1. La imagen fotográfica
Las cámaras digitales son el presente y futuro de la fotografía. Actualmente la
denominación de cámara digital, ya gran parte de los formatos y tipos de cámaras vistos
anteriormente (SLR, Compactas, medio formato, estudio) cuentan con versiones
digitales similares. En estas cámaras la película ha sido sustituida por un sensor digital
de imagen que procesa la información y la almacena en tarjetas de memoria digitales.
Tienen diferentes sistemas de visor óptico o electrónico, y además una pantalla LCD.
Partes de la cámara
Para estudiar el funcionamiento básico de una cámara, tomaremos como referencia el
sistema réflex, por su versatilidad y prestaciones. En este tipo de cámara, la imagen
captada por las lentes del objetivo, es reflejada por un espejo interno. La imagen
especular está en posición invertida y es dirigida hacia un pentaprisma, en donde es
rebotada varias veces, para proporcionar al visor una imagen en su posición y encuadre
real.
Cuando accionamos el disparador, el mecanismo de la cámara levanta el espejo y abre
el obturador para que la película se exponga durante la fracción de tiempo determinada
en cada caso. Después de la exposición, el obturador se cierra y el espejo vuelve a su
posición original. En estas cámaras réflex el encuadre que muestra el visor es el mismo
que captará la película, y se evita el error de paralelaje de otras, en donde el visor capta
una imagen ligeramente distinta a la expuesta.
En primer lugar nos encontramos con el cuerpo de la cámara, que básicamente es una
caja hermética a la luz y que contiene los elementos mecánicos o electrónicos que
permiten la exposición de la película. El disparador activa los mecanismos de
exposición y en algunas cámaras permite el control de otras funciones
complementarias.
Si desmontamos el objetivo de la cámara, podemos observar el espejo dispuesto delante
del obturador y que se encarga de mandar la imagen captada por el objetivo al
pentaprisma localizado por encima de él. Este es el sistema que garantiza que la imagen
que encuadramos en el visor, sea la misma que se expone en la película.
2. Montado sobre el cuerpo de la cámara nos encontramos con el objetivo, una de las
partes esenciales en la realización fotográfica. En algunas cámaras este objetivo es un
elemento fijo, mientras que en otras es intercambiable. El objetivo refracta dirige y
enfoca los haces luminosos de la imagen sobre la película. En el interior se encuentra el
diafragma, un mecanismo que regula la cantidad de luz que llegará a la película.
En la parte posterior de la cámara localizamos el visor. Por medio del visor en primer
lugar, seleccionamos el encuadre de la fotografía que queremos realizar. Igualmente en
gran parte de las cámaras visualizamos la pantalla que nos permite el enfoque de la
imagen y además nos proporciona determinada información del estado y funciones de la
cámara, como velocidad de obturación y diafragma seleccionado, distancia de enfoque,
así como de otros modos de operación.
El objetivo
El objetivo es el elemento encargado de refractar, dirigir y enfocar los haces luminosos
de la imagen sobre la película y en la cámaras digitales sobre el sensor digital de
imagen. Se puede decir que el objetivo es la parte más importante y delicada de una
cámara, ya que su calidad y características determinan los resultados finales de una
fotografía. En algunas cámaras el objetivo es un elemento fijo, mientras que en otras son
intercambiables, contando con una amplia gama de lentes.
Fundamentos ópticos: los objetivos son un conjunto de lentes, desarrollados en torno a
una serie de conceptos ópticos que regulan su funcionamiento… El punto focal es el
punto donde corvergen los rayos de luz, cuando el objetivo se enfoca al infinito; este
punto se encuentra en el plano focal, o el plano donde se dispone la película o el sensor
digital.
La distancia focal se define como la distancia existente entre el centro óptico de la
lente y el punto focal. Esta distancia se mide en milímetros y es uno de los conceptos
primordiales que diferencian unos objetivos de otros. La distancia focal determina el
tamaño de la imagen captada por la película y el ángulo de cobertura, que se va a
3. recoger de la escena fotografiada. A medida que aumenta la distancia focal se
incrementa la capacidad de aumento sobre la imagen, y se reduce el ángulo de visión.
