Fruto del espíritu. <br />Gálatas 5:22-23<br />Introducción: <br />La palabra de Dios nos habla que el espíritu en el cristiano genera un fruto. No se nos dice los frutos del espíritu, sino el fruto del espíritu y nos describe las características de dicho fruto. Hoy hablaremos de estas características, con el objetivo de que nos permita reconocer, en nosotros mismos, si tenemos y manifestamos este fruto o no. <br />Debemos andar en el espíritu. <br />Se nos manda a andar en el espíritu. Debemos ser guiados por el espíritu. Esto significa que nuestra manera de vivir debe ser conforme a las normas de Dios, establecidas en la biblia. Gálatas 5:16 Gálatas 5:18 Gálatas 5:17 <br />Nosotros debimos haber crucificado la carne con sus pasiones y deseos. En gran parte es así, pero no del todo, aún persisten los deseos de la carne junto con sus obras en nosotros. Gálatas 5:24 2Pedro 3:11 <br />Por sus frutos los conoceréis. <br />Las aptitudes y acciones que damos nos permite determinar lo que somos. El árbol bueno no da malos frutos, las personas guiadas por el espíritu no dan, no deben dar frutos u obras de la carne. Lucas 6:43-45 Mateo 7:20 <br />Fruto del espíritu. Lo primero que debemos recalcar es que se habla de un fruto, no de varios frutos, por lo cual para que ese fruto sea del espíritu debe poseer todas las cualidades que estudiaremos.<br />Amor. Es la disposición mental y voluntaria de amar a Dios y amar y ayudar a otros. No importar sin son nuestra familia carnal o espiritual o extraños y aun enemigos. 1Juan 5:3 Juan 13:34 <br /> Gozo. Alegría del ánimo. Nuestra fe nos da alegría de ánimo, gozo, a pesar de las circunstancias. 1Pedro 1:6-8 <br />A pesar de los problemas, de las enfermedades, las pruebas, siempre debemos estar gozosos, porque nuestro corazón está puesto en Jesús y en la vida eterna. 2Corintios 12:10 <br />Paz. En el presente contexto la paz se refiere a la armonía, la paz que existe entre los miembros de la iglesia y de estos con el resto de los hombres y se contra pone a las obras de la carne como: “enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones”. El origen de esta paz viene de Dios pero nos es dada por Jesús y nos permite también tener paz con Dios. Juan 16:33 Romanos 5:1 <br />Paciencia. La paciencia es dominio de sí mismo ante la provocación que no se desquita en forma apresurada o castiga de inmediato. Se asocia a la misericordia. Colosenses 3:12-13 <br />Benignidad. Rae: Benignidad Cualidad de benigno. Benigno 1. Afable, benévolo, piadoso, apacible. Algunos comentaristas los describen como dulzura de temperamento, genio agradable. La persona benigna hace que las demás personas se sientan cómodas con ellas, ellas saben que esta persona será gentil. La benignidad es una cualidad de Dios. A pesar de nuestros errores, siempre podremos ir a El arrepentidos y en el nombre de su hijo nos recibirá con amor, con bondad y misericordia. Romanos 2:4 Efesios 4:32 <br />Bondad. La bondad es generosidad, disposición de dar y ayudar a otro más allá de lo que merece. La palabra bondad también se usa como bueno. Tenemos los ejemplos de Bernabé y Dorcas.<br />Fe. Fiel, que puede ser de fiar, confiable...quot;
(VINE). La palabra también se traduce fidelidad, y es la capacidad que tenemos de obedecer la voluntad de Dios y ser fieles a Dios. Tenemos el ejemplo de Cristo que fue fiel en cumplir la voluntad de Dios y tenemos la fidelidad de Dios, Quien no nos fallará. Juan 6:38 Deuteronomio 7:9 <br />Mansedumbre. Cristo y Moisés fueron descritos como hombres mansos. Ellos no fueron débiles, sino firmes y con una conducta humilde y amable. Mateo 11: Números 12:3 Mansedumbre es humildad, con amabilidad, gentileza con la firmeza necesaria para corregir el error. Cristo era manso pero limpio el templo de los mercaderes, les hablo duramente a los fariseos y escribas, pero afable y amable con sus discípulos, con aquellos a quienes les predico y no eran duros de corazón.<br />Templanza. O dominio propio. La capacidad para dominarse uno mismo, ser dueño de sí mismo, controlar nuestro ser. Tiene que ver con dominar los apetitos, deseos y pasiones. Es necesaria la templanza para no sucumbir a los deseos de la carne y poder manifestar el fruto del espíritu. 2Pedro 1:5 <br />Conclusión: <br />Estimados hermanos andemos en el espíritu, manifestando el fruto del espíritu. Si manifestamos 8 de las 9 cualidades del fruto, tal vez el fruto que estemos dando no sea del espíritu o no sea buena calidad. Romanos 8:4-6 <br />