Quizás habría que hablar de las adolescencias porque cada persona es un mundo.
La adolescencia no es otra coas que un auténtico viaje del héroe.
¿Algún papá/mamá de niños de 2º ESO del Santo Reino?
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El mundo ordinario.
Niños pequeños, problemas pequeños; niños más grandes, problemas más grandes. Pero si de pequeños los problemas de pequeños son grandes, prepárate para lo que te espera cuando crezcan.
Si hemos hecho bien las cosas en la infancia, la adolescencia no nos de preocupar en exceso.
De niños: autoridad y consecuencias y luego hablamos, pero no al revés. De adelescentes: hablamos y luego autoridad y consecuencias.
¿Alguna llamada a la aventura reciente?
Cambios físicos: capacidad para reproducirse sexualmente (menarquía y poluciones), desarrollo de caracteres sexuales secundarios
Cambios cerebrales: mielinización axónica y prunning (poda) neural
Cambios sociales: acercamiento a la pandilla y retirada de la familia.
A pesar de la influencia del grupo de iguales, el adolescente se enfrenta solo a su vida.
El patito feo, el incomprendido…
La iniciación: No existe en nuestra cultura un rito iniciático que marque el inicio de la vida adulta.
El primer umbral: Abandonar el mundo ordinario para entrar en un nuevo mundo.
Nuevas experiencias: salir con los amigos, el alcohol, el tabaco y otras drogas, el botellón, las fiestas, la indepnedencia.
Paradoja: Dicho o hecho que parece contrario a la lógica
La paradoja es que por un lado nos sentimos vulnerables pero por otra nos sentimos inmortales.
“No soy capaz, me da vergüenza”
Mecanismo de autocontrol para no meternos en problemas.
Adelante, hay que probar.
La tiranía de la mediocridad.
Ante la llamada a la aventura hay dos posibles respuestas: No aceptar la llamada (hacer oídos sordos) o comenzar el viaje del héroe.
NI – Ni : Ni estudian, ni trabajan
El viaje del héroe significa aceptar los retos, arriesgarse, comprometerse con algo que nos trasciende.
Se trata de convertirnos en los auténticos protagonistas de nuestras vidas.
En el viaje nos encontraremos con numerosas pruebas (agradables y desagradables) y nos encontraremos aliados (amigos que nos apoyan) y con adversarios (personas tóxicas)
Hay que aprender las reglas del Nuevo Mundo, para ello es fundamental la curiosidad, la observación.
Cuando empiezo el viaje de pronto descubro que el centro del Universo soy yo.
Lo bueno: autonomía, confianza, maestría.
Lo malo: desprecio de lo que piensan, dicen o hacen los demás que no son como yo (los adultos)
La soberbia.
Soy muy honesto, por eso soy el centro del Universo e inmortal:
Digo lo que pienso (aunque a veces no pienso lo que digo)
No soy consciente del daño que puedo hacer.
Falta de empatía por el otro (la crueldad adolescente)
Acepto el reto.
El mentor: Un familiar (padre, madre, hermano/a mayor, un tío/a), un profe, un amigo…
Escucharlos y preguntarles.
Aprender de ellos.
Superar la soberbia y pedir ayuda: Humildad
Para comprender la adolescencia, sólo tenemos que mirar para atrás y recordar la nuestra… pero ahora debemos asumir nuestro rol y comportarnos como padres/madres, no como adolescentes.
Metáfora de la cuerda: El adolescente tira de la cuerda, los padres tiramos del otro extremo, si tiramos demasiado el chaval no crece, si soltamos el chaval se cae.
Avanzando, creciendo, madurando… Las pruebas nos van llevando a aprender.
El valor del error: Aprovechar los fracasos como fuentes de aprendizaje.
La gran prueba
Derrotas memorables: pérdidas grandes: un traslado, una separación, una muerte, una traición, un fracaso amoroso.
Dilemas y toma de decisiones.
Qué elijo: Héroe o villano.
Las derrotas memorables, el aprendizaje, la sensación de control nos da Fuerza pero la fuerza nos puede llevar a lado oscuro.
Seguir el camino correcto nos permitirá convertirnos en un caballero Jedi, aunque eso requiere disciplina, dejarte llevar, compromiso, aprender de otros y con otros.
¿Cuál es tu código?
En este punto, y para los padres podríamos usar la variante de ¿por qué no te suicidas): Alguien que tiene un porqué casi siempre encuentra un cómo
¿Qué es lo verdaderamente importante para ti?
Todo camino culminará con el paso de la adolescencia a la adultez, pero el camino no es el destino, sino las experiencias que vivimos durante el viaje, ese cúmulo de nuevas confianzas que hemos aprendido.
Las derrotas, los fracasos, los nuevos retos, se deberán convertir en el impulso para resucitar y resurgir con más fuerza.
Vuelve a su mundo ordinario que ahora se ha transformado como resultado de su propia transformación.
La adolescencia: el despertar de la Fuerza… Despedida: ¡¡¡Que la Fuerza te acompañe!!!