3 Componentes de la sistematización
2.4 Metodología de la sistematización
2.5 Cuatro experiencias de buenas prácticas
PARTE III: ANÁLISIS DE LA SISTEMATIZACIÓN
1. Características de las buenas prácticas priorizadas
2. Lecciones aprendidas
3. Principales desafíos en sus intervenciones
4. Recomendaciones
4.1 Internas, desde las organizaciones
4.2 Externas a las organizaciones
Conclusiones
Referencias bibliográﬁcas
ANEXOS

INTRODUCCIÓN
La violencia penetra e impacta en todas las esferas de la vida de las personas afectadas
por ella y puede incluso tener consecuencias fatales. El impacto de la violencia no es
igual en todas las mujeres: cada mujer es única y responde a actos de violencia de
maneradistinta.
Durante las últimas décadas se ha logrado contar con un marco legal más adecuado
para la implementación de programas y políticas orientadas a atacar la problemática de
la violencia. Sin embargo, observamos que la magnitud de este fenómeno no está
disminuyendo y que los servicios implementados por las instancias de gobierno no
responden a las demandas ni expectativas de las mujeres. Además, los servicios
estatales para hombres relacionados con la problemática de la violencia son escasos y
de poco alcance. Los mecanismos que mantienen la desigualdad entre varones y
mujeressiguenvigentes.
Entre 2010 y 2012, Oxfam en Perú, en el marco de su programa de cooperación
voluntaria, apoyó un proyecto del Centro Mujer Teresa de Jesús en el proceso de
reconstrucción de las masculinidades; se alcanzaron resultados alentadores en las
familias y en la comunidad, lo que se articula con esta nueva experiencia de
sistematizar el proceso desde sus intereses. La metodología validada al final de este
proyecto se centró en la deconstrucción de los estereotipos que confinan a mujeres y
hombres en roles sociales y sexuales fijos ―además de reforzar las desigualdades―, y en
la reconstrucción de las masculinidades sin violencia. Los resultados obtenidos han
confirmado que la inclusión de los hombres en la atención de la violencia de género
conduceaunamejorgestióndeesteproblema.
Compartir esta experiencia fortalece a las organizaciones e instituciones en pos de
conseguir objetivos comunes, y hace posible la implementación de un modelo diferente
para la prevención de la violencia de género en la actualidad, modelo que enfatiza el
caráctertransversaldelenfoquedegéneroenlaproblemáticasocial.
Este documento es el resultado de un proceso de reflexión entre organizaciones de la
sociedad civil sobre lecciones aprendidas y buenas prácticas para prevenir la violencia
de género incorporando en el análisis intervenciones orientadas a las masculinidades.
En efecto, se recogen elementos y se proponen alternativas que consideren tanto a las
mujeres como a los hombres como actores de cambio en las cuestiones relativas a la
violenciadegénero.
Cuatro instituciones de la sociedad civil peruana se involucraron con Oxfam en el marco
de este proceso: la Red Peruana de Masculinidades, el Centro de la Mujer Peruana Flora
Tristán, Inppares y el Centro Mujer Teresa de Jesús. Comprometidas todas ellas con la

justicia de género, han implementado en Lima experiencias muy relevantes respecto del
tratamiento de la violencia: procesos de formación, de prevención y de atención de
mujeres afectadas por ella, así como procesos grupales con hombres violentos,
acompañamiento y asistencia técnica, entre otros. La perspectiva de trabajo de las
organizaciones involucradas considera que el proceso de cambio a nivel individual es el
punto de partida para lograrlos en el ámbito de las comunidades. El cambio de las
normas sociales es un horizonte que guía todas las intervenciones, aunque sus
enfoques privilegiados y estrategias diﬁeren en algunos aspectos y premisas, como
veremosacontinuación.

PARTE I:
CONTEXTO DE
LA SISTEMATIZACIÓN
Foto: Marco Antonio Bazán Nattes / Oxfam

1.Violenciadegénero(VG)
La violencia contra las mujeres es la violación más frecuente de los derechos
humanos en el mundo. A escala mundial, una de cada tres mujeres ha sufrido
violencia física o sexual en su vida. Según el “Estudio multicéntrico de la OMS-
2000”, casi el 20% de mujeres habían sufrido violencia sexual antes de los 15 años, y
lamayoríadeloshombresquelahabíanejercidopertenecíaasuentornofamiliar.
Desde 1970 se instituyen en el mundo varios mecanismos que han puesto los
cimientos para el cumplimiento de los derechos de las mujeres, la igualdad de trato y
de oportunidades de género. No obstante, y a pesar del carácter inclusivo e
igualitario de los marcos legislativos, la igualdad de género está todavía lejos de
lograrse. En los últimos años, esta problemática ―tanto en el ámbito público como en
elprivado―hadado cuentadesucaráctercrónico,sistemáticoyapremiante.
1.1Causasdelaviolenciacontralasmujeres (VCM)
Las relaciones desiguales de poder entre hombres y mujeres, la posición
subordinada de éstas, así como su menor valoración simbólica (de parte del
machismo), constituyen las principales causas de la violencia de género,
incluyendo la violencia contra las mujeres. Los factores que generan y sostienen
la VG se encuentran principalmente en la familia, en los ámbitos de educación
formaleinformalyenlacultura:
La violencia contra las mujeres es una manifestación de las
desiguales relaciones de poder entre mujeres y hombres. Este
desequilibrio de poder está profundamente arraigado en
nuestras sociedades; en casi todos los aspectos de la vida
humana, se considera de manera abierta o encubierta que las
mujeres y las niñas son inferiores a los hombres y los niños. El
desequilibrio de poder tiende a vincularse estrechamente con la
dependencia económica, la inseguridad ﬁnanciera y las
expectativas que las sociedades tienen acerca de las mujeres y
loshombres.
United Nations Development Fund for Women (UNIFEM) (2010). Investir en la igualdad de género para poner ﬁn a la
violenciacontralasmujeresylasniñas,NuevaYork:UNIFEM.
OMS(2000).EstudiomulticéntricodelaOMSsobresaluddelamujeryviolenciadoméstica.Ginebra:OMS.
Tomado de Oxfam (2014). Caja de herramientas de género. Módulo 3: Violencia contra las mujeres. Manual de
participantes,Lima,LaPaz:Oxfam,p.12.
Unamujertambiénpuedereproduciractitudesdiscriminadorasenrelaciónconambossexos.
Oxfam (2012a) “Erradiquemos la violencia contra las mujeres: Una guía para el personal de Oxfam”, documento interno,
Oxford:Oxfam.
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Sobreinterseccionalidad
“Según sea la situación de la mujer o la niña, estará en mayor o menor
riesgo de violencia. El análisis interseccional examina las 'intersecciones'
entre la discriminación de género y otros aspectos de la vida de las mujeres
y las niñas, que pueden aumentar o disminuir el riesgo de violencia contra
las mujeres. Las mujeres y las niñas indígenas, las que viven en pobreza o
en guerra, y las que padecen discapacidades sufren formas diferentes de
violencia que pueden aumentar o agudizar la violencia de género, y reducir
lasoportunidadesdelassobrevivientesdeobtenerapoyo.
Cada mujer es única en cuanto a su situación económica, su historia,
etnicidad, edad, rasgos corporales, estado de salud, religión, orientación
sexual y otros aspectos de su identidad y su sociedad. La discriminación de
género adopta diversas formas para las diferentes mujeres y en diferentes
contextos,ynoeslaúnicafuentededesequilibriodepoderyviolencia”.
Ibid.6
6
Cuatro experiencias exitosas involucrando a hombres en la prevención de la violencia contra las mujeres, en Lima, Perú
Principalescausasdelaviolenciadegénero(incluyendolaVCM)
Lasrelacionesdepoderdesigualesentrehombresymujeres.
La falta de respeto universal y efectivo de los derechos humanos,
particularmentedelosderechosfundamentalesdelasmujeresydelasniñas.
La existencia de normas socioculturales que legitiman los roles tradicionales de
género.
Factoresquecontribuyenalaviolenciacontralasmujeres
La demostración o aﬁrmación de la masculinidad hegemónica o de un rol de
génerotradicional.
La existencia de sistemas de justicia que enfrentan desafíos para sancionar
laviolenciacontralasmujeres.
Las habilidades de comunicación y de resolución de conﬂictos limitadas, a
nivelindividualeinstitucional.
Losmitossobrelascausasdelaviolenciacontralasmujeres
Adicciones (alcohol, drogas): El consumo de sustancias psicoactivas puede
actuar como desencadenante de episodios de violencia o servir después
como excusa, pero no se considera como una causa de la violencia hacia las
mujeres. No todas las personas que beben o consumen drogas maltratan a
susparejas.Muchosmaltratadoresnibebennisedrogan.
Pobreza: La violencia de género ocurre en todas las clases sociales, sin
distincionesderiquezaeconómica,etnia,estatussocialonivelcultural.
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1.2TiposdeViolencia
A continuación se señalan los diversos tipos de violencia, así como algunas
estadísticasrelevantes.
Tipo de
violencia
Violencia
psicológica
Acoso
callejero
Descripción
Definición: Consiste en cualquier acto
u omisión que dañe la estabilidad
psicológica de la persona.
Algunos ejemplos: negligencia,
abandono, descuido reiterado,
insultos, humillaciones,
marginación, indiferencia,
desamor, infidelidad,
comparaciones destructivas,
rechazo, restricción a la
autodeterminación, amenazas,
etcétera.
Posibles consecuencias:
depresión, aislamiento,
devaluación de la autoestima,
suicidio.
Definición: Es la conducta física o
verbal, de naturaleza o
connotación sexual, realizada en
los espacios públicos, por una o
más personas en contra de otra u
otras, quienes no desean o
rechazan estas conductas por
considerar que afectan su
dignidad, sus derechos
fundamentales como a la libertad,
la integridad y el libre tránsito, y
crean en ellas sentimientos de
intimidación, hostilidad,
degradación, humillación, en un
ambiente ofensivo.
Algunos ejemplos: comentarios
sexualmente explícitos o
implícitos, masturbación pública,
tocamientos, entre otros, de los
que son víctimas cotidianamente
las mujeres en las calles o en el
transporte público.
Estadísticas relevantes
Según la Encuesta Demográfica y
de Salud Familiar (ENDES) 2013,
del INEI, en el país el 67,5% de
mujeres denuncian haber sufrido
violencia psicológica o verbal.
TomadodeOxfam(2014),op.cit.,p.6-12.
InstitutoNacionaldeEstadísticaeInformática(INEI)(2013).EncuestaDemográficaydeSaludFamiliar2013.Lima:INEI.
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Tipo de
violencia
Violencia
sexual
Violencia
física
Feminicidio
Descripción
Definición: Son los actos que
degradan o dañan el cuerpo o la
sexualidad de la mujer.
Algunos ejemplos: acoso sexual,
violación sexual, intento de violación
sexual, manoseo, explotación sexual,
aborto forzado, daños físicos o
emocionales durante el acto sexual,
exhibición de pornografía a niñas o
niños, prácticas sexuales frente a
menores, proxenetismo, trata de
personas, turismo sexual.
El hecho de obligar a la pareja,
esposa o esposo, a tener relaciones
sexuales, sin su consentimiento y
recurriendo a la fuerza, intimidación
o manipulación, también es una
forma de violencia sexual. Tanto los
hombres como las mujeres tienen el
derecho de decidir cómo y cuándo
quieren tener relaciones sexuales.
Definición: Se refiere al uso de la
fuerza física, con o sin algún tipo
de arma u objeto, para provocar
daño intencional (lesiones
internas, externas o ambas). Muy
frecuentemente, se usa junto con
otras formas de violencia.
Algunos ejemplos: golpear,
patear, morder, quemar.
Definición: Es el homicidio
intencional contra las mujeres en
razón de su sexo. El delito de
feminicidio está incluido en el
Código Penal desde 2011.
Estadísticas relevantes
Desde enero a noviembre del
2013, se reportaron 456 casos por
violación sexual en el Perú.
El 76% de la violencia sexual
contra las mujeres fue ejercida
sobre niñas y adolescentes
(menores de 15 años).
22,4% es la tasa de denuncias
por violación sexual por 100 mil
habitantes en América Latina.
9 de 10 casos de denuncias por
cometer el delito de violación de
la libertad sexual son
protagonizados por hombres.
La mayor cantidad de denuncias
se reportan en Lima-Callao,
Arequipa, La Libertad, Ucayali,
entre otras, en 2013.
El 71,5% de las mujeres, alguna
vez emparejadas, sufrieron algún
tipo de violencia por parte del
esposo o compañero.
El 38,4% de mujeres peruanas,
que han estado alguna vez en
pareja, han sufrido violencia
física o sexual por parte de su
esposo o pareja.
De enero 2009 a marzo 2013 se
reportaron 531 casos de
feminicidio. El departamento de
Lima presenta una incidencia de
29,4% (datos del Registro de
Feminicidio del Ministerio Público
del Perú).
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Violencia
económica
Violencia
social
Violencia
Familiar
Definición: Es toda acción u
omisión que afecta la
supervivencia económica de la
mujer.
Algunos ejemplos: limitaciones
encaminadas a controlar el
ingreso de sus percepciones
económicas, percepción de un
salario menor por igual trabajo, no
reconocimiento del trabajo
doméstico.
Definición: Se refiere a la denegación de oportunidades, derechos y
servicios.
A denegación del acceso a la educación, a los servicioslgunos ejemplos:
de salud, a un trabajo remunerado, de los derechos de propiedad y de
participar y gozar de los derechos civiles, sociales, económicos,
culturales y políticos (individual o colectivamente).
Definición: La Ley de protección frente a la violencia familiar vigente (Ley
26260) conceptúa a la violencia familiar como: “Cualquier acción u
omisión que cause daño físico o psicológico, maltrato sin lesión,
inclusive amenaza o coacción graves y/o reiteradas, así como violencia
sexual, que se produzca entre: cónyuges, ex cónyuges, convivientes, ex
convivientes, ascendientes, descendientes, parientes colaterales,
hasta cuarto grado de consanguinidad y segundo de afinidad; quienes
habitan en el mismo hogar, siempre que no medien relaciones
contractuales o laborales; quienes han procreado hijos/as en común,
independientemente de que convivan o no al momento de producirse la
violencia”.
Constituye uno de los problemas sociales que afecta la calidad de
vida de las familias, sumiéndolas en un ambiente de tensión, maltrato,
insultos, golpes, haciendo desdichada la vida de quienes la padecen.
73% de las mujeres asesinadas lo
fueron por su pareja o expareja.
En el Perú, mientras que las
mujeres trabajan en promedio 39
horas con 28 minutos en trabajo
doméstico no remunerado, los
hombres lo hacen por un tiempo
de 15 horas con 53 minutos.
Asimismo, el promedio de ingreso
de las mujeres que trabajan
representa el 63% del ingreso
promedio de los hombres que
trabajan.
Tipo de
violencia
Descripción Estadísticas relevantes
MIMP, Resumen de estadístico de Feminicidio y tentativas Lima, 2014. Disponible en:
hiperlink<http://www.mimp.gob.pe/index.php?option=com_content&view=article&id=1407&Itemid=431>.
Pro Familia (2007). Violencia sexual: Cuaderno infantil.
INEI (2011). Encuesta nacional de uso del tiempo 2010: Principales resultados. Lima: INEI.
INEI y Movimiento Manuela Ramos (2008). Brechas de género: Insumos para la adopción de medidas a favor de las
mujeres. Lima: INEI / Movimiento Manuela Ramos.
Ministry of Gender and Family Promotion, op. cit., 2011.
Ley de protección frente a la violencia familiar. Texto único ordenado de la Ley 26260 y sus modificaciones.
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Definición: Son los actos u omisiones de las servidoras y los servidores
públicos de cualquier instancia de gobierno que discriminen o tengan
como fin dilatar, obstaculizar o impedir el goce y ejercicio de los
derechos humanos de las mujeres, así como su acceso al disfrute de
políticas públicas destinadas a prevenir, atender, investigar, sancionar
yerradicar losdiferentes tiposde violencia.
Definición: La violencia estructural y la violencia cultural limitan a las
mujeres y niñas en el logro de su máximo potencial, tanto en lo personal
como enla sociedad ensuconjunto.
Algunos ejemplos: leyes y tradiciones que excluyen a las mujeres de la
propiedad de la tierra.
Tipo de
violencia
Descripción Estadísticas relevantes
Violencia
institucional
Violencia
estructural
y cultural
Choque Márquez, V. Módulo mujer y seguridad ciudadana. La Paz: Oxfam / CPMGA, 2011.
Oxfam (2012a), op. cit.
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Foto: Mario Vildosola Benavente

