"La auto-regulación como concepto esencial para la seguridad de la praxis clí...
CÉLULAS DE LA PIEL Y SUS FUNCIONES
1. JERARQUIZACIÓN DE LAS CÉLULAS DE LA PIEL
La piel es el órgano más grande del ser humano.
Dependiendo del tamaño y el peso corporal su superficie es
de 1.5 a 2.0 metros cuadrados. La piel y el tejido subcutáneo
tienen un peso medio de 3,5 kg lo que representa alrededor
del 16% del peso corporal. Junto con las estructuras
complementarias llamadas faneras, como pelo, uñas,
glándulas sudoríparas, glándulas olfativas y glándulas
sebáceas, la piel caracteriza el aspecto único de los seres humanos y también cumple con una
serie de funciones.
La piel surge en los primeros días de la vida del embrión humano, casi al mismo tiempo
que el cerebro. Pocas semanas después de la fecundación, las células que se están
multiplicando para formar los distintos tejidos se distribuyen en tres estratos, llamados "hojas
embrionarias". Del primero se formarán todos los órganos internos (endodermo) y del segundo
los músculos y el esqueleto (mesodermo). De la tercera hoja (ectodermo) se origina el sistema
nervioso y el revestimiento del organismo, es decir, la piel y las mucosas. Pero la maduración
de este preciado órgano sólo termina con el nacimiento, aunque sigue perfeccionándose
también después. Especialmente, la piel posee una formidable capacidad de regeneración.
La estructura de la piel es la siguiente:
Epidermis
Dermis
Hipodermis
Melanocitos
Queratinocitos
Células de Merkel
Células de Langerhans
Histiocitos
Mastocitos
Fibroplasto
Adipocitos
P
i
e
l
2. CÉLULAS DE LA PIEL
Melanocitos: Un melanocito es una célula dendrítica que deriva del
neuroectodermo y migra hacia la epidermis y el folículo piloso durante la
embriogénesis. Se localiza en la capa basal en contacto con la membrana
basal. Su núcleo es ovoide y esta rodeado de queratinocitos. Su relación
con los queratinocitos es a través de sus dendritas. Los melanocitos son
células especializadas en la producción de melanina, el principal pigmento responsable de la
coloración de la piel, los ojos y el pelo. Son críticos en la respuesta a los rayos UV, protegiendo
a las células de la piel de un potencial daño al ADN, uno de los mayores factores de riesgo
para el cáncer de piel, entre ellos el melanoma.
Queratinocitos: Queratinocitos es el tipo celular predominante en la
epidermis, la capa más externa de la piel, que constituye 90% de las
células que se encuentran allí. Los queratinocitos se encuentran en la
capa basal de la piel se denominan a veces como "células basales" o
"queratinocitos basales". La función principal de los queratinocitos es la
formación de una barrera contra los daños medioambientales, tales como
agentes patógenos, el calor, la radiación UV y la pérdida de agua. Una vez que los agentes
patógenos comienzan a invadir las capas superiores de la epidermis, los queratinocitos pueden
reaccionar con la producción de mediadores proinflamatorios y, en particular, las quimiocinas
tales como CXCL10, CCL2 que atraen leucocitos al sitio de la invasión de patógenos.
Celulas de Merkel: Son células capaces de actuar como receptores
sensitivos a la presión. Son células especializadas del epitelios estratificado de
la epidermis, concentradas en la palma de la mano y la planta de los pies. Las
células de Merkel se ubican entre las células de la capa germinativa y se
asocian a las células epiteliales vecinas por medio de desmosomas y su
citoplasma se caracteriza por su abundancia en filamentos intermedios de
citoqueratina. El citoplasma de las células de Merkel es capaz de sintetizar y
acumular vesículas membranosas que contienen un material denso a los electrones que
contienen cromograninas asociadas a moléculas pequeñas parecidas a las catecolaminas . La
célula de Merkel al ser deformada por una compresión la epidermis sería estimulada a liberar
sus vesículas que contienen una sustancia capaz de actuar como un neurotransmisor y podría
inducir la depolarización del terminal nervioso asociada a ella, la cuál eventualmente generaría
la descarga de un potencial de acción en el axón de la neurona sensitiva. Por sus
características de ser capaz de liberar una sustancia química capaz de ejercer su acción al
unirse un ligando específico en la superficie de la membrana del terminal nervioso se considera
que la célula de Merkel pertenece al sistema APUD (o sistema neuroendocrino difuso).
Células de Langerhans: Célula estrellada de la piel encargada de la defensa
inmunitaria y localizada en la epidermis. Al ser capaz de migrar, su papel
consiste en alertar a las demás células inmunitarias de la intrusión de una
3. molécula o cuerpo extraño. Es, en cierto modo, un "centinela" inmunitario. La célula de
Langerhans es capaz de fagocitar partículas consideradas como extrañas tales como los virus.
Puede asimismo estimular la producción de ciertos linfocitos. Pero las exposiciones excesivas y
constantes a los rayos UV pueden provocar un declive de su función inmunitaria cutánea.
