El documento explica los beneficios de practicar el daimoku o entonación de Nam-miojo-rengue-kio. Esta práctica budista proporciona infinitos beneficios espirituales, emocionales y materiales, permitiendo a los practicantes liberarse del sufrimiento y manifestar la iluminación. Se recomienda dedicar tiempo diario a la invocación para experimentar de manera gradual los efectos positivos en la vida y en la mente.
Dos meditaciones cuaresmales cercanas al corazón de la tradición vicenciana
Beneficios de la practica de nam miojo rengue kio
2. El significado de hacer daimoku:
Lograr una vida de suprema victoria mediante la práctica budista correcta
La práctica de entonar el daimoku de Nam-miojo-rengue-kio proporciona infinitos
beneficios, pues nos permite extraer de nuestra propia vida el poder ilimitado de
la Ley Mística, que es la Ley primordial del universo.
Nichiren Daishonin se puso de pie para concretar la felicidad de todo el género
humano mediante el poder benéfico sin límites de Nam-miojo-rengue-kio. La base
doctrinal de esta lucha se expresa de manera concisa y sencilla en el pasaje inicial
de El logro de la Budeidad en esta existencia:
Este pasaje condensa los profundos principios del budismo y la revolución
religiosa iniciada por el buda Sakyamuni y completada por Nichiren Daishonin
para que todos los seres humanos accedan a la iluminación. Cada palabra y cada
frase destila la sublime sabiduría del budismo.
Si desea liberarse de los sufrimientos del nacimiento y la muerte que ha venido
soportando desde el tiempo sin comienzo, y manifestar sin falta una iluminación
insuperable en esta existencia, debe percibir la verdad mística que existe en todos
los seres vivos en forma inherente y primigenia. Esta verdad es Miojo Rengue Kio.
Por lo tanto, recitar Miojo Rengue Kio le permitirá aprehender la verdad mística que
existe de manera innata en todas las formas de vida.
3. ¿Qué tiene que ver Nam-miojo-rengue-kio?
Enseguida surge la pregunta: ¿Cómo puede repercutir en tu vida positiva o
negativamente, una frase que apenas entiendes (si es que llegas a entenderla)? La
analogía que a menudo utilizan los budistas es la comparación entre Nam-miojo-
rengue-kio y la leche. Los bebés se alimentan de leche materna y, más adelante, de
leche de vaca, mucho antes de saber lo que significa la leche. Las ventajas
nutritivas son intrínsecas a la leche. Otro ejemplo: no necesitamos saber cómo
funciona un vehículo para utilizarlo e ir a algún sitio. Conviene tener nociones
sobre el funcionamiento de un vehículo, del mismo modo en que el estudio es una
parte importante para llevar a cabo una práctica budista completa. Pero es
importante darse cuenta de que la frase funciona ya sea que la comprendas o no,
creas o no que funciona. De hecho, muchas personas empiezan a invocar Nam-
miojo-rengue-kio con la firme intención de demostrale a los amigos que no
funciona, y siempre se sorprenden al ver que si funciona. Nam-miojo-rengue-kio
funciona con todo el mundo, viejos y jóvenes, ricos y pobres, escépticos y crédulos,
ignorantes y astutos, africanos y asiáticos, republicanos o demócratas o
Según el budismo de Nichiren, Nam-miojo-rengue-kio es a ley del universo, al
invocarla revelas la ley de tu propia vida, situándote en armonía o ritmo con el
universo. La palabra ley se emplea aquí en su sentido científico como la ley de la
gravedad. Como la gravedad es una ley de vida, nos afecta independientemente de
4. que entendamos o no su funcionamiento.
La puesta a prueba de tu iluminación
El promedio de las personas comunes, envueltas en las preocupaciones de la vida
diaria, no suelen aspirar al noble y feliz estado de la budeidad, o al menos no lo
hacen de un modo constante. Si tienes problemas para pagar el alquiler y
alimentar a tu familia, resulta bastante difícil deambular pensando en alcanzar la
iluminación. Así que no es descabellado invocar la Ley Mística (Nam-miojo-
rengue-kio) para las necesidades materiales y emocionantes básicas con el fin de
establecer una base firme desde la cual podemos aspirar a cosas más elevadas,
incluida la budeidad. La práctica del budismo de Nichiren ofrece en un principio
ventajas claras y prácticas, empezando por un espíritu positivo que surge de muy
adentro: el reto esperanzado en lugar de la derrota resignada. Esto, a su vez,
conduce a la sabiduría y a la acción constructiva para transformar cualquier
situación negativa a la que tengas que hacer frente.
Para empezar a practicar, trata de invocar Nam-miojo-rengue-kio durante, por
ejemplo, cinco minutos por la mañana y por la noche cada día. Reserva el tiempo
necesario y busca un lugar tranquilo donde no molestes a nadie. Puede ser un
dormitorio o un cuarto de estar. Siéntate recto y cómodo, respira tranquilamente
y, si es posible, mira una zona de pared vacía o un fondo neutro que no te distraiga.
