MANUAL PARA PADRES:
¿QUÉ ES EL JUEGO?
El juego es una actividad natural en el hombre, tanto para adultos como para niños, y
especialmente importante para estos últimos, que resulta fácil de reconocer y está presente a lo
largo de toda la vida del ser humano.
¿En qué beneficia el juego?
– Ayuda a los individuos que lo practican a comprender el mundo que les rodea y actuar sobre
él.
– Se trata de una actividad compleja porque engloba conductas a distintos niveles: físico,
psicológico, social, etc.
– Aparece también en los animales mamíferos (caninos, felinos, etc.) y se basa en la imitación
y la exploración por ensayo y error, pero a diferencia de los humanos, hay una carencia total de juego
simbólico.
– El juego forma parte del comportamiento humano y de la cultura de cada sociedad, y ha
estado presente a lo largo de toda la historia de la humanidad. Los niños de todas las épocas (incluso
las más primitivas) y de todas las épocas han jugado. Sin embargo, desde el punto de vista de la
antropología cultural se ha comprobado que el juego infantil, aún teniendo este carácter universal y
presentando una evolución similar según la edad, posee connotaciones diferentes según el contexto
cultural.
CARACTERÍSTICAS DEL JUEGO
- Es Libre, es una actividad voluntaria no admite imposiciones externas. Es una actividad
espontánea y autónoma no condicionada desde el exterior. El juego es una actividad
espontánea, voluntaria y recreativa. Se realiza por elección, no por obligación. .
- Es una actividad placentera que fomenta y desarrolla la capacidad de disfrutar, divertirse y
recrearse, proporciona placer inmediato. Hay toda una serie de conductas asociadas al juego, la
risa, la diversión, etc.
- El juego se desarrolla en una realidad ficticia. A través del juego, el niño ensayaposibilidades
futuras de su vida adulta.
- Tiene un carácter universal, constante. En todas las sociedades de todos los tiempos se han
dado situaciones de juego.
- Es acción e implica participación activa, jugar es hacer y siempre implica participa. Algunas de
las capacidades implícitas al hecho de jugar son explorar, moverse, pensar, deducir, imitar,
relacionarse, etc.
- No necesita un material concreto. Los niños inventan múltiples recursos para situaciones de
juego. Cualquier juego puede realizarse con algún objeto o material, o en ausencia absoluta del
mismo.
- Es innato, es la actividad propia de la infancia, en los niños suele ser espontáneo, aunque
también puede estar preparado o motivado.
- Todo juego se desarrolla en un espacio y un tiempo. La duración temporal vendrá limitada por
la motivación del que juega, y el espacio por las posibilidades del lugar físico en que se realiza.
- Cualquier actividad puede ser convertida en un juego.
- Es una actividad que implica un fin en sí mismo, carácter autotélico, lo importante son los
medios, la actividad no los fines. Autotelismo quiere decir que una actividad tiene finalidad en
sí misma, es decir, que una persona no pretende con ella nada más que el mero hecho de
realizarla porque le resulta divertida y placentera..
- Favorece la socialización. Puede ser utilizado como un recurso educativo que favorezca el
aprendizaje en sus múltiples facetas, ya que facilita el conocimiento del entorno, de las
relaciones sociales, la resolución de conflictos. Enseña a respetar las normas, a relacionarse.
Mediante la comunicación, la competición y la cooperación, se facilitan procesos de inserción
social por eso tiene también una función compensadora de desigualdades, integradora y
rehabilitadota, sobre todo en la infancia. Los juegos son adaptables y permiten la participación
de niños de diferentes edades, sexos, culturas, etc.
EVOLUCIÓN DEL JUEGO
Durante el desarrollo del niño, tanto él como el juego pasan por cuatro fases las cuales tienen unas
características específicas. Las indicaremos de forma breve y resumida:
JUEGO FUNCIONAL
Es un juego de ejercicio que no entraña ningún simbolismo ni técnica alguna específicamente
lúdica, pero que consiste en repetir con placer actividades adquiridas con un fin de adaptación.
Se trata del juego característico de la primera etapa de la vida del niño, hasta los dos años y se
corresponde con la etapa sensoriomotora, desde los primeros días de vida, los bebés juegan con su
propio cuerpo. Así, durante el período de 0-2 años los juegos se centran en la acción, en los
movimientos, en la manipulación, en la experimentación y en la observación de objetos y
personas. Se trata de un juego de ejercicio que consiste en repetir, por simple placer, actividades
adquiridas.
