4. 1.1 Exhibicionismo
La inclinación de un individuo a exponer sus genitales en público de forma
espontánea y excesiva, sin ajustarse a las normas sociales. Los exhibicionistas
no constituyen, por regla general, ninguna amenaza; por el contrario, la
mayoría reaccionan de forma insegura y se dan a la fuga cuando su oferta es
correspondida. Las fantasías, los impulsos sexuales o los comportamientos
provocan malestar clínicamente significativo o deterioro social, laboral o de
otras áreas importantes de la actividad del individuo. Muchos investigadores
modernos, dicen que el mejor tratamiento del exhibicionista debe tener como
fin quitar el sentimiento de culpa característico que se tiene después del acto
exhibicionista. Se trata de eliminar complejos de inferioridad causados por un
excesivo juicio social, y no de quitar el gusto por la exhibición de los genitales;
Lograr controlar la exhibición como acto impulsivo para convertirlo en un
enriquecimiento de la vida sexual es la meta más razonable que un
exhibicionista puede fijarse.
5. 1.2 Fetichismo
Consiste en la excitación erótica y el logro del orgasmo a través de un talismán
u objeto fetiche, sustancia o parte del cuerpo en particular. El fetiche lleva
puesto, huele o se frota contra los genitales los objetos. El fetichismo sexual se
considera una práctica inofensiva, salvo en el caso de que provoque malestar
clínicamente significativo o problemas a la persona que lo padece o a terceros,
pudiendo en este caso llegar a considerarse un trastorno patológico
propiamente dicho. Los especialistas no han encontrado ninguna solución, ya
que consideran que no hacen daño a nadie y que lo hacen en privado. Hay
que tener claro que muchos hombres se excitan viendo ropa interior de
mujeres y oliéndola, ya que genera un estímulo agradable, y en estos casos no
estamos hablando de personas fetiches.
6. 1.3 Fetichismo Transvestista
La sintomatología esencial de este trastorno consiste en intensas necesidades
sexuales y en fantasías sexuales excitantes que implican vestirse con ropas
del sexo contrario. La persona ha actuado de acuerdo con estas necesidades
o se encuentra marcadamente perturbada hacia ellas. Generalmente guarda
una importante colección de ropa para transvestirse cuando está sólo, luego se
masturba imaginando que otros hombres se sienten atraídos por él como si
fuera una mujer.
7. 1.4 Frotismo
La parafilias consistente en la excitación erótica mediante el rozamiento del
órgano genital u otra parte del cuerpo con el cuerpo de otra persona sin su
consentimiento. El frotista (o froteurista) actúa en lugares públicos y
abarrotados sin que la víctima se dé cuenta. No es una conducta procedente
de alguna actividad sexual posterior. Tras la práctica frotista, el individuo suele
masturbarse recordando la escena. Este comportamiento, que suele tener un
carácter pasajero, afecta sobre todo a hombres entre 15 y 20 años, aunque
también hay ancianos de unos 60 años que lo practican.
8. 1.5 Masoquismo
La sintomatología esencial de este trastorno consiste en intensas necesidades
sexuales recurrentes y en fantasías sexuales excitantes, que implica el acto
(real o simulado) de ser humillado, golpeado, atado o cualquier tipo de
sufrimiento. La persona ha actuado de acuerdo con estas necesidades o se
encuentra marcadamente perturbada a ellas. El masoquismo parece hallar su
satisfacción en: -Las sensaciones de orden, control de los acontecimientos,
contra los impulsos propios y ajenos. -El abandono temporal o permanente de
las propias responsabilidades, sobre todo cuando éstas resultan muy
agobiantes, retornando a un estado "infantil" más libre dentro de su
dependencia de otros. -Ocasionalmente, reproducción y liberación de
experiencias infantiles traumáticas, lo que refuerza el elemento anterior. -El
alivio de las sensaciones de culpa a través del castigo, que refuerza los dos
elementos anteriores, en caso de darse. -Los factores de intensa excitación
sexual vinculados a estas actividades.
9. 1.6 Sadismo
Forma de manifestación de la pulsión sexual que busca hacer sufrir a otro un
dolor físico o, al menos, hacerle sufrir una dominación o una humillación. El
término sadismo proviene del nombre del marqués de Sade, escritor francés
(1740-1814) cuya considerable obra da un amplio lugar a la algolagnia (mezcla
del placer y del dolor) activa y pasiva. El psicoanálisis reconoce al sadismo
como una de las posibilidades inscritas en la naturaleza misma de la pulsión
sexual. Ni Freud ni sus sucesores pensaron que era una habilidad de carácter
normal en la sociedad humana; pero si es cierto que la sexualidad infantil
puede crear una perversión anormal que den lugar al sadismo. Freud destaca
que al principio el sadismo busca el control sobre el otro.
