Las tortugas marinas han existido desde los dinosaurios y usan su caparazón para protegerse de depredadores. Se reproducen poniendo huevos en la arena para incubarlos, y son demasiado lentas. Los leones son depredadores carnívoros que viven en manadas dominadas por las hembras. Pelean para defender su territorio y conseguir comida siendo imponentes en su hábitat.