1. VIRGEN DEL VILLAR
Como niña de Corella,
cuando salgo a pasear,
ando y ando hasta tu ermita,
querida Virgen del Villar.
Cuando entro a saludarte,
veo lo guapa que estás,
y se me alegra el alma,
querida Virgen del Villar.
A la hora de despedirme,
aunque no me quisiera marchar,
te mando un beso muy grande,
querida Virgen del Villar.
Delia Atienza Librada. Curso: 2ºC

2. VIRGEN DEL VILLAR
Tu luz nos ilumina,
como una estrella fugaz.
Nos protege desde el cielo,
o aquí en el altar.
Tienes nuestra devoción,
y también el corazón.
Te rogamos todo el año,
que nos des tu bendición.
Sólo, en mi habitación,
yo rezo bien bajito.
Y sé que me escucharás:
-Dame tu protección,
¡Oh Virgen del Villar!
Ander Soto Toso. Curso: 3ºC

3. VIRGEN DEL VILLAR
Llena de cosas bonitas,
está la ciudad de Corella,
pero mi Virgen del Villar,
destaca entre todas ellas.
La Virgen del Villar tiene,
en su mano una rosa,
en sus pies la vara de mando,
y en su cara, la sonrisa más hermosa.
Siempre que vengo a verte,
te rezo y te pido dos cosas,
que cuides de todo el mundo,
y nunca me dejes sola.
De ser corellana,
yo me siento orgullosa,
porque tengo de patrona,
a mi Virgen de la rosa.
Elisa Montilla Rodríguez. Curso: 4º C

4. VIRGEN DEL VILLAR
Hace ya muchos años,
que en nuestra ciudad,
una preciosa Virgen,
apareció en un rosal.
Con mucha alegría,
nuestro pueblo la acogió,
en un altar la puso,
y ella siempre nos cuidó.
Cada día del pueblo,
la van a visitar,
y grandes y pequeños,
no la dejan de adorar.
Desde su alta ventana,
ella nos mira al pasar,
y se alegra porque sabe,
que no la dejamos de amar.
Miguel Sesma Pérez curso:

5. VIRGEN DEL VILLAR
No sé cómo empezar,
pero te voy a contar,
aunque parezca increíble,
es una historia de verdad.
Mi abuelo enfermo estaba,
y yo te fui a rezar,
como si fuera un milagro,
él se llegó a curar.
Ahora él te ha creado,
en miniatura en tu altar,
llena de flores y luces,
adornas su cuarto de estar.
No es por egoísmo,
tampoco por interés,
pero que sepas que nunca,
Te dejaré de querer.
Erika Mensat Catalán. Curso 6ºA

6. VIRGEN DEL VILLAR
No sé cómo empezar,
pero te voy a contar,
aunque parezca increíble,
es una historia de verdad.
Mi abuelo enfermo estaba,
y yo te fui a rezar,
como si fuera un milagro,
él se llegó a curar.
Ahora él te ha creado,
en miniatura en tu altar,
llena de flores y luces,
adornas su cuarto de estar.
No es por egoísmo,
tampoco por interés,
pero que sepas que nunca,
Te dejaré de querer.
Erika Mensat Catalán. Curso 6ºA