Arquitectura y Urbanismo en América antes de la Conquista
La cultura olmeca o cultura madre
es el nombre de la civilización que se
desarrolló durante el Preclásico
Medio. Aunque se han encontrado
vestigios de su presencia en amplias
zonas de esta área cultural, se
considera que el área nuclear olmeca
o “zona metropolitana” abarca la
parte sureste del estado de Veracruz
y el oeste de Tabasco.
Arquitectura Olmeca
ARQUITECTURA
Un edificio típico Olmeca consistía
de una construcción de
materiales perecederos: postes de
madera, paredes de carrizo repelladas
con lodo, techos de palma y pisos de
tierra apisonada, cono sin una
subestructura. Las subestructuras o
basamentos eran de tierra
compactada, ya sea arcillas o arenas
de origen local. En algunos casos, se
utilizaron piedras como recubrimiento,
y para la fabricación de los monolitos
esculpidos y las "columnas basálticas".
Las subestructuras pueden tener
forma piramidal o pueden ser
Es difícil conocer la
traza arquitectónica de los
asentamientos prehispánicos
correspondientes a los períodos más
tempranos de Mesoamrica, ya que
en la mayoría están cubiertos por
ocupaciones posteriores. El caso de
la antigua ciudad de la Venta es único,
puesto que conserva el trazo
arquitectónico original: nunca tuvo una
ocupación posterior a lo que
Estos mosaicos nunca fueron visibles y
estaban obviamente recubiertos,
acentuando con ellos el carácter
mágico-religioso y ritual de la ofrenda.
El centro ceremonial esta formado por
un conjunto de pirámides y plataformas
de adobe rellenas de barro de color,
pues la piedra no era accesible en el
área, como ya se ha señalado.
Se piensa que este barro de diferentes
tonalidades también fue traído de tierra
adentro, lo cual subraya, con el acarreo
de la piedra, la gran disponibilidad de
fuerza de trabajo.
LA VENTA
El centro ceremonial fue erigido en la
parte baja y seca de una isla rodeada
de pantanos, cerca del río Tonalá. Los
monumentos están colocados de
acuerdo con una planificación rigurosa
sobre un eje norte-sur, al centro del
cual los Olmecas hicieron grandes
ofrendas y los famosos pisos de
mosaicos que representan caras de
jaguare.
Los Olmecas tallaban
magistralmente la piedra y, en
especial, el jade. Algunos
monumentos Olmecas llevan
inscripciones de calendario, que
se consideran más antiguas
que la civilización maya del
primer período, lo que indujo a
unos científicos mexicanos a
sostener que las civilizaciones
mesoamericanas tuvieron su
origen en la cultura Olmeca.
Dos civilizaciones mexicanas
mencionadas las de los
zapotecas y el pueblo de
Teotihuacán continuaron
floreciendo durante los siglos de
preponderancia maya.
Un edificio típico olmeca consistía de una construcción de materiales
perecederos: postes de madera, paredes de carrizo repelladas con lodo, techos
de palma y pisos de tierra apisonada, con o sin una subestructura. Las
subestructuras o basamentos eran de tierra compactada, ya sea arcillas o
arenas de origen local. En algunos casos, se utilizaron piedras como
recubrimiento, y para la fabricación de los monolitos esculpidos y las "columnas
basálticas". Las subestructuras pueden tener forma piramidal, como los
edificios C1 y D1 de La Venta, o pueden ser plataformas de planta rectangular.
En la arquitectura de Teotihuacan se emplearon las particularidades
arquitectónicas propias de la pirámide que ya se conocían en Cuicuilco, con
la aplicación de una serie de plataformas que van achicándose conforme
toman un nuevo nivel ascendente (solo que en Cuicuilco se trata de un
cono, mientras que aquí son pirámides).
Así pues se comenzó a edificar siguiendo
el tipo de Cuicuilco, es decir una serie de
plataformas decrecientes con sus lados en
talud. Más tarde se difundió el sistema
constructivo de tablero sobre talud. La
arquitectura alcanzó el gusto por la
geometría y por el saber científico de las
matemáticas, empleando un canon
especial y una orientación muy meditada.
Se conseguía así un contraste muy
especial de luces y sombras engalanado
por la decoración pictórica y la escultura.
Desde fines de la segunda
época, Teotihuacán
desplegó sin duda una
actividad edilicia muy febril,
pues los palacios de las
zonas residenciales, al igual
que algunos templos,
muestran innumerables
huellas de remodelación y
superposición, y es muy
común encontrar, debajo de
los restos de un palacio de
la última época, varias
etapas anteriores de
construcción, con sus redes
de desagüe, sus pisos en
buen estado de
conservación, sus patios
Teotihuacán es rica en pinturas. Aparte de
los diseños de sus sellos de barro,
aparecen pinturas al temple, según
algunos autores, al fresco;
ocasionalmente en objetos tales como la
concha de mar y muy especialmente en la
cerámica ritual, así como en la pintura
mural. esta última, de una paleta y estilos
inconfundibles, que va desde lo
simplemente decorativo guirnaldas de
flores y frutas, frizos de volutas
entrelazadas y motivos marinos,
chalchihuites o cuentas de jade.
