Tirso de Molina fue un importante dramaturgo español del Siglo de Oro que aunque no estableció una nueva fórmula teatral como Lope de Vega ni alcanzó la profundidad de Calderón de la Barca, se mantuvo fiel al estilo de Lope de Vega en su producción dramática con un análisis más profundo de la psicología de los protagonistas. Escribió unas trescientas comedias que publicó en cinco partes y varios autos sacramentales, comedias bíblicas y hagiogr
1. TIRSO DE MOLINA
Dramaturgo español. Aunque no estableció una innovadora fórmula
teatral como Lope de Vega ni alcanzó la profundidad y perfección de
Calderón de la Barca, Tirso de Molina figura entre los grandes autores de la
comedia española del Siglo de Oro. En su producción dramática se mantuvo
fiel a Lope de Vega, del que sólo se diferencia por el análisis más profundo
de la psicología de sus protagonistas, en especial en los tipos femeninos,
cuya variedad y matización era poco usual en el teatro español de la época.
Tirso de Molina fue un autor sumamente fecundo. Dejó unas
trescientas comedias, que se imprimieron en cinco partes: Primera parte
(Sevilla, 1627); Segunda parte (Madrid, 1635); Tercera parte (Tortosa,
1634); Cuarta parte (Madrid, 1635), y Quinta parte (Madrid, 1636). Como
dramaturgo religioso, escribió varios autos sacramentales (El colmenero
divino, No le arriendo la ganancia, El laberinto de Creta), comedias bíblicas
(La mujer que manda en casa, sobre la historia de Acab y Jezabel; La mejor
espigadera, sobre Ruth; La vida y muerte de Herodes; La venganza de
Tamar) y comedias hagiográficas (la trilogía de La Santa Juana, La ninfa del
cielo, La dama del Olivar).
Extrajo de las historias y leyendas nacionales argumentos de
numerosas comedias: la trilogía de los Pizarro (Todo es dar en una cosa,
Amazonas en las Indias y La lealtad contra la envidia); la historia de Martín
Peláez (El cobarde más valiente), o la de María de Molina (La prudencia en
la mujer). Entre las comedias de carácter destacan Marta la piadosa y El
vergonzoso en palacio. Al grupo de comedias de intriga pertenecen La
villana de Vallecas, Desde Toledo a Madrid, Por el sótano y el torno y Don
Gil de las calzas verdes.
Se le atribuyen, aunque no se incluyeron en las Partes de sus
comedias, dos obras de contenido filosófico de gran importancia: El
burlador de Sevilla y convidado de piedra, que introdujo el tema del
libertino don Juan Tenorio en la literatura universal, y El condenado por
desconfiado, en la que trató el tema de la arrogancia del hombre frente a la
gracia divina y la importancia del libre albedrío. Su obra en prosa incluye
una Historia de la orden de la Merced y dos obras misceláneas: Cigarrales
de Toledo (1621) y Deleitar aprovechando (1635).