1. CATEGORIAS DE TALENTO HUMANO, COMPETENCIA PROFESIONAL Y
AMBITO DE DESEMPEÑO
Introducción.
Abordaremos la relación que existe entre el talento humano, la competencia
profesional y el ámbito de desempeño; primero tenemos que tener en cuenta que
mientras el elemento humano esté dispuesto a proporcionar su esfuerzo, la
organización marchará, de lo contrario se detendrá.
Esta nueva cultura del trabajo, requiere un conjunto de nuevas competencias
cognitivas, sociales y tecnológicas, requerimientos que han puesto a la formación
en los primeros lugares de la agenda de las políticas sociales y de desarrollo. La
emergencia de nuevas formas de organización del trabajo y de la producción, que
colocan al conocimiento dentro de la estrategia de productividad y competitividad,
han hecho que la calificación sea una clave fundamental en el acceso al empleo.
Reconocer el concepto de competencia en el ámbito laboral, significa tener la
posibilidad de incorporar al proceso una nueva concepción, dirigida a la formación
de un profesional con aptitudes y actitudes para que responda a las exigencias
que la sociedad le plantea, no sólo en el marco de la profesión sino en lo social,
donde de forma consecuente sea un seguidor fiel de su historia y tradiciones,
reflexivo y sobre todo capaz de enfrentarse y atemperarse a los nuevos retos y
exigencias de la ciencia y la técnica para transformar el medio, desarrollarlo y con
ello transformarse a sí mismo.
En las condiciones actuales resulta vital para un profesional el desarrollo de las
capacidades para asimilar los conceptos científico, técnicos de su campo,
debiendo en su formación académica, desarrollar competencias que le permitan la
aplicación de estos para solucionar problemas de su profesión.
Desarrollo de Contenidos.
En los nuevos mercados, por los cuales estamos transitando, se pueden identificar
tres aspectos que se destacan por su importancia: La globalización, el permanente
2. cambio del contexto y la valoración del conocimiento.
Cuando hablamos de Recurso Humano se está catalogando a la persona o
recurso humano como un instrumento, sin tomar en consideración que éste es el
capital principal, el cual posee habilidades y características que le dan vida,
movimiento y acción a toda organización o empresa, por lo cual voy a utilizar el
término Talento Humano a partir del día de hoy. Toma muchos años reclutar,
capacitar y desarrollar el personal necesario para la conformación de grupos de
trabajos competitivos o de grupos de trabajo para las áreas que necesitamos, es
por ello que las empresas u organizaciones han comenzado a considerar al talento
humano como su capital más importante y la correcta administración de los
mismos como una de sus tareas más decisivas. Sin embargo la administración de
este talento no es una tarea muy sencilla ya que hay muchas organizaciones y
empresas que poseen muchos trabajadores y se requiere de más tiempo.
Cada persona, trabajador u empleado es un fenómeno sujeto a la influencia de
muchas variables y entre ellas las diferencias en cuanto a aptitudes y patrones de
comportamientos son muy diversas que dependen del ambiente de trabajo donde
se desempeñan.
El Recurso Humano presenta una increíble actitud para desarrollar nuevas
habilidades, obtener nuevos conocimientos y modificar aptitudes y
comportamientos. En los últimos años se ha observado como las empresas líderes
y competitivas han comprendido que solo mediante una racional inversión en
programas de capacitación lograran obtener el nivel de competencia exigido en los
nuevos mercados, los departamentos de Capacitación y Desarrollo de Personal
realizan diagnósticos para identificar necesidades de formación, con el objeto de
desarrollar competencias; todo esto es útil para el desarrollo humano así como
para generar sentido de pertenecía en los integrantes de la organización. El
desempeño se evalúa mediante un instrumento diseñado para tal fin, de acuerdo a
las competencias laborales establecidas, con el objeto de identificar las
limitaciones y de ser necesario se trazan planes de mejoramiento, llamado
Evaluación para el Desarrollo. Los resultados profesionales se manifiestan a
través de la interacción, si se limita el desarrollo de estas destrezas se corre el
3. riesgo de tener profesionales con talento pero que no se encuentran motivados en
su trabajo. Así mismo, podemos señalar que para tener talento se necesita poseer
conocimientos y ciertas características de personalidad. Estos además de una
actitud positiva pueden ayudarnos a desarrollar actividades en beneficio de la
empresa.
