Publicidad
(238)long es historia la crisis
(238)long es historia la crisis
(238)long es historia la crisis
(238)long es historia la crisis
Próximo SlideShare
(297)long¿que pasa con las bolsas?(297)long¿que pasa con las bolsas?
Cargando en ... 3
1 de 4
Publicidad

Más contenido relacionado

Publicidad
Publicidad

(238)long es historia la crisis

  1. 1 ¿ES HISTORIA LA CRISIS? Manfred Nolte En un encuentro organizado la semana pasada por el Consejo para la Competitividad, el ICEX y la CEOE, Mariano Rajoy ha lanzado un mensaje cargado de optimismo, asegurando que “la crisis es historia” y que estas serán “las primeras Navidades de la recuperación”. A renglón seguido, Soraya Sáenz de Santamaría, ha ratificado las palabras del Presidente del Gobierno, añadiendo que la economía española "está cambiando de ciclo". Casualmente estas declaraciones se han visto enturbiadas por la caída libre de la Bolsa que ha perdido un 6,9% hasta los 10.145 puntos en lo que constituye la peor semana del año para el selectivo español. Hay que remontarse al seis de enero de 2012 para encontrar un descenso más agudo, del 7,31%. Si tan solo hace 15 días se auguraba un rally espectacular de fin de año, ahora los pronósticos se han pasado al bando de los pesimistas. Aunque las Bolsas no son los mejores indicadores adelantados de la marcha de la economía, -el miedo a veces es demasiado libre-, el contrapunto que marca su volatilidad frente a las esperanzadas tesis de Rajoy abre el interrogante de si realmente la crisis es ya historia, si el cambio de ciclo es una evidencia y si estas navidades suponen una festiva estación de paso en la larga travesía de la recuperación económica. Las palabras de Rajoy exigen una matización categórica, aquella que distingue entre los conceptos económicos de recesión y de crisis. La recesión está atrás desde finales de 2013, porque para afirmar tal cosa basta con que se concatenen dos trimestres seguidos de PIB positivo. Afortunadamente son ya cinco los trimestres que el PIB cotiza en positivo y el cuarto y último de este año de 2014 promete hacerlo con un porcentaje significativo, tal vez del 0,6% o incluso del 0,7% intertrimestral. Que la economía española camina en la senda de la recuperación es también un
  2. hecho incuestionable lo que avalaría las palabras de la vicepresidenta en relación al cambio de ciclo. No hay prácticamente variable económica significativa que no muestre una evolución positiva sobre sus registros inmediatamente anteriores. El PIB crecerá un 1,4% en 2014, una décima porcentual más que en su consenso anterior, encabezando el ranking de crecimiento de la Eurozona. En el último año la economía española registra 296.792 parados menos y 402.209 afiliados más a la Seguridad Social. Los indicadores de ventas y salarios de las grandes empresas así como la Producción Industrial progresan en positivo. Las ventas en el mercado nacional crecen y las exportaciones mant ienen la tónica de revitalización de los últimos trimestres, apoyadas en la reducción del índice de precios a la exportación, que registra veinte caídas sucesivas y que remacha la competitividad exterior de nuestras empresas cimentada en una competitividad ganada con el gran esfuerzo nacional de la reducción de los costes laborales unitarios. España ha convertido en el transcurso de la crisis un enorme déficit de balanza de pagos en un superávit, lo que sienta las bases para un crecimiento más sostenido financiado en el ahorro interior. Adicionalmente, la depreciación del euro agrega un componente de competit ividad a las ventas realizadas a países situados fuera de la Eurozona. Sin extendernos en alambicados pormenores adicionales es necesario citar inexcusablemente dos datos relevantes más, de los que España es beneficiaria: la rentabilidad de nuestro bono a 10 años cotizando al filo del 2% y el desplome del crudo en los mercados internacionales. El primero de ellos supone un ahorro presupuestario de miles de millones en el servicio de la deuda y el segundo puede estimarse en un efecto positivo sobre nuestro PIB de hasta el 0,5% anual. No se olvide que España importa un 73% de la energía que consume, generando un déficit energético anual de 50.000 millones de euros. ¿Enfilamos el cambio de ciclo? La respuesta es si, pero con condiciones. No puede negarse que los vientos favorables que nos empujan son frágiles y pueden, dadas las circunstancias, darse la vuelta. Existe, sobre todas las cosas, el riesgo de una imprudente complacencia que invite a levantar el pie del pedal que debe seguir alimentando las necesarias reformas que apuntalen y mejoren la competitividad de la economía española. Y algún tema más que cerrará esta columna. Para lo cual, y antes de hacerlo, habremos de contestar a la segunda pregunta:¿Es historia la crisis? Resulta evidente que la respuesta es negativa. La superación de la crisis se entiende como aquel momento, en que, tras la pertinente senda de recuperación vuelven a alcanzarse los niveles básicos de actividad y bienestar previos al desencadenamiento de la crisis. Y en esto hay consenso: el nivel de PIB de 2008 podrá recuperarse solamente a fínales de 2017. Más pesimista es el marco de inserción laboral: 2025 es el año estimado para volver a los niveles de empleo previos a la gran recesión. O sea, la crisis en modo alguno es historia, aunque el rumbo elegido para superarla sea el adecuado. Pero es obligado aludir, en una materia tan crit ica y delicada a la vulnerabilidad de la singladura, a los peligros que acechan en esta larga travesía de la recuperación. Cabe citar el estancamiento de los países centrales de Europa, nuestros principales clientes, o el peligro de un retroceso deflacionista, hoy todavía improbable y otros muchos más. Pero en la hora actual, sobre cualquier 2
  3. otra amenaza, los problemas provienen de unos fantasmas económicos disfrazados de fantasmas polít icos. En las aulas advertimos reiteradamente de la colosal influencia de esa variable que se llama ‘expect ativas’, aplicable tanto a consumidores como a inversionistas. De los múltiples factores que afectan a los índices económicos los más sensibles son el nivel de confianza o su inversa el nivel de la incertidumbre. El nivel de nuestra corrupción, los peligros de la desintegración territorial y el discurso radical de nuevas formaciones que irrumpen en el escenario electoral van a condicionar el transcurso de la recuperación y su posible vuelta atrás. En Grecia se enciende la primera mecha. Es la política la que va a marcar la nueva prima de riesgo y el desenlace del proceso en curso. Créanme que nos están observando atentamente y algunos ya mueven ficha. 3 15.12.14. Niveles del PIB estimados en 2017 para los países que se señalan, sobre la base 2008=100. SIGUE>>>
  4. Plazo de recuperación del empleo en distintas crisis en relación al año de inicio de la crisis= 100. 4 Fuente: BBVA RESEARCH
Publicidad