De igual manera la longitud focal también afecta a la perspectiva, los objetivos de
menor distancia focal tienden a potenciar la perspectiva, mientras que los objetivos de
mayor longitud focal, aplastan o comprimen el espacio y la perspectiva.
Tipos de objetivos
Existe una amplia gama de objetivos, con las distancias focales idóneas para que el
usuario pueda abordar diferentes temas. Entre el ojo de pez y el más potente
ultrateleobjetivo..
OBJETIVOS NORMALES: Con una distancia focal de 50 mm, su ángulo de visión
es similar al del ojo humano, y por este motivo es el objetivo estándar que viene
acompañando a muchas cámaras. Por la visión natural que proporciona y su
luminosidad, es un objetivo versátil indicado para la realización de los temas más
comunes, que nos podamos encontrar.
TELEOBJETIVO CORTO: Los teleobjetivos tienen un ángulo de visión reducido y
la capacidad de acercar la imagen. Cuanto mayor es su distancia focal, mayor es el nivel
de acercamiento de la imagen, y menor es su ángulo visual. Los teleobjetivos cortos
tienen una distancia focal comprendida entre los 85 y 135 mm. Este tipo de lentes están
indicadas para tomar primeros planos en la fotografía de retratos y también para captar
motivos generales que requieran cierto nivel de ampliación.
OBJETIVOS ZOOM: Este tipo de objetivos tienen la longitud focal variable, y
actualmente se fabrican en gran número de amplitudes focales, de tal manera que en un
mismo objetivo podemos tener las prestaciones de un gran angular y las de un
teleobjetivo corto. Si bien la calidad de imagen es inferior que los objetivos de focal
fija, cada vez se diseñan objetivos zoom que ofrecen más nitidez de imagen.
Normalmente suelen ser objetivos con poca luminosidad y voluminosos.
OBJETIVOS MACRO: Este grupo de objetivos están diseñados para la fotografía de
acercamiento, consiguiendo distancias de enfoque muy cortas respecto a otras lentes. De
igual manera trabajan con diafragmas muy pequeños para garantizar una gran
profundidad de campo, en esas distancias. Existen objetivos macro de diferentes
longitudes focales, comprendidas entre los 50 y 200 mm, indicados para dar los mejores
resultados en macrofotografía.
El diafragma es un mecanismo situado en el interior del objetivo, formado por un
conjunto de laminillas, que regulan selectivamante la cantidad de luz que pasa hacia la
película o el sensor digital. El diámetro de abertura del diafragma, se puede controlar
manualmente en el anillo del objetivo o bien electrónicamente en algunas cámaras. Las
aberturas más grandes dejan pasar más cantidad de luz que las pequeñas, y su tamaño
está determinado por una escala de valores f.
4. Cada número f es el resultado de dividir la longitud focal del objetivo, entre el diametro
real de abertura. Como son el resultado de una fracción, los números f más elevados
corresponden a aberturas más pequeñas, así una abertura f11 es menor que una f2,8. En
una escala f1,4; f2; f2,8; f4; f5,6, f8, f11; f16, f22 cada paso corresponde a un punto de
diafragma y cada valor de diafragma deja pasar el doble de luz que el siguiente, de este
modo un diafragma f16 deja pasar la mitad de luz que f11.
La abertura de diafragma además de regular la cantidad de luz, es uno de los factores
que determina lo que se llama “profundidad de campo”. Se denomina profundidad de
campo a la zona que permanece nítida en la imagen, es decir la parte que se sitúa por
delante y por detrás del plano o motivo enfocado y que aparece igualmente nítida. La
profundidad de campo es uno de los controles creativos y técnicos que se tienen sobre la
imagen fotografiada, por el cual seleccionamos que elementos queremos destacar o
abarcar por medio del enfoque. Esta profundidad de campo viene condicionada por
diversos factores. En primer lugar por el número f o abertura de diafragma utilizado.