Dentro de los conocimientos vamos a encontrar los conocimientos profesionales
relacionados al estudio y a la preparación, hasta los conocimientos elementales
que aprendemos en nuestro diario vivir. Cada persona posee un conjunto de
competencias, unas más explotadas que otras de acuerdo a nuestros aprendizajes
y las llamadas competencias básicas que como seres humanos sabemos que
podemos ejecutarlas pero no las desarrollamos, por lo tanto, una persona al
momento de trabajar pondrá en práctica los conocimientos y las competencias
adquiridas.
Sabiendo que las competencias se conforman por las características de
personalidad que vinculan el éxito y es ahí donde volvemos al término talento.
El talento individual de cada persona está conformado por capacidades, las
mismas que se presentan en tres planos:
Los conocimientos se adquieren mayoría de veces dentro de los años
académicos de estudio.
Las destrezas por su parte no son tan fácilmente desarrollables requieren
una conexión directa entre el conocimiento aprendido y una acción.
Las competencias por su parte son relacionadas directamente al cerebro, la
personalidad y la percepción, un ejemplo de competencia podría ser la
adaptabilidad al cambio, el autocontrol, etc.
La clave es la motivación que se brinda a cada empleado, la identidad que
se imprima para el desarrollo de los objetivos y sobre todo el trabajo en
equipo que es fundamental para la empresa.
4. El término competenciaaparece relacionado con los procesos productivos en las
empresas, en donde el desarrollo del conocimiento ha sido muy acelerado.Debe
transmitir claramente la idea que los procesos educativos tienen que estar
dirigidos fundamentalmente a la formación de un ciudadano que reúna
condiciones que la sociedad actual está demandando, es decir, en dependencia
del nivel de escolaridad de que se trate, sean sujetos con capacidad plena para el
análisis, la argumentación, preparados para asumir los desempeños laborales que
las distintas profesiones y oficios requieren.
La Competencia Profesional se identifica en las normas a través de la definición
de elementos de competencia (logros laborales que un trabajador es capaz de
conseguir), criterios de desempeño (definiciones acerca de la calidad), el campo
de aplicación y los conocimientos requeridos.
Está claro que la educación a nivel superior debe estar orientada a desarrollar en
el estudiante capacidades y habilidades que le posibiliten una participación
productiva en la sociedad, y, puesto que la tendencia es hacia una sociedad del
conocimiento, la educación debe apuntar a formar en el estudiante una visión
científica del mundo en que vive, debe, por tanto, propiciar el entendimiento y
manejo de la Lógica y, en general, de la Ciencia, debe alentar la creatividad, el
desarrollo intelectual, la búsqueda de información y la adecuada selección de
fuentes, debe fomentar la capacidad de identificar problemas y proponer
alternativas de solución y desarrollar en los estudiantes una actitud crítica, abierta
y creativa frente a la investigación y su práctica.
La dinámica del proceso docente educativo permite que el estudiante adquiera y
desarrolle actitudes, aptitudes y valores inherentes a su profesión, es decir,
contribuye a la formación de competencias profesionales, las mismas que están
asociadas al desempeño que se aspira del egresado de la persona como la
totalidad en su integralidad.
Es por esto que el profesional juega un papel muy esencial en estas
circunstancias, las cuales requieren una buena formación que responda a las
5. necesidades de la sociedad frente a esto y a la gran oferta que hay en el mercado
de profesionales es primordial pensar en una educación muy completa en el
sentido que le permita ser competitivo no tanto en materia de poseer conocimiento
para llevar a cabo el desarrollo de las practicas, sino también que cree una
responsabilidad social con el entorno en el cual se desempeñara, para lo cual es
importante tener una adecuada formación en valores.
En estos momentos se pretende entonces incorporar en la educación los
siguientes parámetros:
Formación en Competencias: al profesional de hoy se le hace necesario
mejorar y cualificar su competencia argumentativa ya que el reto que se
afronta es el de interpretar, proponer y actuar, para lo cual se supone que
se tiene un dominio de competencias en lenguaje, es decir, comunicativa,
textual y gramatical.
Responsabilidad Social: cualquier profesional muy capacitado, en su área
correspondiente debe de actuar de acuerdo a los requerimientos del
entorno, es por esto que tiene una responsabilidad social puesto que la
información depende de las diferentes áreas de la comunidad esto es;
económica, política, social, financiera, ambiental y demás; de modo que
esta información adquiera su integridad mediante una relación
fundamentada en valores, pautas y requisitos de cada contexto. Por
consiguiente, el desarrollo de cada uno de estos aspectos pone de
manifiesto la alta responsabilidad social.
