El documento discute la relevancia de Juan Wesley y su teología wesleyana para América Latina en la actualidad. Explica que Wesley abogaba por una teología práctica y equilibrada en lugar de una mera exposición doctrinaria. También analiza el "cuadrilátero wesleyano", las cuatro fuentes doctrinales según Wesley (Biblia, razón, tradición y experiencia), y propone una relectura desde América Latina que ubica a la Biblia en el centro e incluye la creación como una