Los campamentos de verano comenzaron en 1876 en Suiza cuando un pastor organizó campamentos para que los niños construyeran casas en los árboles, cantaran canciones y jugaran. Más tarde, después de la Primera Guerra Mundial, Francia estableció campamentos de verano estatales para los niños que crecieron durante la guerra. Ahora los campamentos de verano son parte integral de la educación de los niños y no solo enseñan habilidades prácticas sino también idiomas extranjeros de manera dinámica y entretenida.