Formación Ética: en la formación profesional es esencial que se
tenganelementos para ejercer la profesión de forma que sean socialmente
útiles y reconocidos; en la práctica profesional es indispensable que el
comportamiento del profesional en cuanto a sus relaciones con todos los
actores que conforman el entorno en el cual se desenvuelve como colegas,
usuarios, otros profesionales y el resto de la sociedad se de en términos de
una honestidad e integridad para así difundir la credibilidad y confiabilidad
de la información como resultado de las actividades realizadas por este.
6. La coyuntura actual del mercado laboral, las exigencias de las nuevas tendencias
y el proceso de globalización que se está viviendo, exigen que sea un profesional
competente, con altos estándares de formación que le permitan afrontar los
constantes y nuevos retos.
El valor agregado que un profesional que puede brindar a sus clientes es
directamente proporcional con su competencia. Para asesorar a una empresa se
requiere un amplio conocimiento y experiencia, y la única forma de conseguir
estos elementos es a través de una formación e investigación continua.
En su artículo “Reinvención de la Universidad” Tünnermann afirma que, debido al
cambio en la concepción del hombre y de su universo, la educación debe enfatizar
sobre la formación básica general y priorizar los procesos de aprendizaje, de
suerte que el futuro graduado esté dotado de los recursos para seguir educándose
por sí mismo.
El profesional pueda ser competitivo y ser capaz de seguir auto educándose, para
ello debe:
Desempeñarse adecuadamente en distintas situaciones comunicativas:
Competenciacomunicativa
Tener disposición y capacidad para construir sus propios conceptos:
Competencia Cognitiva
Saber identificar, acceder y manejar fuentes de información, según
losrequerimientos y mantener una actitud crítica y reflexiva frente a hechos
o fenómenos: Competencia Indagativa.
Fijar posiciones claras y sustentarlas adecuadamente: Competencia
Argumentativa.
Identificar y formular problemas y desarrollar y presentar propuestas de
solución: Competencia propositiva.
La comunicación siendo un aspecto de gran importancia en la vida en general, las
investigaciones de los últimos tiempos es considerada como el fenómeno externo
7. de las interrelaciones personales, como el proceso de su realización y modo de
manifestarse; además, constituye el mecanismo interno de la vida social en grupo.
En la comunicación se da la unidad de lo cognitivo y lo afectivo, por eso se ha
precisado que las palabras corresponden predominantemente al componente
cognitivo, y los gestos al afectivo.
Un profesional debe ser capaz de transmitir a las personas interesadas los
resultados de su trabajo con claridad y de forma oportuna, debe trabajar en equipo
para lograr un mejor ambiente de trabajo y fluidez en la comunicación, capacidad
que debe potenciar las relaciones con colegas de otras entidades y la promoción
de los productos de la suya.
El conocimiento siempre está en constante evolución, por lo que su adquisición y
aplicación es continua, el profesional haciendo uso de sus conocimientos debe ser
capaz de asimilar cambios, de emitir criterios e informaciones de forma
independiente y creativa. Además, debe ser conocedor de las leyes, normas y
regulaciones que le son imponibles a su profesión; cuestiones que le son
necesarias para gestionar proyectos y para contribuir a cumplir las metas de la
entidad a la que pertenece.
Con los permanentes cambios que se suceden en el mundo en los ámbitos
económico, tecnológico, financiero, todo profesional debe estar apto para
asumirlos y actuar en consecuencia; debe ser y sentirse parte de la entidad en la
que trabaja, pero a la vez actuar de tal forma que sus opiniones y acciones sean
notadas y de utilidad dentro de esta.
La identificación y formulación de problemas de una profesión contribuye a
perfeccionarla, y de paso, responder a las necesidades de la sociedad. El papel
del profesional en una entidad, incluye la resolución de problemas dados en su
ámbito profesional utilizando avances científicos, técnicos de su ciencia y
basándose en los conocimientos y experiencia adquiridos en su formación y en su
vida laboral.
8. Teniendo en cuenta la necesidad de que en la universidad se forme el capital
humano en cuanto a tareas de investigación y producción de conocimientos, se
hace necesario entonces asumir la investigación como metodología que le enseña
al estudiante a buscar y construir el conocimiento, desde la perspectiva del papel
protagónico que tiene en el proceso de construcción de saberes, actitudes y
valores.
Por lo que se define como competencia investigativa el manejo de herramientas
básicas de investigación, a la identificación y formulación adecuada de problemas
que el profesional debe resolver, accediendo a la información con eficacia y
estando en posibilidad de transformarla en conocimiento.
Implícitos en todas estas competencias propuestas para el profesional, están los
valores que le corresponden a este. Entiéndase por valores características
personales que orientan al hombre a actuar de acuerdo con las normas morales,
éticas de la sociedad de hoy.
