Este documento describe Irlanda, su gente y algunos lugares notables. Habla sobre Dublin como la capital, las diferencias entre el norte y el sur del país, y un lugar en Wexford donde el autor pasó veranos y le gustaría volver. También advierte que la economía irlandesa está peor que la española, con más graffiti en Dublin y pueblos sucios, aunque menciona tradiciones como quemar cosas en Halloween.