El ejercicio funcional favorece:
• El desarrollo sensorial.
• La coordinación de movimientos y desplazamientos.
• El desarrollo del equilibrio estático y dinámico.
• La comprensión del mundo, de los objetos, de las relaciones de causa y efecto, etc.
• La coordinación óculo-manual.
• La socialización.
• La autoestima.
JUEGO SIMBÓLICO
Aparece cuando el niño ha adquirido la capacidad de representación, mediante la cual representa
acciones reales e imaginadas, emula la acción de los mayores y se transforma en cualquier
personaje: es el juego de hacer como si… En esta etapa el niño posee una representación mental
de los objetos y puede evocar personas y casas que no están presentes. Sus juegos adquieren una
tendencia natural a la representación y simulación de vivencias experimentadas. La complejidad de
este juego simbólico irá progresivamente en aumento y supondrá un gran avance cualitativo cuando
aparezca en este estadio la posibilidad del juego grupal. Posee un mayor control de sus movimientos
y necesita mayor vigilancia del adulto.
El juego simbólico aporta beneficios al desarrollo infantil como:
1. Comprender y asimilar el entorno.
2. Conocer los roles sociales, normas de conducta, valores, la socialización.
3. Desarrollar el lenguaje.
4. Favorece la imaginación y la creatividad.
Las principales acciones que se representan en el juego simbólico son relacionales, y hacen
referencia tres categorías de argumentos.
• Primer grupo argumentos que son una especie de versión o resumen de la realidad social
simplificada. Jugar a familias, a médicos, a las casitas, a los colegios....
• Un segundo grupo está menos ligado a la realidad, y más a la ficción y la imaginación:
jugar a superhéroes.
• Un tercer grupo está constituido por los argumentos individuales inventados: el juego de los
amigos.
JUEGO DE CONSTRUCCIÓN
El juego de construcción comienza alrededor de los 12 meses y se puede definir como un conjunto
de acciones coordinadas hacia un fin específico, donde los materiales utilizados cobran
especial relevancia.
Si se aportan los materiales necesarios para la práctica de este tipo de juego, observaremos cómo
niños y niñas tienen una tendencia natural a disfrutar con actividades tales como encajar, apilar,
clasificar. Normalmente durante los primeros momentos evolutivos de este juego, dicha actividad
se realiza individualmente y con elevada concentración y esfuerzo.
No suele haber simbolización sino imitación de la realidad. Por lo tanto, necesita tener un cierto
conocimiento de qué quiere hacer y cómo lo quiere hacer.
• Facilita la motricidad fina y gruesa y el uso de la coordinación mano-ojo. Sirve de base para
el aprendizaje del control muscular, pues deberá tener mucho cuidado con sus movimientos
y la fuerza que aplica para que las estructuras ya formadas no caigan.
• Desarrolla la atención y la concentración.
• Estimula el esfuerzo para conseguir lo deseado y la paciencia.
• Facilita la práctica del pensamiento abstracto, pues los niños y niñas necesitan haber jugado
con ideas matemáticas y de construcción para enfrentarse a las operaciones concretas y
después a las abstractas. Desarrolla la capacidad de análisis y síntesis.
• Potencia la creatividad.
• Facilita el juego compartido, la socialización.
Asimismo el tiempo de concentración dedicado a la actividad también va aumentando:
1. A los nueve meses golpea el suelo con las piezas.
2. Al año puede encajar alguna pieza muy sencilla y apilarla con gran dificultad.
3. A los dos años construye una torre o un tren.
4. A los tres años puede comenzar a encajar piezas diferentes: cuadrados, círculos,
rectángulos, puzzles planos.
5. A partir de los cuatro años (y en adelante) las piezas y los montajes aumentan en número
y dificultad. Podrá escenificar un camino con nutrido tráfico o una granja llena de animales.
JUEGO DE REGLAS
Las reglas aparecen tímidamente, favorecidas por el juego simbólico, a partir de los 4 o 5 años,
pero no será hasta el periodo de las operaciones concretas, comprendido entre los 6-7 y los 12 años,
que dichas reglas se conviertan en la base específica de los juegos infantiles. Antes de los 6 años
el niño utiliza ciertas normas en sus juegos, pero que son totalmente egocéntricas, él las dicta y las
modifica a su antojo y en su beneficio. A medida que evoluciona, estas normas se convierten en
reglas exteriores a él, que regulan el juego del grupo y que va aceptando al tiempo que
aprende a compartir y que aparece el compañero de juego.
