La polea es una máquina simple que sirve para transmitir o cambiar la dirección de una fuerza mediante el uso de una cuerda o cable. Históricamente, Arquímedes demostró su utilidad al sacar un barco del agua con poca fuerza usando poleas. Las poleas tienen tres partes principales - el cuerpo, el cubo y la garganta - y se usan comúnmente para elevar cargas o transmitir movimiento entre ejes. Pueden ser fijas, móviles o compuestas en sistemas como polipastos para obtener
1. LA POLEA
1. ¿Qué es?
Una polea, es una máquina simple que sirve para transmitir una fuerza. Se trata de
una rueda, generalmente maciza y acanalada en su borde, que, con el curso de una
cuerda o cable que se hace pasar por el canal ("garganta"), se usa como elemento de
transmisión para cambiar la dirección del movimiento en máquinas y mecanismos.
Además, formando conjuntos —aparejos o polipastos— sirve para reducir la
magnitud de la fuerza necesaria para mover un peso.
Según definición de Hatón de la Goupillière, «la polea es el punto de apoyo de una
cuerda que moviéndose se arrolla sobre ella sin dar una vuelta completa»[1]
actuando en uno de sus extremos la resistencia y en otro la potencia
2. Historia.
La única nota histórica sobre su uso se debe a Plutarco, quien en su obra Vidas
paralelas (c. 100 a. C.) relata que Arquímedes, en carta al rey Hierón de Siracusa, a
quien lo unía gran amistad, afirmó que con una fuerza dada podía mover cualquier
peso e incluso se jactó de que si existiera otra Tierra yendo a ella podría mover ésta.
Hierón, asombrado, solicitó a Arquímedes que realizara una demostración.
Acordaron que el objeto a mover fuera un barco de la armada del rey, ya que Hierón
creía que éste no podría sacarse de la dársena y llevarse a dique seco sin el empleo
de un gran esfuerzo y numerosos hombres. Según relata Plutarco, tras cargar el
barco con muchos pasajeros y con las bodegas repletas, Arquímedes se sentó a
cierta distancia y halando la cuerda alzó sin gran esfuerzo el barco, sacándolo del
agua tan derecho y estable como si aún permaneciera en el mar.
3. Partes o elementos que la conforman.
En toda polea se distinguen tres partes: cuerpo, cubo y garganta.
El cuerpo es el elemento que une el cubo con la garganta. En algunos tipos de
poleas está formado por radios o aspas para reducir peso y facilitar la ventilación de
las máquinas en las que se instalan.
El cubo es la parte central que comprende el agujero, permite aumentar el grosor de
la polea para aumentar su estabilidad sobre el eje. Suele incluir un chavetero que
facilita la unión de la polea con el eje o árbol (para que ambos giren solidarios).
La garganta (o canal) es la parte que entra en contacto con la cuerda o la correa y
está especialmente diseñada para conseguir el mayor agarre posible. La parte más
2. profunda recibe el nombre de llanta. Puede adoptar distintas formas (plana,
semicircular, triangular...) pero la más empleada hoy día es la trapezoidal.
4. Utilidad.
Básicamente la polea se utiliza para dos fines: cambiar la dirección de una fuerza mediante
cuerdas o transmitir un movimiento giratorio de un eje a otro mediante correas.
En el primer caso tenemos una polea de cable que puede emplearse bajo la forma
de polea fija, polea móvil o polipasto. Su utilidad se centra en la elevación de cargas
(pastecas, grúas, ascensores...), cierre de cortinas, movimiento de puertas
automáticas, etc.
En el segundo caso tenemos una polea de correa que es de mucha utilidad para
acoplar motores eléctricos a otras máquinas (compresores, taladros, ventiladores,
generadores eléctricos, sierras...) pues permite trasladar un movimiento giratorio de
un eje a otro. Con este tipo de poleas se construyen mecanismos como el
multiplicador de velocidad, la caja de velocidad y el tren de poleas.
5. Tipos de poleas
3. Polea Simple Fija: La manera más sencilla de utilizar una polea es colgar un peso en
un extremo de la cuerda, y tirar del otro extremo para levantar el peso.
Una polea simple fija no produce una ventaja mecánica: la fuerza que debe aplicarse
es la misma que se habría requerido para levantar el objeto sin la polea. La polea,
sin embargo, permite aplicar la fuerza en una dirección más conveniente.
Polea Móvil: Una forma alternativa de utilizar la polea es fijarla a la carga un
extremo de la cuerda al soporte, y tirar del otro extremo para levantar a la polea y la
carga.
La polea simple móvil produce una ventaja mecánica: la fuerza necesaria para
levantar la carga es justamente la mitad de la fuerza que habría sido requerida para
levantar la carga sin la polea. Por el contrario, la longitud de la cuerda de la que
debe tirarse es el doble de la distancia que se desea hacer subir a la carga.
Polea Compuesta: Existen sistemas con múltiples de poleas que pretenden obtener
una gran ventaja mecánica, es decir, elevar grandes pesos con un bajo esfuerzo.
Estos sistemas de poleas son diversos, aunque tienen algo en común, en cualquier
caso se agrupan en grupos de poleas fijas y móviles: destacan los polipastos: Son la
configuración más común de polea compuesta. En un polipasto, las poleas se
distribuyen en dos grupos, uno fijo y uno móvil. En cada grupo se instala un número
arbitrario de poleas. La carga se une al grupo móvil.
6. ¿Para qué sirve?
La Polea es una máquina simple que sirve para transmitir una fuerza o invertir la misma, es
decir, si necesitamos levantar un carga determinada o resistencia la polea nos permita
jalarla hacia abajo en vez de hacia arriba y esto facilita el levantamiento de la resistencia.
7. Objetos que utilizan poleas
- Lavadora
- Taladro de columna
- Máquina de coser
- Ascensor
- Máquinas para realizar ejercicios
- Teleférico