PONENCIA SOBRE LA JUSTICIA
Aula de Formación Permanente Cáritas Granada
15 de enero de 2014 • Quico Prat
Esquema de los contenidos: ¿Qué es la justicia?, La justicia a la luz del Evangelio, Injusticia y exclusión, Y nosotros, ¿qué podemos hacer? Algunas propuestas, ¿Justicia o caridad?, Un mensaje final.
2. Esquema de la charla
1. ¿Qué es la justicia?
a. La virtud de la justicia
b. Tipos de justicia
2. La justicia a la luz del Evangelioy la DSI
3. Injusticia y exclusión
4. ¿Justicia o caridad?
2
3. 5. Y nosotros, ¿qué podemos hacer? Algunas
propuestas
a. Desmontar intereses e ideologías
b.Combatir la ignorancia
c. Testimoniar otro tipo de “crecimiento”
d.Apostar por lo no rentable
e. La revolución de la ternura
f. Tejer redes
g. Fomentar la participación
6. Un mensaje final
5. ¿Qué es la justicia?
• La JUSTICIA es un concepto.
• Lo que se debido a las personas, lo que les
corresponde.
• Dar a cada uno lo suyo.
• Tratar casos iguales se deben tratar
igualmente, y casos desiguales, se deben
tratar desigualmente (Aristóteles)
• FORMAL.. Pero, ¿cuál es su contenido?
6. UNA VIRTUD: PLATÓN
•
•
•
•
Justicia (virtud fundante/preservante) Prudencia (calculativo) - véase el todo
Fortaleza (enérgico) - presérvase el todo
Templanza (apetitivo) - sírvase el todo
• JUSTICIA virtud fundante y preservante: sólo
cuando alguien comprenda la justicia puede
conseguir las otras tres virtudes
7. VIRTUD: J.L. LÓPEZ ARANGUREN
“el tema ético de nuestro tiempo es la
pregunta de si puede ser considerado como
verdaderamente bueno el hombre que
acepta, cuando menos con su pasividad y con
su silencio, una situación social injusta”
8. Diversas formulaciones
•
•
•
•
•
•
A cada persona una porción igual
A cada persona según sus necesidades
A cada persona según sus esfuerzos
A cada persona según su aportación
A cada persona según su mérito
A cada persona…
9. Tipos de justicia
• JUSTICIA RETRIBUTIVA: es la proporcionalidad
de los resultados y las consecuencias
(castigos, beneficios)
• JUSTICIA PROCEDIMENTAL: Procesos ante la
ley
• JUSTICIA CONMUTATIVA: intercambio entre
valores iguales
10. Tipos de justicia
• JUSTICIA DISTRIBUTIVA: lo correcto con
respecto a la asignación de bienes en una
sociedad.
• Principios normativos para guiar la
distribución de beneficios y las cargas de la
actividad económica y social
11. ¿QUÉ ES LO JUSTO?
•
•
•
•
Depende de cada caso…
Tiene que haber un criterio igual para todos
Depende de las consecuencias..
Rawls 1971 Teoría de la Justicia
14. ¿QUÉ ES LO JUSTO?
• “La idea directriz es que los principios de justicia para la
estructura básica de las sociedad son el objeto de un
acuerdo original
• Son los principios que las personas
libres y
racionales interesadas en promover sus propios
intereses aceptarían en una posición inicial de igualdad
como definitorios de los términos fundamentales de su
asociación”
• Se justifica la diferencia si son las menores
humanamente posibles y las que más favorecen al
grupo menos favorecido
15.
16.
17.
18. John Rawls
• Todo ello nos ayudó a sentar bases del
diálogo y la cultura del consenso.
• También, en condiciones formales de
igualdad, los pobres se convierten en sujetos.
copartícipes de la construcción social en
condiciones de igualdad con el resto de los
ciudadanos
20. Ana, la primera niña, alega:
- Debería ser para mí, pues soy la única de los
tres que sabe tocar la flauta.
El segundo niño, Roberto, dice:
- Dádmela a mí, pues soy el más pobre, no
tengo nada, nada.
Y, finalmente, sostiene Carla:
- Me corresponde a mí, pues la hice yo
21. Ana, la primera niña, alega:
- Debería ser para mí, pues soy la única de los
tres que sabe tocar la flauta.
