Las cuatro fases del proceso creativo propuesto por Wallas son: 1) Preparación, donde se recopila información; 2) Incubación, donde se deja madurar inconscientemente la idea; 3) Iluminación, donde surge la solución de forma súbita; y 4) Verificación, donde se evalúa la solución. Koestler propuso que existen dos tipos de pensamiento: lógico y intuitivo, siendo este último clave en la fase de iluminación.