El documento describe la toxicidad de dos componentes principales de los gases de escape de los motores: el óxido de nitrógeno (NO), que constituye más del 90% de los óxidos de nitrógeno (NOx) y se oxida fácilmente a NO2, y los hidrocarburos, de los cuales hay más de 200 tipos diferentes en los gases de escape, divididos en alifáticos y aromáticos con anillos de benceno.