Histiocitos: Un histiocito es una célula normal (un tipo de glóbulo blanco) que
es parte del sistema inmunitario y se encuentra en muchas partes del cuerpo,
especialmente en la médula de los huesos, la sangre, la piel, el hígado, los
pulmones, las glándulas linfáticas y el bazo. La función principal dentro de la piel
es la fagocitaria, es decir, detectar y aislar microbios y cuerpos extraños que se
adentren en la dermis; englobarlos y destruirlos.
Mastocitos: son células voluminosas de forma variada. En su citoplasma
poseen diversos gránulos que contienen sustancias activas, por lo que
reciben también el nombre de células cebadas. Estas sustancias son
liberadas ante determinados estímulos. Las principales sustancias que
liberan estas células cebadas son: la histamina, que participa en la
respuesta inmune, aumentando la permeabilidad capilar, y la heparina, que es un
anticoagulante.
Fibroplasto: Los fibroblastos son las células de la dermis responsables de
la secreción de las fibras de elastina y de colágeno, así como de los
glicosaminoglicanos que forman la matriz de apoyo de la dermis. Están
insertados en la matriz fibrosa y permanecen vinculados a la red de fibras
que producen. Con la edad se disminuye el número de fibroblastos. Además
se vuelven menos productivos, lo cual conlleva una disminución de la cantidad de
macromoléculas de la matriz intercelular. El tejido de apoyo se vuelve, por ello, menos denso y
tiende a hundirse.
Adipositos: Son células especializadas en el almacenamiento de grasa, el
citoplasma contiene grandes depósitos de triglicéridos en la forma de una o
más gotas lipídicas sin membrana limitante. En las células maduras la gota
es tan grande que desplaza al núcleo y al citoplasma a la periferia celular. El
tamaño de los adipocitos es de 50 a 150 μm. El citoplasma cercano al
núcleo posee un aparato de Golgi, mitocondrias, RER y ribosomas libres. El
citoplasma que rodea la gota lipídica contiene REL y vesículas de
pinocitosis. Observe que la gota de lípido no posee una cubierta membranosa. El tejido adiposo
blanco también es denominado grasa amarilla, ya que toma este color debido a la acumulación
de carotenos de la dieta en las gotas lipídicas.
4. CAPAS DE LA PIEL
EPIDERMIS
+ + +
Melanocitos Queratinocitos
Células de
Merker
Células de
Langerhans
= Epidermis
La parte visible del exterior de la piel (epidermis) consiste en una capa formada principalmente
por los llamados queratinocitos (células muertas). Esta capa es continuamente sustituida por la
descamación y la replicación. En la celda inferior, se forman regularmente nuevos
queratinocitos, que alcanzan la superficie a los 30 días, se endurecen progresivamente y
finalmente se desprenden como escamas muertas. En su punto más grueso, como por ejemplo
en las plantas de los pies, la epidermis puede tener hasta dos milímetros de grosor. El espesor
promedio, sin embargo, es de 0,05 milímetros.
La epidermis está dividida desde el interior hacia el exterior en cinco capas. Estas son las
siguientes:
1. Estrato de células basales (stratum basale): en el estrato basal la construcción de las células
madre de queratinocitos tiene lugar mediante división celular, y la regeneración se efectúa en
varias fases. Los melanocitos y las células de Merkel se incrustan en el estrato basal. Los
melanocitos forman el pigmento responsable de la coloración y bronceado de la piel: la
melanina. Las células de Merkel se asocian con fibras nerviosas y transmiten parte del tacto.
En las palmas y plantas de los pies son más frecuentes que en otras zonas del cuerpo.
2. Estrato espinoso (stratum spinosum): en el estrato espinoso, los queratinocitos están unidos
como en una red mediante zonas de adhesión o puentes intercelulares (desmosomas). En esta
capa, si hay enfermedades de la piel, puede haber retención de agua y por lo tanto se pueden
formar ampollas. Aquí también se encuentran las células de Langerhans, que forman parte del
sistema inmunológico.
3. Capa de células granulares (strato granulosum): los queratinocitos presentes en la capa de
células granulares contienen los gránulos de queratohialina, que causan la queratinización
progresiva.
5. 4. Capa transparente (stratum lucidum): la capa transparente o estrato lúcido se halla sólo en
las partes más gruesas de la epidermis, por ejemplo, en las palmas de las manos y las plantas
de los pies. Esta capa es muy delgada, los bordes o núcleos de las células ya no son
reconocibles.
5. Estrato córneo (stratum corneum): en la capa córnea de la piel, las células muertas
resultantes de los queratinocitos se agrupan junto con sustancias muertas de la piel. Entonces
se desprenden las escamas córneas. El paso de las células del extremo inferior de la capa
córnea hasta llegar a la superficie y desprenderse dura dos semanas. La capa córnea apenas
permite el paso del agua y sustancias solubles. Las sustancias de bajo peso molecular pueden
penetrar, sin embargo. Esta barrera se debilita cuando la piel está expuesta al agua por mucho
tiempo.