¿Porquépermanecen lasmujeresenunarelacióndeparejaviolenta?
El ciclo de la violencia, así como el análisis de las múltiples dependencias de las
mujeres, permite explicar y entender por qué pocas mujeres logran romper con la
situación de violencia intrafamilar y de maltrato que sufren. Algunas de esas
dependencias incluyen escasa disponibilidad de recursos económicos, una baja
autoestima, el miedo al “qué dirán”, a las represalias o a la destrucción de la
“unidad” familiar. Otro factor importante es el lazo afectivo de amor que une a las
mujeres a su pareja. Ellas quieren el éxito de su relación amorosa y tienen la
esperanzadequesuparejacambieydejedeserviolenta.
Asimismo, la cultura de una comunidad o de un país influye considerablemente.
En Bolivia y el Perú, por ejemplo, las operadores y los operadores de justicia
(policía, fiscales, etcétera) y los familiares, muchas veces culpan a la mujer
(“¿Quéhabráshecho?”)olegitimanlaviolencia(“Estuesposo,aguantanomás”).
Por ser maltratada de esta manera, es probable que una mujer nunca más vuelva a
denunciar un acto de violencia. La justicia negada genera, además de un
maltrato adicional para las mujeres, la pérdida de confianza en el sistema
judicial.
Las consecuencias de la violencia, como la devaluación de la autoestima, son
graves para las mujeres: “Está demostrado que la exposición repetida a cualquier
grado de violencia afecta y disminuye la conciencia crítica de percepción y de
rechazo a la misma”. Este proceso de naturalización de la violencia, o de
habituación a ella, impide a algunas mujeres detectar la violencia que están
padeciendo y las expone, sin que tengan conciencia de ello, a secuelas en su
saludfísicaypsicológica.
¿Dónde buscan ayuda las mujeres o por qué no la buscan?
Fundación Mujeres (2007). Violencia de género: Fórmulas para la igualdad 5. Madrid: Fundación Mujeres.
Ibid.
INEI (2011), op. cit.
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Donde buscó o no buscó ayuda
Con alguna persona cercana (familiar, amiga,
etcétera)
En alguna institución
Perú
42.1%
26.8%
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Estudio multipaís de la Organización Mundial de la Salud sobre salud de la
mujeryviolenciadomésticacontralamujer
La información recogida en 10 países (Japón, Namibia, Perú, Samoa y
Serbia, entre otros) que se presenta en este informe, confirma que la
violencia infligida por la pareja contribuye en gran medida a la mala salud
de las mujeres. El estudio aporta nuevos datos no solo sobre la
prevalencia de la violencia en países donde se había recopilado poca
información al respecto, sino además sobre las formas y pautas de la
violenciaendistintospaísesyculturas.
¿Aquiéncuentanlasmujeressuexperienciadeviolencia?
En todos los países objeto de estudio, la entrevistadora era a menudo la
primera persona con la que las mujeres víctimas de la violencia hablaron
sobrelosmalostratossufridosamanosdesupareja.
¿Quiéntratadeayudar?
Si bien muchas entrevistadas declararon haber hablado con familiares o
amigos sobre la violencia infligida por su pareja, se mostraban más
Organización Mundial de la Salud (OMS) (2005). Estudio multipaís de la OMS sobre salud de la mujer y violencia doméstica
contra la mujer: Primeros resultados sobre prevalencia, eventos relativos a la salud y respuestas de las mujeres a dicha
violencia.Ginebra:OMS.
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Razon por la cual no buscó ayuda
“No fue nada grave”
Verguenza o humillación
Miedo a las represalias
No saber a dónde o a quién acudir
miedo a la separación
La violencia es algo normal
“No volverá a ocurrir”
Miedo a dañar al agresor
“Me lo merecia”
“De nada sirve”
Otras razones
Perú
40.5%
17.5%
8.9%
12.7%
1.8%
3.0%
SD
5.8%
4.4%
3.6%
1.8%
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reacias a informar sobre si esas personas habían intentado ayudarlas. De
hecho, en todos los entornos examinados, entre el 34% y el 59% de las
mujeres que habían sido víctimas de violencia física informaron que nadie
habíaintentadoayudarlas.
¿Porquébuscanayudalasmujeresoporquénolabuscan?
La razón más común que adujeron las entrevistadas para no buscar ayuda
fue que o bien consideraban la violencia como algo normal o trivial (29%
de las mujeres que declararon no haber buscado ayuda en el Perú, frente
al 86% en Samoa), o bien temían las consecuencias que podrían
derivarse, como más actos violentos, perder a sus hijas e hijos o
avergonzar a su familia. Algunas pensaban que no les creerían o que no
serviría de nada. Incluso en países que disponen de un nivel razonable de
recursos destinados a ayudar a las mujeres que son víctimas de violencia,
las barreras como el miedo, el estigma y la amenaza de perder a los hijos
disuadenamuchasmujeresdebuscarayuda.
¿Abandonaraunaparejaviolentaoseguirconella?
Entre el 19% y el 51% de las mujeres que habían sido víctimas de violencia
física inﬂigida por su pareja abandonó su hogar durante al menos una
noche. Entre el 8% y el 21% declaró haberse marchado entre dos y cinco
veces. Existe un fuerte vínculo entre el abandono del hogar y la gravedad
de la violencia: fue el principal motivo que dieron las mujeres para
marcharse de casa. Ya no podían soportarlo más; estaban gravemente
heridasosuparejalashabíaamenazadoointentadomatar.
¿Porquéregresanlasmujeres?
A menudo las mujeres aﬁrmaron que habían vuelto porque no podían dejar
a sus hijos o “por el bien de la familia”. Otra de las razones que se dieron
es que la mujer quería a su pareja, que ésta le había pedido que volviera,
que la había perdonado o pensaba que cambiaría, o que su familia le había
aconsejado que regresara. Las mujeres que nunca se habían ido de casa
dieron motivos similares e indicaron, asimismo, que no hubieran tenido
dóndeir.
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1.3¿Cómoloshombresylacomunidadestánafectadosporlaviolenciadegénero?
A continuación se señalan los diversos tipos de violencia, así como algunas
estadísticasrelevantes.
Loshombres
Seguimos explorando los impactos negativos de la violencia de género sobre las
mujeres, pero la violencia afecta también negativamente a los perpetradores y
hombres que la ejercen, quienes suelen sufrir las consecuencias de la violencia
intrafamiliar: sentimientos de culpabilidad, de frustración, de arrepentimiento o
de baja de autoestima, así como falta de capacidad para comunicarse con otras
personas. La identificación de estos síntomas permite a los hombres empezar el
proceso de cambio reflexionando sobre las consecuencias de su
comportamiento. Evidentemente, el hecho de que experimenten consecuencias
negativas no disminuye –en ninguna proporción– ni su responsabilidad ni la
gravedaddesusacciones.
Lasociedadylacomunidad
La violencia hacia las mujeres también tiene impactos negativos sobre la
sociedadylascomunidades.Seobservaconfrecuenciaque:
Elsistemadesaludseencuentraensituacióndesobrecarga.
Menos personas están disponibles o aptas para trabajar; muchas no
participaneneldesarrolloeconómicodelacomunidadydelpaís.
Los recursos de la comunidad se agotan (apoyo entre familiares y vecinos,
capacidadesdeliderazgo,servicioseducativos,socialesolegales,etcétera).
Cuando los hombres que ejercen violencia no reciben sanciones, por la
ausencia de sistemas judiciales eficaces, ésta se legitima y normaliza. La
ausencia de sanción da a entender que la violencia es un comportamiento
socialmenteaceptado.
Se genera un clima de miedo e inseguridad que perjudica la libertad y la
percepcióndelaseguridadpersonal.
Se restringe la participación de las mujeres en la vida política y
socioeconómica de la comunidad y del país. La incidencia de la violencia
contra las mujeres limita sus capacidades para desarrollar y afirmar su
autonomíaysupoderdedecisión.
Tomado de Oxfam (2014), op. cit., p. 14.26
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1.4Normativa internacional
A continuación se presentan algunas convenciones y tratados internacionales
sobre la violencia de género. Desde la década de 1950, las conferencias y las
cumbres mundiales han abierto espacios de diálogo a través de los que se ha
llegado a acuerdos y compromisos, asumidos por los Estados, en lo referente a
losderechoshumanos.
Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la
Mujer(1979)
Constituye el instrumento jurídico más importante de protección de los derechos
humanos de las mujeres a nivel internacional. Fue aprobada por la Asamblea de las
Naciones Unidas el 18 de diciembre de 1979. En su artículo 1.°, establece los
conceptosdedistinción,exclusiónyrestricción,quedeﬁnedelamanerasiguiente:
Distinción: “Una política, ley, programa o conducta que favorece al género
masculino”.
Exclusión: “Una política, ley, programa o conducta que atenta contra el pleno
ejerciciodelosderechosdelasmujeres”.
Restricción: “Ya sea por razones culturales, políticas o ideológicas, no se
brindanlasmismascondicionesdeigualdaddeoportunidadesalasmujeres”.
Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer (1979), adoptada por la Asemblea
GeneraldelasNacionesUnidasenfechade18dediciembrede1979enNuevaYork,EE.UU,
hiperlink<http://www.un.org/womenwatch/daw/cedaw/text/sconvention.htm>
Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia Contra la Mujer - 'Convención de Belém Do
Pará' (1994), adoptada por la Organización de los Estados Americanos en fecha de 9 de junio de 1994 en Belém Do Pará,
Brasil,hiperlink<http://www.oas.org/es/mesecvi/docs/Convention-Text-SP.pdf>
27
Artículo1°:
“La expresión 'discriminación contra la mujer' denota toda
distinción, exclusión o restricción basada en el sexo que tenga por
objeto o por resultado menoscabar o anular el reconocimiento,
goce o ejercicio por la mujer, independientemente de su estado
civil, sobre la base de la igualdad con el hombre, de los derechos
humanos y las libertades fundamentales en las esferas política,
económica,social,culturalyciviloencualquierotraesfera”.
28
27
- 15 -