A partir del uso de esas primeras reglas decididas y utilizadas por los jugadores en el juego
simbólico, los niños pueden empezar a realizar otros juegos reglados con la participación o no del
adulto. En estos juegos de reglas los jugadores saben antes de iniciar el juego lo que cada uno tiene
que hacer. Este es el caso de los juegos tradicionales como “El lobo” “El escondite”, a los que los
niños de 4 o 5 años ya pueden empezar a jugar.
La obligatoriedad de las reglas, a partir de los 6 años, no resulta del acuerdo de los jugadores, sino
que tiene un carácter de verdad absoluta.
o Son elementos socializadores que enseñan a los niños a ganar y perder, a respetar turnos, a
considerar las opiniones y acciones de los otros.
o Son fundamentales en el aprendizaje de distintos tipos de conocimientos y habilidades.
o Favorece el desarrollo del lenguaje, la memoria, el razonamiento, la atención y la reflexión.
IMPORTANCIA DEL JUEGO Y SU DESARROLLO
Hasta bien entrado el siglo XX la infancia no se contempló como una etapa de la vida con identidad
propia y por tanto no se consideraba propicio que el niño dedicase parte de su tiempo a estas
actividades lúdicas y a otros aprendizajes.
Durante muchos años se vivió un ambiente totalmente adverso a los más pequeños: la sociedad
rural y con posterioridad la urbana, convirtió las escuelas en espacios de preparación para ser
adultos. Esta fase de adultez llegaba a los pequeños con demasiada antelación y sin ningún tipo de
intervención educativa. La mayoría de actividades que realizaban estos niños, lejos de ser lúdicas,
se convertían en una preparación de trabajos futuros y todos ellos con fines de carácter productivo.
En la actualidad se considera que el juego es una actividad lúdica que se debe manifestar de una
manera libre y espontánea, que gracias al juego niño y niñas desarrollan de forma adecuada
sus capacidades, evolucionan de unas conductas innatas y reflejas a un grado de desarrollo
biológico, psíquico y social cada vez más complejo y adaptado y, por supuesto, totalmente
necesario para su supervivencia.
Será precisamente mediante estas continuas actividades lúdicas que los niños y niñas más pequeños
logren ejercitar y coordinar sus movimientos, descubran su espacio circundante, manipulen
los objetos más cercanos e interaccionen con las demás personas, al principio con adultos más
tarde con iguales; y todo ello de una forma placentera y positiva.
A medida que pasan los años estas actividades se vuelven más complejas y elaboradas, los
campos de acción se amplían, así como las interacciones y las experiencias a escala personal y
grupal. Ello permite un desarrollo de los ámbitos psicomotor, cognitivo y afectivo ajustado para
lograr la integración de estos niños en el ámbito social, donde se tienen que desenvolver durante
toda su vida.
Existe una conciencia del valor del juego como camino para educar al hombre y como una de las
mejores vías para aprender valores, normas, interiorizar conceptos y desarrollar capacidades. En los
primeros años de nuestra vida el juego favorece nuestro desarrollo integral a distintos niveles.
Todo lo que aprendemos a través del juego lo asimilamos de un modo más rápido y eficaz. Lo
que más le gusta a un niño es jugar, no hay nada que le motive más.
El desarrollo de las diferentes capacidades básicas que se produce en niños y niñas a través de la
actividad lúdica se entiende de forma global e integrada, sin perder de vista esta consideración, es,
sin embargo para su estudio, mucho más clarificador presentar la contribución del juego al
desarrollo separada en distintos ámbitos. Queda explícito que los distintos ámbitos se
interrelacionan continuamente, de manera que el desarrollo de un ámbito influye en los otros.
JUEGOS MÁS HABITUALES
Clasificación de la actividad lúdica: los juegos
Criterios Clases de juegos
Espacio en el que se • Juegos de interior
realizan • Juegos de exterior: en la naturaleza, en la playa, parque,
etc.
