2. ¿QUÉ ES EL CATECISMO?
DEF: es la exposición de la fe de la Iglesia y de la doctrina
católica, atestiguadas o iluminadas por la Sagrada Escritura, la
Tradición apostólica y el Magisterio eclesiástico.
El Catecismo de la Iglesia Católica (en
latín Catechismus Ecclesiae Catholicae ,
representado como “CEC” en las citas
bibliográficas)
3. ESTRUCTURA DEL
CATECISMO
LO QUE
CREEMOS La
profesión de
fe bautismal
(credo)
1
LO QUE
CELEBRAMOS
Los
sacramentos
2
LO QUE VIVIMOS
La vida de fe (las
bienaventuranzas
y los
mandamientos)
3
LO QUE
ORAMOS
El
padrenuestro.
4
4. ¿CÓMO SE DIVIDE EL
CATECISMO?
• Introducción
• Partes
• Secciones
• Artículos
• Párrafos
• Resumen.
5. FINALIDAD DEL CATECISMO
“como un punto
de referencia para
los catecismos o
compendios que
sean compuestos
en los diversos
países” (Sínodo de
los Obispos 1985).
Sus fuentes
principales son la
Sagrada
Escritura, los
Santos Padres, la
Liturgia y el
Magisterio de la
Iglesia.
Presentar una exposición
orgánica y sintética de los
contenidos esenciales y
fundamentales de la
doctrina católica tanto
sobre la fe como sobre la
moral, a la luz del Concilio
Vaticano II y del conjunto
de la Tradición de la
Iglesia.
6. PRIMERA PARTE
LA PROFESIÓN DE LA FE
PRIMERA SECCIÓN
“CREO” – “CREEMOS”
1. ¿Cuál es el
designio de Dios
para el hombre?
(1-25)
Dios, infinitamente perfecto y bienaventurado en sí
mismo, en un designio de pura bondad ha creado
libremente al hombre para hacerle partícipe de su
vida bienaventurada. En la plenitud de los tiempos,
Dios Padre envió a su Hijo como Redentor y Salvador
de los hombres caídos en el pecado,
convocándolos en su Iglesia, y haciéndolos hijos
suyos de adopción por obra del Espíritu Santo y
herederos de su eterna bienaventuranza.
EL HOMBRE ES “CAPAZ”
DE DIOS
“Tú eres grande, Señor,
y muy digno de
alabanza (…). Nos has
hecho para ti
y nuestro corazón está
inquieto mientras no
descansa en ti” (San
Agustín)
7. LA RESPUESTA DEL
“Nadie puede tener a Dios por Padre si
no tiene a la Iglesia por Madre”
HOMBREA DIOS
(San Cipriano)
SE LLAMA:
“FE”
Una adhesión de la inteligencia y de la voluntad
personal del hombre entero a Dios que se revela
Un don sobrenatural de Dios.
Para creer, el hombre necesita los auxilios interiores del Espíritu
Santo.
"Creer" es un acto humano, consciente y libre, que
corresponde a la dignidad de la persona humana.
"Creer" es un acto eclesial. La fe de la Iglesia precede,
engendra, conduce y alimenta nuestra fe. La Iglesia es la
madre de todos los creyentes.
Necesaria para la salvación. El Señor mismo lo afirma: "El que
crea y sea bautizado, se salvará; el que no crea, se condenará"
(Mc 16,16).
8. SEGUNDA SECCIÓN: LA
PROFESIÓN DE LA FE
CRISTIANA
• ¿Qué son los símbolos de la fe? (185-188; 199.197)
• Los símbolos de la fe, también llamados “profesiones de fe” o “Credos”,
son fórmulas articuladas con las que la Iglesia, desde sus orígenes, ha
expresado sintéticamente la propia fe, y la ha transmitido con un
lenguaje común y normativo para todos los fieles.
