UNIVERSIDAD NACIONAL MAYOR DE SAN MARCOS
ESCUELA DE POST GRADO
FLORA TRISTÁN Y LA
ESCLAVITUD EN EL
PERÚ
ANÁLISIS DE LA ESCLAVITUD EN LA OBRA:
PEREGRINACIONES DE UN PARIA
AUTOR: GIAN MARCO OSORIO PRUDENCIO
CURSO: SEMINARIO DE LITERATURA E HISTORIA EN EL PERÚ
SUMARIO:
I. RESUMEN
II. OBEJTIVOS
III. PANORAMA HISTORICO A COMIENZO DEL SIGLO XIX
Viajeros franceses en el perú: Siglo
IV. FLORA TRISTAN, DEFENSORA DE LOS DERECHOS DE LA MUJER
La esclavitud en el Perú
V. ANALISIS Y TIPOS DE ESCLAVITUD EN LA OBRA “PEREGRINACIONES DE
UNA PARIA” DE FLORA TRISTAN”
El matrimonio como forma de esclavitud:
La esclavitud y el comercio de negros:
La esclavitud en la mujer en Praia
Abuso y castigo, formas de controlar la esclavitud: Praia
Las religiosas y la esclavitud:
La esclavitud en las haciendas de Lima
VI. CONCLUSIONES
VII. BIBLIOGRAFIA
I. RESUMEN
Entre los años de 1833 y 1834, Flora Tristán emprende un viaje a la libertad.
Su objetivo fue recuperar el respeto por la sociedad, la cual la había condenado a
convertirse en una Paria. En la peregrinación que realiza en el Perú y parte de la
América del Sur, ella describe sus experiencias en una memoria, que con el
transcurrir del tiempo se convertirá en uno de los libros más relevantes de nuestra
historia. El artículo se centrará en explicar los tipos y las formas de esclavitud que
ella experimentó en su recorrido por el Perú. El interés del trabajo no sólo se
centrará en la esclavitud de negros, sino en las diferentes formas de represión que
existieron a comienzo del Siglo XX, como el matrimonio, la vida religiosa, y la
avaricia del poder. Que hicieron sumergir al Perú en la más honda pobreza social.
II. OBJETIVOS
Determinar la situación social política y económica del esclavo a comienzo del
Siglo XX.
Analizar las experiencias del viaje que realizó Flora Tristan en América del Sur.
Esta descripción está basada específicamente al tema de la esclavitud, y sus
consecuencias en el entorno político de nuestra historia.
Valorar el discurso de Flora Tristan en la construcción de un personaje que influyó
en la modernidad.
III. PANORAMA HISTORICO A COMIENZO DEL SIGLO XIX
La independencia del Perú marcó el fin del Virreinato y el inicio de los
gobiernos militares. El caudillaje militar se convirtió en la manera de alcanzar el
poder. No hubo instituciones que regularan el sistema de nuestra sociedad, por tal
razón, convirtió al Perú en un colapso general. Nuestra economía se vio afectada,
los campos arruinados, las minas abandonadas, la baja producción obrera, todo
declinó. El Perú tuvo la necesidad de recurrir a préstamos extranjeros para hacer
frente a las necesidades del Estado. Nuestra producción sólo se limitó al comercio.
El caudillismo se convirtió en la máxima representación del Estado en los países
emancipados. Para Lynch “Los caudillos (con su capacidad de controlar a las
clases populares) representaban la solución al desorden social, señalando
asimismo que la agenda política que ellos tenían moldeó a la nación”.1
1
Lynch, John. (1993). Caudillos en Hispanoamérica 1800 – 1850. 1 ed. Colecciones
MAPFRE
En las primeras décadas del siglo XIX, San Martín y Bolívar discutían el
nuevo sistema que optaría el Perú: Monarquía o República. En 1822, Riva Agüero
se unió al general José de San Martín y apoyó fielmente a la Monarquía
Constitucional que era defendida por Torre Tagle y Sánchez Carrión. Luego,
Bolívar optaría por una República Unitaria contra la República que defendía Riva
Agüero. En los tiempos de la Confederación Peruano-Boliviana, el general Santa
Cruz desencadenó una serie de batallas contra Santiago Salaverry y su defensa a la
Republica Conservadora.
En las primeras décadas, el Perú ha tenido 7 constituciones (1821,1823,
1826, 1828, 1834, 1837 y 1839), y siete gobiernos militares (1827,1829, 1834,
1835, 1839, 1841 y 1843) de características conservadoras y liberales.
1. Viajeros franceses en el perú: Siglo XIX
En el siglo XIX. Francia era considerada un paradigma de libertad.
Cualquier acontecimiento que ocurriera en ese país, repercutía en admiración y
respeto en nuestro continente. En los últimos años del siglo XVIII y comienzo del
siglo XIX, los franceses estuvieron abocados al conflicto social y político que causó
la revolución francesa. Por tal motivo, su literatura estuvo comprometida en los
acontecimientos sociales y políticos, y no en temas secundarios: América.