Papel que desempeña • Libre
el adulto • Dirigido
• Presenciado
Número de • Individual
participantes • Paralelo
• Grupo
Actividad que • Juegos sensoriales
promueve en el niño • Juegos motores
• Juego simbólico
• Juegos orales
• Juegos de razonamiento lógico-matemático
Por el material que • Con material
utiliza • Sin material
Por las relaciones que • Relación asociativa
se establecen • Relación competitiva
• Relación cooperativa
Por las reglas • Juegos sin reglas
• Juegos reglados
Por el origen • Étnicos
• Multiculturales
• Populares o tradicionales
Otros • Juegos de mesa
• Juegos de paracaídas
• Juegos de agua
• Grandes juegos, gymkhanas
• Juegos tecnológicos
Como vemos, hay mucha variedad de juegos, pero nos centraremos en tres juegos muy utilizados en
educación infantil:
CESTO DE TESOROS
El cesto o la cesta de los tesoros es una actividad que consiste en situar en el suelo un cesto lleno de
objetos de tal forma que los niños y niñas, sentados a su lado, puedan acceder fácilmente a ellos y
explorarlos sensorialmente. La cesta de los tesoros es una actividad dirigida a una edad
determinada, puede empezar a realizarse cuando los niños o niñas ya son capaces de permanecer
sentados durante un cierto periodo de tiempo, normalmente hacia los 5 o 6 meses, y es conveniente
dejar de realizarlo cuando empiezan a caminar. Pueden acceder al cesto en grupos de tres. Algunos
de los objetivos que se pueden trabajar con este juego son:
• Mejorar la coordinación visomanual.
• Utilizar los distintos sentidos.
• Conocer distintos tipos de objetos.
• Desarrollar la curiosidad innata para descubrir las cualidades de las cosas.
• Aprender por sí solo y estructurar el pensamiento.
• Aumentar la capacidad de concentración y exploración.
La cesta ha de ser lo suficientemente grande para que quepan los objetos, pero también lo
suficientemente pequeña para que los niños puedan acceder a ella con facilidad, y permanecer
estable. La selección de los objetos es importante, ya que de ello dependerán las posibilidades de
experimentación que pueda practicar de pequeño. Los objetos que puedan encontrar en la cesta
nunca deben ser juguetes comerciales, y algunos autores tampoco admiten objetos de plástico,
deben ser objetos que podemos encontrar en una casa sin necesidad de que tengan una
utilidad concreta. La cesta debe contener unos sesenta objetos de materiales diferentes que deben
ir renovando, aunque no todos a la vez, de forma sucesiva durante los 5 o 6 meses que dura la
actividad. Entre los materiales que podemos incorporar al cesto de los tesoros:
• Objetos naturales: piedras, corcho, limones, manzanas, esponjas naturales, cepillos, pelotas,
brochas, etc.
• Objetos de madera: cucharas, castañuelas, cuencos, carraca, pinzas, etc.
• Objetos metálicos: llaveros, embudos, triángulo, latas, colador, campanas, etc.
• Objetos de piel o ropa: monederos, pelotas, muñecos de trapo, fundas de gafas, bolsas de
tela, etc.
• Objetos de papel y cartón: libretas, tubos, pepeles variados, cajas, etc.
• Objetos de vidrio (no cristal): pomos, espejitos, etc.
La función del educador es doble, de un lado la organización de los recursos y el espacio, cómodo,
seguro, en un ambiente tranquilo y relajado, reponer los materiales, lavarlos, etc; por otro la
atención a los niños, observarlos sin intervenir, no debe interferir en su acción.
EL JUEGO HEURÍSTICO
Consiste en una actividad de juego en la que los niños interactúan con distintos tipos de materiales.
A través de la manipulación y exploración de objetos, se ponen las bases para la formación de
conceptos y el aprendizaje de actitudes en relación con las personas y las cosas. Con este juego se
puede aprender la relación causa-efecto y conceptos prácticos como dentro-fuera o la noción de
cantidad (mucho-poco-nada o lleno-vacío) entre otros. El juego consiste en poner a disposición del
grupo de niños una gran cantidad de materiales diversos que ellos puedan explorar, tocar, oler,
mover, etc. Aunque lo practiquen varios niños el juego heurístico es individual. Son muchos los
objetivos que se pueden trabajar con este juego:
• Desarrollar la coordinación visomanual.
• Mejorar y/o aumentar los movimientos en la manipulación de objetos.
• Realizar acciones variadas: apilar, enroscar, llenar, vaciar, meter, sacar, abrir, cerrar, tapar,
destapar, etc.
• Realizar ordenes sencillas del educador.