Principio de la utilidad o eficiencia
¿Quién puede producir el “bien” de la flauta (música)?
El segundo niño, Roberto, dice:
- Dádmela a mí, pues soy el más pobre, no
tengo nada, nada.
Principio de la igualdad económica
Más oportunidades para los más desfavorecidos
Y, finalmente, sostiene Carla:
- Me corresponde a mí, pues la hice yo
Principio de la retribución del trabajo
La tierra para quien la trabaja
22. Amartya Sen
• Rawls: justicia… abstracta, ideal.
• Partir de la situación real: injusticia
• Razonar: pasar “de la observación de una tragedia
al diagnóstico de una injusticia”
• Rasgo central de la vida humana: las capacidades.
• Justicia = “igualdad para desarrollar las
capacidades” capacidades de las que cada
persona dispondría para poder convertir sus
derechos en libertades reales. (ej. poder votar)
29. ¿Por qué nos acercamos a la in-justicia?
• Los creyentes nos acercamos a la realidad porque
queremos conocer a Dios
• no podemos hacer experiencia del Dios cristiano fuera
de donde se ha manifestado.
• La vida, la historia, la suerte de los más vulnerables se
constituyen en lugares teológicos de primer orden y
reveladores del misterio de Dios
• “Conocer a Dios es practicar la Justicia” (Jer 22,16);
completándose con la primera carta de Juan: “quien
no ama a su hermano, a quien ve, no puede amar a
Dios a quien no ve” (1Jn 4,20)
30. ¿Por qué nos acercamos a la injusticia?
• El análisis de la realidad injusta, ¿Qué
consecuencias tiene en mí?
• ¿Qué consecuencias tiene o debería tener en
la Iglesia?
• ¿Qué consecuencias tiene o debería tener en
concreto en Cáritas?
31. ¿Por qué nos acercamos a la injusticia?
• ¿Cuál es nuestro sitio en el mundo?
A los pies de todas las cruces y fijos los ojos
en el Señor, al lado de los que sufren.
• “Hacer por” los pobres,
“vivir con” los pobres”
34. ECONOMÍA DE LA EXCLUSIÓN
“hoy tenemos que decir «no a una economía de la
exclusión y la inequidad». Esa economía mata. No
puede ser que no sea noticia que muere de frío un
anciano en situación de calle y que sí lo sea una caída
de dos puntos en la bolsa. Eso es exclusión. No se
puede tolerar más que se tire comida cuando hay
gente que pasa hambre. Eso es inequidad. Hoy todo
entra dentro del juego de la competitividad y de la ley
del más fuerte, donde el poderoso se come al más
débil” (53)
35. NO A UNA ECONOMÍA DE LA EXCLUSIÓN
De la explotación a la irrelevancia:
superfluos, invisbles
36.
37. ECONOMÍA DE LA EXCLUSIÓN
“Hemos dado inicio a la cultura del «descarte» que,
además, se promueve. Ya no se trata simplemente del
fenómeno de la explotación y de la opresión, sino de algo
nuevo: con la exclusión queda afectada en su misma raíz
la pertenencia a la sociedad en la que se vive, pues ya no
se está en ella abajo, en la periferia, o sin poder, sino
que se está fuera. Los excluidos no son «explotados» sino
desechos, «sobrantes».” (53)
38. Exclusión:
INJUSTICIA Y situación
EXCLUSIÓN
proceso vs.
EXCLUSIÓN es un proceso social
de PÉRDIDA de INTEGRACIÓN que supone:
- Falta de ingresos
- Alejamiento del mercado de trabajo
La multidimensionalidad del concepto de exclusión social
… y también:
•Debilidad de lazos sociales
•Descenso de participación social
•Y pérdida de derechos sociales.
40. Los ejes de la exclusión
1. Ejercicio de los derechos sociales.
2. Las relaciones y las redes.
3. El Sentido Vital.
41. Exclusión:
INJUSTICIA Y EXCLUSIÓN situación
proceso vs.
Bloqueos PROCESO DE INTEGRACIÓN
Integración económica y social
Derechos Sociales
Fallos MECANISMOS ENRAIZAMIENTO
Crisis de redes sociales, solidaridad,
vínculos
46. ¿Integración? ¿inserción?
