Este poema expresa la devoción del autor hacia Dios y su deseo de entregarle su vida y ser. El autor pide a Dios que lo purifique con su fuego, lo llene de su presencia y lo guíe para siempre hablar y vivir de acuerdo a su voluntad. El poema termina repitiendo la petición de que Dios lo purifique y llene nuevamente.