Fue en 1820, que resurge el interés de Francia en esta parte del continente,
a raíz de la secuela de la guerra de la independencia. Para los franceses, el Perú,
constituyó la noticia del momento. El primer libro del siglo XIX dedicado al Perú,
fue escrito por Rosnyy: “Voyague de un puviem a Paris”. El libro trata la vida de
un joven indio, descendiente de Incas, que llega a Francia, conducido por un viejo
filósofo, amargado de la revolución francesa y desengañada del género humano.
Jullien Mellet, fue otro viajero francés, que residió más de diez años en América, y
fue agente de Napoleón, era conocido por el apodo de El Americano. Él recorrió la
costa peruana en 1819, desde Buenos Aires a la Antillas. Mellet no era científico y
no gozaba de un cargo oficial, sólo conoció al virrey y a la nobleza criolla.
Cuando el nombre del Perú se mezcló con el de La Serna, San Martín y
Bolívar. El gobierno francés vigiló de cerca los acontecimientos del Perú, como los
de toda América. Fue a partir de 1824, donde la figura del libertador Simón Bolívar
ocupó el interés de Francia. En ese momento, el gobierno francés realizó visitas
oficiales para trasmitir al ministerio francés sus impresiones de los planes de
gobierno de América.
Quién conoció el Perú y trazó una imagen real de nuestro país, fue el capitán
Alfonso de Mogel y el Agente Rattier de Sauvignan. Mogel era un oficial de la
marina, que llegó a las costas de América en 1823, y al Perú en 1824. Él tuvo como
misión oficial, reunirse con La Serna en el Cuzco, pero al no tener éxito se dirigió a
Lima. Mogel conoció la costa y la sierra peruana, tuvo contacto directo con el
pueblo indígena y los montoneros. El otro cronista francés, fue el padre Rattier de
Sauvignan. Rattier viajó al Pacifico casi al mismo tiempo que Mogel, pero lo hizo,
como secretario del conde de Landós. El francés tuvo como misión observar la
conducta del gobierno patriota de Lima. Él escribió una serie de correspondencia de
suma importancia para comprender el contexto social, político, económico del Perú.
De no haberse publicado los libros de viajes, el Perú hubiera gozado de una mala
imagen.
IV. FLORA TRISTAN, DEFENSORA DE LOS DERECHOS DE LA MUJER
Flora Tristan nace el 7 abril de 1803 en París. Su padre, Mariano Tristan y
Moscoso, fue un destacado coronel de la armada española. Durante sus primeros
años de su vida, Flora no se privó de nada y creció en un hogar respetado por la
sociedad francesa. Cuando tuvo 4 años, su padre muere y su familia se sume en el
desamparo. El Estado francés no reconoció a la viuda y a sus hijos negándoles todo
tipo de derechos.
Por tal razón, Flora comienza a trabajar como obrera en un taller de
litografía, coloreando los grabados del dueño, André Chazal. El señor Chazal era un
persona mayor, que se enamoro perdidamente de Flora, y su madre impulso ese
romance. Es a la edad de 16 años que contraen nupcias, pero su matrimonio fue un
desastre, apenas duro 4 años. Ella tuvo 3 hijos, de los cuales dos morirían a una
temprana edad, su hija se llamó Aline y fue la madre de Paúl Gaudin. El matrimonio
se convirtió para Flora en un suplicio y humillación. Al no existir el divorcio, ella
tomo la decisión de huir, escondiéndose por todo Paris, huía por el temor de que su
marido la denunciara a las autoridades. Al encontrarse en la ilegalidad, tuvo que
trabajar de dama de compañía de una familia inglesa, la que acompañó en sus viajes
por Europa. Es en una hospedería de Paris donde se enteró que el hermano de su
padre, Pió Tristan, era un destacado personaje en la lejana América. Al enterarse de
la noticia, ella le escribe una carta contándole su existencia y su situación en que se
encontraba. En la carta, le expresa la difícil situación de la familia, a raíz de la
muerte de su padre. El matrimonio de sus padres no tuvo la legalidad esperada en
Francia, para un militar el casarse con una francesa, requería permisos especiales,
pero él no los realizó, por esa razón su matrimonio no tuvo un valor legal.
Su tío, Don Pío Tristan, le envió un pasaje para que viajara a Perú. Fue en
1833, cuando ella se embarca en El Mexicano para dirigirse a América. En Perú
comienza a escribir su libro “Peregrinaciones de una Paria”, el cual, tuvo tanto
existo en Francia, que le permitió ser una escritora reconocida en la ciudad de luz.
Al enterarse del retorno de Flora a Paris. Andrés Chazal se dedicó a
perseguirla judicialmente, valiéndose del rumor que Flora había regresado con una
enorme fortuna. Un buen día Chazal la espero en la puerta de su casa con dos
pistola, el primer disparo logró impactarle cerca al corazón, al sentirse culpable del
acto, Chazal declinó en el segundo disparo. Dos médicos logran salvarle de la
muerte, pero la advierten que debe tener una vida calma y discreta, pero ella hace lo
contrario. Su necesidad de luchar por la mujer en Francia por las injusticias
laborales hizo que alcanzara el respeto de las autoridades francesas.
