1. MIÉRCOLES, 1 DE ABRIL DE 2020 EL ECONOMISTA4
Opinión
E
sunsecretoavoces:laactualcrisissani-
taria producto del virus Covid-19 va a
conducir a una abrupta y peligrosa cri-
sis económica en nuestro país.
En este contexto, contribuir a la confianza
ylaestabilidaddetodoslosagenteseconómi-
cosesclave,comenzandoporlosquecarecen
deunaposiciónmásprivilegiadaalahorade
amortiguar el impacto. Es por esa razón que
desdeCiudadanoshemosplanteadodistintas
propuestasparalosautónomos,pymes,elsec-
tor primario, etc. En materia laboral y fiscal
especialmente.
Pero además de estas medidas en el ámbi-
tolaboralexistenmedidasdeapoyoadiciona-
lesquepuedenaliviarlasituacióndelasempre-
sas más vulnerables, autónomos y pymes e
incluso de los propios consumidores.
Unadeellasseríahabilitarlaposibilidadde
que estas empresas puedan aplicar una dis-
minucióndesupotenciacontratadaenelsumi-
nistroeléctrico,aliviandoasílacargaquesupo-
Portavoz de Trabajo, Transportes, Transición Ecoló-
gica, Pacto de Toledo, Presupuestos y Reglamento
de Ciudadanos. Diputada por Valencia.
María
Muñoz
MEDIDAS ECONÓMICAS CONTRA EL
CORONAVIRUS, TAMBIÉN EN ENERGÍA
ne este gasto corriente para su actividad en
virtuddelasexcepcionalescircunstanciasque
vivimos.Sinembargo,lalegislaciónactual(en
Real Decreto 1955/2000) no garantiza estas
disminucionessiyasehaproducidouncam-
biodepotenciaduranteelañoenvigor,dejan-
do la potestad para determinar la viabilidad
de ese cambio a la empresa distribuidora.
Como en tantas otras ocasiones, en esta
materialaciudadaníaylas
empresassehanadelanta-
do a los políticos en este
caso demostrando más
visión y audacia que los
poderespúblicos.Enefec-
to, las principales empre-
sasdistribuidorasdeener-
gíaeléctricadenuestropaís
ya han tomado esta medi-
dadeformaproactivapara
quesepermitaalosconsu-
midoressuministradosdis-
minuir su potencia contratada aunque no
hayantranscurridolos12mesesdesdeelúlti-
mo cambio técnico realizado.
Sin embargo, dado el enorme impacto que
esta crisis va a tener en el tejido productivo
español,conespecialacentoenlasempresas
máspequeñasysusempleos,esnecesarioque
el Gobierno ejerza su liderazgo también en
esta materia y brinde la posibilidad de reali-
zar esas modificaciones de potencia a todos
losautónomosypymessinimportarcuálsea
su empresa distribuidora, asegurando así su
posibilidadparatodoelterritorionacionalsin
importar el suministrador.
De esta manera, sería necesario establecer
una excepción temporal a esta norma mien-
tras se mantenga la situación de Estado de
Alarma.
Asimismo, esta ocasión
resulta inmejorable a la
hora de valorar otros cos-
tes del suministro eléctri-
co y gasista como la doble
imposición que existe en
relaciónalImpuestosobre
laElectricidad,queforma
partedelabaseimponible
delIVAaplicableenlasfac-
turas;unasituaciónanálo-
gaenelcasodelImpuesto
sobre Hidrocarburos y el IVA aplicable en la
factura del gas.
Efectivamente:losconsumidorespagamos
dos veces estos impuestos, lo que resulta en
unhechoinauditoyhastajurídicamentecues-
tionable.
Finalmente pero no menos importante,
la situación actual debería servirnos para
reconsiderar la posibilidad de establecer
un tipo reducido de IVA para estos sumi-
nistros básicos; con el ánimo de limitar la
pérdida de tejido productivo pero también
la reincidencia de situaciones de vulnera-
bilidad social como las que ha conocido
nuestro país en el pasado, a causa de los
impagos y cortes de suministro experimen-
tados.
¿Cómo se concibe que un bien esencial
como la electricidad sin la que no podemos
vivir en el mundo actual tenga un tipo impo-
sitivo del 21%? Cuando la incertidumbre
sume a pymes, autónomos y al conjunto de
la sociedad, no es justificable que la admi-
nistración se quede de brazos cruzados sin
aliviar la carga fiscal que estos soportan,
máxime cuando por razones de salud públi-
ca se les pide encarecidamente que se man-
tengan en sus casas y por tanto, se vean obli-
gados a incrementar su consumo eléctrico.
En conclusión: puede y se debe actuar
para contribuir al bienestar y la confianza
de la ciudadanía y empresas, también en
estos ámbitos. En un momento dramático
a nivel social no es el momento de que la
administración se centre en afán recauda-
torio, sino en el apoyo de aquellos que más
sufren y que también levantarán de nuevo
nuestro país: empresas y trabajadores.
Es inaudito y
jurídicamente
cuestionable que se
paguen dos veces
tributos eléctricos
U
nanoveladedicadaalverdaderoamor.
Así se ha definido el libro de García
MárquezElamorenlostiemposdelcóle-
ra. Un hombre espera cincuenta años para
recuperar a su amada, todo ello ambientado
enunlugardevastadoporlaepidemiadelcóle-
ra. ¿Cómo era posible amar en ese momento
histórico? ¿Cómo es posible hoy pensar en
otracosaquenosealaemergenciasanitaria?
Larespuestaaambascuestioneseslamisma:
se puede y se debe.