Los grandes basamentos
Tienen un núcleo hecho de adobe. Después fueron revestidos de estuco y
de piedra y añadieron un friso adornado con relieves geométricos se
construyeron como basamento de un templo que se hallaba en la
plataforma. Los españoles que llegaron en el siglo XVI, todavía alcanzaron
a ver los ídolos del Sol y de la Luna.
Pirámide de Quetzalcóatl
La pirámide de Quetzalcóatl
presenta un sistema reticular de
contrafuertes interiores y se
recubre con piedra perfectamente
labrada y ajustada; tanto las
esculturas de bulto como los
tableros están fuertemente
anclados en el cuerpo del
basamento piramidal, a tal punto
que la fachada que fue sepultada
bajo una construcción posterior
sigue siendo hasta la fecha la
mejor conservada
El cuerpo adosado a la pirámide de la Luna muestra, tanto en la alfarda como
en los escalones, un ingenioso corte de las piedras que se ajustan una con otra
para obtener mayor rigidez y evitar deslizamientos; los edificios suelen erigirse
sobre una cimentación muy firme; numerosos muros de mampostería que
generalmente se engruesan en talud en la parte inferior, presentan refuerzos
internos de madera en forma de parrilla, de rejilla o de castillos, o actuando
desde el exterior como contrafuertes empotrados; los muros y pisos interiores o
exteriores están cubiertos de sólido concreto a base de polvo de tezontle y cal;
aparecen también algunos pisos de mica.
Los mayas Durante esta
época de la cultura maya,
los centros del poder
religioso, comercial y
burocrático crecieron para
convertirse en increíbles
ciudades como la
preclásica El Mirador, la
mayor del clásico Tikal y
las posclásicas Chichén
Itzá y Uxmal. Debido a
sus muchas semejanzas,
así como a sus
diferencias estilísticas, los
restos de la arquitectura
maya son una clave
importante para entender
la evolución de su antigua
civilización.
La cultura Maya fue una civilización
precolombina mesoamericana, conocida por
haber desarrollado un único lenguaje escrito
conocido de la América precolombina, así
como por su arte, arquitectura y sistemas
matemáticos y astronómicos. La civilización
Maya se estableció durante el período Pre-
Clásico ( 2000 a. C. a 250 d. C.), de acuerdo
con la cronología de Mesoamérica, muchas
ciudades Mayas alcanzaron su mayor
desarrollo como estados durante el periodo
clásico ( 250 d.c a 900 d. C.) y continuaron
durante todo el período de Post-Clásico hasta
la llegada de los españoles.
Las características principales de la arquitectura
maya es la forma de techar, conocida como
bóveda maya o arco falso. Los edificios más
comunes son: las pirámides (superposición de
plataformas tronco piramidales), la cual sirve de
basamento a los templos, los cuales suelen tener
un elemento decorativo llamado crestería, que se
sitúa en el techo y le añade altura al edificio.
Plataformas ceremoniales: De poca
altura (máximo cuatro metros), en los
lados tenían figuras labradas. Escenarios
de ceremonias públicas, en la parte
superior había altares, banderas,
incensarios y, a veces, un tzompantli:
hilera de varas con cráneos ensartados.
Pirámide: Superposición de varias
plataformas, sin nunca culminar en un
volumen geométrico realmente
piramidal. Sirve de basamento al
templo, acercándolo lo más posible al
cielo, pero tuvo también una función
funeraria secundaria en importancia.
Templo: De planta cuadrangular, muros
verticales con una, tres o cinco
entradas que conducen a varias piezas,
sea directamente, o sea pasando por
un pórtico, cuando hay varias puertas.
Las entradas se cerraban mediante
cortinales o esteras amarradas en el
interior a unas argollas empotradas,
tres en cada lado de la entrada. Los
templos carecen de ventanas, pero en
algunos casos pueden tener aperturas
en forma rectangular. El espacio interior
del templo varía mucho, desde los
minúsculos santuarios del Petén hasta
los de mayor amplitud de Palenque.
Crestería: Elemento propio de la
arquitectura maya, que consiste
en una alta construcción situada
sobre el techo del templo, la cual
hace resaltar la verticalidad del
conjunto pirámide-templo y la idea
de acercamiento al cielo. La
crestería se aplicaba la mayor
parte de los elementos
decorativos simbólicos.