Flora realiza un viaje a Londres, donde escribe un libro muy admirable, que
se llama Paseos en Londres. Fue en Londres donde ella se disfrazó de hombre para
poder entrar a los sitios que no le eran permitidos como mujer. Visitó prostíbulos,
bares, donde pudo observar la condición indiscriminada de la mujer.
A su llegada a Burdeos recibe una invitación al concierto de Franz Litz, en el
Teatro de la ciudad. Fue en ese lugar, que ella cae desplomada. Al ser auxiliada por
una pareja, es conducida a su casa. Flora Tristan muere en 1834, a los 41 años,
dejándonos plasmadas sus ideas y vivencias en sus libros.
1. La esclavitud en el Perú
A consecuencia de la dominación española, el Perú sufrió una caída
demográfica. Motivado principalmente por efectos de enfermedades que eran
transportadas por barcos que partían de Europa. Esta afección tuvo consecuencia
irreparable, la destrucción de poblaciones y aldeas enteras; quedando la necesidad
de requerir mano de obra para el proceso productivo. Por esta razón se determinó y
se recurrió a la trata de esclavos. Para Santiago Tavara, “la esclavitud es un crimen
social que priva al hombre de su libertad personal, cuya garantía es la primera y
principal base de la sociedad. En toda sociedad en que existe ó ha existido, la
legislación considera al esclavo como una cosa. El crimen de la esclavitud se
comete, en un principio, sobre su raza, extranjera que no tiene vínculos civiles con
la sociedad que la cautiva. La esclavitud antigua asiática ó europea nació del falso
derecho de la guerra del vencedor sobre el vencido. La esclavitud moderna ó
americana, nació del sentimiento humanitario de un hombre poseído de la sublime
caridad de Jesucristo. De esta caridad surgió una idea errónea de que se apoderó
malignamente el egoísmo y la codicia para fundarla sobre el color y sobre el abuso
de la fuerza”2
Como España no tenía colonias africanas, recurrió principalmente a la trata
de negros, realizada por Portugal, Inglaterra. Estos eran transportados en barcos
hasta el puerto del Callao, donde recibían un trato inhumano de violencia; después
eran ubicados en barracones, para ser subastados públicamente en distintos espacios
públicos de nuestra capital. El destino de los esclavos era mayormente las
plantaciones de azúcar y algodón. El trabajo exigía mucho sacrificio; por tal razón,
el esclavo varón costaba mucho más que los jóvenes, mujeres, niños. En las
haciendas sus casas carecían de ventilación e higiene, por lo tanto propiciaban
enfermedades. El poco tiempo que le quedaba se dedicaban al alcohol, provocando
desorden y violencia. Pero todo esto era inducido por el patrón.
2
Tavara, Santiago (1855). Abolición de la Esclavitud en el Perú. 1 ed. Lima, Imp. El Comercio. Pág. 3.
V. ANALISIS Y TIPOS DE ESCLAVITUD EN LA OBRA
“PEREGRINACIONES DE UNA PARIA” DE FLORA TRISTAN”
1. El matrimonio como forma de esclavitud:
La primera experiencia que tuvo Flora Tristán con la esclavitud, fue en su
matrimonio. Su unión se convirtió por muchos años en servidumbre. Y este vinculo
matrimonial fue interpretado por la autora como una humillación, que no había
manera de liberarse de ella, porque no existía el divorcio y la separación. Está
búsqueda de libertad se convirtió desde el punto legal en un acto delincuencial.
Flora sintió que con aquel lazo matrimonial, hacía de ella un ser sin vida
propia y libertad; que sólo el hecho de verse ligada con otra persona era el resultado
de un trato comercial de sometimiento al hombre. Esto hizo en ella, que rechazara la
maternidad y desconfiara el amor del sexo opuesto. Su idea de matrimonio se
basaba en una institución intolerable, donde la mujer era vendida al hombre para ser
convertida en esclava.
Al sentirse abandonada en Francia, y escondiéndose del temor de ser
descubierta y enviada a prisión por su marido. No descartó la oportunidad de buscar
a su pariente en el sur del Perú. Este hecho, fue a consecuencia de un encuentro
fortuito que tuvo con un comensal en una hostería de Paris. Esté se acercó a ella, y
le dijo: “Usted se apellida Flora Tristán. ¿Usted no será pariente de unos Tristán
del Perú?. Yo soy marino. Hago viajes regularmente hacia América del Sur, he
estado muchas veces en el sur del Perú, en la ciudad de Arequipa, y allí la familia
Tristán es la familia más poderosa e influyente. Yo conozco a don Pío Tristán, que
fue uno de los últimos virreyes del Perú y uno de los primeros presidentes de la
República”.3. Este acontecimiento fue el inicio a un encuentro con la libertad y el
despotismo de la sociedad.