• Establecer relaciones entre los objetos
• Ordenar y organizar objetos.
• Identificar sensorialmente las cualidades y atributos de los objetos.
• Compartir objetos y espacios con otros niños y niñas.
• Adquirir el hábito de recoger cuando termina el juego.
Para organizar una propuesta de juego heurístico es necesario tener en cuenta principalmente la
edad de los jugadores, la duración y los materiales que se utilizarán. El juego heurístico está
dirigido a niños y niñas de entre 12 y 24 meses, desde que empiezan a caminar hasta la aparición
del lenguaje. Por las características del propio juego se debe limitar el número de participantes por
sesión aproximadamente a ocho, y se debe procurar que tenga más o menos la misma edad. Se debe
poner en práctica durante unos ocho meses, con unas dos sesiones por semana de una hora de
duración. Es importante seleccionar bien el momento de realización, nunca cuando estén cansados o
tengan hambre. La mejor franja horaria es la primera hora de la mañana o de la tarde. Los
materiales para realizar el juego son muy variados, pero debemos distinguir entre:
• Objetos: variados y numerosos. Han de ser fácilmente manipulables, sólidos y combinables
entre sí.
o Materiales de la naturaleza, conchas, cantos rodados, esponjas naturales, frutos secos,
piñas, etc.
o Materiales reciclados, aros, bobinas de hilo, cuerdas, llaveros, botones, llaves, tapones,
cadenas, pelotas de ping-pong, etc.
o Materiales confeccionados, pompones, etc.
• Contenedores: son recipientes de un tamaño mayor que el material de juego y deben ser
susceptibles de contener algunos objetos cada uno. Deben ser siempre los mismos, es
conveniente que cada participante tenga tres o cuatro. Se recomiendan cilindros duros de cartón
o metal, botes metálicos, cajas de madera, cartón o metal, sin tapadera.
• Bolsas: se necesitan tantas bolsas como clases de objetos se hayan recogido. Es preferible que
sean de tela y que lleven escrito el nombre y el dibujo de los objetos que contienen. Cada bolsa
ha de ser lo suficientemente grande para contener unos 50 objetos iguales.
Desarrollo
Las actividades que se realizan en el juego heurístico se pueden dividir en tres grandes fases. La
primera consiste en la preparación del juego por parte del educador y las dos siguientes
corresponden propiamente al juego de los niños. La segunda fase es la exploración y combinación
de objetos y la tercera la recogida de esos objetos.
1ª Fase. Preparación
Antes de empezar el educador selecciona educador, seguidamente, se coloca en un
cuatro bolsas con objetos dentro y prepara lugar estratégico desde donde pueda
algunos contenedores. Distribuye el observar a todos los participantes y a su
material entre cuatro o cinco puntos de la vez pueda ser visto por ellos. A partir de
sala alejados entre sí. Cada punto se llama ese momento el educador debe
foco de actividad. En cada foco de permanecer en silencio.
actividad habrá 4 o 5 contenedores y entre
20 y 25 objetos sacados de cada una de las
bolsas elegidas anteriormente. Cada tipo
de objeto de cada foco de actividad se
coloca formando un montón sin que se
mezclen unos con otros. El resto de
material que no se va a utilizar se retira. El
2ª Fase. Exploración y combinación de objetos
entre 20 y 25 minutos. El educador debe
Normalmente los niños y niñas se sienten pasar a la fase siguiente cuando den
atraídos por los objetos que han puesto a señales de cansancio. La actividad en esta
su alcance. El tiempo de esta fase dura fase es libre y espontánea y la
intervención del educador se limita a
resolver cualquier incidencia, reagrupar el
material cuando se ha agrupado o
dispersado en exceso, atender las
necesidades físicas de los pequeños.
3ª Fase. Recogida
Este momento es tan importante como las anteriores. Cuando uno o dos niños den señales de
cansancio el educador debe comenzar a retirar los contenedores. Deberá coger las bolsas donde se
guardan los objetos que había puesto en los focos de actividad y desde su silla invitar a los niños y
niñas a que recojan. El educador abrirá la bolsa y les incitará a que traigan y depositen los objetos
que les corresponden en su interior. La actividad de recogida de los primeros servirá de ejemplo al
resto. Es importante que las bolsas permanezcan siempre en el mismo sitio, porque se facilita su
localización y la acción de clasificar. En esta fase el papel del educador es activo y dirige la
actividad. La persona adulta no debe recoger nada, lo tienen que recoger todo los niños y niñas. La
actividad finaliza cuando no queda nada por recoger. Seguidamente se cuelgan las bolsas en un
lugar visible para que los pequeños comprendan que la actividad ha terminando.