Convención Interamericana para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra la
mujer(BelémdoPará,1994)
La Convención establece que “[…] la violencia contra las mujeres constituye una
violación de los derechos humanos y las libertades fundamentales, y limita total o
parcialmente a la mujer el reconocimiento, goce y ejercicio de tales derechos y
libertades”.
Constituye un avance de fundamental importancia en el repensar y reconceptualizar
los derechos humanos de las mujeres. Además, marca lineamientos para el diseño,
la implementación, la coordinación y el seguimiento de las políticas públicas que se
handedesarrollarenmateriadeviolenciacontralasmujeres.
ConferenciasobrePoblaciónyDesarrollo(CIPD)(1994)
Celebrada en El Cairo en 1994, establece, por primera vez, políticas claras acerca de
la participación de los hombres en los asuntos de salud sexual y reproductiva.
Haciendo énfasis en la equidad de género, se señaló que la buena salud de la
reproducción es el derecho de todas las personas, sean éstas hombres o mujeres, a
compartirlaresponsabilidadencuestionesdereproducción.
Protocolo para prevenir, reprimir y sancionar la trata de personas, especialmente
mujeresyniños(2000)
El Protocolo es un acuerdo internacional que pretende regular el delito de tráﬁco de
personas, especialmente mujeres y niñas, a nivel internacional. Fue adoptado por la
AsambleaGeneraldelasNacionesUnidasennoviembredelaño2000.
Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia Contra la Mujer - 'Convención de Belém Do
Pará' (1994), adoptada por la Organización de los Estados Americanos en fecha de 9 de junio de 1994 en Belém Do Pará,
Brasil,hiperllin<http://www.oas.org/es/mesecvi/docs/Convention-Text-SP.pdf>
Inppares (2009). “La masculinidad desde la perspectiva de los hombres de Lima Metropolitana”. Revista Salud,
SexualidadySociedad,2(1),p.2.
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- 16 -

1.5SituacióndelaviolenciadegéneroenelPerú
Las cifras referentes a la violencia de género son temibles y crecientes en América
Latina. En la actualidad, el Perú es uno de los países con tasas más elevadas en
materia de violencia contra las mujeres en la región. En efecto, según el informe del
Observatorio de igualdad de género de la Comisión Económica para América Latina y
el Caribe (CEPAL), el Perú ocupa el segundo lugar de países de la región, con 83
feminicidiosdocumentadosporelMinisterioPúblico.
En 2010, un reporte del Observatorio de la Criminalidad del Ministerio Público divulgó
que 10 mujeres mueren al mes a manos de sus parejas en el Perú. Se reporta un
40,7% de víctimas menores de edad que mueren por acción de su padre o padrastro.
La mayoría de las víctimas son mujeres en edad reproductiva, y por lo menos una de
cada 10 estaba embarazada cuando ocurrió el hecho. Las regiones con mayor
número de casos reportados se ubican en Cusco y Lima, siendo los distritos de Sani
JuandeLuriganchoyVillaElSalvadoraquellosconmayorincidenciadedenuncias.
En la década de 1980, la violencia de género era un asunto privado e invisible en el
espacio público. Desde el año 2000, el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI)
reporta, a través de la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar (ENDES), las primeras
cifras sobre violencia familiar y sexual de mujeres entre los 15 y los 49 años de edad. Esto
permitemedirlastendenciasrespectoalamagnituddelaproblemáticaanivelnacional.
Los crímenes responden a un clima social y cultural específico, donde aún prevalece
el machismo, entendido como el comportamiento colectivo sostenido en un sistema
social organizado de manera desigual donde el poder es ejercido por el hombre. Esta
eslarazónporlacualsenormalizaytoleralaviolenciacontralamujer.i
Las normas sociales que valoran el machismo son otro elemento de riesgo de
violencia hacia la mujer, que se manifiesta a través de los celos del varón. También el
consumo de alcohol y la infidelidad son factores de riesgo en la pareja y la familia.
Los varones justifican el maltrato hacia la mujer por su infidelidad y porque ella
habría descuidado a los niños y niñas, entre otras razones. Además, si la esposa se
niega a tener relaciones sexuales, creen tener derecho a molestarse, a no darle más
dinero,ausarlafuerzayaobligarlaatenerlas.
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1.6Marcolegalanivelnacional
En la legislación nacional se determinan claramente los roles de la sociedad y el
Estado para garantizar el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia; en
ella se observa la adopción e implementación de políticas públicas orientadas a
tal fin. A continuación se presentan algunas leyes que fueron adoptadas para
enfrentar la violencia contra las mujeres. Es preciso señalar que si su
promulgación es ya ardua y complicada, su reglamentación e implementación
constituyenunretoaúnmayor.
En los últimos diez años, el gobierno peruano ha tomado diversas medidas,
incluyendo legislativas, para erradicar la violencia, así como para atender a las
mujeres y las niñas afectadas por esta problemática. Pero esto no es suficiente
para solucionarla,así como tampocofuncionael castigoo sancióna los hombres
que ejercen violencia sin atender los distintos y diversos factores que inciden en
ella. Estas políticas públicas son recientes; antes estos casos quedaban en
evidencia garcias a las luchas de las feministas. La primera investigación sobre
violencia familiar y sexual fue realizada por el Ministerio de la Mujer y Desarrollo
Social(MIMDES)en2002.
Presentamos a continuación el marco normativo ―local y nacional― vigente que
conciernedirectaoindirectamentealaviolenciadegénero.
Tomado de Oxfam (2014), op. cit.; y Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables. Ibid.36
Políticas
nacionales de
obligatorio
cumplimiento
Constitución Política del Perú
Ley de igualdad de oportunidades entre mujeres y
hombres LIO –N° 28983-2007
Garantiza a las mujeres y a los hombres el ejercicio de
sus derechos a la igualdad, dignidad, libre desarrollo,
bienestar y autonomía. Prohíbe la discriminación en
todas las esferas de su vida.
Código Penal
Sanciona los delitos contra el cuerpo, la vida y la salud,
así como aquellos contra la libertad sexual. Fue
modificado por la Ley 292824, agravando las penas de
los delitos de lesiones y faltas si la agresión, además,
califica como violencia familiar.
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- 19 -