Flora Tristán encontró en el Perú el mismo trato de esclavitud que sufrían las
mujeres francesas, porque en el siglo XVIII, el matrimonio en nuestro país fue la
base de la sociedad hispánica. La nobleza criolla mediante esta unión garantizaba la
legitimidad y continuidad social de la familia colonial. Porque mediante el
matrimonio se conservaba el status y el patrimonio de las familias. Fue por ese
motivo que existió un excesivo abuso a la mujer peruana. En este siglo las uniones
no necesariamente fueron por motivos de fe sino más bien por razones de otra
idiosincrasia, trayendo como consecuencia niños ilegitimos, madres abandonas y
abusos excesivos contra la mujer peruana: violaciones, embarazos no deseados, etc.
Cuando Flora Tristán escribe sobre su viaje, lo realiza con un énfasis puesto
en el paisaje social y las relaciones humanas, donde ella misma se sitúa en la
narrativa que expresa. Por tal razón, en Peregrinaciones de una Paria se entretejen
muchos temas, pero la esclavitud será el motor para entender el pensamiento de está
3
Tristan, Flora. Peregrinaciones de una Paria (Biblioteca Juvenil Arequipa). 1 ed. Arequipa: Gobierno
Regional. Pág. II
gran intelectual que estuvo en el Perú a comienzos del siglos XIX. Ella
continuamente va intercalando las descripciones con sus reflexiones, estableciendo
comparaciones de su actividad política como militante de movimientos socialistas
en Paris con el desarrollo histórico de nuestra sociedad. Ella afirma lo siguiente:
“Antes de comenzar la narración de mi viaje debo hacer conocer al lector la
posición en la cual me encontraba cuando lo emprendí y los motivos que lo
determinaron. Debo colocarlo en mi punto de vista, a fin de asociarlo a mis
pensamientos y a mis impresiones4. Este párrafo nos da entender, que ella no
solamente estuvo comprometida consigo misma, sino con otras personas o hechos
que tuvieron relevancia en ese momento.
2. La esclavitud y el comercio de negros:
Cuando se embarca en “El Mexicano”, ella establece una amistad con sus
compañeros de viaje, donde descubre que los marineros son hombres civilizados
que la tratan con respeto, protegiéndola de toda adversidad que pueda tener en el
transcurso del viaje. Fue en Praia, donde conoce a Mr. Tappe, un hombre gordo,
con rasgos angulosos y tez curtida. El le contó, que había sido educado en el
Seminario de Passe, cerca de Bayona. Y por su distinción religiosa, fue enviado
como misionero a diferentes puntos del mundo, para convertir a la población salvaje
en el catolicismo. Fue por esa razón que llegó a parar en el puerto de Praia. En la
conversación que tuvo con el Mr. Tappe. Flora Tristán quería saber que clase de
negocios había realizado en esta parte del mundo. El le respondió: Dios mío,
señorita, no hay en esta costa, sino un solo género de comercio: la trata de negros.
¡Cuando vine a establecerme en esta isla era entonces el buen tiempo! Se podía
ganar dinero sin darse mucho trabajo. Durante dos años fue un gran negocio. La
prohibición misma de la trata, hacía que se vendieran los negros como uno quería.
Pero, desde entonces, esos malditos ingleses han insistido tanto en la ejecución
rigurosa de los tratados, que los peligros y los gastos que ocasionan el transporte
de los negros ha han arruinado por completo el negocio más lucrativo que ha
existido. Además, esta industria la explota todo el mundo ahora y no se gana en
ella, más que al vender fardos de lana o algodón.5
Este incremento del comercio de negros en América era acompañado por
una fuerte ideología racista. Los negros eran considerados seres inferiores,
comparados frecuentemente por animales, o simplemente un objeto. La iglesia los
consideraba seres sin alma. Pero Una vez proclamada la independencia, San Martín
emite el famoso bando de “Libertad de Vientres” (12 de agosto de 1821) por el cual
todos los hijos de esclavos que nacieren en el Perú a partir del 28 de julio de ese
4
Tristan, Flora. Peregrinaciones de una Paria (Biblioteca Juvenil Arequipa). 1 ed. Arequipa: Gobierno
Regional. Pág. [13]
5
Tristan, Flora. Peregrinaciones de una Paria (BIblioteca Juvenil Arequipa). 1 ed. Arequipa: Gobierno
Regional. Pág. 43
año serían libres. Ya en el texto mismo del decreto se aprecia que San Martín
decide optar por una fórmula de abolición gradual: “Yo no trato, sin embargo, de
atacar de un golpe este abuso: es preciso que el tiempo mismo que lo ha
sancionado lo destruya”6. Este decreto permito dar algunas libertades a la raza
negra, pero en la práctica nunca se cumplía, siempre existieron los abusos y las
humillaciones.
