2. SOFTWARE
• iOS es un ecosistema cerrado que, por un lado, es muy seguro, pero, que por
otro lado, ofrece poco espacio para la personalización. Siempre recibirás
exactamente el mismo iPhone que tu vecino. Android es abierto, de los
cual, por desgracia, se deriva que tengamos que sufrir la carencia de calidad
en algunas aplicaciones y el aumento de las brechas de seguridad. El lado
positivo es que los dispositivos se individualizan. La superficie puede ser
fácilmente intercambiadas, se pueden utilizar ROMs personalizadas y todo el
mundo puede modificar el sistema según sus propias necesidades.
4. PROCESADOR
• En las especificaciones del Samsung Galaxy S4 podemos leer 2 GB
de RAM y un procesador quad-core Snapdragon a 1.9 GHz. El
iPhone 5 se queda un poco atrás con un procesador A6 de doble
núcleo a 1,2 GHz. En las pruebas de referencia Geekbench el S4
reportó 3163 puntos, casi el doble que el iPhone 5 con 1596
puntos.
5. • No hay que olvidar también que el S4 tiene ranura para
tarjetas microSD - una ventaja real, incluso si el iPhone se
encuentra en varias versiones de 16, 32 y 64 GB. Hay que
añadir también lascapacidades multitarea de
Android junto con un potente hardware: mientras jugaba
a Dead Trigger, un juego gráficamente exigente, se
estaban ejecutando cinco aplicaciones en segundo plano.
Ningún problema para el S4. En el iPhone 5, sin embargo
el multitasking es muy limitado. En cuanto a hardware y
rendimiento, Samsung obtiene una puntuación perfecta.