JUEGOS TRADICIONES
Son los que se trasmiten de forma espontánea de generación en generación y forman parte de la
memoria y la cultura colectiva, son los juegos de toda la vida, y de la mayoría se desconoce su
origen. Podemos definir el juego tradicional como aquel que es característico de una zona
determinada en la que está muy arraigado y que se trasmite de generación en generación.
Algunas veces los trasmiten los padres y otras los niños. Existen también juguetes tradicionales
como los sonajeros, las canicas, la peonza, los aros, los cromos, recortables, etc. Algunos juegos
tradiciones son considerados patrimonio de la humanidad. Suelen ser un importante elemento
socializador e integrador de la cultura, están muy ligados a la historia, cultura y tradiciones de un
pueblo o región. Con el tiempo algunos pueden llegar a convertirse en deportes: la pelota vasca o
valenciana, la lucha canaria, etc. Pero las actuales condiciones sociales y urbanísticas hacen
complicada su práctica y tienden a desparecer. Para evitarlo los centros educativos deben
promover este tipo de juegos adaptándolos a los valores sociales actuales, y eliminado
aquellos no deseados como el machismo, la violencia, la desigualdad, etc. Normalmente los
juegos tradicionales se trasmiten de niños más mayores a más pequeños y suelen ser colectivos y
motores: saltar, el escondite, el churro, el burro, la rayuela, el siete y medio, pollito inglés, pies
quietos, etc. La mayoría se trasmiten de forma oral y forman parte del folklore tradicional.
Podemos decir que un juego es tradicional cuando cumple dos requisitos:
• Son juegos típicos de cada zona o región, pero también patrimonio de la humanidad. Se
pueden encontrar con variaciones distribuidos por todo el mundo, como la rayuela o la
peonza.
• Constituyen un elemento socializador e integrador, ya que la mayoría se juegan en grupo o
equipos.
En la sociedad actual la transmisión de las tradiciones en general y del juego en particular es difícil.
Las condiciones de vida modernas y los entornos urbanísticos no son favorables a la trasmisión
generacional. En este contexto los profesionales de la educación deben asumir la trasmisión de estos
juegos. Los juegos tradicionales pueden realizarse en el ámbito de la educación formal y no formal.
• Juegos de falda: aserrín-aserrán, 5 lobitos, etc.
• Juegos de conjuros: “Que llueva, que llueva...”
• Juegos de corros y de filas.
• Juego de pelota.
• Juegos de saltar: churro, burro, etc.
• Juegos de cuerda.
• Juegos de puntería: caliche, etc.
• Juegos de echar a suerte: Chapi-chopo, etc.
• Trabalenguas.
• Adivinanzas
RECOMENDACIONES A LOS PADRES
Como hemos visto, el juego en sus diferentes formas es muy beneficioso para el desarrollo de las
capacidades de los niños y que dará buenos frutos a lo largo de su vida. Es por tanto muy necesario
el papel que tenemos los adultos para promover la evolución del juego en los pequeños.
Es muy importante que colaboremos, tanto los educadores como los padres con este proceso
evolutivo en la vida del niño. Nuestro papel no es únicamente dejar que los niños se entretengan
sólos con un objeto, también debemos observarles, ayudar a que desarrollen su imaginación, que
hagan del tiempo del juego un momento feliz, y que se sepan socializar mediante el juego con otros
niños. Para ello, como hemos ya comentado, es vital admitir la importancia del juego e incluirla en
la vida del niño como una faceta principal en su vida en la que estamos nosotros de guías y
colaboradores.
Tanto en la escuela infantil como en casa es cuando el niño se expresa mediante el juego, es por ello
que adecuamos en todo momento los espacios para que el niño pueda jugar libremente y que
expanda su imaginación.
“En mi casa he reunido juguetes pequeños y grandes, sin los cuales no podría vivir. El niño que no
juega no es niño, pero el hombre que no juega perdió para siempre al niño que vivía en él y que le
hará mucha falta. “ Pablo Neruda
“La infancia tiene sus propias maneras de ver, pensar y sentir; nada hay más insensato que pretender
sustituirlas por las nuestras. “ Jean Jacques Rousseau