2. La leche materna es el mejor alimento
que puede darse en los primeros 6
meses de vida. Es rica en nutrientes
importantes para el crecimiento,
desarrollo adecuado, protección
contra enfermedades y brindar
beneficios a la salud materna. Dar de
mamar brinda beneficios tanto al niño
como a la madre.
3. La lactancia materna se inicia tras el nacimiento del bebé. El calostro es la primera leche de
secreción láctea amarillenta, espesa, producida en poca cantidad dentro de los 5 primeros
días después del parto y es la más apropiada para la y el recién nacido porque:
Protege al bebé contra las infecciones porque es rico en proteínas, vitamina A y
sustancias inmunológicas o defensas.
Protege su mucosa intestinal impidiendo la formación de gérmenes patógenos
Tiene un efecto laxante, ayudando a eliminar las deposiciones oscuras (meconio) que
tiene el bebé los primeros días de vida.
Disminuye la presencia de coloración amarillenta de la piel (ictericia)
4. La lactancia materna protege contra la leucemia en la niñez:
Amamantar por seis meses o más se asocia con una reducción del
19% en el riesgo de leucemia en la niñez, comparado con un
período más corto o con no amamantar.
La lactancia materna protege contra el síndrome de muerte
súbita infantil
Los bebés que son amamantados tienen un 60% menos de riesgo
de morir por síndrome de muerte súbita infantil, comparados
con los que no son amamantados.
La lactancia materna aumenta la inteligencia de los bebés:
Los adultos que fueron amamantados cuando niños tienen 3,4
puntos más en los indicadores de desarrollo cognitivo. Un
aumento en el desarrollo cognitivo resulta en más años de
escolaridad.
5. IMPORTANCIA DEL CALOSTRO
El “calostro” es la primera leche que recibe el niño posterior al nacimiento, es
un líquido de color amarillento, espeso, rico en proteínas, vitamina A y
sustancias inmunológicas que protegen al niño contra las infecciones,
comprobando que el calostro es la primera inmunización natural que recibe el
niño. Además:
Protege la mucosa intestinal, impidiendo la implantación de gérmenes, protege
contra la neumonía, la diarrea y otras enfermedades. Esta protección se
prolonga por el tiempo en que el niño recibe leche materna.
6. FRECUENCIA DE LA LACTANCIA MATERNA
El objetivo de continuar la lactancia materna a una niña o niño enfermo, es
evitar un mayor deterioro de su estado de salud y nutrición. Las niñas o
niños que reciben lactancia materna exclusiva son los que presentan
menor riesgo a hacer complicaciones con las enfermedades respiratorias.
También se ha encontrado, que una constante lactancia materna está
asociada con una reducción en el riesgo de otitis media aguda,
gastroenteritis no específica, graves infecciones del tracto respiratorio
inferior, dermatitis atópica, asma (niños pequeños), obesidad, diabetes de
tipo 1 y 2, leucemia infantil, síndrome de muerte súbita infantil (SIDS), y la
enterocolitis necrotizante.
7. PROBLEMAS QUE PUEDEN SURGIR
Y CÓMO SOLUCIONARLOS
• Pechos congestionados (plétora
o ingurgitación): tiene lugar
durante las siguientes horas a la
subida de leche, entre el 3º y 5º
día. Las mamas se hinchan, se
ponen duras y los pezones se
aplanan. Se previene poniendo el
bebé al pecho con mucha
frecuencia desde el principio,
para que lo vacíe bien.
• Pezones dolorosos y grietas: las
grietas son fisuras que pueden
aparecer en el pezón o areola.
Aunque son dolorosas su
aparición no debe suponer un
motivo de abandono de la
lactancia. Se evitan y curan con
una correcta técnica de postura y
agarre. La boca del bebé tiene
que abarcar el pezón y parte de
la areola (con un gran bocado de
pecho desde abajo). Mantén
seco el pezón entre tomas.
• Obstrucción de conducto: se
nota como un bulto hinchado,
caliente y doloroso en uno de
los pechos. Suele estar causado
por un sujetador apretado, por
dormir con sujetador o por
saltarse tomas. Se soluciona
con masaje (para extraer el
“tapón”, también puedes
“peinar” la zona con un peine
de púas estrechas), calor
húmedo antes de la toma y frío
seco después.
8. ESTIMULACIÓN DEL PECHO
• Masajea el pecho oprimiéndolo firmemente hacia la caja torácica (costillas),
usando un movimiento circular con los dedos en un mismo punto, sin
deslizar los dedos sobre la piel. Después de unos segundos cambia hacia otra
zona del pecho.
• Frota el pecho cuidadosamente desde la parte superior hacia el pezón, de
modo que produzca un cosquilleo. Continúa este movimiento desde la
periferia del pecho hacia el pezón, por todo alrededor.
• Sacude ambos pechos suavemente inclinándote hacia delante.
9. TECNICAS CORRECTAS DE AMAMANTAMIENTO
Posición acostada:
La madre y el bebé deben ubicarse recostados
de lado, uno frente al otro o la niña o niño debe
estar acostado encima de la madre.
Debe flexionar la pierna que esté arriba y, para
mayor comodidad de la madre puede ayudarse
con una almohada o frazada para sostener a la
niña o niño
Debe colocar los dedos debajo del seno y
levantarlo hacia arriba, luego el bebé debe
acercarse hacia la madre para que inicie a
mamar.
Posición de bailarina:
Coloque su mano apoyando la
mama y a la vez sosteniendo el
mentón y la mandíbula del
bebé mientras da de mamar.
Esta es una buena posición
para la niña o niño con
hipotonía muscular y/o
Síndrome de Down.
Posición de caballito:
Se coloca a la niña o niño frente a
la madre montado en su pierna,
con una mano coger la cabecita
del bebé y con la otra mano coger
el cuerpo, esta es una buena
posición para dar de mamar a la
niña o niño que vomitan mucho
cada vez que maman o con
paladar hendido.