La oración es hablar con Dios y encontrarse con Aquel que nos ama. Existen diferentes tipos de oración como la de intercesión, acción de gracias y alabanza. Antes de orar, se debe buscar un momento sin apuros y un lugar sin ruidos, tener un corazón sencillo y humilde, y pedir al Espíritu Santo que guíe la oración. Durante la oración, se debe traer al presente cómo Dios nos enamoró y hablarle con sinceridad, no terminando hasta recibir una respuesta.