DERMIS
+ + =
Histiocitos Mastocitos Fibroplastos Dermis
Se encuentra debajo de la epidermis y está formada por tejido conjuntivo, con un espesor que
varía entre uno y tres milímetros. Su función es dar fortaleza y elasticidad a la piel. En la dermis
están localizados los vasos sanguíneos y linfáticos de la piel y la mayoría de los receptores
sensitivos, además de los anexos cutáneos de origen epidérmico y unas estructuras
adicionales: la papila y el músculo piloerector. La dermis, como tejido conjuntivo, está
constituida por una trama fibrosa compleja, resistente, espesa y esponjosa, envuelta en la
sustancia fundamental. La sustancia fundamental es una especie de gel compuesto por agua,
proteínas, electrolitos y un material mucoso; mucopolisacáridos ácidos. Su estructura es amorfa
y su principal característica es la hidratación.
Aunque su división no queda perfectamente delimitada, vista al microscopio podemos
diferenciar en la dermis dos capas: la dermis papilar y la dermis reticular.
1. La dermis papilar es la parte más superficial sobre la que se asienta la epidermis, separada
de ésta por la membrana basal. Debe su nombre de papila a que la dermis en su límite con la
epidermis configura unas ondulaciones en forma de cono que ahuecan la epidermis; a cada
una de estas cavidades se le denomina papila dérmica y en ella se alojan algunas
terminaciones nerviosas y los capilares sanguíneos que alimentan las células de la epidermis.
2. La dermis reticular está situada en la zona más profunda de la dermis papilar. Constituida
principalmente por fibras colágenas que forman la red que le da nombre. Alternando con las
6. fibras colágenas, se dispone una red de fibras elásticas, especialmente abundantes alrededor
de las glándulas sebáceas y sudoríparas.
Es más gruesa que la dermis papilar y en ella se alojan la mayoría de los elementos
cutáneos;como las glándulas sebáceas, sudoríparas, el músculo piloerector, el folículo piloso,
la papila, determinadas terminaciones nerviosas y los capilares sanguíneos y linfáticos.
HIPODERMIS
Adipocitos
=
Hipodermis
La hipodermis forma la capa más espesa de la piel y está unida a la dermis por fibras de
elastina y de colágeno. Está constituida principalmente por células denominadas adipocitos,
especializados en la producción y el almacenamiento de grasas. Estos cuerpos grasos son
necesarios para el buen funcionamiento de cada célula cutánea ya que, al degradarse,
producen energía vital.
El conjunto de los adipocitos constituye un tejido de sostén flexible y deformable que posee
propiedades de “amortiguación” frente a los choques, un verdadero “colchón” para la piel. Estas
células también desempeñan una función aislante y, por tanto, participan en la
termorregulación de la piel.
Aunque su número tiende a mantenerse constante a partir de la adolescencia, los adipocitos
pueden no obstante multiplicarse a lo largo de toda la vida a partir de una célula precursora
llamada preadipocito. El tamaño de un adipocito es muy variable. En efecto, cuanto más lípidos
(aportados por la alimentación) almacena el adipocito, más aumenta su tamaño, hasta llegar a
decenas de veces su capacidad inicial. Este fenómeno causa el aumento de peso. En cambio,
durante una dieta, los adipocitos liberan en el organismo ácidos grasos y azúcares, fuente de
energía.
7. PIEL
+
Epidermis Dermis
+
=
Hipodermis
Piel
La piel tiene cumple una serie de funciones básicas para nuestro organismo, y podemos
resumirlas, básicamente, en cinco.
1. Una de las funciones de la piel es la relación. Como decíamos antes, la piel es un órgano
mediador, gracias a la cual recibimos los estímulos del exterior: podemos sentir los efectos del
calor, el dolor, el frío, el contacto con otros materiales, la presión, etc. Esto es posible por las
terminaciones nerviosas que la componen y las estructuras especializadas con las que cuenta.
2. La protección sería otra función de la piel, ya que además de permitir que nos relacionemos
con el exterior, también nos protege de las agresiones que puedan proceder del exterior.
Asimismo, la piel es una barrera física que impide que agentes vivos del reino animal o vegetal
penetren, así como una barrera química, que impide la absorción de sustancias de composición
química.
3. La piel cumple la función de homeostasis. Es decir, la piel es el principal órgano del cuerpo
humano encargado de regular la temperatura corporal. En este sentido, podemos considerarla
como un medidor de temperatura, gracias a la permeabilidad capilar, por medio de la cual se
aumenta o se disminuye la temperatura del cuerpo.
4. La función metabólica también está presente en la piel. La vitamina D es sintetizada por la
piel para que el metabolismo funcione correctamente.
5. Por último, tenemos que decir que la piel tiene la función inmunológica. Las células de
Lagerhands, los queratinocitos y los linfocitos del tejido cutáneo son los encargados de
proteger al organismo.
8. BIBLIOGRAFÍA
Aris, M. (2009). Bioquímica Molecular. Septiembre 7, 2014, de Scielo Sitio web:
http://www.scielo.org.ar/scielo.php?pid=S0325-29572009000300007&script=sci_arttext
Freeman, Scott. (2009). Biología. Madrid: Pearson.
Tortora & Derrickson. (2011). Principios de Anatomía y Fisiología . Buenos Aires: Médica
Panamericana