10. 1.7 Voyeurismo
El voyeurismo es una conducta, que se caracterizada por la contemplación de
personas desnudas o realizando algún tipo de actividad sexual con el objetivo
de conseguir una excitación sexual. La actividad del voyeur no implica ninguna
actividad sexual posterior. El voyeur suele contemplar la escena y el hecho de
poder ser descubierto aumenta su excitación, normalmente todo el acto va
acompañado de la masturbación. En lo que respecta a los rasgos de
personalidad del voyeur, estos sujetos suelen ser tímidos durante la
adolescencia y con cierta dificultad para iniciar o mantener relaciones de
pareja. No son sujetos especialmente propensos a poseer rasgos
especialmente patológicos.
11. 2.Transtorno de identidad sexual
El trastorno de identidad de género (TIG) es una enfermedad en la que la persona siente una
discordancia entre el sexo físico de una persona y el género con el cual se identifica. El individuo
siente un profundo rechazo hacia su cuerpo, lo cual suele provocar trastornos psicológicos o
psiquiátricos, como por ejemplo, depresión, ansiedad, aislamiento, baja autoestima, frustración y
sufrimiento permanente e incluso aparición de ideas suicidas. Este trastorno también es conocido
como transexualidad, transexualismo, disforia de género o trastorno de identidad sexual
Puede manifestarse por primera vez tanto durante la infancia como en la edad adulta. En el caso de
los niños transexuales, puede comenzar a manifestarse a partir de los 18 meses de edad.
No debe confundirse con la homosexualidad, ya que una persona homosexual no siente rechazo
hacia su género ni tiene por qué desarrollar problemas de identidad debido a suorientación sexual.
13. 3.1Transexualismo
Consiste en el deseo de vivir y ser aceptado como un miembro del sexo opuesto, que
suele acompañarse por sentimientos de malestar o desacuerdo con el sexo anatómico
propio y de deseos de someterse a tratamiento quirúrgico u hormonal para hacer que el
propio cuerpo concuerde lo más posible con el sexo preferido.
Pautas para el diagnóstico
La identidad transexual debe haber estado presente constantemente por lo menos
durante dos años y no ser un síntoma de otro trastorno mental, como esquizofrenia, o
acompañar a cualquier anomalía intersexual, genética o de los cromosomas sexuales.
14. 3.2Transvestismo no fetichista
Consiste en llevar ropas del sexo opuesto durante
una parte de la propia existencia a fin de disfrutar
de la experiencia transitoria de pertenecer al sexo
opuesto, pero sin ningún deseo de llevar a cabo un
cambio de sexo permanente y menos aún de ser
sometido a una intervención quirúrgica para ello.
Debe ser distinguido del transvestismo fetichista,
en el que hay una excitación sexual acompañando a
estas experiencias de cambio de vestido.
15. 4..Disfunciones según el sexo.
4.1Transtorno del deseo sexual
4.2Trastornos de la excitación sexual
4.3Trastornos del orgasmo
16. 4.1Transtorno del deseo sexual
Es una enfermedad que puede deberse a una bajada del nivel normal de
producción de estrógenos (en las mujeres) o la testosteronaa (en los
varones). Otras causas pueden ser la edad, la fatiga, el embarazo, la
medicación (como los ISRS) o enfermedades psiquiátricas, como
depreion o ansiedad.
17. 4.2Trastornos de la excitación sexual
Previamente llamados «impotencia» en los hombres y «frigidez» en las
mujeres, aunque ahora se usan términos menos críticos: para los hombres, se
emplea el de «disfunción erectil» y para las mujeres se utilizan diferentes
alusivos a los diversos problemas. Estos desórdenes se manifiestan como
aversión o elusión del contacto sexual con la pareja. Puede haber causas
médicas para estos problemas, como insuficiente riego sanguíneo o falta de
lubricación vaginal. Las enfermedades crónicas también contribuyen, así como
la naturaleza de la relación entre las partes.
18. 4.3Trastornos del orgasmo.
El trastorno del orgasmo, o más conocido como anorgasmia, es la incapacidad
para llegar al orgasmo aun cuando se está recibiendo la estimulación
adecuada, o exista gran deseo sexual y/o las condiciones medioambientales
sean las apropiadas para ello. Según el manual de diagnóstico de enfermedades
mentales, el trastorno del orgasmo es la ausencia o retraso persistente o
recurrente del orgasmo después de una fase de excitación normal (tanto en
duración como en intensidad). Cuando se habla de anorgasmia, suele tratarse de
la de las mujeres, pero puede afectar también a los hombres. Para su diagnóstico
debemos tener en cuenta diversos factores como la edad del o la paciente, la
experiencia sexual y la intensidad y la duración de la estimulación erótica
recibida. Las mujeres presentan una amplia variabilidad en el tipo e intensidad de
estimulación que conduce al orgasmo. Como en las otras disfunciones sexuales
también produce malestar psíquico y problemas en las relaciones interpersonales.