¿JUSTICIA = INTEGRACIÓN?
Pone el acento en que hay personas “distintas”, o
que no encajan en el puzzle. Se las “pule” y
solucionado. Como si el puzzle no tuviera que
modificarse.
48. INJUSTICIA Y EXCLUSIÓN
202. La necesidad de resolver las causas
estructurales de la pobreza no puede
esperar, no sólo por una exigencia pragmática
de obtener resultados y de ordenar la
sociedad, sino para sanarla de una
enfermedad que la vuelve frágil e indigna y
que sólo podrá llevarla a nuevas crisis. Los
planes asistenciales, que atienden ciertas
urgencias, sólo deberían Pensarse como
respuestas pasajeras.
49. PRIMACÍA DE LOS POBRES
Mientras no se resuelvan radicalmente los
problemas de los pobres, renunciando a la
autonomía absoluta de los mercados y de la
especulación financiera y atacando las causas
estructurales de la Inequidad, no se
resolverán los problemas del mundo y en
definitiva ningún problema. La inequidad es
raíz de los males sociales.
54. CARIDAD POLÍTICA
xsa
Tenemos que convencernos de que la caridad
«no es sólo el principio de las microrelaciones, como en las amistades, la familia,
el pequeño grupo, sino también de las
macrorelaciones, como las relaciones sociales,
económicas y políticas»
(Benedicto XVI, CV)
55. JUSTICIA Y CARIDAD
Pero la caridad no puede atribuirse este nombre si no
respeta las exigencias de la justicia, porque, como
enseña el Apóstol, quien ama al prójimo ha
cumplido la ley (…) una caridad que prive al obrero
del salario al que tiene estricto derecho no es
caridad, sino nombre vano y mero simulacro de
caridad. No es justo tampoco que el obrero reciba
como limosna lo que se le debe por estricta
obligación de justicia; y es totalmente ilícita la
pretensión de eludir con pequeñas dádivas de
misericordia las grandes obligaciones impuestas por
la justicia.
56. JUSTICIA
CARIDAD
Dar a cada uno lo que le
corresponde, lo debido, lo
que es suyo
El actuar de la persona
solidaria que introduce la
humanización, la gratuidad,
el cariño, el perdón
Virtud moral
Virtud teologal
Necesariamente dirigida al
otro
Inmanente al sujeto
Mínimos para organizar la
sociedad
Máximos, cada uno se pone a
sí mismo el listón
57. • La caridad constituye la mejor “definición” de
Dios:
DIOS ES AMOR
58. JUSTICIA Y CARIDAD
“Tú das pan al que tiene hambre; pero mejor sería
que ninguno tuviese hambre. Tú vistes al desnudo,
pero ojalá todos estuviesen vestidos y no existiese
tal necesidad… Suprime a los desafortunados. ¿Se
extinguirá entonces el fuego del amor? ….
(San Agustín. ss.IV-V)
59. JUSTICIA Y CARIDAD
Más auténtico es el amor con que amas a un
hombre feliz a quien no puedes hacer ningún
favor; este amor es mucho más puro y
sincero. Pues si haces un favor a un
desgraciado, quizá desees elevarte a sus ojos y
quieras que esté por debajo de ti. Desea que
sea tu igual: juntos estaréis sometidos a Aquel
a quien nadie puede hacer ningún favor”
(San Agustín. ss.IV-V)
61. • Venid, benditos de mi Padre..., porque luce
hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y
me disteis de beber... En verdad os digo
que cuantas veces hicisteis eso a uno de
estos mis hermanos menores, a mí me lo
hicisteis
(Mt 25,34-40)
62. Y DESPUÉS DE TODO ESTO, ¿QUÉ?
Hoy suele hablarse de un «exceso de
diagnóstico»
que
no
siempre
está
acompañado de propuestas superadoras y
realmente aplicables. Por otra parte, tampoco
nos serviría una mirada puramente
sociológica, que podría tener pretensiones de
abarcar toda la realidad con su metodología de
una manera supuestamente neutra y aséptica.
Lo que quiero ofrecer va más bien en la línea
de un discernimiento evangélico.