Se considera que un profesional debe tener los siguientes valores; honestidad,
responsabilidad, patriotismo, colectivismo, la ética más rigurosa como ciudadano y
profesional, en relación con el cumplimiento de los principios morales vigentes y
las leyes y reglamentaciones establecidas por el sistema legal; la puntualidad en
todos los aspectos relacionados con sus funciones; la excelencia en el desarrollo
de su trabajo; la creación de hábitos de investigación y perfeccionamiento
constante en la actividad que realiza; la honestidad en su comportamiento; la
pulcritud en el vestir y en el desarrollo de su trabajo.
El acelerado avance científico y tecnológico genera nuevas complejidades en las
organizaciones y sistemas productivos, las cuales producen transformaciones en
todos los ámbitos y sectores de la sociedad, originando un cambio social y cultural
irreversible. Costumbres arraigadas se debilitan, normas y modelos de conductas
se transforman con relativa celeridad hacia nuevas relaciones sociales que es
preciso afrontar con valores y actitudes que den respuesta al cambio orientándolo
hacia el progreso humano.
9. La educación en valores en la Educación Superior debe encaminarse
fundamentalmente a la formación y al desarrollo de valores profesionales,
entendidos éstos como los valores humanos contextualizados y orientados hacia
la profesión. Sus significados se relacionan con los requerimientos universales y
los particulares de la profesión. Constituyen rasgos de la personalidad profesional
y contribuyen a definir una concepción integral del ejercicio de la profesión.
La educación en valores en la formación profesional es el proceso de humanizar e
intencional lo social de la profesión en las competencias profesionales, desarrollar
la personalidad profesional integral, mediante la modelación del ejercicio
profesional en el proceso docente y en toda la vida universitaria para el desarrollo
de los futuros modos de actuación profesionales.
Para ello el modelo o aspiración de competencias y actitudes profesionales debe
estar definido y debe tener un carácter pluridimensional, que abarca las siguientes
dimensiones: intelectual, técnica, ética, estética, política y otras según la profesión,
y de otros factores a considerar.
La cuestión no estriba en la mayor o menor información que un profesional posea,
sino en los principios y las concepciones que éste posea para comprender a la
sociedad y, en ella, el lugar de su profesión para gestionar adecuadamente la
ciencia a la tecnología.
En estas condiciones la formación integral y especializada son dos pilares de la
profesionalidad, de ahí que la formación sociohumanista en particular adquiera
mayor significado en cuanto a la creación de una cultura que permita interpretar el
paradigma vigente y lograr el desarrollo sustentable.
La solución se haya en concebir la formación sociohumanista a partir del modelo
del profesional, que integre como un todo las posibilidades que brindan las
ciencias sociales, naturales y exactas, así como las técnicas, desde enfoques
interdisciplinarios y a lo largo de todo el proceso de formación profesional.
10. La formación sociohumanista es parte del desarrollo de la personalidad, por lo que
no puede estar separada ni simplemente añadida al modelo del profesional, sino
que es parte intrínseca del desarrollo de valores.
“El humanismo es sencillamente un intento y una actitud del espíritu humano en
permanente proceso de evolución, que se inicia en el momento en que tomamos
conciencia de nuestra diferencia con las demás especies biológicas, que busca el
respeto, la dignidad y los derechos del ser humano para la formación integral de
su individualidad y de su personalidad, lo cual requiere y conlleva condiciones
sociales que propicien su transformación y realización como ser humano” (Arana-
Ramos).
Conclusión.
El talento humano es la principal fuerza motriz que mueve las empresas, por lo
tanto, su cuidado y desarrollo depende de las motivaciones brindadas y de saber
determinar sabiamente hacia donde queremos formar al profesional que tenemos
con nosotros.
En relación a las competencias profesionales, nos damos cuenta que se valora
muchísimo el compromiso social, los conocimientos adquiridos, la capacidad para
resolver problemas y las habilidades interpersonales encabezando el grupo de
competencias relativas a los valores con los que cuenta el personal. Sin duda
alguna, el saber explotar las competencias en los profesionales, mejora la
eficiencia y la eficacia en las ejecuciones administrativas. Constituyen la base para
lograr la formación integral del estudiante universitario, al ser la representación de
los conocimientos, habilidades, valores y actitudes que deben reunir los egresados
de Educación Superior.
Por último el desempeño como factor de evaluación, dentro de las empresas y
organizaciones optimiza y mejora la retroalimentación en la que debe constar todo
personal y en donde se analizan las competencias profesionales de cada
empleado.