La gastronomía española se ha visto influenciada a lo largo de
los siglos por las invasiones que sufrió la Península, desde los
antiguos pueblos bárbaros hasta la llegada de los pueblos
musulmanes. También ha tenido gran influencia el
descubrimiento de las Américas.
La llegada del imperio romano a tierras españolas trajo consigo
la incorporación de productos como el aceite de oliva y el ajo a
los platos que se elaboraban anteriormente. El vino fue otro
producto fruto de la invasión romana.
Los pueblos musulmanes hicieron llegar nuevos condimentos que
aún hoy acompañan los platos españoles. Este pueblo introdujo
productos como el azafrán, la naranja y el azúcar.
Gastronomía Española
La llegada al nuevo mundo también influyó en
la gastronomía española. Desde América se
importaron productos muy utilizados como la
patata, el cacao y el tomate.
Posteriormente se han introducido nuevas
tendencias culinarias dependiendo de los
siglos y los movimientos de la época.
Actualmente, la gastronomía se decanta por
la unificación de la tradición y la imaginación.
Características Comunes
A pesar de que la gastronomía española es muy variada debido
a que cada Comunidad Autónoma tiene una cocina propia,
existen varios rasgos comunes entre los que destacan:
· Utilización del aceite de oliva como elemento fundamental a
la hora de la elaboración.
· Utilización de gran número de frutas, verduras y hortalizas en
la elaboración de los platos.
· Utilización de la cebolla y del ajo como condimentos
fundamentales.
· Utilización del sofrito como primer elemento a la hora de
realizar cualquier receta.
Gastronomía Por Zonas
· Norte
La zona norte de España presenta una cocina en la que
abundan tanto las buenas carnes del interior, sobre todo de
vaca y cerdo. Otros productos importantes son los pescados y
mariscos del mar Cantábrico. También destacan los vinos y las
bebidas típicas.
· Mediterránea
Esta zona se caracteriza por contar con la afamada dieta
mediterránea consistente en el consumo de aceite de oliva,
frutas, verduras, hortalizas y legumbres. Se trata de una dieta
beneficiosa para la salud.
· Sur
El sur de España tiene una gastronomía basada en la
preparación de platos con productos de la huerta. También
se debe destacar la cultura de tapas existente en esta zona,
la cual presenta muchos de sus manjares.
· Meseta
Los platos de esta zona están elaborados
fundamentalmente con carne, embutidos, aves y
legumbres. La carne proviene principalmente de la caza o
de las matanzas de cerdo y cordero. Destacan los productos
ibéricos como el jamón o el chorizo.
El queso es un producto que está presente en todas estas
zonas. Suelen estar elaborados con leche de cabra, oveja o
vaca, aunque también los hay de mezcla de ellas. Existen
más de 100 clases y algunos de los más importantes son el
manchego, el Cabrales o el de Burgos.
En el tiempo inca, la papa, el maíz, la quinua, ésta por ejemplo,
cuando en épocas de siembra el rompimiento del primer surco se
hacía con un implemento de oro. Estos insumos, eran la base de
sopas, guisos y diferentes comidas y bebidas como "la chicha"
nuestra cerveza andina, que hasta el día de hoy es consumida en
todos los pueblos y regiones, presentándose muchas variantes de la
misma, encontrándose hasta chichas "enterradas" pues a través del
tiempo y en todas las regiones, el hombre, de una u otra manera,
ha necesitado comunicarse con los dioses para tomar decisiones
sobre su cuerpo y su alma. El uso de la fe, la meditación, diversas
ceremonias, algunas con alucinógenos, otras con alcohol y también
utilizando otros medios, han permitido el sagrado encuentro con
nuestros seres tutelares. Hasta poseían el "HUACO LOCO", Ceramio
pre-colombino cuyo pico se prolonga en su parte inferior de modo
que cualquier liquido se escurra, pero utilizado en la forma correcta
se constituye en un eficiente condensador en el proceso de
destilación de la chicha. Al parecer, según los especialistas, se
trataría del primer destilador más antiguo hasta ahora encontrado.
