2. • Líder religioso y dirigente político iraní.
Hijo del ayatollah Sayyed Mustafa
Musawi, asesinado a los cinco meses de
nacer él, tomó el apellido de su pueblo
natal, situado en el centro del país.
Cuando el joven Jomeini contaba 15 años
de edad falleció también su madre.
Familiarizado con el orfanato y el
concepto del martirio predicado por la fe
chií, y proclive a la meditación, recibió
una esmerada educación coránica, propia
de los descendientes directos de la
familia santa del chiísmo, el Profeta
Mahoma, su hija Fátima y su esposo Alí
(de ahí su condición de Sayyed), y del
séptimo imán, Musa el-Kassim (los así
bendecidos eran Musawi) en los centros
de Isfahán (desde los 12 años), Arak
(desde los 16) y la ciudad santa de Qom
(desde los 18).
Allí se integró en la Asamblea
Teológica y profundizó sus
conocimientos en literatura,
misticismo, gnosticismo, lógica,
ética, retórica y jurisprudencia
islámicos, además de filosofía,
astronomía y matemáticas. Sus
maestros fueron los más
renombrados sabios de Qom,
que en los años siguientes haría
grandes avances en Teología.
Cuando en 1929 contrajo
matrimonio con Batul-Irán, hija
de un ayatollah de la ciudad de
Redj, la nueva familia se instaló
en Qom, y en los años de la
guerra mundial Jomeini y sus
hermanos llevaron una
empresa de transporte.
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3. • El 24 de septiembre de 1978 el gobierno iraquí (desde hacía tres
años en entendimiento con el iraní), informó a Jomeini de su
expulsión del país. Tras fallidas gestiones para afincarse en Kuwait,
Líbano y Siria, Jomeini, por consejo de su hijo Ahmad (otro hijo
mayor, Mustafá, fue asesinado en 1977 en Iraq), decidió
establecerse en París, en cuyo suburbio de Neauphle-le-Château
fue acogido por un iraní residente. Se negó a acatar el abandono
de sus actividades políticas exigido por el gobierno francés e
intensificó sus anatemas contra el sha, hábilmente difundidas por
sus seguidores en Irán. Allí, entretanto, había comenzado el asalto
final contra el régimen, con manifestaciones multitudinarias y una
durísima represión de las fuerzas de seguridad.
• El 13 de enero de 1979 Jomeini constituyó en París un Consejo de
la Revolución Islámica, tres días después el sha y su familia
abandonaban Irán y el 1 de febrero, sin poder impedirlo el
gobierno de S. Bajtiar, el avión que llevaba a Jomeini aterrizó en el
aeropuerto de Teherán, donde se le tributó un gran recibimiento.
El 5 designó primer ministro provisional a M. Bazargan, un
veterano opositor al sha, que hacia el día 11 quedó como poder
ejecutivo indiscutible al disolverse el gabinete Bajtiar y desistir el
ejército de oponerse al virtual triunfo de la Revolución.
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4. •
Las reformas modernizadoras emprendidas por el Sha Reza Pahlevi en el marco de
una dictadura corrupta y bajo una fuerte influencia norteamericana engendraron
un importante descontento social, prontamente encauzado por el clero chiíta.
• Pese a la brutal represión de las fuerzas policiales, largos meses de protestas
desencadenaron la huida del Sha y el fracaso del intento de mantener un régimen
pro-occidental bajo el primer ministro Bajtiar. El Ayatollah Jomeini retornó desde
su exilio francés el 1 de febrero de 1979 en medio de enormes manifestaciones.
• El 1 de abril tras una abrumadora victoria en un referéndum, Jomeini proclamó la
República Islámica a la que pronto se dotó con una Constitución que reflejaba los
ideales de gobierno islámico. Inmediatamente se tomaron medidas
fundamentalistas y comités revolucionarios patrullaron las calles para obligar a
cumplir los códigos de comportamiento y vestido. Mientras el régimen trataba de
borrar cualquier vestigio de influencia occidental.
