Este documento ofrece instrucciones para la limpieza adecuada de los genitales en niños recién nacidos. Explica que al nacer, el prepucio del pene está adherido y no se puede retraer, por lo que basta limpiar suavemente con toallitas húmedas. También indica que los genitales pueden verse enrojecidos o hinchados al principio, pero se normalizarán con el tiempo. Finalmente, enfatiza la importancia de mantener la zona limpia y seca para evitar irritaciones, y consultar al pediatra sobre
2. Higiene genital en los niños
Como mujeres, las mamás suelen estar
más familiarizadas con la limpieza de la
vagina en niñas, mientras que hablar de
higiene genital en los niños les
despierta muchas inquietudes.
No te preocupes, ¡sigue leyendo y conoce
cómo efectuar adecuada limpieza
de genitales en bebés varones!
3. ¿Cómo limpiar los
genitales de mi hijo?
El cambio de pañal está
íntimamente ligado a la
salud infantil, por lo que
aprender a realizarlo es
medida inteligente que
va más allá de solo quitar
uno y colocar otro limpio
de inmediato.
Para que resulte tarea
fácil y completa, toma en
cuenta la siguiente guía:
4. Preparativos
1. Manos limpias. Lávate las
manos con agua y jabón.
2. Equipo indispensable. Antes
de comenzar, asegúrate de
tener a la mano todo lo
necesario: pañales limpios,
toallitas húmedas, talco,
pomada contra rozaduras y
una muda de ropa, etc.
5. Piel limpia
3. ¿Cómo asear la zona genital del bebé varón?
Los niños suelen orinar al momento en que quitas
el pañal, así que espera unos segundos más antes
de retirarlo. Luego, abre el pañal, arrastra las
heces con toallitas y tíralas junto con el pañal.
Pasa una toallita limpia o esponja por el abdomen,
ombligo, pliegues, muslos, testículos y
debajo del pene, para asegurarte de
que no quedan restos de deposiciones.
6. Limpia con suavidad
4. Delicadeza, clave en la limpieza del pene en
niños. Al nacer, el pene es anatómicamente
inmaduro, es decir, el prepucio está adherido a la
cabeza del pene (glande) y no puede retraerse
como sucederá posteriormente, de manera que al
llevar a cabo la higiene genital en niños basta
limpiar con suavidad el pene ya sea con toallitas
húmedas o simplemente agua tibia. Conforme el
prepucio se separe, conviene deslizarlo
suavemente durante cada cambio de pañal y,
especialmente, al bañarlo.
7. Los genitales cambian...
5. No te alarmes si descubres que los genitales de tu
hijo se ven enrojecidos. Durante los primeros días de
vida, el escroto puede estar terso y ser apenas lo
suficientemente grande para contener los testículos,
o parecer voluminoso y arrugado, por lo que los
testículos pueden salir y entrar al escroto. Poco a
poco la zona genital del bebé adquirirá un tono de
piel uniforme.
8. Crema o pomada
6. Protección de la piel.
Cuando toda la zona esté
limpia y seca, aplica crema
o pomada protectora en
forma generosa sobre el
pene y alrededor de los
testículos, ano y nalgas.
9. Observa cómo orina
7. Revisión. Durante la limpieza del pene en niños,
de vez en cuando conviene observar cómo orina,
esto con el propósito de revisar que la abertura del
prepucio es lo suficientemente grande para no
causar problemas, es decir, si sólo deja pasar
un hilito de líquido o el bebé se nota molesto durante
la micción, debes consultar al pediatra.
10. Limpio el mayor tiempo
posible
8. Evita irritación. La piel de tu bebé es mucho más
delgada que la de un niño mayor, por lo que la
zona genital debe mantenerse libre de
deposiciones el mayor tiempo posible, de lo
contrario, el continuo contacto con la orina
y/o las heces puede irritarla más rápido
de lo que imaginas.
11. ¡Al aire libre!
9. Un rato sin pañal.
Ocasionalmente, al quitar
el pañal sucio, permite que
la piel de tu pequeño se
quede un rato al aire libre
para evitar la humedad que
favorece infecciones
micóticas.
12. Importancia del aseo de
genitales externos en bebés
10. Fórmulas adecuadas. Antes de utilizar cualquier
producto para la piel de tu bebé, consulta al
pediatra, a fin de tener completa seguridad de que
la fórmula elegida beneficiará la salud del pequeño.
La higiene infantil es vital para su sano desarrollo,
pero requiere manejo distinto para garantizarlo, de ahí
la importancia de efectuar adecuado aseo de
genitales externos en bebés.