Antes de abordar a “El Mexicano” aceptaron la cortesía de un capitán
italiano, de subir a su goleta. Se llamaban Brandisco, era un hombre de 50 años,
natural de Venecia, que recorría el mundo desde los 6 años. Durante el transcurso de
su vida llegó a realizar labores de grumete, marinero, y ahora era capitán y dueño
de un buque con dos mástiles, de cuarenta toneladas. Hablaba todas las lenguas,
pero lo realizaba de una manera errada, que causaba rizas entres sus amigos. Su
principal negocio era la trata de negros, y después de presentarse y contar la forma
como se hizo de una riqueza, vino a expresar su negocio. Este es el dialogo:
-Ahí tengo – nos dijo – dos lindos negritos que serían muy
convenientes para ustedes. Son buenos honrados, bien
educados, fuertes, y sanos. ¡Cok! – gritó. Enseguida un negro
joven, como de quince o dieciséis años saltó a la cámara y
quedó inmóvil delante de nosotros. El miserable Brandisco se
puso a elogiar su mercancía, mostrándonos por todos lados a
ese ser humano como hubiera podido hacerlo un chalán con
un potro joven. Este acto de barbarie trajo presente a mi
espíritu todos los males de la esclavitud, odioso cuadro que ya
me había ofrecido Praia.7
En este pasaje se demuestra la injusticia social que sufría el esclavo negro en
el continente americano. Ella notó que estás prácticas de desprecio social se
acrecentaba durante el tiempo, acrecentándolo con las prácticas de torturas y otros
bajezas indignas. Flora estaba convencida que está costumbre existía por todo el
continente americano. Los prejuicios de Europa sobre las profesiones no habían
podido propagarse, y la esclavitud del negro se ha clasificado por el matiz del color
de la piel, más no por el género de trabajo a que se dedicaban.
3. La esclavitud en la mujer en Praia:
La primera experiencia que tuvo Flora Tristán con la esclavitud, fue en
Praia. Ella fue testigo visual de la opresión que sufre la mujer negra en esta parte del
continente. Y comprobó la humillación que sufre sus valores, como ser humano.
6
Aguirre, Carlos (1995). Agentes de su propia libertad: los esclavos de Lima y la desintegración de la
esclavitud, 1821 – 1854. Lima: Pontificia Universidad Católica del Perú. Pág. 185
7
Tristan, Flora. Peregrinaciones de una Paria (Biblioteca Juvenil Arequipa). 1 ed. Arequipa: Gobierno
Regional. Pág. 54
Flora Tristán al tener el dialogo con Mr Tappe sintió que hablaba con un
caníbal. Este consideró a la mujer como un objeto sexual y una maquina
reproductora de hijos. Donde el objeto de su cuerpo era la satisfacción de sus
apetencias sexuales.
Por esa razón decidió retirarse a su dormitorio. Luego, al encontrarse con el
Mr. David (Co-propietario de El Mexicano) por los pasadillos del barco. Este le
preguntó por la velada que tuvo con el propietario del Puerto de Praia. Flora Tristán
muy indignada le expresa que aquel hombre le inspiraba la más profunda
repugnancia. Cuando el Mr David increpa a la autora, y le reprocha cual fue el
motivo del trato a este hombre culto, ella replica: “Este hombre no es francés. Es un
antropófago bajo la forma de carnero”. Infortunadamente para ella el Mr Tappe
había sido invitado a comer en el barco, por lo cual Mr. David la convenció de
olvidar el incidente y le pidió que le de oportunidad de conocerlo mejor. Su
intención era que Flora estudiara a este hombre, a fin que adquiriera por sí misma la
existencia de criaturas inmundas. Después de experimentar la avidez de comer de
este hombre, se mantuvo un dialogo. Es el siguiente:
Su capitán, señorita, acaba de darme una comida muy buena. ¡Comer!. Esa
es la vida. Y yo en esta isla de miseria, estoy privado de esa vida.
¿No tiene usted nada para comer en esta isla?
No tenemos sino carneros, aves, legumbres, pescado fresco y
frutas.
Pero me parece que con todas esas cosas se debe tener un
menú muy conveniente.
Sí, si se tuviera un cocinero y todo lo que se necesita para
preparar los guisos; pero no hay nada de eso.
¿Porqué, pues, no le enseña a cocinar a una de sus negras?
¡Ay señorita! Se ve bien que no conoce usted a la raza negra.
Esas miserables criaturas son tan malas, que me es imposible
confiar en ninguna de ellas ese trabajo sin correr el riesgo de
ser envenenado.
Entonces las trata usted muy duramente, para que sientan
tanto odio y alimenten semejante animosidad contra su amo.
Los trato como es debido tratar a los negros, sí se quiere ser
obedecido: a latigazos. Le aseguro, señorita, que para
manejarlos, esos bribones dan más trabajo que los animales.
Tengo 18 negros, veintiocho negras y treinta y siete negritos.
Desde hace dos años los negritos se venden muy bien, pero
cuesta mucho trabajo deshacerse de los negros.
En que ocupa Usted a esa gente?
En cultivar mi chacra, en cuidar mi casa. Todo está bien
cuidado, pregunte a esos señores.
El Mr. David me ha dicho que usted es casado; ¿es feliz en su
matrimonio?
Me vi obligado a casarme con una de esas negras, para
asegurar mi vida, Ya me han envenenado tres veces. Temía
morir y pensé que casándome con una de aquellas mujeres,
ella tomaría interés por mí, sobre todo si le hacía creer que
todo lo mío le pertenecía también. La hago cocinar y la obligo
a probar, delante de mí, lo que me sirve de comer. Encuentro
en esta precaución una gran seguridad. Tengo tres hijos en
esta mujer a quienes ella quiere mucho.