66. 1. DESMONTAR INTERESES E IDEOLOGÍAS
•
•
•
•
•
•
•
•
Desarrollo de la persona = crecimiento
Lo rentable, lo que se contabiliza
No hay sujeto, hay consumidor
Crecimiento= bienestar
Necesidad = deseo
No hay bien común
Ética individualista y neo darwinista
El pobre es excluido porque no llega: culpable
69. 2. COMBATIR LA IGNORANCIA
• 204. Ya no podemos confiar en las fuerzas
ciegas y en la mano invisible del mercado. El
crecimiento en equidad exige algo más que el
crecimiento económico, aunque lo supone,
requiere decisiones, programas, mecanismos y
procesos específicamente orientados a una
mejor distribución del ingreso, a una creación
de fuentes de trabajo, a una promoción
integral de los pobres que supere el mero
asistencialismo.
70. 2. COMBATIR LA IGNORANCIA
Estoy lejos de proponer un populismo
irresponsable, pero la economía ya no puede
recurrir a remedios que son un nuevo
veneno, como cuando se pretende aumentar
la rentabilidad reduciendo el mercado laboral
y creando así nuevos excluidos.
73. DEL PRECIO AL VALOR
• La dignidad no tiene precio, no se sustenta en
la cantidad
• No hay acepción de personas, su historia de
vida tiene valor en sí.
• Es el eje sobre el que gira la DSI, la afirmación
radical
• Es el lugar de encuentro o de una ética de
mínimos
74.
75. 4. APOSTAR POR LO NO RENTABLE
La palabra «solidaridad» está un poco
desgastada y a veces se la interpreta mal, pero
es mucho más que algunos actos esporádicos
de generosidad. Supone crear una nueva
mentalidad que piense en términos de
comunidad, de prioridad de la vida de todos
sobre la apropiación de los bienes por parte de
algunos.
¿
76. 4. APOSTAR POR LO NO RENTABLE
Individualismo institucionalizado
Hay un voluntariado individualista
Voluntariado de puerta giratoria
La moral del vagabundo (Bauman)
El mercado es quien construye la relación
social
• Los fuertes son los grandes, los que generan
riqueza, los que reactivan el consumo
•
•
•
•
•
77. 4. APOSTAR POR LO NO RENTABLE
• Los bienes relacionales no tienen valor porque
no tienen precio
• El mercado intercambia objetos, no sujetos
• El único real es el individuo que consume.
• No hay trascendencia hacia el otro
• Ética del poder
• El pobre es una amenaza al individuo que
puede poner en peligro
78. 4. APOSTAR POR LO NO RENTABLE
• Lo que da valor al voluntariado en la relación
que establezco con el otro, sin intercambios
• El valor es reconocer que estamos ob-ligados
al otro
• No habría “opción por los pobres”, sino
autenticidad (Levinás)
• MIRADA AL SUR AHORA MÁS QUE NUNCA
• ¿DÓNDE ESTÁN LOS ÚLTIMOS?
80. 5. LA REVOLUCIÓN DE LA TERNURA
88. el Evangelio nos invita siempre a correr el
riesgo del encuentro con el rostro del otro, con
su presencia física que interpela, con su dolor y
sus reclamos, con su alegría que contagia en un
constante cuerpo a cuerpo. La verdadera fe en el
Hijo de Dios hecho carne es inseparable del don
de sí, de la pertenencia a la Comunidad, del
servicio, de la reconciliación con la carne de los
otros. El Hijo de Dios, en su encarnación, nos
invitó a la revolución de la ternura.
81. … Y EL DIÁLOGO ENTRE SUJETOS
142. Un diálogo es mucho más que la
comunicación de una verdad. Se realiza por el
gusto de hablar y por el bien concreto que se
comunica entre los que se aman por medio de
las palabras.
Es un bien que no consiste en cosas, sino en las
personas mismas que mutuamente se dan en
el diálogo.
82. … Y AL DIÁLOGO ENTRE SUJETOS
Primacía de los bienes relacionales, noobjetivación o instrumentalización de la
persona
No se construye sociedad paliando
carencias
La cuestión es el cómo se da.
Lo importante no son los bienes materiales
(nudos), sino la relación (cuerda)
85. AYUDAR
…desde fuera
Ofrecer recursos a una persona
para superar o afrontar
sanamente una situación
difícil
•Materiales: Objetos, dinero
ropa…
•Técnicos: programas,
proyectos estructuras,
cursos....
