1. Proceso de iniciación cristiana infantil Paso a paso con Jesús
2. La pastoral de la
iniciación cristiana
despierta hoy en la
Iglesia un gran interés
y preocupación.
Se advierte la
necesidad de
recuperar hoy el
sentido de la iniciación
cristiana y conceder a
la misma, el lugar que
le corresponde en la
vida de la Iglesia.
3. Las razones de esta nueva sensibilidad
son varias:
Hoy no es posible
pensar en una
iniciación cristiana,
realizada de modo
casi espontáneo,
por influjo del
ambiente.
4. La nueva
situación cultural y
social presenta
las características
de una fuerte
secularización
que determina, en
muchos casos, el
debilitamiento y
hasta el abandono
de la fe.
5. Esta situación lleva a
los pastores a la
necesidad de impulsar
una acción pastoral
estrictamente
misionera, que lleve a
los bautizados a la
conversión y a la
adhesión consciente y
responsable a Dios.
6. La familia, por su parte, también recibe el
impacto de la secularización y raramente
constituye hoy un ámbito cristiano capaz
de formar a sus hijos en la fe recibida.
7. En sentido positivo hay un nuevo y vigoroso interés
por la iniciación cristiana que procede de:
El acercamiento a la obra de los “Padres de la
Iglesia”
La renovación catequética y litúrgica posconciliar
Los recientes trabajos de investigación histórica y
teológica sobre la iniciación cristiana
La creciente conciencia misionera y maternal de la
Iglesia en relación con la educación en la fe de sus
hijos, sobre todo de los más pequeños
8. Todas estas realidades van
suscitando en la Iglesia la
necesidad de revisar en
profundidad la pastoral de la
iniciación y restablecer, en toda
su originalidad, la iniciación
cristiana.
9. Esta realidad nueva, exige para la
catequesis
volver a las fuentes
y al contexto histórico
en que vivió la Iglesia en sus inicios,
muy parecida a la nuestra.
10. La iniciación cristiana en el
catecumenado primitivo supuso un
camino o proceso de formación
por etapas en el que se integraron
los siguientes elementos:
11. El primer
anuncio de
Jesucristo
que se
encaminaba
a suscitar la
fe y la
conversión
La instrucción
catequética
El cambio
radical de
vida
La
experiencia
litúrgica y de
oración, la
formación
espiritual
La celebración
de los
sacramentos
del bautismo,
confirmación y
eucaristía, por
los que los
candidatos
son
incorporados
al misterio de
Cristo y a su
Iglesia
12. Para los niños que
fueron incorporados
en los primeros
meses de su vida, en
el misterio de Cristo y
en la Iglesia por el
bautismo se necesita
pensar en un
catecumenado
posbautismal y esto,
supone un itinerario
catequético y
sacramental que se
desarrolle a lo largo
de la infancia y
adolescencia.
¿Qué implicaciones tiene
hoy para nosotros?
13. Al respecto afirma el Catecismo de la Iglesia Católica:
“Desde que el bautismo de niños vino a ser la
forma habitual de celebración de este
sacramento, éste se ha convertido en un acto
único que integra de manera abreviada las
etapas previas de la iniciación cristiana. Por su
misma naturaleza exige un catecumenado
posbautismal. Se trata del desarrollo necesario
de la gracia bautismal en el crecimiento de la
persona. Es el momento propio de la
catequesis” (CCE 1231).
14. La iniciación cristiana de
niños, adolescentes y
jóvenes, después de
celebrado el bautismo en la
infancia hoy día presenta
cantidad de dificultades que
han de tenerse en cuenta
para evitar reducir la
catequesis de estas edades
a la enseñanza o a su tarea
presacramental:
15. No se ha de dar por supuesta la fe y
la conversión en los niños; se hace
necesario tomar conciencia que los
bautizados de toda edad son
destinatarios del primer anuncio,
incluyendo a los niños bautizados.
Ha de asumirse el despertar
religioso de los niños y plantear el
primer anuncio a ellos, a sus familias
y a los adultos responsables de su
educación, como paso previo a
cualquier forma de catequesis.
16. Esto pide
que, celebrado el
bautismo, la
comunidad cristiana
no deje abandonada a
la familia ni al niño
para que en el hogar
mismo suceda la
socialización primera
de la fe.
17. La finalidad de la iniciación
cristiana de los niños no es:
La primera
comunión,
sino la
incorporación a
la vida
comunitaria y a la
eucaristía en la
comunidad
adulta.
18. Dadas las dificultades que se
encuentran hoy para
que la familia cumpla
su tarea evangelizadora,
la comunidad eclesial ha de evangelizar
a la familia y ha de favorecer
espacios comunitarios
para los niños,
de modo que ellos puedan crecer
permanente y continuamente
en la fe y así, ellos se hagan también
discípulos misioneros de Cristo
en la familia, en la Iglesia
y en el mundo.
19. La iniciación cristiana para niños y
preadolescentes exige por lo mismo,
un proceso gradual o itinerario
catequético con todos los elementos
anteriormente señalados que ayude a
madurar en la fe.
Como Hermanas Catequistas de
Jesús Crucificado hacemos nuestras
las preocupaciones y las
orientaciones de la Iglesia a este
respecto. Presentamos una
propuesta de itinerario de iniciación
cristiana para niños y adolescentes.
20. BIBLIOGRAFÍA
CAÑIZARES A. DEL
CAMPO M.
Evangelización,
Catequesis,
Catequistas Una
nueva etapa para la
Iglesia del tercer
Milenio Editorial
EDICE 1999 Madrid. DOCUMENTOS
COMPLETOS DEL
CONCILIO VATICANO
II
DIRECTORIO
GENERAL PARA LA
CATEQUESIS 1997
CELAM III Semana
latinoamericana de
catequesis. Hacia un
nuevo paradigma de la
catequesis. Bogotá,
Colombia 2007.