• ¿Cuáles son los símbolos de la fe más antiguos? (189-191)
• Los símbolos de la fe más antiguos son los bautismales. Puesto que el
Bautismo se administra “en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu
Santo” (Mt 28, 19), las verdades de fe allí profesadas son articuladas
según su referencia a las tres Personas de la Santísima Trinidad.
• ¿Cuáles son los símbolos de la fe más importantes? (193-195)
• Los símbolos de la fe más importantes son: el Símbolo de los Apóstoles,
que es el antiguo símbolo bautismal de la Iglesia de Roma, y el Símbolo
niceno-constantinopolitano, que es fruto de los dos primeros Concilios
Ecuménicos de Nicea (325) y de Constantinopla (381), y que sigue
siendo aún hoy el símbolo común a todas las grandes Iglesias de
Oriente y Occidente.
10. “CREO EN DIOS, PADRE
TODOPODEROSO,
CREADOR DEL CIELO Y DE LA TIERRA”
• ¿Por qué la profesión de fe comienza con “Creo en Dios”? (198-199)
• La profesión de fe comienza con la afirmación “Creo en Dios” porque es la más
importante: la fuente de todas las demás verdades sobre el hombre y sobre el
mundo y de toda la vida del que cree en Dios.
•
¿Por qué profesamos un solo Dios? (200-202; 228)
• Profesamos un solo Dios porque Él se ha revelado al pueblo de Israel como el
Único, cuando dice: “escucha Israel, el Señor nuestro Dios es el Único Señor” (Dt
6, 4), “no existe ningún otro” (Is 45, 22). Jesús mismo lo ha confirmado: Dios “es el
único Señor” (Mc 12, 29). Profesar que Jesús y el Espíritu Santo son también Dios y
Señor no introduce división alguna en el Dios Único.
•
¿Con qué nombre se revela Dios? (203-205; 230-231)
• Dios se revela a Moisés como el Dios vivo: “Yo soy el Dios de tus padres, el Dios
de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob” (Ex 3, 6). Al mismo Moisés Dios
le revela su Nombre misterioso: “Yo soy el que soy (YHWH)” (Ex 3, 14). El nombre
inefable de Dios, ya en los tiempos del Antiguo Testamento, fue sustituido por la
palabra Señor. De este modo en el Nuevo Testamento, Jesús, llamado el Señor,
aparece como verdadero Dios.
11. • ¿Cómo expresa la Iglesia su fe trinitaria? (249-256; 266)
• La Iglesia expresa su fe trinitaria confesando un solo Dios en tres
Personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Las tres divinas Personas son un
solo Dios porque cada una de ellas es idéntica a la plenitud de la
única e indivisible naturaleza divina. Las tres son realmente distintas
entre sí, por sus relaciones recíprocas: el Padre engendra al Hijo, el Hijo
es engendrado por el Padre, el Espíritu Santo procede del Padre y del
Hijo.
• Si Dios es todopoderoso y providente ¿por qué entonces existe el mal?
(309-310; 324.400)
• Al interrogante, tan doloroso como misterioso, sobre la existencia del
mal solamente se puede dar respuesta desde el conjunto de la fe
cristiana. Dios no es, en modo alguno, ni directa ni indirectamente, la
causa del mal. Él ilumina el misterio del mal en su Hijo Jesucristo, que ha
muerto y ha resucitado para vencer el gran mal moral, que es el
pecado de los hombres y que es la raíz de los restantes males.
• 58. ¿Por qué Dios permite el mal? (311-314; 324)
La fe nos da la certeza de que Dios no permitiría el mal si no hiciera salir el
bien del mal mismo. Esto Dios lo ha realizado ya admirablemente con
ocasión de la muerte y resurrección de Cristo: en efecto, del mayor mal
moral, la muerte de su Hijo, Dios ha sacado el mayor de los bienes, la
glorificación de Cristo y nuestra redención.