• El sentimiento antiamericano se desbordó el 4 de noviembre de 1979 con el asalto
por estudiantes islámicos de la embajada de EE.UU. Cincuenta y dos súbditos
norteamericanos fueron mantenidos como rehenes hasta el 20 de enero de 1981.
El nuevo Irán islámico se enfrentaba directamente con las dos superpotencias.
• Los primeros años del gobierno revolucionarios se caracterizaron por la virtual
eliminación de toda la oposición política en el marco de una represión brutal. El
estallido de la guerra con Irak en septiembre de 1980, tras la agresión del régimen
de Saddam Hussein, supuso una verdadera tragedia para ambos pueblos y
fortaleció aún más la dictadura de los clérigos chiítas.
• El fin por extenuación de la guerra en 1988 y la muerte de Jomeini en 1989
abrieron una nueva etapa en la historia del Irán islámico.
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6. • La Revolución Islámica de Irán no solamente causó profundos
cambios y reformas en la historia del país, sino también traspasó
las fronteras y llegó desde los países litorales del Golfo Pérsico
hasta los países musulmanes de África y ha cambiado la doctrina
política e ideológica del mundo. Tal y como indicó el Líder Supremo
de la Revolución:
• “…Imam Jomeini, avivó la autoestima y el honor de la nación persa,
lo que convirtió que el pueblo y el sistema de la República Islámica
de Irán sea un ejemplo para otros países.”
• “La resistencia del pueblo iraní ante el imperialismo, la
independencia y la demanda de justicia de la República Islámica de
Irán, así como el respeto a la voluntad del pueblo como un sistema
republicano forman parte de los cambios fundamentales que
conllevó a la Revolución Islámica de Irán, cuyas consecuencias han
sorprendido a los enemigos del país persa en todo el mundo.”
Conforme a las palabras del ayatolá Jameneí, los más recientes
avatares regionales también son otra muestra del gran despertar
islámico, lo que dejará un efecto sumamente significativo en la
historia mundial. 6
7. • La aparición de la Revolución Islámica en realidad fue la respuesta a
esta voz de Dios que leemos en la aleya 135 de sura “Las Mujeres”
• ¡Creyentes! sed íntegros en la equidad. Cuando depongáis como
testigos de Alá. Aun en contra vuestra, o de vuestros padres o
parientes más cercanos. Lo mismo si es rico que si es pobre. Alá
está más cerca de él. No sigáis la pasión faltando a la justicia. Si
levantáis falso testimonio u os zafáis,... Alá está bien informado de
lo que hacéis.
• Ahora que repasamos los últimos treinta años de la historia
revolucionaria entenderemos que la Revolución islámica de Irán,
fue una necesidad inevitable que se manifestó como un signo de la
justicia en el periodo contemporáneo.
• En una era donde el hombre se hallaba sumergido en el
materialismo, unos pueblos valientes y devotos, se levantaron en
pos de la religión y alumbraron al mundo la luz de la justicia.
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8. • La formación del sistema de la República Islámica y su modelo de gobierno basado
en los valores y sabidurías religiosas, plantearon en el sistema bipolar de Oriente y
Occidente un nuevo factor en las ecuaciones políticas independientes.
• Este cambio especialmente en el Medio Oriente, ha tenido efectos firmes, de un
modo que hoy después de tres décadas de la victoria de la Revolución Islámica no
solo no se ha reducido su importancia e influencia sobre las ecuaciones políticas,
sino que el papel revolucionario se ha convertido en el más grande e influyente del
mundo.
• Hoy mientras que la Revolución Islámica de Irán está en vísperas de entrar a la
cuarta década de su victoria, se habla mucho en los círculos literarios, políticos y
filosóficos del mundo y en muchas reuniones científicas y culturales, sobre el
desafío que ha creado la Revolución Islámica en el escenario socio-político.
• Los puntos de vistas del sistema de la República que surgieron del pensamiento y
la profunda cosmología del fundador de la Rep II, Imám Jomaini (Dios lo bendiga),
plantearon al Islam como una doctrina política, poderosa e influyente sobre el
destino de la humanidad mundial.
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