Gastronomía Peruana
Con la llegada de los españoles se introdujo a esta parte de
América nuevas especies de animales, frutas y plantas. Esta
fusión de la cocina inca con la española dio luz a la que
llamamos "comida criolla". En esta nueva etapa de la cocina
peruana, se manifiesta esa integración de los dos mundos. Pero
también debemos recordar que a su vez, trajeron a los "esclavos
"moros" con toda su cultura y sus sabores. Aparecieron nuevos
platos que han ido evolucionando de generación en
generación. Por ejemplo, la Ocopa, que fué evolucionado: es
una la salsa típica de la ciudad de Arequipa, una mezcla del
maní precolombino y ají que inicialmente eran trabajados a
punto de batán, mezclado después con productos llegados del
"nuevo mundo" como lácteos. Sin mencionar también la llegada
de cerdos, ovejas, gallinas, limones, cebollas, ajo, duraznos,
hierbas como el culantro y muchos más.
Tiempo después, con la llegada de los esclavos africanos,
entraron en las cocinas del Virreinato, éstos aportaron con más
de un granito de arena a la evolución de nuestra cocina,
aporte no sólo en sabor sino también en color. Es a ellos a
quienes muchos les dan el crédito por la creación del delicioso
anticucho (pedazos de corazón de res marinados en salsas
picantes, y demás condimentos como ajíes, pimienta, culantro,
entre otras especias).
En el siglo XIX, la llama de la revolución peruana se avivó
enérgicamente por la fascinación de los criollos con la
Revolución Francesa. La gente sentía un vínculo emocional a los
nuevos ideales de libertad, igualdad y fraternidad por los cuales
dicho país había derribado su monarquía.
La presencia y aporte francés a la comida peruana es el resultado de
la fascinación que tenían los libertadores a todas las cosas francesas,
y pertenece a la época temprana del siglo XIX y la independencia de
España, querían sentirse libres, cogiendo el modelo francés como
mencioné anteriormente, de tal forma que se vio reflejado en la
cocina.
Año después con la independencia San Martín decretó la entrada
libre a los extranjeros. En 1857 había un estimado de 20,000 europeos
(no españoles) viviendo en Lima. Estos incluían franceses, escoceses,
ingleses, alemanes e italianos, así como también ciudadanos de la
mayoría de los países escandinavos y el resto de la cuenca del
Mediterráneo, viniendo con ellos también, todas sus costumbres,
sabores y saberes, influenciando una vez más en la gastronomía
peruana, fusionándose y modificándose a nuestras costumbres, de ahí
podemos mencionar por ejemplo los "Tallarines al pesto", tan
típicamente italianos, que acá se convirtieron en "Tallarines verdes",
pues al ser muy fuertes de sabor para ellos, el peruano le incluyó
espinaca.
En 1849, la llegada de los primeros sirvientes, inmigrantes de
China, trajo un nuevo mundo de sabores y especias. Trayendo
a su vez la técnica de la "cocina a combustión", empezando
a prepararse entonces los "salteados", técnica totalmente
ligada a sus costumbres, no podemos dejar de mencionar
acá nuestro famoso "lomo saltado" nacido de las fondas
chinas.
Llegamos al año de 1899, cuando los primeros inmigrantes
japoneses llegaron, dejando su huella distintiva y esencial en
las tendencias de las cocinas del Perú. Muchos piensan que su
presencia en nuestra tierra, hace que sean los responsables
de la revolución gastronómica peruana.
Como los chinos, los primeros japoneses inicialmente vinieron
para trabajar en las haciendas de la costa. Al comienzo,
sufrieron trabajo arduo pero tiempo más tarde muchas
familias se juntaron y se establecieron económicamente,
naciendo las primeras "fondas" en el Perú.
Aunque ya se ha demostrado, que el inca comió el cebiche
marinado en chicha y varios jugos ácidos como el tumbo,
combinados con ají, fue con la introducción de los limones y
cebollas por los españoles y un nuevo acercamiento al
pescado por los japoneses que tenemos hoy el
internacionalmente famoso "cebiche".