12. CREO EN J-XTO, HIJO
ÚNICO DE DIOS:
Jesús, es nombre dado al Hijo
único del Padre (cf. Jn 1, 14. 18;
3, 16. 18) nacido de las entrañas
de María, nombre que significa
Dios (Yhwh) salva, este hombre
es el Mesías o el Cristo = el
ungido, es el mismo Dios ( Ver Jn
1,1)
Que sin perder la naturaleza
divina asumió la naturaleza
humana, así Jesús es verdadero
Dios y verdadero hombre, por
eso es el único mediador entre
Dios y los hombres,
teniendo en su ser humano
tanto inteligencia como
voluntad humana en perfecto
acuerdo y sometida con la
inteligencia y voluntad Divina.
13. NACIDO DE MARÍA:
• María es la mujer que de nuestra raza a dado el Sí definitivo
a Dios, pues de ella
• se dice que es la “llena de gracia” pues desde el mismo
instante de su
• concepción por gracia especialísima de Dios fue
preservada del pecado y original y por su vida virtuosa
permaneció pura de todo pecado, por eso es la madre de
Dios, pues Jesús es Dios. De allí se desprenden los dogmas
marianos:
• ◊ Inmaculada Concepción
• ◊ Virginidad antes, durante y después del Parto.
• ◊ Madre de Dios (Teothokos)
• ◊ Asunta al Cielo
14. EN EL ESPÍRITU SANTO:
• El Espíritu Santo es la tercera persona manifestada de la
Santísima Trinidad, si el Padre es el que ama y el Hijo es el
amado, el Espíritu es el Amor, por ello se dice que el Espíritu
es el amor del-Padre-y-del-Hijo; por esto quien posee el
Espíritu puede llamar a Dios Abba-Papá (Gal 4,6)
• Así como el Hijo procede del Padre y por eso es
consubstancial a Él, es decir es Dios, lo mismo el Espíritu
procede el Padre y del Hijo y es consubstancial a ambos, es
decir posee la naturaleza divina de ambos, es Dios.
• Ahora bien, la misión del Espíritu no es diferente a la del Hijo
sino que es conjunta e inseparable, pues el Hijo realiza su
misión para gloria del Padre y Santificación de los hombre y
lo mismo hace el Espíritu, colma al creyente para adoración
de Dios y salvación de los hombres.
15. “CREO EN LA SANTA
IGLESIA CATÓLICA”
LA IGLESIA EN EL DESIGNIO
DE DIOS
• “Iglesia” se designa al pueblo que Dios convoca y
reúne desde todos los confines de la tierra, para
constituir la asamblea de todos aquellos que, por la fe
y el Bautismo, han sido hechos hijos de Dios, miembros
de Cristo y templo del Espíritu Santo.
• 4 características la definen:
• Una
• Santa
• Católica
• Apostólica
16. 4 CARACTERÍSTICAS LA
DEFINEN
¿Por qué la Iglesia es una? (813-815; 866)La Iglesia es
una porque tiene como origen y modelo la unidad de
un solo Dios en la Trinidad de las Personas; como
fundador y cabeza a Jesucristo, que establece la
unidad de todos los pueblos en un solo cuerpo; como
alma al Espíritu Santo que une a todos los fieles en la
comunión en Cristo. La Iglesia tiene una sola fe, una
sola vida sacramental, una única sucesión apostólica,
una común esperanza y la misma caridad.
¿En qué sentido la Iglesia es santa? (823-829; 867)La
Iglesia es santa porque Dios santísimo es su autor;
Cristo se ha entregado a sí mismo por ella, para
santificarla y hacerla santificante; el Espíritu Santo la
vivifica con la caridad. En la Iglesia se encuentra la
plenitud de los medios de salvación. La santidad es la
vocación de cada uno de sus miembros y el fin de
toda su actividad. Cuenta en su seno con la Virgen
María e innumerables santos, como modelos e
intercesores. La santidad de la Iglesia es la fuente de
la santificación de sus hijos, los cuales, aquí en la
tierra, se reconocen todos pecadores, siempre
necesitados de conversión y de purificación.
