LIONEL MESSI
Lionel Andrés Messi Cuccittini (Rosario, 24 de junio de
1987), conocido como Leo Messi, es un futbolista
argentino. Conocido como Leo o Pulga, su inmensa
calidad ya apuntaba cuando tenía cinco años y jugaba en
el club de barrio de su ciudad natal dirigido por su padre,
un empleado de la industria metalúrgica, y se reafirmó
cuando, a partir de sus siete años, comenzó a jugar en las
divisiones inferiores del Newell's Old Boys de Rosario.
A los 10 años, a punto de dar el salto al club River Plate de
Buenos Aires, se le detectó un retraso en el desarrollo óseo
causado por un bajo nivel de hormonas del crecimiento; el
tratamiento médico era muy costoso, los clubes no
quisieron afrontarlo y su padre, que no disponía de los
recursos económicos necesarios, decidió entonces emigrar
a Barcelona con su familia, donde se le había presentado
una posibilidad laboral. En septiembre de 2000, Leo Messi realizaba una prueba en el F.C. Barcelona; el
técnico Carles Rexach quedó maravillado con su talento futbolístico y, firmando en efecto un contrato
en una servilleta de papel, como cuenta la anécdota, lo incorporó al club, que se hizo cargo del
tratamiento del chico. Messi tenía entonces trece años y medía 1,40.
A partir de ese momento Messi se formaría en la Masia,centro de entrenamiento de la cantera azulgrana,
donde pasó por las diferentes categorías (Infantil A, Cadete B,Cadete A,Juvenil A, Barça C y Barça B)
antesde llegar al primer equipo, ya enla era delpresidente JoanLaporta. Aunque participó en elamistoso
que enfrentó al FC Barcelona con el FC Porto en el partido de inauguración del Estadio do Dragáo (16
de noviembre de 2003), su debut oficial en primera división con la camiseta azulgrana se produjo el 16
de octubre de 2004 en Montjuic, en el clásico derby con el Español de Barcelona.
Lo demás es historia reciente. A sus 17 años la Pulga marcaba su primer gol como profesional en el
Barça en un partido contra el Albacete, y se convertía en el jugador más joven del equipo azulgrana en
lograr un tanto en la Liga española. Durante esa temporada 2004-2005, las lesiones que arrastraban
algunas figuras del primer equipo y su brillante trayectoria en el filial hizo que fuese un habitual en las
convocatorias y que contribuyera a la consecución del título de Liga, el primero de su palmarés.
Pero la progresión del ariete no había hecho más que empezar. La temporada 2005-2006, después de un
gran debut en el trofeo Joan Gamper contra la Juventus de Turín, fue ya sin duda una buena campaña,
aunque una lesión muscular lo apartó de los terrenos de juego en el tramo final de la competición. Se
exhibió en el Santiago Bernabéu, en un memorable partido en el que los azulgranas vencieron al Real
Madrid por 0-3, y en Stamford Bridge, en los octavosde final de la Liga de Campeonescontra elChelsea.
El resultado de la temporada para el equipo de Frank Rijkaard no pudo ser mejor: ganó la Supercopa de
España, la Liga y la Liga de Campeones, la segunda de su historia.
En 2006-2007 las cosas no fueron tan bien para el Barça,que no ganó ningún título importante, pero
Messi deleitó a los aficionados con jugadas espectaculares que ya lo postularon entre los mejores
jugadores del mundo. Entre sus momentos de gloria se cuenta el haber logrado los tres goles del
Barcelona que le valieron el empate frente al Real Madrid, en el partido disputado en el Camp Nou el 10
de marzo de 2007.
Otro momento estelar en la biografía de Leo Messi fue su hazaña del 18 de abril de ese mismo año, en
las semifinales de la Copa del Rey contra el Getafe,cuando eludió a cinco jugadores, portero incluido, e
hizo el segundo gol de su equipo. Esta genialidad dio la vuelta al mundo y todos lo compararon con
el Maradona que coronó el célebre "Gol del siglo" ante Inglaterra, en el Mundial de México de 1986. La
progresión del jugador continuó en 2007-2008, una temporada difícil para el equipo, que vio cómo se
agotaba el proyecto liderado por Ronaldinho y acababa la era de Frank Rijkaard en el banquillo.
La era Guardiola
El FC Barcelona inició la temporada 2008-2009 con un nuevo proyecto que generó un cierto
escepticismo entre los culés. El presidente Laporta había confiado el banquillo a un hombre de la
casa, Josep Guardiola, con buenos resultados en el filial pero sin experiencia en primera. Los más
optimistas auguraban buenos resultados a largo plazo. Pero la historia fue otra. Los chicos de Guardiola,
con Messi convertido en crack indiscutible, pergeñaron la campaña futbolística más apasionante en
décadas. Con un fútbol de libro, alabado en Europa y en el mundo, encadenaron victorias y resultados
que pulverizaron todos los récords y consiguieron lo que parecía imposible: ganar en una misma
temporada la Copa del Rey, la Liga y la Liga de Campeones, un triplete histórico que nunca antes había
logrado ningún equipo español.
En esta campaña, Messi completó su primera temporada sin lesiones y superó su récord de partidos
jugados (51) y goles (38). El argentino fue decisivo en las finales de Copa y Champions -marcó el
segundo gol del Barça en cada una de ellas-, y, entre goles antológicos, fue el artífice de dos de los seis
tantos que encajó el Real Madrid en el Santiago Bernabéu.