Es el quinto país en el mundo en número de especies; primero
en número de especies de plantas de propiedades conocidas
y utilizadas por la población (4,400 especies); y primero en
especies domesticadas nativas (128).
En lo referente a la fauna, el Perú es el primer país en especies
ictiológicas (2,000 especies, 10% del total mundial); el segundo
en aves (1,730 especies); el tercero en anfibios (330 especies);
y el tercero también en mamíferos (462 especies).
La gastronomía de Italia es una de las más variadas del
mundo, sus cocinas reflejan ésta gran variedad cultural en sus
regiones así como la diversidad de su historia. La cocina
italiana está incluida dentro de las denominadas gastronomías
mediterráneas y es tan imitada como practicada en todo el
mundo. Es muy corriente que a la gastronomía de Italia se le
conozca por sus platos más famosos que son la pizza y la
pasta, pero lo cierto es que es una cocina donde coexisten los
abundantes aromas y los sabores del mediterráneo. Una
bonita forma de conocerlo es a través de sus museos
gastronómicos y de sus productos de la tierra.
Gastronomía Italiana
Italia es un país que le ha exportado al mundo su gastronomía.
La historia nos cuenta que la comida italiana recibió influencia
de otros países, tales como Grecia, África y los países asiáticos.
Los griegos, africanos y asiáticos que se establecieron allá
trajeron sus comidas y maneras de cocinar. Por ejemplo, los
griegos hacían un pan plano, el cual, se imagina, llevó a la
creación de la pizza.
El hecho de comer, para los italianos, no es un acto sencillo,
tiene un significado mayor. Es un momento de socialización, un
momento de unión con sus familiares y de esa unidad de la
familia, se acredita, nacieron los platos ricos y variados.
En 1840, se introduce el parmesano a la gastronomía de Italia,
el cual se usa en la mayor parte de los platos italianos.
Referente a la pasta de Italia, podemos contar que hay relatos
de que Marco Polo trajo la pasta del oriente. Pero, también se
sabe que él volvió a Italia en el año 1295 y que antes de esa
fecha ya había informaciones de la existencia de la pasta.
Algunos afirman que fueron los árabes que inventaron la
pasta, pues conocieron al trigo antes de los italianos.
Bueno, hasta hoy todas estas historias son cuestionables, pero,
de una cosa los investigadores tienen certeza, el clima de
Italia siempre fue bueno para el crecimiento del trigo duro,
de donde viene la sémola. La sémola, se usa para hacer las
pastas secas. Las pastas secas se hicieron populares en los
siglos XIV y XV y en el siglo XVII se hicieron parte importante
de la gastronomía de Italia, porque era un plato económico,
que se podría adquirir fácilmente y versátil. Pastas secas
contienen solamente agua y sémola.
La gastronomía de Italia es magnífica. Es una comida rica,
pues es compuesta de frutas, legumbres, cereales, y especias
que dan sabor. Y es una comida bella ya que hay una historia
y un significado detrás de cada plato.
La gastronomía italiana es rica en exquisitos platos únicos,
tales como la pasta, las verduras, las hortalizas o legumbres
gozan de una cierta atención culinaria, adquiriendo,
respecto al medioevo, una nueva dimensión gracias sobre
todo a un mayor recurso de los aromas locales. Por otro lado
ofrece también una gran variedad de carnes, pescados,
quesos con delicados aromas y cuidados postres,
dependiendo de la población. Con todo ello, el ingrediente
presente en la mayoría de los platos es la pasta “seca” o
cocida en caldo, los diferentes tipos de arroz guisado, risottos,
sopas, minestrones, etc.
Hay una gran elección de guisos y estofados además de la
abundancia de platos con pastas estiradas (como la lasaña)
y rellenas de macarrones. En el terreno de las frutas, los
cítricos adquieren una posición prominente entre las comidas
servidas como entradas.
Nada mejor que comprobar toda esta gran variedad de
gastronómica propia de Italia en sus propias recetas.