Junta las manos a la altura del pecho, con los dedos apuntando hacia arriba y las
5. yemas a la altura de la barbilla aproximadamente. No te desanimes si te sientes un
poco aburrido. No hace falta pensar en nada en concreto ni pensar en el
significado de la frase. Trata de invocar rítmicamente. Si lo deseas, puedes invocar
mucho mas de cinco minutos. En momentos de crisis personal, cuando un familiar
o la persona amada tiene una grave enfermedad, los budistas a veces invocan
durante varias horas seguidas, parando sólo para beber un trago de agua o
atender otras necesidades. Puedes invocar la Ley Mística tan a menudo como
quieras y para contentar a tu corazón. Lo importante es ser constante. La
disciplina de invocar mañana y noche trae un ritmo nuevo y fresco a la existencia
que tiene, de por sí, un efecto saludable.
Aumentar la esperanza, mejorar una relación, estar más motivado… éstos son
algunos de los muchos efectos espirituales y emocionales beneficiosos que las
personas han notado al iniciar la práctica budista. Además, a los principiantes
suele motivarles invocar para alcanzar objetivos específicos y para centrarse en la
consecución de un objetivo claro y concreto. Por ejemplo si eres vendedor, puedes
orar para conseguir una comisión mayor, o superarla. Si eres músico puedes orar
para dominar una pieza especialmente difícil. Estas metas son muy específicas. De
un modo general es posible que desea escribir poemas u obras teatrales, pero te
hayas visto forzado a realizar un trabajo que no tenga nada que ver con tu sueño.
En ese caso, tu sueño puede ser dar pequeños pasos que te hagan avanzar
trabajando durante tu tiempo libre para alcanzar tu objetivo artístico.
Adquiriendo
6. ventajas tangibles mediante la invocación de la Ley Mística, el budista
principalmente descubrirá cómo cambia todo su marco de referencia. Los sueños
imposibles se convierten en objetivos muy reales. Conforme los principiantes van
adquiriendo experiencias, descubren que no sólo solucionan sus problemas
básicos, sino que además experimentan profundos cambios. Algunos de los
muchos resultados que cabe esperar cuando se sigue la practica budista son:
ONCE BENEFICIOS DE LA PRACTICA BUDISTA
1- Sabiduría: Es la capacidad para obtener el valor óptimo de los conocimientos
que se tienen.
2- Comprensión de la eternidad de la vida o la Ley de Causa y Efecto: cuando
practicamos y observamos como funciona la Ley de Causa y Efecto, empezamos a
ver la vida como una serie de causas y efectos que se extienden desde el pasado
hasta el futuro, en lugar de una existencia momento tras momento.
3- Persistencia y tolerancia: la capacidad para afrontar las circunstancias y
cultivar la paciencia y la resistencia para trabajar de un modo positivo con los
obstáculos que van apareciendo.
4- Serenidad: calma en medio de las turbulencias dinámicas de la vida.
5- Buenos alrededores: Quiere decir que las influencias o personas negativas se
evaporan de nuestras vidas.
6- Reconocimiento de la esencia o principio primordial: Que consiste en reconocer
la
7. verdad de todos los fenómenos de la vida, desarrollar una correcta visión de la
realidad y disminuir el miedo a la muerte.
7- Mejoramiento del temperamento
8- Misericordia: un mayor sentimiento de misericordia y la capacidad de empatía
con la gente.
9- Comprensión de la verdad: Este Budismo es una filosofía de la vida práctica,
concreta y clara y así nos convertimos en personas con mentes prácticas,
concretas y claras.
10- Fuerza de propósito: que es una condición de vida que no puede se derribada
ni siquiera por desafíos o dificultades aparentemente imposibles de supera.
11-Iluminación: la condición de felicidad absoluta donde cada instante es
apreciado y disfrutado.
Nota: El mas valioso cambio que se obtiene con esta práctica es el aumento del
control que desarrollamos sobre nuestro destino, volviéndonos dueños del mismo
y esto nos da la medida de cuanto disfrutamos de la vida.
Podemos vencer cualquier obstáculo con la fuerza vital y la sabiduría que
emergen dentro de nosotros al entonar:
NAM – MIOHO – RENGUE – KIO
Roma no se construyó en un día. Y, sencillamente, no es posible solucionar todos
los problemas el primer día que invocas. El karma acumulado durante toda una
vida (al menos), como el óxido, se debe cepillar cuidadosamente para eliminarlos,
día tras
8. día. Pero es raro que la gente que invoca la Ley Mística con cierta sinceridad y
constancia, no note ningún síntoma o beneficio: un gran avance en el trabajo, una
llamada puntual de un amigo que hace tiempo no sabes nada, ingreso de dinero
imprevisto, o sencillamente darte cuenta de que estas sonriendo más y que los
demás les responden de un modo distinto.
Esto no significa que debas tener la convicción de que ocurrirá desde el principio.
Es natural tener dudas. La seguridad en la práctica budista empieza cuando, por
primera vez, “lo pruebas para ver”. Esta se profundiza con el tiempo conforme se
va demostrando su efecto de un modo palpable. La duda es un elemento con el que
tienen que lidiar quienes practican. Tal como dijo el autor alemán Hermann Hesse:
“La fe y la duda se corresponden y complementan. No existe una verdadera fe si un
hay duda”.
Ahora bien, lo fundamental es utilizar las dudas como combustible para hallar las
respuestas a tus preguntas.
Cada vez que recibamos ventajas a partir de la invocación de la Ley Mística, nos
sentiremos animados para seguir.