Políticas locales
Políticas
específicas en
violencia de
género
Plan Nacional contra la Violencia hacia la Mujer 2009-
2015
Garantiza el derecho de las mujeres a una vida libre de
violencia; facilita e incrementa su acceso a servicios
públicos de calidad y promueve cambios en los
patrones socioculturales.
Plan Nacional contra la Violencia hacia la Mujer 2009-
2015: En lo que se refiere a la transferencia de los
programas sociales del gobierno que buscan la justicia
social y el bienestar, este Plan implica la acción
conjunta del Estado y de la sociedad en la
implementación de acciones.
La Ley de Bases de la Descentralización, la Ley Orgánica
de Gobiernos Regionales y la Ley Orgánica de
Municipalidades están destinadas a garantizar el
derecho de las mujeres a una vida libre de violencia;
facilitar e incrementar su acceso a servicios públicos de
calidad; y promover cambios en los patrones
socioculturales, hacia nuevas formas de relaciones
sociales entre mujeres y hombres.
Ley de Protección frente a la Violencia Familiar 26260
(1993)
Define la violencia familiar y establece un proceso que
busca brindar medidas de protección inmediatas y
oportunas, con el fin de resguardar la integridad de la
persona agredida.
Ley de Prevención y Sanción del Hostigamiento Sexual,
Ley Nº 27492, 2003
Regula la prevención y sanción del hostigamiento
sexual tanto en las entidades públicas como en las
privadas.
Ley contra la Trata de Personas y el Tráfico de Migrantes
Nº 28950, 2007, con atención a la víctima
Tipifica el delito de trata de personas y el tráfico ilícito
de migrantes. Contempla un marco normativo para la
atención a víctimas.
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Ley de Feminicidio Nº 29819, 2011
Se considera el feminicidio como delito.
Modificatoria a la Ley de protección frente a la violencia
familiar (Ley 26763, 1997)
Precisa los procedimientos de intervención y
compromete la participación intersectorial en la
prevención y atención de la violencia familiar.
El acoso callejero es un tema que recién está siendo
considerado en la agenda del Congreso y del Ministerio
de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) como tema
de interés nacional que requiere del establecimiento de
políticas normativas.
1.7Discurso:prevenirlaviolenciadegéneroincorporandoaloshombres
En el discurso sobre la necesidad de involucrar a los varones para enfrentar la
violencia contra las mujeres se trata de considerar el papel positivo que ellos
pueden jugar como aliados en la lucha por la justicia de género, lo cual beneficia
tanto a las mujeres como a ellos mismos. Es importante precisar que este nuevo
discurso no pretende disminuir o eliminar las acciones específicas con mujeres,
pero sí “complementa el trabajo con ellas y permite garantizar cambios más
profundosyduraderos”.
A nivel internacional, se realizan esfuerzos para incluir a los varones y a los
jóvenes para alcanzar la igualdad de género, como el Programa de Acción de El
Cairo (1994) y la Plataforma de Beijing (1995), que destacan la necesidad de una
reparticiónde las responsabilidades,como las tareasde la casa y el cuidadode la
familia.
En 2004, la Comisión de la ONU sobre el estatus de la mujer adoptó conclusiones
sobre el rol de los hombres y jóvenes en iniciativas positivas para eliminar los
estereotipos de género y promover la igualdad de hombres y mujeres; sus
recomendaciones los involucran en la prevención y la eliminación de la violencia
degénero.
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Cinco años más tarde, en 2009 se establece la alianza internacional entre
algunas ONG y la agencia de ONU, MenEngage, para lograr la igualdad de género a
través de actividades de sensibilización en el tema. La alianza trabaja el enfoque
de género desde las masculinidades, profundizando los temas de la cultura
masculino-patriarcal de los varones y de la tolerancia de la violencia en las
prácticastradicionalesmachistas.
Formada en 2012, en el marco de la campaña mundial del Secretario General de la
ONU, ÚNETE para Poner Fin a la Violencia contra las Mujeres, la Red Mundial de
Jóvenes ÚNETE ha insistido con éxito en la inclusión de múltiples
recomendaciones sobre la prevención de la violencia en la Declaración del Foro
MundialdelaJuventuddeBali(2012).
1.8Masculinidades
El concepto de masculinidades alude a los comportamientos, roles y cualidades
de los hombres, generalmente esperados en ciertas situaciones, dentro de
determinadacultura. Es importante referirse a este concepto desde su pluralidad
para considerar las dinámicas ligadas a contextos especíﬁcos: culturales,
espacios geográﬁcos, clases sociales, orientación sexual, tiempo, distintas
generaciones,etcétera.
Procesosdesocialización
Aunque el concepto de género es la resultante de un proceso dinámico, histórico
y cambiante, existen percepciones o ideas dominantes que se asocian con los
hombres y la masculinidad. A pesar de que las ideas sobre género cambian según
la comunidad, tiempo y cultura, existen en cada contexto mensajes sobre el
concepto dominante de masculinidad. Los valores o características que se
asignan a la masculinidad se transmiten, de forma explícita o implícita, a los
niños y a las niñas en diversos ámbitos: en el colegio, en la familia, en los grupos
deamigos,enlosmediosdecomunicación,entreotros.
Hombres y mujeres reproducen roles y estereotiposque transmiten a las niñas y a
los niñosmensajesdominantessobrelos comportamientosy las actitudesque se
asumen como rasgos de la masculinidad y de la femineidad. Durante su proceso
de socialización, el hombre asimila que en su relación con las mujeres él es el
jefe, la autoridad, el que tiene la razón y el que debe controlar y proteger a las
mujeresdesuentorno.
Informe anual 2012-2013, ONU Mujer, p. 16.
Inspirado de Oxfam (2015). Caja de herramientas de género. Módulo 5: Hombres agentes de cambio. Manual de
participantes.Lima:Oxfam,p.3.
Ibid., p.4.
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Aunque esas “prerrogativas” parezcan positivas y ventajosas, no siempre lo son.
Para muchos hombres esta presión de tener que actuar de una manera definida y
de controlar y proteger a las mujeres es un peso del que quisieran deshacerse.
Varias de tales “prerrogativas” tienen un alto costo para los hombres mismos:
agresividad, competencia y conductas violentas (incluso contra sí mismos) y
temerarias en aspectos tan diversos como la relación con los vehículos, las
adicciones,laviolenciaylasexualidad.
Otro aspecto importante del proceso de socialización de los hombres es la
llamada “armadura psíquica de la masculinidad”, esto es, el rechazo a las
cualidades asociadas al cuidado y al sustento emocional. Resulta una dificultad
para el hombre tener comportamientos empáticos, la capacidad de experimentar
las emociones y sentimientos de otras personas. Entonces, la represión de la
sensibilidadydelaemotividadterminaporgenerarviolencia.
En la cultura peruana, el ser macho se demuestra constantemente en los
espacios público y privado; se percibe al hombre como más poderoso y superior.
La condición masculina está siempre en duda: necesita ser frecuentemente
reafirmada, tanto social como personalmente. Los hombres rechazan las
cualidades asociadas al cuidado, al sustento emocional, a la sensibilidad, a la
emotividad. Esa manera de ser termina por generar violencia hacia otros hombres
y hacia las mujeres. La violencia se convierte en un medio legítimo para reafirmar
sumasculinidadysuposicióndominante,ypararesolverproblemasyconflictos.
La violencia está basada en expectativas y roles de género que refuerzan
aquellos tradicionales y las desigualdades de género a través del abuso físico,
sexualypsicológico hacialasmujeres,hombres,niñasyniños:
La minimización frecuente que hacen los hombres que ejercen
violencia de las consecuencias de su violencia contra sus parejas,
podría estar en relación a la poca sensibilidad desarrollada como
parte de la construcción de la masculinidad hegemónica. El
negarse a muchas necesidades de sus cuerpos haría que éstas no
sean identificadas y con ello se perdería la capacidad del
autocuidado,dependiendoentoncesdeloscuidadosfemeninos.
Ibid.,pp.11-12.
Callirgos,JuanCarlos(2014).Palabradehombre.Lima:ProyectoProequidad,GIZ
Ramos Padilla, Miguel Ángel (2012). Manual de capacitación a líderes locales en masculinidades y prevención de la
violenciabasadaengénero.Lima:UNFPA,,p.23.
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Así, los hombres pagan un precio elevado al vivir según este modelo de
masculinidad. Al reprimir sus sentimientos, generan incertidumbre,
frustraciones y problemas de salud. La violencia y ciertas afecciones físicas y
mentales están asociadas a los mandatos de la masculinidad hegemónica, que
se reﬁere a la forma cultural dominante de la masculinidad, es decir, el conjunto
de ideas, actitudes, conductas, prácticas sociales y creencias destinadas a
justiﬁcar y promover la mantención de comportamientos percibidos
tradicionalmente como heterosexualmente masculinos y que son
fundamentalmentediscriminatorioscontralamujer.
Las diversas consecuencias patológicas del alto nivel de violencia,
especialmente las adicciones, y algunos otros trastornos de la salud mental, no
son solo eso: son también indicios del dolor y la tensión que el modelo masculino
hegemónico impone a los hombres en su construcción social de las
masculinidades.
Foto: Luís Alberto Sánchez / Oxfam
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1.9¿Porquéinvolucraraloshombres?
Aunque solemos olvidarlo, trabajar con los hombres —como aliados y agentes de
cambio— es fundamental para alcanzar la justicia de género y luchar contra este
tipo de violencia. Los hombres y los niños tienen un papel esencial que
desempeñar en su erradicación,tanto en el ámbito de sus relaciones personales
comoeneldelosentornosenquesedesenvuelven.
Algunos argumentos a favor del trabajo con hombres para revertir las
desigualdades de género y disminuir la prevalencia de violencia contra las
mujeressonlossiguientes:
Los hombres y los jóvenes son también objeto de estereotipos y, en ciertos
casos, están expuestos a la discriminación de género. La justicia de género
apuntaalaeliminacióndetodaslasformasdediscriminaciónydesigualdad.
La igualdad de género concierne tanto a las mujeres como a los hombres. Es
crucial que los hombres reconozcan la interdependencia entre sus vidas y las
de las mujeres,así como el hechode que el empoderamientode las mujereses
beneﬁciosoparatodasytodos.
Los cambios de actitud, comportamientos y creencias tanto de las mujeres
como de los hombres y de los jóvenes son condiciones esenciales para
alcanzarlaigualdaddegénero.Loshombresnonacenviolentosy dominantes;
aprenden a serlo. El trabajo con ellos, con jóvenes y niños puede inﬂuir en su
proceso de socialización y contribuir a transformar los estereotipos y las
desigualdadesdegénero.
Las intervenciones tradicionales orientadas hacia la eliminación de la
violencia contra las mujeres y la violencia de género no han sido del todo
exitosas.Las accionesde intervencióny el trabajodirectocon las mujeresson
fundamentales. Por lo general, los programas existentes tienden a brindar un
tipo de apoyo asistencialista para quienes ya han vivido violencia, pero faltan
aquellos que la prevengan. En esta prevención es fundamental intervenir y
trabajar directamente con los hombres, con los jóvenes y con aquellos
potencialmenteviolentosoperpetradoresdeviolencia.
Se ha establecido un amplio consenso acerca del papel constructivo que
pueden y deben jugar los hombres y los jóvenes para lograr la justicia de
género. La justicia entre las mujeres y los hombres solo podrá lograrse si ellos
participan activamente en el proceso. Éstos tienen un papel importante que
jugar en la transformación de las estructuras que perpetúan las
desigualdades y, en el plano personal, en la transformación de sus propias
relaciones de poder con las mujeres. El trabajo con hombres complementa el
trabajoconmujeresypermitegarantizarcambiosmásprofundosyduraderos.
Tomado de Ofam (2015), op. cit., p. 12.47
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1.10PrevencióndelaviolenciadegéneroenelPerúinvolucrandoaloshombres
Sociedadcivileinstitucionesacadémicas
La prevención de la violencia de género ha sido considerada como una de las
prioridades en algunas organizaciones y grupos de la sociedad civil; las
promotoras sociales han actuado en las ciudades y en las zonas rurales
promoviendolaatencióndelasvíctimasquesufrenestetipodeviolencia.
Las organizaciones civiles incluyen en sus agendas temas como la igualdad de
género y la prevenciónde la violencia.Hace un tiempo,solo las organizacionesde
mujeres lo hacían. Desde el año 2004 se están creando grupos de hombres que
luchancontralaviolenciamachistahacialasmujeres.
El tema de prevención de la violencia de género involucrando hombres ―como
estrategia para lograr la igualdad de género― se trabaja mediante campañas de
salud sexual y reproductiva, de paternidad responsable y formación de líderes
comunitarios, entre otras que están dirigidas a los hombres. Por ejemplo, una
experiencia exitosa en el campo académico, en Lima, es el Programa de hombres
que renuncian a su violencia, implementado en 2004 por la Facultad de Salud
Pública y Administración de la Universidad Peruana Cayetano Heredia. Este
Programa privilegia la intervención grupal reeducativa con enfoque de género, y
pretende convocar la participación voluntaria de varones que ejercen violencia
contra sus parejas o hijos e hijas. Estas iniciativas alcanzan a un grupo de
hombres aún limitado pero que está creciendo a través de proyectos conjuntos
conelEstadonacional.
Estadonacionalylocal
Las cifras nacionales reﬂejan la importancia del trabajo prioritario en la
prevención, desde las mujeres y las niñas como víctimas y con un enfoque de
derechos humanos. Desde el año 2013, el MIMP viene desarrollando trabajos
conjuntos con la sociedad civil y está integrando el enfoque de género en sus
planes, desde sus gerencias respectivas y desde el Programa Nacional contra la
Violencia Familiar y Sexual, que implementa e integra a los hombres en la
prevención. Se trabaja con una experiencia piloto con varones judicializados que
ejercenviolencia,conatenciónenelCentrodeAtenciónInstitucional.
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48
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Las políticas de género se introducen en las instituciones estatales, principalmente
en el MIMP y en el Ministerio de Salud (MINSA), pero no se trabaja suficientemente con
otros sectores del Estado. El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) asume una
inversión social en estos temas, pero aunque hay presupuesto para la campaña del
25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer,
éste es insuficiente para el trabajo de acciones públicas y menor para el de
prevención. Además, hay una brecha en la implementación de las políticas, y el
concepto de género se percibe solo como un tema de mujeres que no involucra a los
hombres.
A nivel de gobierno local, son muy pocas las autoridades que consideran estos
temas en sus planificaciones. La Municipalidad Metropolitana de Lima (MML),
durante el mandato de la ex alcaldesa Susana Villarán (2011-2014), desarrolló
programas que abordaron la prevención de violencia de género involucrando a
hombres, con un trabajo social y comprometido y a través de políticas sensibles al
género; es el caso de los programas municipales Warmi Wasi y Oye Varón. Este
último es un espacio de reflexión sobre las experiencias acerca de la violencia,
donde se puede aprender a detener las conductas violentas, resolver conflictos sin
usar la violencia y relacionarse con respeto, a partir del enfoque de género de las
masculinidades. Sin embargo, esta experiencia interesante y prometedora sobre la
prevención de violencia hacia la mujer no fue adecuadamente difundida e
implementada en otros gobiernos locales. La actual gestión municipal ha cerrado
este programa en enero de 2015: es preocupante que estas iniciativas de apoyo a
hombres que quieren renunciar a la violencia de género y contribuir a nuevas
masculinidadessinviolencia,nopermanezcan.
Montalvo Reinoso, Rosa (2015). “¡Oye varón!” Noticias SER.PE (28.1.2015). Disponible en línea:
hiperlink<http://www.noticiasser.pe/28/01/2015/teleidoscopio/%C2%A1oye-varon>.
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PARTE II:
SISTEMATIZACIÓN
DE LAS EXPERIENCIAS
Foto: Marie-Hélène Bérubé / Oxfam