Entonces usted no puede pensar en retornar a Francia si siete
lazos aquí.
Porque dice eso? ¿Acaso por esta mujer? OH, eso no me
molesta. Tan pronto como haya hecho una pequeña fortuna, la
traeré aquí y un día que el mar esté encrespado le diré: Yo
regreso a mi país. ¿quieres venir conmigo?. Todas estas
mujeres se aterrorizan por el mar, estoy seguro que ella se
negará. Entonces yo le diré: Bien, mi querida, ya usted ve que
estoy cumpliendo con mi deber y le estoy ofreciendo llevarla
conmigo, pero usted se niega a obedecer a su esposo.... Le
deseo la felicidad. Y luego me iré.
¿Cuál será el porvenir de esa mujer?
OH, ella ni se quejará ni temerá nada: venderá a sus hijos por
buen precio y encontrará un buen marido para cocinarle..
Pero, esa mujer es su esposa a los ojos de Dios, Mr. Tappe ;
ella es madre de sus hijos....8
8
Tristan, Flora. Peregrinaciones de una Paria (Biblioteca Juvenil Arequipa). 1 ed. Arequipa: Gobierno
Regional. Pág. 50
A raíz de este dialogo, Flora entiende los infortunios que traen la pobreza y la
falta de aceptación por la sociedad. No se resigna ante tanta injusticia, y su sentido
de compasión y equidad está dirigida hacía el esclavo. Es a través de sus relatos, que
denuncia a la sociedad, que se encuentra en esta parte del continente (Praia). Ella
reflexiona en el hecho que toda está maldad y discriminación es causa directa de
Europa por permitir esas opresiones. Flora Tristán observó que la esclava negra era
comprada y vendida por su calidad de productora y reproductora, teniendo sus hijos
el mismo futuro que la madre, por esa razón era considerada por el hacendado de
interés multidimensional.
4. Abuso y castigo, formas de controlar la esclavitud: Praia
Antes de salir de Praia. Flora realizó una visita de despedida al cónsul de aquel
puerto. Fue en ese lugar donde presenció otra bochornosa atrocidad de ultraje a la
humanidad. Ese joven cónsul, representante de una república, ese elegante
americano, tan gracioso conmigo, tan amable con Mr. David, no parecía sino un
amo bárbaro. Lo encontramos en la sala baja golpeando con un garrote a un negro
extendido a sus pies, cuyo rostro estaba cubierto de sangre. Hice un movimiento
para ir a defender de su opresor a ese negro, a quien la esclavitud paralizaba las
fuerzas.
El cónsul encargó a Mr. David que nos explicara por qué
golpeaba a su esclavo. El negro era ladrón, embustero,
etc...!Como si el más enorme de los robos no fuera aquel de
que es víctima el esclavo! ¡Como si pudiera existir una virtud
para aquel que no puede tener una voluntad! ¡Como si el
esclavo debiera algo a su amo y no estuviera, por el contrario,
con derecho de intentar todo contra él.9.
Tristan nos muestra lo abyecto de la esclavitud, y la incomprensión de cómo
una persona de gran talla es agredida por otra. Por primera vez observa el abuso
desmedido del patrón, y su respuesta fue una reacción justa contra del opresor. La
isla de Praia pertenecía a Portugal, y su principal comercio era la trata de negros, su
ubicación estaba muy cerca a la costa occidental de Senegal. Por otra parte, el
abolicionismo se desarrolló a inicios del siglo XIX, alentado por la Revolución
Industrial y la Revolución Francesa, pero a él se enfrenta el pensamiento esclavista
americano (que se apoya en que el esclavo es la mano de obra, que hace posible el
cultivo de tabaco, algodón, azúcar y café). Hay tres etapas: en la primera (primer
tercio del siglo XVIII-1807) se dan los orígenes y desarrollo del abolicionismo, que
se convierte en un movimiento interior que influyen en que cada Estado decida la
abolición de la trata; en la segunda etapa (1807-1815) se da una transición en la
que el abolicionismo pasa de ser un asunto exclusivamente nacional a plantearse
como un caso internacional en el Congreso de Viena; en la tercera etapa (1815-
1886/1888) se da la era abolicionista, pues tras Viena los países van suprimiendo
9
Tristan, Flora. Peregrinaciones de una Paria. 1 ed. Arequipa: Gobierno Regional. Pág. 52
la trata y luego la esclavitud, firmando tratados bilaterales o por leyes internas.
Pero no se producirá una supresión total y no será hasta los años 60 cuando se
proscriba el contrabando de negros10. Estos intentos de abolir el tráfico de negros
por parte de Inglaterra (1807) y la creación del Escuadrón de África Occidental,
hizo muy difícil el comercio de negros. Este tratado permitió que otros países se
afiliaran al tratado. A raíz de este hecho, San Martín encuentra una fórmula
salomónica: decreta lo que se denomino la libertad de vientres, es decir, la regla de
que nadie nace esclavo en el Perú a partir de la Independencia. En esta forma, los
actuales esclavos permanecen como tales, pero la siguiente generación ya no será
esclava. Así mismo San Martin, una institución que ha durado tanto tiempo no será
terminada en un solo acto, lo que podría ser perjudicial, sino que se dejará que “el
tiempo mismo que la ha sancionado la destruya”. Estos aires de independencia fue
el inicio de la abolición de la esclavitud en el Perú.
