El escaso futuro
¿Cómo es que algo tan hermoso se convirtió en esto? ¿Por qué ciento que éste presente pudo
haber sido diferente? Si tan solo algo hubiera cambiado… ¿o es qué era irreversible?. Aun
recuerdo el hermoso atardecer en el mar, esos colores del cielo reflejado en el agua, ese
aroma de humedad, las hermosas criaturas, los peces y el sonido de las olas, el meterse y
nadar en la diversión de una playa y la felicidad... ¡Ah la felicidad!
Hoy en día eso parece ser menos que un recuerdo, un sueño lejano. Los polos se han derretido
casi por completo inundando las ciudades; la basura que había en el mar aumentó por la
basura en tierra; las especies marinas inofensivas se extinguieron o evolucionaron, se
adaptaron al mar contaminado, mientras que los humanos sobrevivientes también nos
adaptamos, pero a vivir en las puntas de los rascacielos. Algunos botes que no fueron
arrasados en las inundaciones nos sirven para buscar alimento, pero casi todo ser viviente es
dañino y venenoso. La población disminuye, los niños dejan de nacer y no solo eso, sino que
ahora somos lo más bajo en la cadena alimenticia, los animales nos comen para sobrevivir
mientras que ellos son comidos por animales más grandes.
Aun puedo recordar cuando la especie humana estaba en la cima, cuando nosotros
extinguíamos especies, cuando los animales eran nuestro alimento, cuando los acuarios
estaban llenos de hermosos peces ¿Quién diría que los papeles se voltearían? ¿Qué nuestra
ignorancia nos llevaría a esto? ¿Qué nuestros logros serian destruidos por nosotros mismos?,
nuestras fuentes de energía terminarían matándonos, nuestra basura terminaría
inundándonos. Sentíamos que nuestro planeta era inmortal, que los recursos jamás se
acabarían, que el calentamiento global era una exageración. Ya ni siquiera cuando el calor
aumento, las lluvias empezaron antes de lo que debían y las marejadas desaparecían los
continentes, hicimos algo para cambiar, tratar de salvar lo que era salvable, seguimos el
mismo camino perdiendo el futuro y soñando con el pasado, llorando por el presente.
Desearía que todo hubiera sido diferente, que ahora al ver el mar, no viera gris, si no esos
hermosos colores; que en lugar de sentir temor, sintiera tranquilidad. Hoy, en mi último aliento
sueño con él hubiera inexistente, deseando haber abierto los ojos ante la realidad antes que
fuera tarde. Desearía despertar...
Autora: Alexia González Luna