1. Proyecto “Buenas prácticas para prevenir la violencia de género con
incorporacióndemasculinidades”
El proyecto Buenas prácticas para prevenir la violencia de género se ejecutó con
cuatro organizaciones de la sociedad civil que tienen una nutrida experiencia en
prevención de la violencia de género involucrando a los hombres: el Centro de la
Mujer Peruana Flora Tristán, el Centro Mujer Teresa de Jesús, Inppares y la Red
Peruana de Masculinidades. El proyecto constituyó una oportunidad privilegiada
para sistematizar las buenas prácticas y documentar aprendizajes con el fin de
mejorar sus propias intervenciones acerca de la prevención, incluyendo a mujeres y
hombres. Las experiencias exitosas fueron elegidas de acuerdo con los resultados
positivos logrados y el impacto sobre la población meta en materia de trasformación
individualo colectiva.
Este proyecto promueve el fortalecimiento de las alianzas entre las organizaciones,
y requiere del incremento de la disponibilidad de materiales informativos y
educativos para la sensibilización, información y capacitación de hombres y de
actores claves en la construcción de las nuevas masculinidades. Además, esta
iniciativa constituye una oportunidad para promover y coordinar el intercambio de
experiencias entre los socios con la finalidad de que Oxfam oriente de mejor manera
sus acciones y su participación en las redes y otras intervenciones que abordan el
temadelaviolenciadegéneroylasmasculinidades.
Como ya se ha mencionado, el proyecto concentra sus actividades en Lima, sobre
todo en los distritos de San Juan de Lurigancho y de Villa El Salvador, que es donde se
hapresentadomayorincidenciadecasosdeviolenciareportados.
2. Proyecto Buenas prácticas para prevenir la violencia de género con
incorporacióndemasculinidades
2.1Objetivosgeneralesdelasistematización
Recopilar las experiencias exitosas, las buenas prácticas, las lecciones
aprendidas, los logros y desafíos en prevención de la violencia de género de
cuatro organizaciones de la sociedad civil de Lima y periferia involucradas en
el proyecto, a través de una reflexión autocrítica de sus propias
intervenciones.
Proponer una visión global y articulada de las iniciativas explicitando la
importancia de constituir espacios de reflexión que permitan identificar los
éxitos y lecciones aprendidas en las intervenciones sobre violencia de
género.
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2.2Objetivosespecíﬁcosdelasistematización
Generar un espacio de intercambio y análisis entre las y los participantes del
proyecto que permita reﬂexionar sobre sus conocimientos y sus
experiencias.
Obtener, de las diversas experiencias particulares, elementos para
enriquecersuprácticaysumetodología.
Demostrar las convergencias y divergencias entre las intervenciones y
presentar estrategias para construir una agenda concertada, además de
fortalecerlasarticulacionessobreeltema.
Foto: Carlos Ly / Oxfam
- 30 -

2.3Componentesdelasistematización
a) Capacitación a personas beneficiarias: Sensibilización sobre la prevención de
violencia de género de hombres, mujeres y jóvenes como beneficiarios del
proyecto.
b) Formación de formadores y actores estatales: Desarrollo de capacidades y
habilidadessobreeltemadegéneroylaconstruccióndelasmasculinidades.
c) Proceso de cambio de los hombres: Acciones y actividades que involucren a
los hombres en el objetivo de reconstruir una masculinidad positiva con
igualdaddegénero.
d) Construcción de alianzas: Planificación y organización de una agenda
concertada con organizaciones de la sociedad civil que trabajan en la
prevención, para fortalecer sus intervenciones y, así, estar en condiciones de
incidirenlapolíticaanivelnacional.
e) Sensibilización y difusión a un público diverso: Sensibilización de los diversos
sectores de la población sobre la importancia de la prevención de violencia
de género desde las masculinidades, a través de medios de comunicación
como redes sociales y páginas web, y por medio de eventos que aborden el
tema,entrelosmásusados.
f) Incidencia política a nivel de las instancias de gobierno a nivel nacional,
regional y local: Mejora del proceso de implementación de las políticas
públicas en prevención de violencia de género a nivel local, regional y
nacional, así como de nuevas políticas inclusivas involucrando a los hombres
comoactoresdecambioenlaigualdaddegénero.
Foto: Marie-Hélène Bérubé / Oxfam

2.4Metodologíadelasistematización
El proceso de sistematización se realizó a través de varias actividades de
recolección y de análisis de datos con las cuatro organizaciones involucradas en
el proyecto. La metodología desarrolló dos grupos focales en los que participaron
las y los representantes de las organizaciones involucradas en el proceso. Esta
dinámica permitió recopilar información sobre las prácticas de las
organizaciones y fomentar discusiones e intercambios sobre los éxitos y
desafíosencontradosenlasintervenciones.
Se realizaron reuniones de trabajo para presentar los resultados de los grupos
focales, determinar la estructura de la guía de sistematización —según una
metodología participativa— y generar la discusión. Esta última permitió clarificar
y añadir algunos aspectos en el proceso de recopilación de datos y, también,
continuar la reflexión autocrítica de cada participante acerca de sus
intervenciones.
Durante esas reuniones de trabajo, las y los participantes tenían que completar
una ficha de sistematización de su experiencia exitosa, con los ejes
mencionadosarriba,ypresentarlaalgrupo.
El seminario “Mujeres y hombres: Actores de cambio para prevenir la violencia de
género”, organizado con el apoyo de las y los participantes del proyecto, ha
propiciado un espacio de diálogo social y político sobre la problemática de la
violencia contra mujeres y niñas y para compartir las lecciones aprendidas y las
buenas prácticas acerca del trabajo con varones. Además, este evento permitió
recopilar diferentes perspectivas y recomendaciones para mejorar las
intervencionesenestaproblemática.

2.5Cuatroexperienciasdebuenasprácticas
Presentacióndelasorganizacionescopartes
Nombre de la
organización y
misión
Centro Mujer
Teresa de Jesús
Centro de
promoción y
defensa de los
derechos
humanos e
igualdad de
género, fundado
en 2004.
Centro de la Mujer
Peruana Flora
Tristán
Institución
feminista fundada
en el año 1979,
que combate las
causas
estructurales que
restringen la
ciudadanía de las
mujeres o afectan
su ejercicio.
Nombre del
Proyecto
Construyendo
masculinidades sin
violencia,
cambiando
maneras de
pensar, sentir y
actuar. Proyecto
con Oxfam.
Respuestas
locales y
comunitarias para
la prevención y
atención del
VIH/sida y la
violencia contra la
mujer en el distrito
de Villa El Salvador.
UNIFEM y Flora
Tristán.
Desarrollo de
capacidades para
mejorar la atención
a las mujeres que
sufren la violencia
de género en el
distrito de San
Juan de
Lurigancho, Lima,
Perú. MANCHEGA y
Flora Tristán.
Año y lugar de
ejecución
2009-2011
Distrito de
San Juan de
Lurigancho
Febrero 2008
a febrero
2009.
Distrito de
Villa El
Marzo 2008 a
marzo 2009.
Distrito de
San Juan de
Lurigancho
Ejes de la
intervención
Prevención de la
violencia
familiar/violencia
de pareja
involucrando al
hombre en
sesiones
individuales y
Grupo de Ayuda
Mutua (GAM).
Articulación del
enfoque de género
en las buenas
prácticas desde
las
masculinidades en
materia de
desarrollo de
capacidades o
programas de
capacitación.
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Nombre de la
organización y
misión
Inppares
Institución
fundada en 1966 y
que tiene por
misión mejorar la
calidad de vida de
las personas, en
especial de
aquellas social y
económicamente
menos favorecidas
o excluidas,
brindándoles
educación y
servicios
integrales con
énfasis en salud
sexual y salud
reproductiva en el
marco de los
derechos de las
personas.
Red Peruana de
Masculinidades
Red de voluntarios y
voluntarias jóvenes
creada en 2008,
que realiza acciones
en prevención de
violencia machista
hacia las mujeres
desde las
masculinidades.
Contribuye al
desarrollo y la
difusión del tema
de las
masculinidades a
través de
estrategias de
incidencia para su
incorporación en las
políticas públicas.
Nombre del
Proyecto
Proyecto Macho,
con enfoque de
género desde las
masculinidades.
Proyecto Macho,
con enfoque de
género desde las
masculinidades.
Año y lugar de
ejecución
2006-2009
Distritos de
Lima
Metropolitana
2006-2009
Distritos de
Lima
Metropolitana
Ejes de la
intervención
Incremento de la
participación de
los hombres en
salud sexual y
salud
reproductiva,
expresada en el
autocuidado y en
el apoyo de éstos
a la salud de su
pareja y de su
familia.
Incremento de la
participación de
los hombres en
salud sexual y
salud
reproductiva,
expresada en el
autocuidado y en
el apoyo de éstos
a la salud de su
pareja y de su
familia.
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2.5.1 Tabla con perﬁl de las y los profesionales a cargo de intervenciones
sistematizadas
Sexo 2 mujeres y 6 hombres
Edad Entre los 25 y 47 años
Estado Civil 75% soltero/a
25% casado/a con hijos
Lugar de
residencia
Lima y periferia
Educación 88% tienen nivel de educación superior
7 participantes estudiaron Psicología y uno. Derecho
Experiencia
profesional
Intervenciones en salud sexual y reproductiva,
seguridad ciudadanía, violencia de género,
capacitaciones de sensibilización con hombres y
jóvenes, Grupo de Ayuda Mutua con hombres
violentos, intervenciones urbanas y movilización
social