5. Las religiosas y la esclavitud:
Al establecerse en Arequipa, en búsqueda de su herencia. Flora realiza una
serie de visitas a los conventos que cuenta la ciudad. Al visitar el convento Santa
Rosa, considerado como uno de los más ricos monasterios del Perú, se dá con la
sorpresa que tiene una distribución muy cómoda, y presenta cuatro claustros que
encierra en cada uno, un lugar espacioso. Pero toda esa belleza no era contrastada
con el perfil de las religiosas de Santa Rosa. Para Flora, ellas eran consideradas
como: envidiosas, celosas. Ellas revelaban la pereza y el odio. La autora la
consideraba unas esclavistas. “Ninguna debería tener, según el reglamento, más de
una mujer a su servicio; pero algunas tienen tres o cuatros esclavas alojadas en el
interior. Además cada una sostiene afuera una esclava para hacer sus comisiones,
comprar lo que desea, y comunicarse, en fin, con su familia y con el mundo. Se
encuentran también en esta comunidad, religiosas cuya fortuna es muy
considerable y hacen muy ricos presentes al monasterio y a su iglesia”11.
La autora comprendía la necesidad de tener esclavos domésticos, pero el
trato que recibían era infrahumano. Ella denuncia a la sociedad por no abolir las
leyes que permitían esta humillación. Esta esclavitud fue abolida gradualmente
desde 1821, pero persistió en el Perú hasta 1854.
Por otro lado, Flora menciona que las mujeres que abandonan la vida
espiritual, como es el caso de su prima Dominga, nunca podrán sacarse el pasado
religioso. La ciudad la condenará por siempre. A pesar de no contar con los hábitos
la seguirán tildando de religiosa, y el desprecio se convertirá en una esclavitud.
10
González Recuerdo, Antonio (2009). Colonización de África. El Comercio de esclavos y la era
abolicionista [En línea]. Recuperado el 9 de noviembre de 2010. http://www.mailxmail.com/curso-
colonizacion-africa-comercio-esclavos-era-abolicionista/comercio-esclavos-trata-negros
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Tristan, Flora. Peregrinaciones de una Paria (Biblioteca Juvenil Arequipa). 1 ed. Arequipa: Gobierno
Regional. Pág. 256
6. La esclavitud en las haciendas de Lima:
Después de la revolución de Arequipa. Flora toma la decisión de regresar a
Francia, pero antes, decide visitar Lima. El ser pariente de don Pío Tristán le valió
poder participar de todo la elite de la ciudad. En Lima es invitada por la familia
Izcue a visitar la zona de Chorrillos, cerca de la costa, lugar donde los limeños
acostumbran a pasar el verano. Muy cerca de este balneario se encuentra la
plantación azucarera de Mr. M. Lavalle, antiguo intendente de Arequipa. Este
establecimiento contaba con cuatrocientos negros, trescientas negras y doscientos
negritos. El propietario de la hacienda le ofreció visitar sus instalaciones. Fue en
ese lugar donde Flora, harta de la humillación por parte del patrón replica de forma
airada el maltrato que recibe los esclavos de la hacienda. Este es el dialogo:
Enseguida fuimos a la refinería contigua donde el azúcar se separaba de la melaza.
M. Lavalle me habló de sus proyectos de mejoras.
Pero, señorita, agregó, la imposibilidad de conseguir nuevos
negros es desesperante. La falta de esclavos traerá la ruina de
todos los ingenios. Perdemos muchos de ellos y las tres
cuartas partes de los negritos mueren antes de llegar a los
doce años...
Esta mortalidad es espantosa y debe hacerle concebir, en
efecto los más funestos temores para su establecimiento. ¿De
qué proviene, pues, que no se mantenga el equilibrio entre los
nacimientos y las defunciones? El clima es sano y creería que
los negros están aquí tan bien como en África.
El clima es muy sano pero las negras se hacen abortar a
menudo....
Oh! ¡Entonces son muy desgraciados! ¡La especie humana
aumenta hasta en medio de las calamidades! Sus negros se
multiplicarían tanto como los hombres libres si su existencia
fuese tolerable y si entre ellos el sentimiento del dolor no fuese
más fuerte que los más tiernos afectos de nuestra naturaleza.
Señorita, usted no conoce a los negros. Es por pereza que
dejan perecer a sus hijos...
¿Cree usted que siendo libres sus necesidades bastarían para
inducirlos al trabajo?
Las necesidades en estos climas se reducen a tan poca cosa
que no necesitarían de gran trabajo para satisfacerlas.
Además, no creo que el hombre, por más necesidades que
tenga pueda sentirse inducido, sin la fuerza, aun trabajo
regular....