Cuanto mayor es el número f, es decir cuanto menor es el tamaño de la abertura de
diafragma utilizado, mayor es la profundidad de campo. En una cámara con una
distancia focal y distancia de enfoque determinada, un diafragma f22 proporcionará una
fotografía con mayor profundidad de campo, que otra realizada a f2. Otro factor que
determina la profundidad de campo, es la distancia de enfoque del motivo. Cuanto
mayor es la distancia de enfoque mayor es la profundidad del espacio enfocado. De esta
manera en una cámara con un objetivo y diafragma determinado, si fotografiamos a un
motivo en dos distancias de enfoque diferentes, el motivo registrado y enfocado a
mayor distancia tendrá más profundidad de campo, que otro enfocado más cercano.Un
tercer factor que afecta a la profundidad de campo es la distancia focal del objetivo. A
medida que a aumenta la longitud focal del objetivo utilizado por la cámara, disminuye
la profundidad de campo. Si realizamos una fotografía con dos objetivos diferentes, con
una misma distancia de enfoque e igual abertura de diafragma, la fotografía realizada
con la focal más corta, tendrá mayor profundidad de campo, que la realizada con un
objetivo con mayor distancia focal.
El obturador es el mecanismo que determina el tiempo que la película o el sensor,
permanece expuesto. Generalmente está formado por unas cortinillas que se abren,
desplazándose unas sobre las otras, y manteniéndose abiertas durante la fracción de
tiempo requerido. Estás fracciones de tiempo están ordenadas en una escala numérica,
que forman las distintas velocidades de obturación. En esta escala progresiva, cada
número representa la mitad de tiempo de exposición que el anterior, así a 1/125 el
obturador permanece abierto el doble de tiempo que a 1/250. Como el obturador regula
el tiempo de exposición, si fotografiamos a un motivo que esté en movimiento, con una
velocidad de obturación baja, éste tendrá el tiempo suficiente, para que su imagen deje
una estela de su movimiento sobre el sensor o sobre la película. Sin embargo si
utilizamos una velocidad de obturación mucho más rápida, conseguiremos congelar su
desplazamiento. Este control del movimiento, es un recurso utilizado tanto cuando
queremos congelar una acción, como para crear el efecto contrario de borrosidad, que
represente un valor expresivo de movimiento. Cuando queremos controlar el
movimiento para congelar una acción, hay que tener en cuenta una serie de factores, la
velocidad de desplazamiento del motivo fotografiado, la distancia a la que se encuentra
y la dirección del desplazamiento ante la cámara. También tenemos que tener presente,
que a velocidades lentas, realizando la fotografía con la cámara en la mano, las
imágenes pueden quedar borrosas.
5. La composición: las formas de encuadrar una imagen son infinitas, pero no todos los
encuadres pueden recoger el sentido de lo que queremos captar. La composición
organiza los elementos de una imagen para que se ajusten a la intencionalidad
semántica, plástica o estética que queremos registrar. Existen una serie de principios o
reglas que pueden servirnos de ayuda, a la hora de componer una fotografía.
REGLA DE LOS TERCIOS: nos dice que si dividimos el espacio en tres partes iguales
horizontalmente y verticalmente, en los puntos de intersección de las líneas imaginarias
que dividen las partes, se crea unas zonas de especial fuerza, donde es aconsejable situar
el motivo que se quiere fotografiar.
REGLA DEL HORIZONTE: es muy común a la hora de hacer una fotografía, que el
motivo principal aparezca excesivamente centrado. Una forma de crear una
composición más satisfactoria, cuando estamos realizando una fotografía de paisaje, es
dividir mentalmente la imagen en tres partes iguales, y colocar la línea del horizonte en
el tercio superior o inferior.
REGLA DE LA MIRADA: otra consideración es cuando fotografiamos personajes que
se desplazan o miran hacia un determinado lado de la escena. Siempre es aconsejable
dejar bastante aire por delante del personaje, por la zona hacia donde se desplaza o mira.