PARTE iii:
ANÁLISIS DE
LA SISTEMATIZACIÓNLA SISTEMATIZACIÓN
Foto: Inppares

Las intervenciones y los programas del Estado respecto de la atención a la violencia no
han logrado incidir de manera importante en la disminución de la violencia contra las
mujeres, como lo demuestran las estadísticas sobre esta temática y el análisis de los
programas implementados a lo largo de los años. Esto explica, parcialmente, que las y
los representantes de las organizaciones de este proyecto enfaticen la necesidad de
ser más agresivos en la implementación de estrategias de prevención de la violencia,
orientadas a producir cambios sociales y cambios en las relaciones entre las mujeres y
loshombres,asícomoenlosrolesesperadosdecadaunodeellos.
El análisis de las experiencias llevadas a cabo por las organizaciones involucradas en el
proceso de reﬂexión sobre la prevención de las violencias y masculinidades da cuenta
de la importancia de integrar estrategias de diferentes niveles. Siguiendo el modelo de
Gender at Work, hemos agrupado esas estrategias en las cuatro categorías que se
presentan a continuación, que hacen hincapié en los cambios requeridos para lograr la
transformación de las creencias e ideas sobre el género. Todos los cambios están
interconectados.
Oxfam (2014), op. cit., p. 17.
Oxfam (2012c). Reducing the Occurrence of GBV in Eastern Indonesia: 2012-2015. Jakarta, Indonesia: Oxfam
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51
Programas y proyectos de desarrollo
Transformación individual
La conciencia de
mujeres y hombres
Acceso a recursos
para mujeres
Informal
Normas culturales
informales y
Prácticas de exclusión
Formal
Instituciones formales,
leyes, politicas, etc.
Transformación sistématica
50
51
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Las dos categorías presentadas en la parte superior del diagrama se refieren a cambios
en las condiciones de vida individuales (recursos, acceso a la salud, derecho a una vida
libre de violencia, etcétera), así como en la conciencia individual de las personas
(conocimiento, habilidades, conciencia política, compromiso con la igualdad de
género,etcétera).
En la parte inferior, las dos categorías se refieren a cambios en el nivel sistémico, tanto
formales (leyes, políticas) como informales (valores, prácticas culturales). El proceso de
cambio hacia la igualdad de género y la eliminación de la violencia abarca, necesariamente,
lascuatrocategorías.
Para el análisis de esta sistematización, las buenas prácticas están divididas por
procesos: los procesos de cambio a nivel individual; los procesos de cambio a nivel
colectivo y sistémico. Sin embargo, esas categorías no son fijas y se cruzan dentro de
las intervenciones de las copartes. Eso significa, por ejemplo, que las acciones o
actividades pueden lograr un proceso de cambio de forma paralela o simultánea, en los
nivelesindividualycolectivo.
1. Característicasdelasbuenasprácticaspriorizadas
1.1Procesodecambioanivelindividual
Veamos a continuación las buenas prácticas identificadas por las instituciones
involucradas relacionadas con la transformación individual, nivel de intervención
indispensableenlaluchacontralaviolenciadegénero.
Provisióndeespaciosseguros,serviciosyredesdesoportesocial
Los espacios seguros permiten contar con condiciones más adecuadas y
favorables para que mujeres afectadas por la violencia puedan aprender a
reconoceryaejercersusderechos.
Un ejemplo de ello es el Centro Mujer Teresa de Jesús. Esta organización
ofrece atención psicológica individual a las mujeres que sufren violencia,
involucrando a la pareja en el proceso de reconocimiento de sus actos de
violencia y en el convencimiento acerca de un proceso de rehabilitación
desdesupropiaylibredecisiónparaelcambiohacialanoviolenciafamiliar.
Oxfam (2012b). Global Program on Ending Gender-based Violence / Violence Against Women. Londres: Oxfam.52
52
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Procesodesensibilizaciónsobrelosderechoshumanosdelasmujeres
Los cambios en la legislación y la exigibilidad de los derechos en ella reconocidos
se harán realidad en la medida en que la ciudadanía conozca las leyes y la forma
de ejercerlas. Desde esta perspectiva, es importante que se lleven a cabo
procesos de sensibilización que inciten a la reﬂexión sobre la temática de la
violenciaysobrelasmanerasdeenfrentarsituacionesdeestetipo.
El Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán cuenta con una experiencia
interesante en el sentido de que busca desarrollar en las promotoras legales y en
las y los servidores públicos capacidades para la prevención de violencia de
género. Flora Tristan ha implementado cambios en sus metodologías, y ahora
incide en la mayor participación del público usuario; así ha logrado que las
mujeresamplíenelejerciciodesusderechosporunavidasinviolenciadegénero.
Capacitación sobreiniciativasyestrategiasdeempoderamiento
Los procesos de cambio iniciados por mujeres decididas a vivir libres de
violencia requieren de un plan de acompañamiento que les permita
comprender y elaborar las dinámicas relacionales en las cuales se hallan
inscritas, así como tomar decisiones sobre sus vidas, sobre la base de su
propio empoderamiento. Se trata de procesos de transformación o
deconstrucción profundos de las relaciones de poder desiguales entre
hombresymujeres.
Inppares aborda del tema de masculinidades como estrategia a partir de espacios
de reﬂexión de manera vivencial durante el proyecto Macho, con un plan de
capacitaciones anuales; estos programas de capacitación enfatizan el rol de la
paternidad, las interrelaciones culturales y la violencia basada en género. En ellos
se inicia la deconstrucción del poder en las relaciones entre hombres y mujeres, lo
quesupone unaestrategiadevaloracióndelamujerensutriplerol.
El Centro Mujer Teresa de Jesús enfatiza el proceso de cambios, emociones,
creencias y comportamientos de la masculinidad hegemónica en relación con
su pareja, con el apoyo del promotor social en el seguimiento y
acompañamientodeloscasos.
Grupodesoporteentrepares
Los procesos de cambio se caracterizan por atravesar momentos complejos y
difíciles, de desconstrucción de creencias, prácticas y actitudes. Una
estrategia que ha sido implementada —y que es muy valorada por las
personas que ahí participan— son los grupos de soporte entre pares, que
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posibilitan el encuentro con personas que están atravesando similares
procesosdereflexiónydecambio.
El Centro Mujer Teresa de Jesús propone esta estrategia para los procesos
terapéuticos de transformación y deconstrucción de la masculinidad
hegemónica, a través del trabajo en el Grupo de Ayuda Mutua (GAM). El
propósito es que los hombres se redescubran en mejores relaciones de pareja
y en su comunidad. Las técnicas psicoterapéuticas apuntan a los niveles
cognitivo, emocional y comportamental de las actitudes de la persona que se
adhierealprogramaysecomprometeconelcambio.
Promociónde laeducaciónylatomadeconciencia
Se fomenta una educación en habilidades sociales para la búsqueda de
equidad de género, para la valoración de una vida sin violencia y para brindar
soluciones a los casos de conflicto, para tomar mejores decisiones
vivenciales. Se utilizan técnicas psicoeducativas acordes con el género y el
grupodeedad.
El Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán desarrolla capacitaciones,
actividades artísticas como teatro impro, concursos de grafitis para
hombres, mujeres, funcionarios y funcionarias públicos, a través de una
metodología participativa en sus talleres. Así, busca involucrar a los y las
jóvenes, desde sus propias vivencias, para prevenir la violencia de género y
mejorarsuseguridad.
El Centro Mujer Teresa de Jesús promueve capacitaciones, desde sus pares,
en la formación de promotores varones contra la violencia familiar, con
acciones y movilizaciones en la comunidad mediante campañas acerca de
vivir sin violencia. Estos promotores cuentan con el apoyo de sus
instituciones y han logrado ser visibles y reconocidos como referentes en la
localidaddeSanJuandeLurigancho.
Desarrolloderespuestasadecuadasalasnecesidadesdesalud
Se pretende cubrir las necesidades de salud, así como ejercer este derecho
para mantener un buen nivel de salud física y mental. Por esto es importante
brindar soporte psicológico a las víctimas y a los hombres que ejercen
violencia, con horarios adecuados al tiempo disponible de las y los
participantes. De este modo se busca garantizar su permanencia duradera,
tantoindividualcomocolectiva.
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Inppares ha tenido una experiencia en este sentido. Forma a los hombres en
la necesidad de auto cuidarse y les brinda servicios de salud sexual y
reproductiva adecuados para cuidar a su pareja y a su familia. Todo esto
desde la formación de una nueva estructura de su identidad de género
masculina,individualysocialmenteconsiderada.
El Centro Mujer Teresa de Jesús realiza una entrevista inicial como requisito
para que el varón ingrese en el GAM, cuyo objetivo es evaluar el nivel de
compromiso con el cambio, el nivel de conciencia acerca de su problema de
violencia, nivel de riesgo y gravedad de su comportamiento violento y los
factores asociados a su agresividad. Además, se aplica la ficha de registro e
instrumentospsicológicos.
Apoyo a los procesos personales para construir relaciones sin violencia (de
pareja,familiares,laborales,deamistadosociales)
A menudo se trata de una estrategia complementaria a las intervenciones
grupales, que si bien pueden tener efectos terapéuticos, no se definen
propiamente como terapias sino como sesiones de dinámicas artísticas. Los
procesos de las personas son complementarios e importantes en la
búsquedadelcambioorientadoalograrrelacionesequitativas.
El Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán ha llevado a cabo talleres de teatro
impro y concursos de grafitis, entre otras actividades a favor del cambio hacia
mejoresrelacionesyenprodelcambiodelosestereotiposdegénero.
Inppares incrementa la participación de los hombres en el cuidado de su
salud sexual y reproductiva (SSRR) desde la sensibilización y capacitación
acercadelautocuidadoconresponsabilidadensalud,desuparejayfamilia.
Como apreciamos en las buenas prácticas mencionadas líneas arriba, el
empoderamiento individual conlleva un proceso de cambio hacia la
emancipación en el cual las personas empoderadas y dignificadas reconocen
que tienen la capacidad de hacer cambios en sus vidas, de ser autónomas, de
tomar decisiones (tanto en el ámbito privado como en el público), y de
transformar las desigualdades que observan en las relaciones de género. Ese
proceso es clave y constituye un paso hacia otros niveles de empoderamiento,
comoeselcolectivoquepresentamosacontinuación.
Tomado de Oxfam (2014), op. cit., p. 18.53
53
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1.2Procesodecambioanivelcolectivo
El proceso de cambio a nivel colectivo se reﬁere al empoderamiento de un grupo o
de una comunidad. La apuesta reside en que las personas de la comunidad y los
grupos de actores podrán fortalecer su capacidad de prevenir y enfrentar la
violencia contra las mujeres si conocen mejor las causas y las consecuencias de
esta violencia en el contexto. Esto se logrará implementando planes concretos
de prevención o de apoyo dirigidos a las mujeres o a los hombres que ejercen
violencia.
Algunas buenas prácticas identiﬁcadas por las experiencias bajo estudio son las
siguientes:
Empoderar a las personas para responder ante una situación de violencia,
mediante redes de apoyo en la localidad, grupos de mujeres organizadas,
hombres sensibles a favor de los servicios integrales, con estrategias
adecuadasparaabordareltemadeviolencia.
En este ámbito, el Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán trabaja con sus
promotoras legales y promotores varones; el Centro Mujer Teresa de Jesús,
con facilitadores del GAM; Inppares, con sus facilitadores del proyecto Macho;
y la Red Peruana de Masculinidades, con el compromiso de voluntarios y
voluntarias activistas en acciones públicas a favor de la prevención de
violenciadegénero.
Capacitar a actores claves para responder a las necesidades de las mujeres,
mediante un mapeo de estos actores, con quienes se puede contar en la
estrategia de desarrollo de capacidades en este tema, incrementando el nivel
desensibilizaciónyparticipaciónenlaprevencióndeviolenciadegénero.
El Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán capacita promotoras legales,
agentes policiales, agentes municipales y funcionarias y funcionarios
públicos de San Juan de Lurigancho y Villa El Salvador. Sus acciones locales
están dirigidas a la prevención de manera colectiva y se abordan temas claves
como derechos humanos, prevención de violencia basada en género, derecho
atenerunavidalibredeviolencia,entreotros.
Ibid., p. 20.54
54
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Garantizar el acceso a la justicia y la integridad física de las personas con
mecanismosdereferencia,denuncia,monitoreoyevaluación.
El acceso adecuado a la justicia no se circunscribe a la existencia formal de
recursos judiciales: se refiere también a que su capacidad sea la adecuada y
estéactualizadorespectodel tema.Asimismo,esteaccesodebeasumircomo
obligación hacer que los recursos judiciales sean sencillos, rápidos, idóneos
e imparciales, y que se apliquen de manera no discriminatoria, para prevenir
de esta manera la impunidad. Deben desarrollarsemecanismos de referencia,
denuncia, monitoreo y evaluación de la violencia contra las mujeres, que
midanla eficaciay la calidadde las respuestasante situacionesde violenciay
haganunseguimientodelasnecesidadesdelassobrevivientes.
El Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán desarrolla estrategias de
protección y seguridad de las mujeres, según cada grupo de beneficiarias y
beneficiarios. Las metodologías se adecúan a su posición y condición de
género (policías, autoridades, funcionarios/as públicos, serenazgo), para la
prevención de violencia, para preservar la integridad física de mujeres,
jóvenesyniñasyniños,reconociendolasprácticasautoritarias.
Además, la organización desarrolla asesoría en denuncia de violencia hacia
las mujeres afectadas, emplea mapeo de zonas inseguras, monitorea y evalúa
las estadísticas de los casos más vulnerables, en los espacios estratégicos
desoportedelasmujeresyniñasenSanJuandeLurigancho.
Identificaraotrasyotrosaliadospotencialescomoautoridades.
Autoridades como alcaldes, regidoras, líderes de opinión en medios de
comunicación, entre otros, deben colaborar en la difusión de las acciones en
prevención e implementando estrategias de movilización social a favor de
unavidasinviolenciadegénero.
La Red Peruana de Masculinidades viene trabajando con aliados y aliadas en
la Rueda de Hombres, acción pública que se realiza en el marco de las
actividades del 25 de noviembre, “Día Internacional de la Lucha contra la
Violencia hacia la Mujer” y con Campaña Lazo Blanco, símbolo mundial del
involucramiento de varones en la no violencia contra la mujer; todos ellos
comprometen al varón en la prevención de la violencia de género, de manera
conjuntaconlaMMLyelMIMP.
Crear espacios de reflexión e implementar estrategias de sostenibilidad a
mediano plazo (un año) con organizaciones especializadas para hombres que
ejercenviolencia,enactividadespúblicas.
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Inppares desarrolló, al lado de varias instituciones aliadas e ininterrumpidamente
entre 2007 y 2009, un curso anual de Formación de Facilitadores/as en
Masculinidades y Género para voluntarias y voluntarios y educadores, donde se
reconoció que todos ejercen agresividad con la pareja por el hecho de reproducir
elmodelohegemónicodelamasculinidad.
Recientemente, la Red Peruana de Masculinidades se ha articulado en el nivel
regional con las organizaciones de MenEngage, con una agenda de trabajo
que enfoca a varones y niños hacia acciones positivas de género, desde
masculinidadesconplandevidasinviolenciahacialamujer.
1.3Cambioanivelsistémico:Formulacióndepropuestasdepolíticasyleyes
La formulación e implementación de una legislación adecuada resulta clave para
prevenir y responder a la violencia contra las mujeres. Los Estados tienen la
responsabilidad de formular, implementar y supervisar la aplicación de políticas y
leyesquegaranticenalasmujeresunavidasinviolencia:
Leyesqueprotejanlosderechosdelasmujeres.
Políticas que protejan los derechos humanos de las mujeres (por ejemplo, un
protocolocontraelacososexual).
Sentencias adecuadas por parte de las juezas y los jueces en el caso de los
perpetradoresdeviolenciacontralasmujeres.
Servicios de atención, protección y prevención de la violencia contra las
mujeres (policías, médicos y médicas, asesoría legal, psicólogas y
psicólogos,etcétera).
Éstos últimos conforman las “rutas críticas” que siguen las mujeres afectadas
por la violencia. En el Perú, los actores que conforman estas rutas no siempre
coordinan eﬁcazmente entre ellos. Esta carencia de coordinación limita la
prevencióndelaviolenciacontralasmujeresylaatenciónalassobrevivientes.
Veamos a continuación algunas buenas prácticas desarrolladas por las instituciones
copartesrelacionadasconlaformulacióndepropuestasdepolíticasyleyes.
Reforzamiento de las capacidades de las operadoras y los operadores de la
justicia para que apliquen apropiadamente las leyes existentes, debido al
limitado trabajo desde el Ministerio Público, así como desde el MIMP, en la
descentralización de los Centros de Emergencia Mujer. Por ello es necesario
actualizar el alcance de las normas, estableciendo alianzas entre las
organizacionescivilesconmayorparticipaciónylapoblaciónafectada.
Ibid., p. 23.55
55
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El Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán ofrece capacitación a servidores
públicos como efectivos policiales, funcionarias y funcionarios municipales y
miembros del Serenazgo de San Juan de Lurigancho y Villa El Salvador.
Además, forma a miembros de las juntas vecinales, integrantes del Comité
Distrital de Seguridad Ciudadana (CODISEC) y miembros del Grupo Impulsor del
Distrito de San Juan de Lurigancho. Ellos reconocen la violencia de género
como tema de la agenda local, con el ﬁn de plantear una política de
prevencióndegénerointegral.
Incorporación de nuevos procesos de concertación y articulación de las
organizaciones civiles con instituciones públicas en la agenda local acerca
deprevencióndelaviolencia.
Esto se logra mediantela aprobaciónde los planes,ordenanzas y mecanismos
locales en el fomento de los programas municipales frente a la violencia de
géneroylanodiscriminacióndelamujerconpolíticasdegénero.
Inppares ha realizado un trabajo coordinado con la Municipalidad de Lima y la
Municipalidad del Rímac, en planes de actividades de prevención, mediante
un convenio piloto con talleres de información y sensibilización en derechos
sexuales y derechos reproductivos, género y masculinidades para
poblacionesderiesgo(jóvenesyadolescentes).
El Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán fortalece la Red de Mujeres (lo que
también hace el Centro Mujer Teresa de Jesús), en SJL y VES, en la formulación
e implementación de los planes contra la violencia hacia las mujeres y los de
género. Estos temas están presentes en la agenda de las mujeres de Lima Sur,
enlosespaciospolíticos.
La Red Peruana de Masculinidades fomenta el diálogo y alianzas para trabajar
los distintos modelos de masculinidades. Recientemente se trabaja
colectiva, participativa y comprometidamente, de manera articulada, en
redes de organizaciones civiles y públicas a nivel nacional (MIMP, Inppares y la
Municipalidad Metropolitana de Lima (MML)), así como en organizaciones
internacionales (MenEngage y MEN CARE). Además, se han adoptado nuevas
agendas comunes que incluyen temas de trabajo con hombres y niños por la
equidadde género.Otra muestrade este trabajocoordinadointerinstitucional
es la implementación del Programa Oye Varón (hasta enero del 2015) por la
Gerencia de la Mujer de la MML, en alianzas con otras entidades. El Programa
consistía en un servicio de protección frente a la violencia basada en género;
dicha violencia se apoya en la concepciónde la identidad masculina asociada
a la fuerza y al poder y, por ende, de desigualdad entre hombres y mujeres, lo
queafectaeldesarrollointegralycalidaddevida.
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1.4CambiosenlasNormasSociales
Las estrategias que tienen por objetivo prevenir o enfrentar la violencia contra
las mujeres generan, a largo plazo, cambios en las normas sociales. Están
enfocadas en esfuerzos colectivos, junto con la promoción activa de los
derechoshumanos.
A continuación presentamos algunas estrategias que apuntan a generar
cambiosenlasnormassociales.
Creacióndealianzasconagentesdecambiodenuevasmasculinidades
En la experiencia se integra el trabajo de los hombres como aliados en temas
claves como paternidad, autocuidado, salud sexual y reproductiva. Se
convoca la participación de hombres líderes que sean capaces de
promocionarlajusticiadegénero.
La Red Peruana de Masculinidades realiza cada año acciones públicas (Rueda
de Hombres contra la Violencia y Lazo Blanco) que han ido creciendo en su
convocatoria y alianzas. Las acciones se realiza de manera principal en
diferentes distritos de Lima, y se llevó a cabo una réplica en el interior del
país.
La difusión se realiza también en las redes sociales, en las que se ha obtenido
una buena acogida, como en los casos antes mencionados, donde
participaronnuevasvolumtariasynuevosvoluntarios.
Valoración de imágenes de relaciones igualitarias entre las mujeres y los
hombresenlosmediosdecomunicación
La Red Peruana de Masculinidades ha logrado permanencia en los medios de
comunicación en la lucha contra el sexismo, el machismo y la homofobia.
Anteriormente esos temas no recibían la atención debida, y quienes sí los
contemplaban eran las organizaciones feministas y de mujeres,
principalmenteatravésdelasredessocialesylaradiolocal.
Inppares también ha implementado esta estrategia mediante la puesta en
valor de la imagen de los hombres como padres responsables. Estos mismos
han mostrado interés por conocer hábitos de buena salud; por participar en la
lucha contra el VIH/sida y contra la violencia basada en género, con el ﬁn de
mejorarsusrelacionesconsupareja.
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Fomento de un diálogo abierto acerca del género, de las relaciones de poder
desigualesydelaviolenciadegénero
El diálogo es un medio a través del cual puede tomarse conciencia de las
relaciones de poder de un sexo sobre el otro y empezar a valorar una nueva
formadeconstruiralianzasconbaseenlospoderesdeambossexos.
A través del Proyecto Macho, Inppares inició en el ámbito institucional —y luego
adquiere inﬂuencia política— la articulación con diferentes organizaciones en
temas de derechos y salud sexual y reproductiva. Suma esfuerzos para realizar
actividades conjuntas, en el tema de masculinidades, en Lima y periferias. Tal es el
casodelosforosanualesqueabordanelenfoquedegéneroylasmasculinidades.
La Red Peruana de Masculinidades realiza acciones del proceso de cambio. El
binarismo del sexo cuestiona a los hombres como activistas del movimiento
feminista y las mujeres empoderadas son ubicadas en acciones
masculinizadas del poder. Este cuestionamiento de la forma de enfrentar las
resistencias a renunciar a sus privilegios masculinos es un debate de
aperturadelasdiversidadesdegénero.
Difusión de los medios y servicios disponibles para las personas afectadas
porlaviolenciacontralasmujeres
Informar a la población constituye un desafío en la práctica, por la poca apertura
de los medios de comunicación tradicionales en la prevención de la violencia de
género,yporlolimitadoquesuelenserlosrecursosﬁnancierosparaello.
Inppares realiza, en su sede y en las periferias de Lima, campañas de
promoción de los servicios para los varones en las especialidades de
medicina general y urología, con fomento a la prevención y cuidado del cuerpo
deloshombresydesusaludsexualyreproductiva.
El Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán informa y difunde en todos los
medios posibles (página web, boletines, trípticos, folletos, etcétera) los
servicios disponibles y los resultados obtenidos en prevención de violencia
de género, principalmente en SJL y VES, por estar involucrados en el proyecto
yportenerlamayorincidenciadecasosreportadosenLima.
Realización de campañas educativas e informativas que promuevan cambios
aniveldecomportamientoyenlasnormassocialesdemaneraprogresiva
El Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán ha desarrollado programas de
capacitación y talleres con jóvenes y hombres, integrando algunos tópicos
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con el enfoque de género en la construcción de las masculinidades para cada
grupo o sector. En el caso de los hombres ha sido importante vincular el
enfoque de la masculinidad hegemónica, así como conceptos sobre la
identidad y construcción del machismo como elementos que conforman
prácticas autoritarias que legitiman la discriminación y la violencia contra las
mujeres.
Promoción delliderazgodelasmujeres.
Desde los espacios públicos o privados, las mujeres que sobreviven a la
violencia de género desarrollan estrategias de aprendizaje y ejercicio de una
vida sin violencia, siendo referentes en sus localidades y actores sociales
clave en el cambio hacia la atención a los hombres que ejercen violencia y en
lacapacitaciónhacialatransformacióndelasmasculinidades.
El Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán fortalece a las mujeres capacitadas
y sensibilizadas sobre la prevención de violencia de género y las entrena para
consejería en derechos de salud sexual y reproductiva, en los procesos y
planes locales contra la violencia hacia las mujeres, y sobre planes de
igualdaddeoportunidades.
Foto: Red peruana de masculinidades