Los trestítulos obtenidos en la temporada 2008-2009 daban accesoalclub a disputar otros tantos torneos
a principios de la siguiente, antes de terminar el año: la Supercopa de España, la Supercopa de Europa y
el Mundial de Clubs. En todos ellos resultó vencedor el Barça,marcando un récord histórico: levantar
en un solo año los seis trofeos de las seis competiciones en que participaba. No hay duda de que, junto
al entrenador, la explosión de Leo Messifue una de las claves de que la era Guardiola (2008-2012) haya
pasado a la historia como la mejor del club. El equipo conquistó durante ese cuatrienio 14 títulos de 18
posibles: a los seis citados, hay que sumar otras dos Liga españolas (2009-2010 y 2010-2011), otra Liga
de Campeones en 2010-2011 (la tercera de Messi y la cuarta de la historia del club), la Copa del Rey
(2011-2012), la Supercopa de Europa (2011), dos Supercopas de España (2010 y 2011) y el Mundial de
Clubs de 2011.
De hasta qué punto el papel de Leo Messi en tales triunfos fue determinante pueden dar una idea las
estadísticas. De los 16 goles marcados por Messi en la temporada 2007-2008, pasó a anotar 38, 47, 53 y
73 tantos en los cuatro años de la era Guardiola, cifras de por sí estratosféricas que pueden indicar
además,en su progresión, que aún no ha tocado techo, como lo ilustran otros aspectosenque sus números
mejoran cada año. Ya no sólo hay que valorar su virtuosismo en el regate (sus cambios de ritmo rompen
a los rivales hasta el punto de que el técnico del Arsenal, Arsène Wenger, lo llamó "jugador de
PlayStation") y su extraordinaria precisión en los disparos y remates,sino también una visión del juego
que ha hecho de él un excelente pasador: de apenas tres o cuatro asistencias de gol en sus primeras
temporadas, pasó a 29 en la temporada 2011-2012.
A estas alturas ya eran muy pocos los expertos, entrenadores y colegas que no lo consideraban el mejor
jugador del mundo. La prensa deportiva y las federaciones internacionales lo reconocían como tal, y
además de los incontables títulos de su palmarés deportivo, el jugador acaparaba reconocimientos
individuales. Ya en 2009 la revista France Football le concedió el Balón de Oro y la FIFA lo designó
Mejor Jugador del Mundo. Ambos premios se unificaron un año después en el FIFA Balón de Oro, que
recayó sobre el argentino en sus tres primeras ediciones (2010, 2011 y 2012) y de nuevo en 2015.
El sueño del Mundial
Con la victoria de España en el Mundial de 2010, algunos de los compañeros de Messi en el F.C.
Barcelona habían logrado incluir en sus vitrinas todos los trofeos posibles; para el argentino, ésta seguía
siendo una asignatura pendiente. A pesar de su contribución, y excluyendo la medalla de oro en los
Juegos Olímpicos de Pekín de 2008, los resultados con la selección argentina fueron mediocres. En el
Mundial de Alemania (2006) no pasó de los cuartos del final.
Mayores expectativas despertó la participación en el Mundial de Sudáfrica (2010), con el astro argentino
en un momento pletórico de forma; pero el combinado albiceleste, bajo la controvertida dirección del
legendario Maradona como técnico, cayó estrepitosamente frente a Alemania, de nuevo en los cuartos
de final. El distinto rendimiento de Leo Messi con la selección y con el F. C. Barcelona hizo correr ríos
de tinta; alfinal, elfútbol es un juego de equipo en el que cualquier análisis debe tomar en consideración
muchos factores.
Los argentinos depositaron susesperanzasen el Mundial de Brasil de 2014, pero hay que decir que Messi
no llegaba a la cita mundialista en su mejor versión. Finalizada la era Guardiola, demostró seguir siendo
el de siempre en la temporada 2012-2013 con Tito Vilanova (el segundo de Guardiola) en el banquillo,
y el club se llevó la liga con récord de puntos; una lesión del crack argentino en el tramo decisivo de la
temporada impidió triunfos mayores. Pero a principios de la temporada siguiente, con su compatriota
Tata Martino como entrenador, una recaída en la lesión lo apartó dos meses de los terrenos de juego, y
aunque el Barça tuvo opciones hasta el final, la temporada 2013-2014 se cerró sin ningún título y con un
Messi menos inspirado que en las campañas precedentes.
Ciertamente, ni la selección argentina ni Leo Messi brillaron especialmente en el Mundial de Brasil de
2014. Si bien los albicelestes empezaron ganando todos los partidos, lo hicieron siempre por la mínima,
y fue necesario acudir a las tandas de penaltis para superar las semifinales. En la final contra Alemania,
que venía de humillar a los anfitriones por un inaudito 7 a 1, los argentinos supieron frenar el embate
germánico y dispusieron de oportunidades, pero acabaron perdiendo en la prórroga. Considerando el
juego exhibido, el subcampeonato fue un buen resultado; los argentinos no lo habían logrado desde los
tiempos de Maradona. Messifue además distinguido con el Balón de Oro del Mundial, pero el sueño de
conquistar el preciado título quedó otra vez pospuesto.