ACOMPAÑAR
… al ladito
El principal recurso que se ofrece
es LA PERSONA misma del
acompañante para superar o
afrontar sanamente una
situación difícil
87. 7. FOMENTAR LA PARTICIPACIÓN
198 quiero una Iglesia pobre para los pobres. Ellos
tienen mucho que enseñarnos. La nueva
evangelización es una invitación a reconocer la
fuerza salvífica de sus vidas y a ponerlos en el
centro del camino de la Iglesia. Estamos llamados
a descubrir a Cristo en ellos, a prestarles nuestra
voz en sus causas, pero también a ser sus amigos,
a escucharlos, a interpretarlos y a recoger la
misteriosa
sabiduría
que
Dios
quiere
comunicarnos a través de ellos.
88. 7. FOMENTAR LA PARTICIPACIÓN
• La participación supone que el otro no es un
objeto, sino sujeto constructor de relaciones y
de procesos de transformación personal y
social.
• Significa la posibilidad y capacidad creciente de
intervenir en la identificación de problemas y
prioridades, en la definición de objetivos, en la
planificación de las acciones, en la ejecución y
gestión y en la evaluación. La participación
supone ser parte en la sociedad civil,
89. MENSAJE FINAL
201. Nadie debería decir que se mantiene lejos
de los pobres porque sus opciones de vida
implican prestar más atención a otros
asuntos. Ésta es una excusa frecuente en
ambientes académicos, empresariales o
profesionales, e incluso eclesiales. Si bien
puede decirse en general que la vocación y la
misión propia de los fieles laicos es la
transformación de las distintas realidades
terrenas para que toda actividad humana sea
90. MENSAJE FINAL
nadie puede sentirse exceptuado de la
preocupación por los pobres y por la justicia
social: «La conversión espiritual, la intensidad
del amor a Dios y al prójimo, el celo por la
justicia y la paz, el sentido evangélico de los
pobres y de la pobreza, son requeridos a
todos». Temo que también estas palabras sólo
sean objeto de algunos comentarios sin una
verdadera incidencia práctica.
91. MENSAJE FINAL
No obstante, confío en la apertura y las buenas
disposiciones de los cristianos, y os pido que
busquéis comunitariamente nuevos caminos
para acoger esta renovada propuesta.
Notas del editor
Hubo épocas de angustia más dolorosa, miseria más áspera, atrocidades inenarrables, crueldad más ostentosa; pero a nuestra época la caracteriza el que las personas son superfluas los inevitables recortes no afectan a nadie. Vivimos como si en eCuerno de África no hubieran personas sufriendo
La vulnerabilidad producida por la crisis ha instalado en la sociedad la sensación de descenso y precariedad. Como si una especie de tobogán, empujara hacia abajo y hacia afuera
Hacia abajo. En el mundo laboral constatamos la tendencia hacia abajo. Médicos, arquitectos, ingenieros...pero fueron reducidos a auxiliares domésticos, a recollidors de naranjas, a obreros de la construcción. En un mercado laboral presidido por la competencia, vende quien logra hacer la oferta más baja y a costes menores. La preparación académica y técnica que inicialmente se presenta como una oportunidade de ascenso, se convierte en un mecanismo de descenso: el mercado tira hacia abajo y sitúa en posiciones inadecuadas a su formación, con posibilidades inferiores de salario, status y promoción. Es sintomático que se oculten los méritos del curriculum para poder obtener un empleo.
Hacia otra parte. Hay un mecanismo estructural que se ha identificado como des-localización, que expulsa hacia otra parte. Está en el origen del desarraigo. Es más que una anécdota biográfica ya que se convierte en una trayectoria que impide o dificulta vivir en comunidad, en la memoria y en las raíces. Esta espiral se despliega en la vida de muchas personas en forma de inseguridad económica y desánimo personal; y en la vida de muchos pueblos en la sensación de sobrantes; afectan a las relaciones y al modo de ser y estar en la realidad social. Rompen las vinculaciones sociales y fragilizan los nexos relacionales, que protegían al individuo y le concedían protección, seguridad y libertad. Cada vez son más las personas, que se han visto descolgados de sus redes naturales como mecanismos de protección general y se convierten cada vez más en individuos sin apoyos. Es el grado máximo de desafiliación familiar y de ruptura de sus vínculos naturales y de sus redes sociales. En toda exclusión, siempre hay una convergencia entre elementos estructurales, que orillan y expulsan, elementos contextuales, que vulneran las redes de apoyo y elementos subjetivos, que debilitan los dinamismos vitales de la personalidad (García Roca 1995).