LacrisisdelCovid-19haparalizadoelmundo
y de repente las prioridades son otras. Lo
importante es no morir, no hacer que nadie
muera, no contagiar ni contagiarse. Por eso,
elestadodealarma,elconfinamientoyelcie-
rredeunagranmayoríadeloscomerciosde
caraalpúblico.Enprincipioelsectoreduca-
tivo, luego la restauración y los minoristas
para posteriormente en cascada ir parando
prácticamente todas las industrias. Las con-
secuencias se sufrieron inmediatamente en
los mercados financieros y por tanto en la
valoración de las empresas cotizadas. En la
misma semana llegaron los primeros despi-
dosquehoycolapsanlasoficinasestatalesde
empleo.Enbreveelpulmóndelasempresas
másfrágilesseacabaráycomenzaránloscon-
cursosdeacreedoresyloscierrespatronales,
Director de Deusto Business School y profesor de
la Universidad de Deusto.
Iñaki
Ortega
porqueprohibirdespidosolospermisosretri-
buidosnopararálahemorragia.Todoconun
abrumadorycadadíamásfrágilconsensoen
quelasdurasmedidasdeaislamientosonlas
necesarias para frenar la pandemia y evitar
más muertes. La economía, como miles de
españoles, en la UCI. Pero el pulso de nues-
tra economía sigue latiendo gracias al tele-
trabajo y la necesidad de
seguir abasteciendo a los
millones de encerrados.
Hasta aquí nada nuevo.
Quizás para algunos sí lo
seaqueempresasespaño-
las de todo tamaño y sec-
tor han reconvertido su
actividadparafabricarmas-
carillas o respiradores.
Igualmente, que empren-
dedores se están movili-
zando de manera altruis-
ta bien para digitalizar pymes que de otra
forma cerrarán, bien para dar herramientas
de big data a los hospitales. Grandes corpo-
racionesdecapitalespañolestánusandosus
redes logísticas y capacidad financiera para,
sin pedir nada a cambio, ayudar al sistema
sanitario. Directivos dedican estos días todo
su tiempo a movilizar recursos para salvar
empresas con herramientas financieras de
impacto social.
Pero desde este fin de semana nos encon-
tramosenunanuevaencrucijada:parardefi-
nitivamentelaeconomíaendureciendoelcon-
finamientoopermitirquelaactividadeconó-
micasigabajomínimos.Losquedefiendenla
primera opción, la hibernación, quieren evi-
tar contagios causados por las personas que
siguen trabajando, pero quizás no tienen en
cuentaquegraciasamuchosdeesostrabaja-
doresningunalocalidadyningúnespañolha
estadodesabastecidoohadejadodedisfrutar
serviciosdeenergía,aguaotelecomunicacio-
nes.Igualtampocohanreparadoenqueeste
débilpulsodelaactividad
empresarialestápermitien-
do que millones de espa-
ñoles sigan con empleo,
aunqueseaenremoto.Tal
vez no son conscientes de
que se ha levantado toda
unaoladesolidaridadlide-
radaporempresasquetam-
bién sufren.
Antesdequenosdemos
cuenta, la Semana Santa
habrápasadoyelelefante
seguiráenlahabitaciónydeberemosrespon-
deralagranpregunta¿seguironoseguircon
la economía parada? Somos muchos los que
pensamosquetomarelcaminodelcierretotal
esllevarlaeconomíaauncomainducido,que
enmedicinaessiemprelaúltimaopciónpara
un enfermo por el riesgo de irreversibilidad.
Gabriel García Márquez consiguió hacer
creíbleenplenaepidemiadelcóleraunahis-
toriasobreelverdaderoamorquediolugara
su premiada novela. Hoy, a pesar de lo que
piensen algunos ministros una gran mayoría
de empresas están mostrando la verdadera
caradelaactividadeconómica.Empresarios
y trabajadores que cuidan de sus familias la
vezquetrabajan,aunquenadieselopida.Cien-
tosdemilesdeautónomosqueseguiránpagan-
dosuscotizacionesapesardenoteneringre-
soalguno.CorporacionesqueevitanlosErtes
acostadesusdividendos,CEOsquenoduer-
menparabuscarunresquicioquepermitano
despediranadie,altosdirectivosqueserecor-
tansussalariosomultinacionalesqueseponen
adisposicióndelosgobiernos.Emprendedo-
resempeñadoshastalascejasquenopueden
dejardetrabajarnoparapagarsusdeudassino
para buscar soluciones de emergencia para
las consecuencias del Covid-19.
Nohanpasadonitressemanasdeconfina-
miento,peropareceyaunaeternidad.Enton-
ces el debate era cómo conseguir empresas
con propósito. Desde las grandes institucio-
nes y los foros más relevantes del mundo se
nosdecíaquehabíaquereinventarelcapita-
lismo; conseguir una economía de mercado
inclusiva que no dejase nadie atrás; pensar
menos en el dividendo y más en el compro-
miso con las comunidades.
Había que aspirar a ser una empresa ESG
(porsussiglaseninglés:environmental,social
andgovernance).Hatenidoquevenirestapan-
demia para conseguir todo lo anterior y des-
cubrirlaverdaderaempresa: laquesufreala
vez que la sociedad a la que sirve o la que se
sostiene nuestro bienestar en contra de sus
intereses.
Ojalá dejemos que empresas y directivos
españolessiganmostrandoesaverdaderacara
de la actividad económica, aunque sea en los
tiemposdelcoronavirus.Estavezlespremia-
rá la historia.
Las firmas
están ayudando
a la Sanidad y a la
sociedad sin pedir
nada a cambio
PELIGROSO COMA INDUCIDO EN LA ECONOMÍA