Mientras las ciudades mayas se dispersaban por la diversa geografía de
Yucatán y Guatemala, el efecto de la planeación parecía ser mínimo; sus
ciudades fueron construidas de una manera orgánica (aparentemente
descuidada), adaptándose a la topografía de cada ubicación en particular.
La arquitectura maya, como la del resto de Mesoamérica, tendía a integrar un
alto grado de características naturales. Por ejemplo, algunas ciudades
existentes en las planicies de piedra caliza en el norte de Yucatán se
convirtieron en poblaciones muy extensas, mientras que otras construidas en
las colinas del río Usumacinta utilizaron los altillos naturales de la topografía
para elevar sus torres y templos a grandes alturas. Aun así prevalecía algún
orden, requerido por cualquier ciudad de grandes dimensiones.
La cultura Tolteca es una cultura de la
Mesoamérica Precolombina. La
palabra tolteca se refiere a las
poblaciones que habitaron el centro
de México precolombino. La palabra
ha sido usada de diferentes formas
en estudios mesoamericanos por
diferentes estudiosos para referirse a
los antepasados mencionados en las
narrativas mítico - históricas de los
aztecas. Existe un debate académico
sobre si los toltecas fueron alguna
vez un verdadero grupo étnico o
comunidad política genuina, o si son
más bien un mito producido por los
aztecas y/o por otras civilizaciones de
la región.
El pueblo tolteca creó una refinada
cultura, que incluía conocimientos
sobre la fundición del metal, el trabajo
de la piedra, la destilación y la
astronomía. Su arquitectura y su arte
reflejan influencias de Teotihuacan y
de la cultura Olmeca.
Los restos de Tula, a veces
llamada Tollan Xicocotitlán,
incluyen tres templos
piramidales, de los cuales el
más grande está rematado
por columnas de 4,6 m de
altura en forma de
estilizadas figuras humanas
conocidos como "atlantes"
(guerreros); se cree que
estaba dedicado a
Quetzalcóatl, la Serpiente
Emplumada, deidad que los
toltecas adaptaron de
culturas anteriores y la
adoraron como el dios del
planeta Venus.
Se estima que Tula albergó alrededor de 30 000 habitantes, los cuales vivían
en grandes complejos de una planta con techos planos básicamente de piedra
y tierra y acabados en adobe. Excluyendo la zona ceremonial, el diseño de las
zonas habitables de Tula refleja una planta cuadriculada que definía
claramente los diferentes barrios. De los elementos arquitectónicos más
significativos destaca la pirámide B, con sus mal llamados atlantes, figuras de
4,6 m de altura que alguna vez sostuvieron el techo de un templo.
En arquitectura introdujeron la
forma característica do toda la
arquitectura mexicana
precolombina: la estructura en
forma de tronco de pirámide,
que servía de base a templos,
palacios, etc. Estas estructuras
poseían unas escalinatas que,
partiendo de la base, ascendían
hasta la plataforma superior y
su finalidad no era otra que la
de servir de base o pedestal al
templo o palacio que se
construía sobre ella. Muy
característico de las
construcciones toltecas (y de
las aztecas) era la falta de
ventanas, empleándose sólo
puertas bajas.
El Imperio Incaico El Imperio incaico fue
un estado sudamericano con el dominio
más extenso en la historia de la
América precolombina. Al territorio del
mismo se denominó Tahuantinsuyo (del
quechua tawantin suyu, «las cuatro
regiones o divisiones) y al periodo de
su dominio se le conoce además como
incanato e incario.
La arquitectura
desarrollada en el
incanato se caracteriza
por la sencillez de sus
formas, su solidez, su
simetría y por buscar que
sus construcciones
armonicen el paisaje. A
diferencia de sociedades
costeñas como la chimú,
los incas utilizaron una
decoración bastante
sobria. El principal
material utilizado fue la
piedra, en las
construcciones más
simples era colocada sin
tallar, no así en las más
Los constructores incas desarrollaron técnicas para levantar muros
enormes, verdaderos mosaicos formados por bloques de piedra tallada
que encajaban perfectamente, sin que entre ellos pudiera pasar ni un
alfiler. Muchas veces esos bloques eran tan grandes que resulta difícil
imaginar su colocación, las mejores muestras de esta habilidad se
encuentran en la zona del Cusco. Se sabe que los mejores talladores de
piedra eran collas, provenientes del Altiplano y que muchos de ellos fueron
llevados al Cusco para servir al estado.