Estos dos mecanismos impiden o dificultan construir un proyecto de vida e instala a las personas en la inseguridad económica, en el desánimo personal y en la sensación de sobrantes; y les sitúa en un especie de callejón sin salida, sin principio ni fin, en el que se densifican las fracturas sociales y se condensan en agujeros negros por donde supuran las heridas de todo tipo.
. No hay fábrica sin su basurero, no hay sociedad sin su vertedero. Los residuos constituyen un ingrediente del proceso social. La zona de la vulnerabilidad indica que entre estar de pie y estar caído está el ir cayendo; entre estar en la fábrica y estar en el basurero hay un espacio de precariedad que difumina la línea de separación entre ambas. El foco se desplaza a las resistencias y contextos que hacen que alguien no caiga en la exclusión. En situaciones de catástrofe, el daño, que produce un acontecimiento inesperado, es proporcional a la intensidad del golpe menos las resistencias.
Los elementos estructurales de la vulnerabilidad de masas son, por una parte, la transición de la sociedad salariada a la sociedad precarizada, que los analistas sociales han llamado la emergencia de la sociedad líquida. Por otra parte resulta decisiva la fractura del capital con el trabajo y del capital productivo con el especulativo.
Entre los elementos contextuales de la vulnerabilidad de masas, que tienen especial importancia en el ámbito social, están el debilitamiento de la institución familiar y la perdida de las redes de solidaridad primaria. Hay un dato significativo, el 20 % de varones entre 40 y 45 años no forman una familia. El escenario de lo social alude a aquello que una organización social expulsa y orilla. En la imagen de Z. Bauman, de las fábricas parten a diario dos tipos de camiones: unos se dirigen a los grandes almacenes y los otros a los vertederos, los dos lugares emblemáticos de la modernidad. No hay una fábrica sin su basurero, no hay sociedad sin su vertedero. Los residuos se han constituido en un ingrediente del proceso social. Esta consideración de lo social cuenta con una larga historia que le ha familiarizado con desgracia personal o colectiva, la asistencia paliativa y la ayuda compensatoria XIMO
Integración de las personas dependientes… ¿en dónde?
Las metáforas espaciales, que se utilizaban para comprender la exclusión, ya no son apropiadas. La noción de centro ha desaparecido, puesto que hay varios centros pero la diferencia entre el llamado centro y la periferia es enorme.
Ocuparse de las vidas desahuciadas no es posible sin ocuparse del camión que va al supermercado ya que allí se dirime la suerte del basurero. Lo que nos lleva a mirar no sólo a las afueras sino también hacia el centro. La exclusión no está donde están los excluidos sino en el corazón del sistema.
Por las mañanas “escuchamos lo que nos dicen los mercados” y por las tardes con miedo infinito esperamos y desesperamos según el soniquete de las “agencias de calificación”. Todo lo que quede fuera de esta idea, de esta lógica es pura fantasía, irresponsabilidad, idealismo
No hay vida fuera de los mercados. No hay relato. No hay sujeto. La cultura está impregnada de la Idea y sus consecuencias. La idea es: mercado. Sus apellidos: el crecimiento, la austeridad, los recortes…
Las ideologías -ismos que para satisfacción de sus seguidores pueden explicarlo todo, cualquier hecho, deduciéndolo de una sola premisa- son un fenómeno muy reciente, y durante muchas décadas desempeñaron un papel desdeñable en la vida política. Sólo con el conocimiento de su naturaleza podemos descubrir en ellas ciertos elementos que las han hecho tan inquietantemente útiles para la dominación totalitaria. Las grandes potencialidades políticas de las ideologías no fueron descubiertas antes de Hitler y de Stalin. Las ideologías son conocidas por su carácter científico: combinan el enfoque científico con resultados de relevancia filosófica y pretenden ser filosofía científica. (…) Una ideología es muy literalmente lo que su nombre indica: la lógica de una idea. Su objeto es la Historia, a la que es aplicada la «idea»; el resultado de esta aplicación no es un cuerpo de declaraciones acerca de algo que es, sino el despliegue de un proceso que se halla en constante cambio. La ideología trata el curso de los acontecimientos como si siguieran la misma «ley» que la exposición lógica de su «Idea». Las ideologías pretenden conocer los misterios de todo el proceso histórico -los secretos del pasado, las complejidades del presente, las incertidumbres del futuro -merced a la lógica inherente a sus respectivas ideas. (..)supone que el movimiento de la Historia y el proceso lógico de esta noción se corresponden entre sí, de forma que, pase lo que pase, todo sucede según la lógica de una «Idea».