17. ¿Por qué decimos que la Iglesia es católica?
(830-831; 868)La Iglesia es católica, es decir
universal, en cuanto en ella Cristo está
presente: “Allí donde está Cristo Jesús, está la
Iglesia Católica” (San Ignacio de Antioquía).
La Iglesia anuncia la totalidad y la integridad
de la fe; lleva en sí y administra la plenitud de
los medios de salvación; es enviada en misión
a todos los pueblos, pertenecientes a
cualquier tiempo o cultura.
¿Por qué la Iglesia es apostólica? (857; 869)La
Iglesia es apostólica por su origen, ya que fue
construida “sobre el fundamento de los
Apóstoles” (Ef 2, 20); por su enseñanza, que
es la misma de los Apóstoles; por su
estructura, en cuanto es instruida, santificada
y gobernada, hasta la vuelta de Cristo, por
los Apóstoles, gracias a sus sucesores, los
obispos, en comunión con el sucesor de
Pedro.
18. EN LA COMUNIÓN DE
LOS SANTOS:
Esta expresión designa primeramente la cosas santas, la comunión
principalmente que se da en la Eucaristía, que realiza y significa la unidad
de los creyentes, cuerpo de Cristo, del mismo modo designa las personas
santas, unidas en la santidad de Dios y en tercer lugar designa la comunión
de los fieles de Cristo: de los que peregrinan (iglesia militante) con los que
se purifican después de muertos (iglesia purgante) más los que gozan la
bienaventuranza celestial (iglesia Triunfante). Una sola iglesia en comunión.
19. EN EL PERDÓN DE LOS
PECADOS:
Va unido al Espíritu Santo, porque Cristo resucitado confió a los apóstoles después
de soplar sobre ellos el perdón de los pecados. Además el primer sacramento del
perdón es el bautismo, pues nos une a Cristo y nos da el Espíritu. Adicionémosle a
ello que la iglesia con el sacramento de la Penitencia por medio de los obispo y
presbíteros puede perdonar los pecados de sus bautizados. Con todo esto, el
perdón de los pecados es un don propio de la misericordia de Dios manifestada a
los hombres por medio de la iglesia en el ejercicio del sacerdocio.
20. RESURRECCIÓN DE LA
CARNE:
Si Dios es el creador de la carne, que el Verbo se hizo carne, entonces la redención del
hombre es integra, restaurando el cuerpo perdido por el lapso de la muerte, pues si la muerte
separa el alma del cuerpo.
la resurrección los re-une, teniendo presente que se siembra en el sepulcro un cuerpo
corruptible, resucita un cuerpo incorruptible (cf. 1 Co 15, 42), un “cuerpo espiritual” (1 Co 15,
44), todo ello gracias a la Resurrección de Cristo el Señor; sin embargo es fe de la iglesia que
aquellos que mueren tiene un juicio inmediato: Si mueren en gracia gozan de la visión
beatifica de Dios (Cielo) - Los que mueren en amistad con Dios pero imperfectamente
purificados, sufren una purgación de sus pecado para obtener la santidad necesaria para
entrar en el gozo de Dios – Y los que mueren, habiendo renunciado libre y constantemente a
la gracia de Dios sufren lejos de su gozo celestial (Infierno).
En virtud de la “comunión de los santos”, la Iglesia encomienda los difuntos a la misericordia
de Dios y ofrece sufragios
21. Y LA VIDA ETERNA:
Del juicio inmediato a la
muerte, sigue el juicio final,
donde Cristo será
aparecerá no como
cordero inmolado sino
como juez de vivos y
muertos, por ello al fin de
los tiempos, el Reino de
Dios llegará a su plenitud.
Entonces, los justos
reinarán con Cristo para
siempre, glorificados en
cuerpo y alma, y el mismo
universo material será
transformado. Dios será
entonces “todo en todos”
(1 Co 15, 28), en la vida
eterna