DIDÁCTICA DE LA EDUCACIÓN SUPERIOR- DR LENIN CARI MOGROVEJO
Linea del-tiempo
1. La ciudadaníatiene dos
características
fundamentales:pertenece
sóloa una élite yrepresenta
un vínculode carácter
religioso.
En Atenas, la ciudadanía viene
definida por la participación en la
comunidad.
La relación entre el ciudadano y la polis
ha sido descrita por Werner Jaeger así:
“La polis representa un nuevo
principio,una forma más firme y más
completa de vida social...con la polis
surgió,por primera vez, lo que
nosotros denominamos estado, aun
cuando la palabragriega puede
traducirselo mismo por estado que
por ciudad.
La concepción griega sobre el “ciudadano”
se ve claro el origen de la identidad con el
concepto de nacionalidad.
El ideal del ciudadano como tal, fue el que Félix enseñó a
Aquiles: ser apto para pronunciar bellas palabras y
realizaracciones. Cuando apareció el nuevo estado
jurídico, la virtud de los ciudadanos consistió en la libre
sumisión de todos, sin distinción de rango ni de
nacimiento, a la nueva autoridad de la ley”.
LINEA DEL TIEMPO
Concepto de Ciudadanía
Antigua Grecia
2. Ciudadanía romana.
La ciudadanía romana
aseguraba a la persona
derechos especiales y
exenciones que se reconocían
y honraban por todo el
imperio.
Era ilegal torturar o azotar a
un ciudadano romano con el
propósito de hacerle
confesar, pues estas clases de
castigo se consideraban muy
innobles y adecuadas solo
para aplicar a los esclavos.
Tambien el recibir en ciertas
epocas del imperio muchos
privilegios economicos al
poder comerciar y efectuar
prestamos con grandes
ganancias e interes.
Otra ventaja y privilegio de
que disfrutaba el ciudadano
romano era el derecho de
apelar contra la sentencia de
un gobernador provincial al
emperador de Roma.
La ciudadanía romana podía
obtenerse de varias maneras. A
veces los emperadores extendían
este favor especial a ciudades o
distritos enteros, o a ciertos
individuos, por los servicios
prestados (servir en las legiones).
También era posible comprar la
ciudadanía directamente a cambio
de una suma de dinero.
En los casos de delitos que
pudieran ser castigados con la
muerte, el ciudadano romano
tenía el derecho de serenviado
a Roma para ser juzgado ante el
mismo emperador.
ROMA
}
3. Con lacaída del Imperioromanode
Occidente se inauguraunanueva
etapa,la Edad Media.En ellase
pierde progresivamente laideade
ciudadaníaentendidacomola
pertenenciaaunacomunidad,la
del ciudadano-súbdito.
El sistema feudal medieval basa
la idea de ciudadanía en una
vinculación personal más que
territorial, de linaje y de sangre.
Se tiende a una comunidad
política imperial, dejando atrás
el concepto de ciudadanía de la
etapa anterior. Además, en la
sociedad medieval el individuo
dispone de múltiples
posesiones, privilegios,
derechos, etc
La ideade ciudadaníaensusinicios
tambiénesexcluyente,puessololos
patriciosromanosgozabande plenos
derechosaunque despuésesos
derechosse ampliaranaotros
colectivosde personascomolos
latinos,loslibres,etc.
En la Edad Media, el
concepto de
ciudadanía resideen
la subordinación
política a un señor
feudal o a un
monarca y no en la
idea de participación
política.
La ciudadanía medieval fue
limitada y local,pero no del
mismo modo en todas partes.
Allí no solo pervivela
tradición teórica dela
ciudadanía,sino quese
mantuvieron y desarrollaron
ciertas instituciones
características y una práctica
de la participación ciudadana.
También es cierto
que la ciudadanía
pudo pervivir gracias
a las ciudades,
particularmente las
del norte de Italia.
EDAD MEDIA
4. El poder lo tiene la burguesía, pero
no cualquier tipo de burguesía, sino
una curiosa mezcla, que incluye
familias de la nobleza antigua y
familias surgidas del pueblo, casi en
proporciones iguales.
Los ciudadanos, los que tienen derecho a
intervenir en los asuntos públicos, no son
todos burgueses.
La importancia que se le da al concepto
de “ciudadano” aparece en la Declaración
de los Derechos del Hombre y del
Ciudadano, aprobada por la Asamblea
Nacional Francesa el 27 de agosto de
1789. Los derechos del hombre son
libertades.
RENACIMIENTO
REVOLUCIÓN FRANCESA
• Los revolucionarios franceses inventaron en Europa
la figura de ciudadano moderno y plantearon el
horizonte de los derechos que se debían alcanzar para
la obtención de una plena ciudadanía: los derechos
civiles, los derechos políticos y los derechos sociales.
Frente al absolutismo, la
Revolución de 1789 trajo consigo
la construcción de la ciudadanía, en
la medida en que el Estado
concedió a los individuos que lo
integraban el derecho al disfrute de
las libertades fundamentales,
reflejadas en un conjunto de reglas
jurídicas y políticas que las
garantizaban.