ARENDT, H. Los orígenes del totalitarismo (1951), Alianza Editorial, Madrid, 2002.
Según esto, ¿qué valor posee el sujeto?
Un modelo de sociedad identificada con el crecimiento económico como paradigma social y con la apropiación individual del crecimiento (cuya manifestación tipológica es el «consumismo»), identifica necesidad con deseo, y éste con la posesión que ahoga todo proyecto de satisfacción que no se resuelva en lo inmediato.
la dignidad de la persona como imperativo ineludible, independientemente de su condición y de su situación; las personas nunca pueden ser objeto de mercancía, y se confronta con el axioma
de que «más es igual a mejor», pues la dignidad no se sustenta en la cantidad. El voluntariado no hace acepción de personas, y reconoce en cada una un principio unificador que las dignifica y pone en valor, independientemente de sus historias de vida.
asunto que nos ocupa, tanto la ética como el voluntariado aspiran y nos instigan a proclamar desde el discurso y la acción la dignidad de todas las personas. Las personas poseen dignidad y no precio y por ello son, o debieran ser el centro de la vida social y económica. Pues bien; esta es la Base de la ética de la acción voluntaria: el Otro. El voluntariado se sustenta en la procura y responsabilidad frente al Rostro del otro.
El voluntariado entiende la justicia como defensa de los más débiles, de los derechos de las personas que ven más vulnerados sus derechos y se encuentran más violentados en su dignidad. La justicia que representa el voluntariado va más allá del mero reparto equitativo, sino que parte de un criterio de justicia social.
Sin duda ninguna desde una aproximación ética es muy difícil saltar este muro que supone poner al Yo como centro. Es difícil construir una geografía de los vínculos humanos desde un enclave individualista. Retejer nuestros vínculos desde un desencarnado individualismo es una tarea ardua. Hay autores que refiriendo a esta característica de falta de vinculación comunitaria habla del voluntariado de “puerta giratoria” que entra y sale sin molestar a nadie, sin ayudar a nadie, sin vincularse con nadie. Es lo que Bauman denomina la “moral del vagabundo” que va caminando sin relaciones sólidas en un mundo, en feliz metáfora, líquido.
Al no haber precio (gratuidad como valor que constituye la propia relación como tal), solo existe el valor de la persona. Esto es lo que el voluntariado pone en juego en su acción y en su relación de ayuda, o sea, el valor de la persona «por sí», que es lo que hace posible una relación en dignidad. Sin ello no hay voluntariado. La gratuidad parte del reconocimiento del otro, de
sentirnos ligados y que por ello estamos obligados. Estamos asignados al otro en necesidad (LEvinás)
Tanto la responsabilidad entendida como servicio que da respuesta a un mundo injusto, desde un nosotros y no desde la individualidad, como entendida como anticipación que va tejiendo redes que prevengan actuaciones futuras. Frente a «una sociedad sin sujeto», la responsabilidad es causa y consecuencia del reconocimiento, y supone que «el otro» no es un objeto, sino sujeto constructor de relaciones y de procesos de transformación personal y social.
pues son los bienes de la reciprocidad, del reconocimiento y de la redistribución. bienes relacionales los que toman la primacía. Y esos bienes no tienen traducción a precio regulados por el intercambio mercantil. Pero son bienes imprescindibles para la cohesión y la justicia social, pues son los bienes de la reciprocidad, del reconocimiento y de la redistribución.
No perder la perspectiva comunitaria de nuestro trabajo