Creo con usted que el hombre blanco, rojo o negro, se
resuelve difícilmente al trabajo cuando no ha sido educado en
él. Pero la esclavitud corrompe al hombre y al hacerle odioso
el trabajo no podrá prepararlo para la civilización.
Sin embargo, señorita, en tiempos de los romanos Europa
estaba cubierta de esclavos y la esclavitud se mantiene aún en
Rusia y en Hungría.
También, señor, las guerras sociales pusieron a menudo en
peligro el Imperio Romano y no habría sucumbido por la
invasión de los pueblos del norte si las tierras hubiesen sido
cultivadas por brazos libres y si las ciudades no hubiesen
contenido más esclavos que ciudadanos.......
Observe, le ruego, que la esclavitud aquí, como entre todos los
pueblos de origen español, es más dulce que entre las demás
naciones de América. Nuestro esclavo puede rescatarse y entre
nosotros, el negro sólo es esclavo de su amo. Si otro lo golpea
se encuentra en estado de legítima defensa y puede devolver el
golpe. Mientras que en sus colonias el negro está, en cierta
manera, bajo la dependencia de todo el mundo.......
Convengo en que las leyes españolas, relativas a los esclavos,
son mucho más humanas que las de cualquiera otra nación.
Entre ustedes el negro no es simplemente una cosa, es un
correligionario y la influencia de las creencias religiosas le
procura algún paliativo. Mas el vicio radical, la perpetuidad
de esa esclavitud, subsiste entre ustedes así como en nuestras
colonias pues es imposible para el esclavo que pueda alguna
vez usar de la facultad de rescatarse, con la continuidad del
trabajo exigido.......
¿En que forma señorita?
Si el precio en que se vende el azúcar comparado con el valor
de trabajo que demanda, estuviese en la misma relación que
los productos de Europa comparados con sus gastos de
producción, el amo, sin tener entonces una compensación por
la perdida de su esclavo, no lo obligaría al trabajo y velaría
por su conservación...
Pero la trata está ya abolida y mientras más valor tengan
nuestros productos más interesados estaremos en conservar
nuestros esclavos.
Parece que debería hacer así y usted ve por su propia
experiencia que sucede lo contrario. El presente es todo para
el hombre....
Señorita, usted habla de los negros como persona que no los
conoce, sino por los bellos discurso de sus filántropos de
tribuna. Mas por desgracia es demasiado cierto que no se les
puede hacer marchar sino con el látigo.
Si es así, señor, le confieso que hago votos por la ruina de los
ingenios y creo que estos votos serán escuchados muy
pronto... 12
VI. CONCLUSIONES:
En “Peregrinaciones de una Paria”, Flora Tristan identifica a la mujer, como un ser
subyugado por el matrimonio. Su argumentación radica en que la sujeción de la
mujer al hombre es un apriorismo, el cual no se funda en la experiencias, sino en
cosas irracionales. La costumbre ha contribuido durante mucho tiempo, un factor
decisivo para mantener esta opresión; además de leyes del Código Napoleónico que
coadyuvaron a sostener la sumisión de la mujer.
El incremento de la trata de negros a comienzos del siglo XX estuvo acompañado
de una fuerte ideología racista por parte del comerciante europeo. Estos seres eran
considerados inferiores a comparación con otros, además, ésta humillación
permaneció hasta mediados del siglo XIX.
El viaje de Flora Tristan explicó la situación del esclavo a comienzo del siglo XIX.
A través de su experiencia, ella observó la ineficiencia de los políticos peruanos
para remediar el problema de la esclavitud. La ambición del poder era el ingrediente
principal en la sociedad limeña.
No solo existía una anarquía militar, sino también social en el Perú, a comienzo del
Siglo XIX. Este desorden social fue producto de una sociedad que no pudo
gobernarse a sí misma, donde la improvisación, fue el elemento principal para su
desarrollo histórico. La raza negra esperaba con ansias este tipo de eventos, para
poder conseguir su libertad, y vivir en el anhelo de libertad.
A través de sus memorias el factor importante para de la existencia de la esclavitud
en el Perú a comienzos del siglo XIX, era la idiosincrasia pesimista, mediocre de la
sociedad peruana. Esto era acompañado por la inconstancia de ideas y modas del
momento que existía a comienzo del siglo.
La esclavitud construye un mundo incivilizado, porque hace del trabajo un
sufrimiento constante, permitiendo a la esclavitud seguir sometiendo con barbarie la
degradación del hombre
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Tristan, Flora. Peregrinaciones de una Paria. (Biblioteca Juvenil de Arequipa) 1 ed. Arequipa: Gobierno
Regional. Pág.356
En Peregrinaciones de una Paria, Flora realiza una radiografía del comportamiento
social del Perú a principio del Siglo XIX, proporcionando herramientas de reflexión
sobre la subyugación del esclavo en el Perú.
VII. BIBLIOGRAFÍA
Lynch, John. (1993). Caudillos en Hispanoamérica 1800 – 1850. 1 ed. Colecciones
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Tristan, Flora. Peregrinaciones de una Paria (Biblioteca Juvenil Arequipa). 1 ed..
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