El urbanismo inca encuentra su
mejor ejemplo en su capital: el
Cuzco. Fue remodelada por
Pachacutec Inca Yupanqui a
mediados del siglo XV. La ciudad se
estructura sobre la base de dos
diagonales que se cruzan en la
plaza central formando así cuatro
barrios. Del centro de la ciudad
partían las rutas que conducían a
las cuatro regiones del Imperio. En
el norte dominaba la fortaleza del
Sacsahuamán, donde residía el
centro político-militar del Estado y
cuyo plano se ha identificado con la
cabeza de un puma o de un halcón
con las plumas erizadas, mientras
que el resto de la ciudad sería el
La arquitectura civil gira en torno a
las exigencias del Imperio.
Encontramos caminos y calzadas
para la rapidez de las
comunicaciones y la movilidad de
las tropas. Depósitos y almacenes
desde donde se distribuía todo lo
necesario para el correcto
desenvolvimiento de la vida
La arquitectura religiosa está
representada por la huaca del Sol o
Coricancha. Su recinto sagrado
estaba delimitado por un muro con
una especie de proa curvilínea.
Encerraba una roca sagrada, el
usnu, llamado por algunas fuentes
el intihuatana, el lugar del Sol.
La arquitectura militar está representada por
el Sacsahuamán. Esta antigua fortaleza
estuvo formada por una serie de
edificaciones de las que no quedan más
que los cimientos, pero de la que todavía
permanecen tres enormes murallas que, de
forma escalonada y siguiendo tres niveles,
se enlazan armoniosamente formando una
imponente obra de defensa.
Los aztecas querían demostrar su
poder por ello construyeron edificios
monumentales. La arquitectura azteca
destaca por su monumentalidad,
grandeza y la veneración de la
divinidad.
La civilización Azteca es
muy destacada por su
preocupación por las
matemáticas, la
astronomía, el tiempo y la
organización religiosa.
todo esto influye de gran
manera en el modo de
organizar la cuidad, era
un pueblo en el que
destacó los rituales y por
tanto la religión para
diseñarlas.
La arquitectura azteca estaba fuertemente influenciada por los toltecas de
Colhuacan, los tepanecas de Atzcapotzalco, y los acolhuas de Tetzcoco.
Se trata de una representación
dual de las divinidades que
existían en Mesoamérica desde
épocas remotas. La colocación de
parejas de dioses, como la de
Huitzilopochtli–Tláloc del Templo
Mayor de Tenochtitlan, sobre una
sola plataforma piramidal, hace
que su estructura sea alargada y
presente una doble escalinata de
acceso. La adaptabilidad y el
ingenio arquitectónico de los
aztecas pueden observarse en
Malinalco donde se esculpió un
templo en la roca, el cual quedó
Pirámides
Entre los tipos arquitectónicos más comunes no podemos dejar de
mencionar los templos piramidales de planta cuadrada o rectangular con
una sola escalinata de acceso en la parte frontal, delimitada por dos alfardas
lisas. Muchas de las pirámides de Tenochtitlan seguían este modelo.
El templo de Tepoztlán es de
planta rectangular y tiene dos
salas: a la primera se accede por
una puerta dividida por dos
pilastras, mientras que en la del
fondo hay un banco corrido
decorado con relieves que muy
bien pudieran ser insignias
funerarias.
Las ciudades estaban diseñadas
de tal forma que el sol incidiera
en ellas el mayor número de
horas posible y estaban por lo
general en zonas con un poco
de desnivel para poder
aprovechar mejor los recursos
hidrográficos, la calzada de las
partes más altas se encontraban
diseñadas para que el agua
fluyera de forma canalizada con
el paso de las lluvias y
desembocara en unos depósitos
para su uso posterior.
El agua una vez utilizada volvía a
un torrente de agua que la
conducía a unos depósitos más
bajos ( por lo que se deduce que
las zonas más bajas también eran
las más pobres ) el último
deposito era utilizado para el
riego de los campos y dar de
beber a los animales.
Otro modelo arquitectónico azteca relativamente frecuente es la pirámide
de planta circular que tradicionalmente se ha atribuido a santuarios del
dios Ehécatl, deidad del viento, que en su aspecto de remolino. Las más
conocidas son la de Calixtlahuaca y la de la estación de metro de Pino
Suárez.
Otra construcción muy
característica de los aztecas es
un tipo de plataforma decorada
con calaveras, que constituían la
base del tzompantli, estructura
donde se acumulaban los cráneos
de los sacrificados. Sólo se
conserva un pequeño altar que se
encuentra en el Museo Nacional
de Antropología de México.
Teotihuacán y el Tajín
Centros urbanos y
ceremoniales, las ciudades de
Teotihuacán y El Tajín
sintetizan el mayor esplendor
del período clásico de la
cultura mesoamericana.
Ambas remontan su desarrollo
inicial al siglo I, alcanzando la
primera su mayor apogeo
entre el V y el VI, y la segunda,
entre el VII y el X. Una y otra
tienen en común una
arquitectura de excepción,
cuyas principales
manifestaciones son la
proliferación de palacios y