2. Leccionesaprendidas
El proceso de ejecución del proyecto ha sido una experiencia que aporta las
siguienteslecciones,segúnlosejesdesistematización.
Resumen del análisis de las lecciones aprendidas
a) Capacitación a
personas
beneﬁciarias
b) Formación de
formadores y
actores del
Estado
c) Proceso de
cambio de los
hombres
Es necesario usar un lenguaje sencillo y motivador
durante el proceso de cambio. Asimismo, debe evitarse
el discurso sancionador.
Es conveniente aplicar metodologías vivenciales ligadas
al arte y talleres sobre teatro e improvisación, que
forman parte de procesos terapéuticos para que los
jóvenes cuestionen modelos autoritarios y se reduzcan
los factores que contribuyen al machismo en sus
relaciones de género.
Hay que capitalizar los valores de los hombres, desde su
proyecto de vida, hacia la preocupación por su familia y
la paternidad, ya que son claves para vencer las
resistencias causadas por sus miedos.
Se requiere sensibilizar y capacitar desde las
masculinidades, para que focalicen su rol de cuidado
del cuerpo y ejerzan una paternidad responsable y así
mejoren la relación con su pareja y su familia.
Ha de contarse con facilitadores con habilidades
sociales, con dotes de comunicación y escucha y con
alto grado de empatía, para que sean capaces de
manejar las emociones de los beneﬁciarios en el
proceso de cambio a una vida sin violencia.
Se hace necesario fomentar nuevas alianzas y
contactos para las acciones preventivas en violencia de
género, con el MINEDU, el Ministerio Público, entre otros.
El hombre debe ser asumido como agente de cambio en
las intervenciones integrales para la prevención de la
violencia de género, y estar involucrado en la mejora de
las relaciones con las mujeres.
Se debe utilizar un sistema para la reconstrucción de la
masculinidad de manera permanente y comprometida,
en sesiones personales y grupales.
Debe fortalecerse el equipo de facilitadores de los GAM
para brindar un programa psicoeducativo como recurso
comunitario transformador, que no se limite al cambio
personal sino que promueva también el cambio social
(normas, estereotipos, etcétera).
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d) Construcción
de alianzas
e) Sensibilización
y difusión a
público
diverso
f) Incidencia
política a nivel
de las
instancias de
gobierno a
nivel nacional,
regional y
local
Es preciso fomentar actividades conjuntas en espacios
comunitarios, como concursos de fotos en paternidad
responsable, movilizaciones y campañas visibles.
Debe trabajarse con los varones que han empezado un
proceso de reaprendizaje de nuevas formas de la
masculinidad y darles soporte social y emocional en las
redes. Hay que hacerlos sentir agentes de transformación,
comprometidos con la igualdad de género.
La diferencia de género debe ser planteada abiertamente
y debe contarse con la participación de hombres
activistas en la prevención de violencia. Esto puede
hacerse a través de proyectos públicos que trabajan el
tema, como la Red Peruana de Masculinidades.
Debe implementarse un proceso de concertación de las
organizaciones civiles con instituciones públicas para la
aprobación de los planes, ordenanzas y mecanismos
locales orientados al fomento de los programas
municipales frente a la violencia de género y no
discriminación de la mujer.
El tema de prevención de violencia debe ser incorporado
en la agenda local para incidir en políticas de género en
los diferentes niveles de participación comunitaria.
Se debe asegurar que los actores del Estado
desplieguen acciones sostenibles a largo plazo y que
tengan mayor cobertura nacional, sobre la base de
potenciar el trabajo de prevención de violencia de
género en sectores más vulnerables.
Foto: Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán

