3. El pacto de Acero El 22 de mayo de 1939, Alemania e Italia firmaron en Berlín un pacto en el que se comprometían a la mutua asistencia militar. Italia, exhausta su industria de guerra tras la intervención en España, pidió que el conflicto no estallara en un plazo de al menos tres años. Diversos malentendidos entre ambas potencias totalitarias, precipitaron que la más poderosa de las dos arrastrara a la guerra a la otra en septiembre de 1939. Mussolini , alegando la falta de preparación del ejército italiano, esperó unos meses hasta lanzarse a la guerra junto a su aliado germano. El conde Ciano firma el pacto junto a Hitler