Se ha radicado en el Senado una medida para prohibir terapias que afirmen a nuestros menores con su realidad biológica en cuanto a su identidad sexual. Tal prohibición irrespeta la formación psico-neurológica del niño y el adolescente. El proyecto además no cuenta con base científica y viola la Patria Potestad de los padres, la integridad de los profesionales y la libertad religiosa del individuo, la familia y los ministros.