2. EL GRAN TEMOR
Érase una vez una manada de ciervos que tenía
que abandonar su hábitat por las heladas.
Pasaron muchos peligros, pero el peor fue un gran
río que tenía muchos remolinos y el agua les
llegaba al cuello. El primero, el más pequeño,
estaba casi hundido, pero su padre le agarró y le
sacó. A la madre y a los hermanos les había
cogido un remolino muy fuerte y el padre no podía
con más peso. La madre intentó agarrar a las crías
y… al final, todos consiguieron salir sanos y
salvos.
Áxel
3. LOS CIERVOS CRUZAN EL RÍO
Había una vez una manada de ciervos. Un día, en
un paisaje muy verde, estaban cruzando un río
muy profundo y con muchas plantas. Los ciervos
pequeños no podían pasar por el río porque les
cubría enteros. Después de un tiempo, fueron
creciendo y creciendo hasta que llegó el momento
de atreverse a pasar a la otra orilla para comer
hierba fresca.
Jaime
4. LOS CIERVOS DEL RÍO
Éranse una vez unos ciervos que estaban
cruzando un río y se quedaron atrapados
porque la corriente era muy fuerte y no les
dejaba salir. Unos hombres prehistóricos los
vieron y aprovecharon la ocasión para cazarlos.
Luego, los cogieron, se los llevaron a la cueva
para comérselos con la tribu y así disfrutar
todos juntos (UBUNTU).
Elías
5. LA MANADA DE CIERVOS
Érase una vez un clan de tres hombres, una mujer y un hijo. Un día
los tres hombres estaban preparando el fuego para comer, las
mujeres estaban recolectando y pescando y los niños, pintando en
las paredes. Después de comer, uno de los hombres tenía mucho frío
porque el fuego se había apagado y fue a buscar palos. Cuando se
acercó al río, vio una manada de seis ciervos . Tres de ellos estaban
a punto de ahogarse. El hombre les ayudó a salir y les construyó un
establo de piedras. Los niños se pusieron muy contentos y gritaban:
-¡¡¡Hala, qué guay, unos ciervos!!!
¡Qué familia más feliz, tienen hasta ciervos!
Cuando el niño mayor cumplió 13 años le dijo a su padre:
- Papá, voy a ir a buscar comida para celebrar mi cumpleaños.
- Vale, pero no tardes mucho- respondió el padre.
- Bueno, papá. Id preparando porque os voy a traer una comida
riquísima.
Al volver, lo celebraron, se lo pasaron genial y hasta fueron cerca
del río a darle agua a la manada.
Ana Belén
6. LOS CIERVOS SE ENFRENTAN
Hace mucho tiempo, en la etapa del Neolítico, había una manada de
ciervos. Vivían en un prado precioso, lleno de flores, hierba fresca y al
lado de un río que tenía una guan más limpia y clara que un cristal y
era la envidia de todos los herbívoros de la zona. Pero siempre había
un listo que les quitaba el sitio porque era más grande que ellos y los
ciervos se iban a otro lugar hasta que aquél se iba y podían estar en
paz hasta que algún otro animal viniera a hacerles lo mismo.
Un día vino un grupo de mamuts, los echaron de allí y los ciervos
fueron nadando por el río. El hijo del líder se enfadó y dijo:
- ¡No es justo que siempre que viene un animal más grande que
nosotros nos asustemos, nos vayamos y les demos el placer de reírse
de nosotros. Pues no, eso se acabó! ¡Ahora mismo voy a decirle cuatro
cosas a esa panda de mamuts!.
De esta manera, fueron a ver a los mamuts y, como los vieron tan
enfadados, los animales que estaban por allí, se fueron. Esto se fue
contando de hocico en hocico y nunca más volvieron a molestar a los
ciervos.
Vicky
7. LOS CIERVOS
Érase una vez, hace 2.000.000 de años, en un bosque de la
prehistoria, una manada de ciervos estuvo paseando en busca de
comida. Se dividieron en tres grupos.
-Cuando consigamos comida, volveremos a donde antes pero…
tened cuidado con los humanos- dijo el jefe ciervo.
Uno de esos grupos se encontró en un río.
-No nos queda más remedio que atravesar el río- dijo el jefe ciervo.
-No, espera. Los humanos han construido un puente- dijo otro de
los ciervos.
Y… todos pasaron por el puente hasta que, de repente… ¡¡¡PLUM!!! Se
rompió el puente y todos cayeron al agua. ¡Se estaban ahogando!
Sólo sobrevivieron 3 ciervos.
Al volver al punto de partida, el hijo del jefe estaba preocupado
porque habían vuelto pocos. Al caer el sol, todos los ciervos se
quedaron sorprendidos porque había sobrevivido el rey.
Aitor
8. LOS CINCO CIERVOS
Éranse una vez cinco ciervos. Uno de los ciervos
mayores iba delante, otro, detrás y los pequeños iban
en el medio. Estaban cruzando un río cuando uno de
los pequeños se hundió porque había mucha corriente.
Uno de los mayores bajó a buscarlo, lo cogió con sus
cuernos, lo llevó hasta la orilla y se fueron a comer.
Luego, después de comer, se fueron a cruzar el río, se
fueron a su casa a dormir.
Al día siguiente, se fueron a comer hierba y un
cazador mató al mayor de todos y al pequeño le
nombraron rey. A los 15 años se murió. ¡Fue el ciervo
que más años vivió!
Ángel
9. LOS TRAVIESOS
Hace mucho tiempo, en la Prehistoria, en un río
enorme con cascadas, me encontré una manada de
ciervos. Iban tan felices cuando, de pronto, subió el
nivel del agua. El primer ciervo era el más fuerte
pero por hacer tanta fuerza, se estaba ahogando y
fui enseguida a rescatarlo. Pesaba mucho y salí
fuera del río, cogí una cuerda y le até las patas a un
árbol. Fui corriendo al poblado, llamé a los más
fuertes y fuimos a salvarlos pero… ¡ya estaban en un
campo comiendo! ¡Fueron muy traviesos!
Daniel
10. EL DÍA FANTÁSTICO
Érase una vez un hombre que vino de cazar. Se
acostó y, al día siguiente, le dijo al clan:
-Hoy cazaremos un reno y como era animal pintado,
animal cazado, pintó unos renos.
Cazaron los 5 renos que había pintado el hombre.
Entonces una mujer trajo muchísimas manzanas y
allí estuvieron comiendo, cosiendo, haciendo
herramientas y demás. Aquel día fue estupendo. ¡Se
lo pasaron genial!
Moisés
11. • Grupo de ciervos en fila india saliendo de un río
imaginario, de los cuales sólo se pueden diferenciar el
cuello, la cabeza y las astas de los ciervos nadando.
Cueva de Lascaux (Francia)