3. Principalesdesafíosensusintervenciones
Las copartes del proyecto han identificado en su organización los siguientes
desafíos:
Promover la motivación, sobre la resistencia al cambio, de los hombres que
ejercen violencia a nivel personal y colectivo, mediante acciones de
convencimiento y de reflexión de nuevos patrones culturales hacia la diversidad
demasculinidadesdemocráticassinviolenciadegénero.
Desarrollar estrategias para el cambio de los patrones culturales de los varones
cuandopresentanresistenciasalaprevencióndesuautocuidadoysalud.
Propiciarun plancomunicacionalconestrategiasde convocatoria,conpresencia
de hombres en temas de prevención de violencia de género. Contar con un
procedimiento estratégico de comunicación para lograr una difusión en los
mediosmasivos(virtuales,radio,televisión).
Debatir el tema de masculinidades en la organización con proyectos específicos de
mujeres que luchan por el respeto de sus derechos y denuncias al sistema de
patriarcado que las oprime. La justicia privilegia el concepto de interseccionalidad,
crucial en la identificación de diversas formas de opresión dadas por la condición
demujer,porsuraza,orientaciónsexual,clase,etcétera.
Promover proyectos específicos en los que participen varones, principalmente
actividades de capacitación para sensibilizar a los actores del Estado, o al
personal de la policía, sobre la problemática de la violencia de género y los
efectosnegativosdelamasculinidadhegemónicasobrelasociedad.
Crear alianzas con nuevos grupos de hombres representa un riesgo para las
organizaciones feministas en materia de estatus, financiamiento y alianzas con
diversosactoresdelEstadoyorganizacionesinternacionales.
Promover la inclusión de los hombres y jóvenes en el tema de la prevención de la
violenciadegéneroenelPerú.
Impulsar acciones que promuevan los cambios, a nivel individual y comunitario, y
lamovilizacióndelíderesmasculinosenlaprevencióndelaviolenciadegénero.
Mejorar la articulación de las intervenciones en prevención de la violencia de
género entre organizaciones de varones y organizaciones de mujeres/feministas,
yaquelamayoríaseencuentratrabajandoaisladamenteyenaccionesdistintas.
Crear alianzas con organizaciones civiles en diferentes espacios ―nacional e
internacional― para contar con una agenda concertada en función del mayor
impacto,losresultadosyelfinanciamiento.
Capacitar personal en temas especializados de género, de masculinidades y de
losprocesosdecambio,paracontarconprofesionalesidóneosanivelnacional
Motivar a grupos de varones que ejercen violencia a trabajar con facilitadoras
mujeres, según su perfil, en el tema de masculinidades, para avanzar así en otras
formasdeintervención.
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Desarrollar estrategias de incidencia en políticas de prevención de violencia,
desde las masculinidades, en los sectores con poca apertura (MINEDU, MINSA,
MINJUS,etcétera).
4. Recomendaciones
4.1Internas,desdelasorganizaciones
Fomentar la investigación y recolección de datos, la evaluación rigurosa de las
intervenciones, la sistematización y los espacios de debate sobre esta
problemática,conapoyodeentidadesespecializadas.
Promover un plan de comunicación, a través de los medios masivos, para
sensibilizar sobre la prevención de la violencia, valorando las relaciones
igualitariasentremujeresyhombres.
Integrar un programa educativo sobre las relaciones igualitarias y la educación
sexual en las organizaciones civiles que participan en la creación de un kit de
capacitación y de herramientas para los profesionales (profesores), con el ﬁn
detratarlatemáticaconjóvenes,niñasyniños.
Articular el activismo de las organizaciones involucradas en el fomento de
alianzas estratégicas con propuestas de políticas públicas especíﬁcas en
género, desde las masculinidades. Este trabajo debe ser ejecutado por un
comité de representantes de organizaciones que se ocupen de desarrollar el
tema de la prevención de la violencia y masculinidades, así como de involucrar
a nuevas instituciones, para construir un plan de incidencia política
(propuestasdepolíticaspúblicas).
Foto: Centro Mujer Teresa de Jesús
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4.2Externasa lasorganizaciones
Sensibilizar a los funcionarios públicos en el tema, a través de medidas
eficaces de seguimiento, monitoreo y evaluación de los programas
respectivos, para involucrar a los hombres que ejercen violencia en el cambio
decomportamiento.
Fomentar en el ámbito nacional un trabajo de sinergias en la prevención de
violencia de género, de manera multisectorial y con acciones visibles en la
comunidad.
Difundir una campaña nacional de prevención de la violencia de género desde el
Estado, en colaboración con las organizaciones de la sociedad civil, dirigida a
la población en general (hombres, mujeres, jóvenes, niños y niñas), de manera
sostenida, en las zonas con mayor prevalencia de casos reportados. Esta
campañadeberácontarconunplancomunicacionalmasivoyestratégico.
Comprometer a los gobiernos central, regional y distrital a atender, de manera
permanente, la prevención de violencia, tema álgido y profundo en la vida
cotidiana de nuestra sociedad, con políticas de género en la prevención de la
violencia y programas en cada sector implicado, como programas de atención
integral a la violencia de género que incluyan la detección en sectores
específicos: salud, educación, empleo y grupos comunitarios, entre otros, de
maneramultisectorial.
Fomentar políticas de género para superar los vacíos legales en el Ministerio
Público. Existe una dicotomía que pretende ser erradicada sobre la base de
“disposiciones y normas” cuya finalidad es básicamente de contención,
disuasiva y con un carácter punitivo. Han pasado los años y las denuncias
siguenaumentando,sinquemuchoscasoshayansidosolucionados.
Involucrar a las instituciones (organizaciones religiosas, escuelas, etcétera) de
la comunidad en la fase inicial del proyecto, para enfrentar las resistencias
externas; construir un mapa de los actores clave en la comunidad para analizar
lasrelacionesdepoderydeinfluencia,lasalianzas,entreotras.
- 53 -

En este proyecto se han priorizado las acciones de prevención involucrando a los
hombres para poder hacer un trabajo integral, considerando a las personas víctimas y a
las niñas y los niños, desde el enfoque de género, en la reeducación de la población
afectadaanivellocal.
Los procesos sociales de formación y sensibilización a mujeres, hombres y jóvenes
―sesiones grupales o individuales o actividades de convivencia realizadas― sirven
como herramientas que contribuyen con la comunidad en la generación de espacios de
reﬂexión dentro de las organizaciones civiles acerca de la problemática de violencia de
género, principalmente en los signos y señales de la prevención de este tipo de
violencia.
La promoción de la inclusión de las mujeres en los roles de toma de decisión y
formulación de propuestas de política de género, en el ámbito de la prevención, es
fundamental: constituye una pieza clave para la construcción de capacidades,
habilidades y mecanismos para que las víctimas y sus parejas accedan a normas de
géneroconreconocimientodelaviolenciaylarenunciaaésta.
Se trabaja articulando las actividades del proyecto, lo que permite establecer alianzas
a nivel local y, recientemente, con organizaciones internacionales. La agenda se
desarrolla en diferentes esferas, tales como educación, salud, cultura, socialización,
política,economía,entreotras.
Un trabajo de alianzas con autoridades locales y el Ministerio de la Mujer y Poblaciones
Vulnerables ―alcaldes, regidoras, líderes de opinión en medios de comunicación,
funcionarias y funcionarios públicos, entre otras― es primordial para difundir las
acciones en prevención y sus estrategias de movilización social a favor de una vida sin
violenciadegénero.
Las acciones de incidencia política de las organizaciones involucradas fomentan la
incorporación de la sociedad civil en las agendas locales, con una participación activa,
democrática y sistemática. Esto hace posible el trabajo articulado para tomar
decisiones sobre asuntos que afectan la vida, para asegurar el pleno derecho de
mujeresyhombres avivirsusrelacionessinviolencia.
conclusiones
- 54 -

referencias bibliograficas
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Anexo 1
Organizaciones e instituciones involucradas en el proceso
Personas
Marie-Hélène Bérubé, consejera en violencias hacia las
mujeres y masculinidades
Christine Benoît, representante regional
Ruth Calzado Atanacio, coordinadora
Ángel Palacios Trujillo
José Reyes Mori
Óscar Huacho
Liz Mélendez, directora
Zadith Vega, consultora
Q'antu Madueño Basurco, Programa de Derechos Sexuales y
Ciudadanía en Salud
Edgardo Sergil, administrador
Servicios Integrales de Salud para Jóvenes
Cristian Sipión, coordinador
Cynthia Cano, coordinadora
Jaikel Homero Rodríguez, miembro
Entrevistas con: PNP Ángel Mío, Carlos Canacho (RPM), Víctor
Ocho (RPM), Emerson Rodríguez Sarmiento (RPM)
Carmen Lourdes Sevilla, directora del Programa Nacional contra
la Violencia Familiar y Sexual
Miguel Ramos Padilla, exdirector, Dirección General contra la
Violencia de Género. Profesor Asociado a la UPCH y experto en
el tema de las masculinidades y la violencia de género.
Silvia Loli, coordinadora del Programa Equidad de Género
Tesania Velásquez, profesora principal
Dirección Académica de Responsabilidad Social (DARS)
Edgar Huarhua
Especialista en Medicina Legal
Organizaciones
Copartes
Oxfam en Perú
Centro Mujer
Teresa de Jesús
Centro de la
Mujer Peruana
Flora Tristán
Inppares
Red Peruana de
Masculinidades
Organizaciones
aliadas
MIMP /
Universidad
Peruana
Cayetano
Heredia (UPCH)
Municipalidad de
Lima
Metropolitana
Pontiﬁcia
Universidad
Católica del Perú
(PUCP)
Centro
Emergencia
Mujer – Medicina
Legal
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Este documento fue producido gracias al apoyo ﬁnanciero del Gobierno de Canadá,
a través del Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio y Desarrollo (MRECD).

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